85162 Febrero 2014 Documento del Banco Mundial Gananc i socialea s en la s balanz a Un desafío de la política fiscal para América Latina y el Caribe © 2014 Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento / Banco Mundial 1818 H Street NW, Washington DC 20433 Teléfono: 202-473-1000; sitio web: www.bancomundial.org Reservados algunos derechos. 1 2 3 4 17 16 15 14 Esta obra ha sido realizada por el personal del Banco Mundial con contribuciones externas. Las opiniones, interpretaciones y conclusiones aquí expresadas no necesariamente reflejan aquellas del Banco Mundial, de su Directorio Ejecutivo, ni de los paí- ses representados por éste. El Banco Mundial no garantiza la veracidad de los datos presentados en este informe. Las fronteras, colores, las denominaciones y demás datos que aparecen en este documento no implican juicio alguno por parte del Banco Mundial sobre la condición jurídica de ninguno de los territorios, ni la aprobación o aceptación de tales fronteras. Nada de lo establecido en este documento constituirá o se considerará una limitación o renuncia a los privilegios e inmunida- des del Banco Mundial, los cuales se reservan específicamente en su totalidad. Derechos y autorizaciones Esta publicación está disponible bajo la licencia Creative Commons de Reconocimiento 3.0 IGO (CC BY 3.0 IGO) http://creative- commons.org/licenses/by/3.0/igo. Bajo la licencia Creative Commons de Reconocimiento, queda permitido copiar, distribuir, transmitir y adaptar esta obra, incluyendo para motivos comerciales, bajo las siguientes condiciones: Cita de la fuente: La obra debe citarse de la siguiente manera: Banco Mundial. 2014. “Ganancias Sociales en la Balanza: Un De- safío de la Política Fiscal para América Latina y el Caribe” Latin America and the Caribbean Poverty and Labor Brief (Febrero), Banco Mundial, Washington, DC: Banco Mundial. doi: 10.1596/ 10.1596/ 978-1-4648-0504-2. Licencia: Creative Commons de Reconocimiento CC BY 3.0 IGO Traducciones: En caso de traducirse la presente obra, la cita de la fuente deberá ir acompañada de la siguiente nota de exen- ción de responsabilidad: La presente traducción no es obra del Banco Mundial, y no deberá considerarse traducción oficial de dicho organismo. El Banco Mundial no responde por el contenido ni los errores de la traducción. Adaptaciones: En caso de adaptarse la presente obra, la cita de la fuente deberá ir acompañada de la siguiente nota de exen- ción de responsabilidad: Este documento es una adaptación de un documento original producido por el Banco Mundial. Las opiniones y posturas expuestas en esta adaptación son responsabilidad exclusiva del autor o autores y no tienen la aprobación del Banco Mundial. Contenido de propiedad de terceras personas: El Banco Mundial no es necesariamente propietario de los derechos de todas las partes del contenido de esta obra. 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ISBN (electronic): 978-1-4648-0504-2 DOI: 10.1596/ 10.1596/ 978-1-4648-0504-2 Ganancias sociales en la balanza Un desafío de la política fiscal para América Latina y el Caribe FEBRERO 2014 Tabla de Contenido Agradecimientos 5 Resumen Ejecutivo 7 Sección 1. A pesar del descenso en las tasas de crecimiento, LAC sigue reduciendo satisfactoriamente la pobreza y promoviendo la prosperidad compartida. 9 Sección 2. Los efectos de la política fiscal en la desigualdad en LAC 17 Sección 3. A pesar de que los países han avanzado en materia de prestación de bienes y servicios, el acceso a algunas oportunidades sigue siendo bajo y en gran medida desigual en LAC 28 Conclusión 39 Referencias bibliográficas 62 Cuadros Cuadro 1. LAC está erradicando la pobreza extrema, al igual que otras regiones con buen desempeño 10 Cuadro 2. El crecimiento del ingreso en LAC se ha distribuido de manera más uniforme a partir del 2010 15 Cuadro 3. El método del Compromiso con la Equidad 18 Cuadro 4. Medición de la progresividad de la política fiscal 21 Cuadro 5. Diferencias entre escolaridad privada y pública en LAC 26 Cuadro 6: Las oportunidades seleccionadas para calcular el IOH 30 Gráficos Gráfico 1. Las tasas de pobreza de redujeron drásticamente en LAC entre 2003 y 2012 10 Gráfico 2. Los pobres se concentran cada vez más en América Central y México 11 Gráfico 3. La pobreza se ha reducido más en las zonas urbanas 12 Gráfico 4. En casi todos los países de LAC, el crecimiento de los ingresos del 40% inferior de la distribución de ingresos superó al crecimiento promedio 12 Gráfico 5. El Índice de Convergencia de la Prosperidad Compartida muestra una amplia brecha entre el PIB ajustado por la igualdad en LAC y los países con mejor desempeño global 13 Gráfico 6. El ingreso laboral es el motor principal en la reducción de la pobreza 13 Gráfico 7. Aunque el crecimiento fue la fuente principal de la reducción de la pobreza, la redistribución aceleró el proceso 14 Gráfico 8. La reducción de la desigualdad se estancó a partir del 2010 14 Gráfico 9. Las transferencias en especie impulsan el impacto redistributivo de la política fiscal 19 Gráfico 10. Los impuestos indirectos, muchos de ellos regresivos, son la fuente más importante del ingreso fiscal en LAC 20 Gráfico 11. Los impuestos indirectos reducen la progresividad de los sistemas tributarios de LAC 22 Gráfico 12. En Bolivia, Brasil y Uruguay, el primer decil paga un porcentaje elevado de su ingreso en impuestos 22 Gráfico 13. El gasto en los programas de CCT está relativamente bien dirigido ya que el 40% más pobre recibe la mayor parte. 23 Gráfico 14. Los sistemas públicos de salud y educación constituyen el grueso del gasto social en LAC 24 Gráfico 15. La incidencia del gasto en salud varía considerablemente entre países 24 Gráfico 16. A excepción de Bolivia, el gasto en educación es más elevado para los estudiantes de ingresos bajos 24 Gráfico 17. El gasto en educación es progresivo, especialmente a nivel preescolar y primario 25 Gráfico 18. Las políticas fiscales de LAC no logran el nivel de reducción de la desigualdad que se registra en los países de la OCDE 27 Gráfico 19. Las oportunidades de Julia y Thiago difieren desde su inicio 29 Gráfico 20. El acceso al agua corriente es bajo y desigual en los países Andinos y de América Central 31 Gráfico 21. La matrícula escolar es casi universal en LAC (niños de 10 a 14 años) 32 Gráfico 22. El completar el sexto grado a tiempo es aún bajo y relativamente desigual 33 Gráfico 23. La calidad de la educación es considerablemente inferior y mucho más desigual en los países de LAC comparada con la de las economías más desarrolladas 34 Gráfico 24. En Guatemala, las interrupciones de los servicios pueden afectar más a algunos grupos que a otros 35 Gráfico 25. Las posibilidades de un niño de tener buen rendimiento en la escuela dependen de los resultados de los padres (descomposición del índice–D de las puntuaciones para una competencia de nivel 2 en matemática) 35 Gráfico 26. El lugar de residencia, la educación de los padres y el ingreso per cápita influyen en las posibilidades de un niño de tener servicio de agua corriente en su hogar 36 Gráfico 27. A pesar de los avances, todavía existen diferencias marcadas en el acceso a oportunidades entre los países de LAC 37 Gráfico 28. Evolución de las oportunidades seleccionadas en Brasil a largo plazo, 1981 a 2012 38 Gráfico 29. Persisten grandes diferencias en el acceso al agua corriente entre los estados de Brasil 38 Anexos. Anexo 1. Bases de datos armonizadas en LAC y estimación de cifras regionales de pobreza y desigualdad 41 Anexo 2. Encuestas de hogares usadas para el análisis del índice IOH a partir de la armonización de CEDLAS 42 Anexo 3. Tasas de pobreza y coeficientes de Gini por país, 2007-2012 43 Anexo 4. Descomposición de Datt-Ravallion de los cambios en la pobreza total por subregiones 45 Anexo 5. Perfiles del 40% inferior y el 60% superior de la distribución de ingresos 46 Anexo 6. Compromiso con la equidad 47 Anexo 7. Resultados de la iniciativa Compromiso con la Equidad 48 Anexo 8: El Índice de Oportunidades Humanas 50 Anexo 9. Descomposición del índice-D 59 Anexo 10. Años necesarios para lograr acceso universal a oportunidades básicas 61 Agradecimientos Este informe fue elaborado por la Unidad de Pobreza, Género y Equidad del Grupo de Reducción de la Pobreza y Gestión Económica de la Región de América Latina y el Caribe (LAC) del Banco Mundial. Los integrantes del equipo principal son Oscar Barriga-Cabanillas, Andrés Castañeda, Louise J. Cord, Santiago Garriga, Leonardo Lucchetti, Adam Kahn Ratzlaff, Carlos Rodriguez-Castelan, Liliana D. Sousa y Daniel Valderrama. Además, se contó con la valiosa asistencia de Bernardo Atuesta, Kiyomi Cadena, Ana Cristina Cifuentes, Tania Díaz Bazan, Karem Edwards, Bernarda Erazo, Natalia Garbiras, Mateo Salazar y Martha Viveros. El equipo agradece los comentarios recibidos de Ciro Avitabile, João Pedro Azevedo, Juan Barón, Gabriela Inchauste, Humberto López, María Ana Lugo, Nora Lustig, Julián Messina, Reema Nayar, Marcela Sánchez-Bender, Erwin Tiongson y los participantes en la reunión del Grupo de examen para el mejoramiento de la calidad. El documento fue editado por John Burgess y Florencia Micheltorena. La mayor parte del análisis y los indicadores de la Sección 2 se elaboró en el marco del proyecto Compromiso con la Equidad (CEQ, por sus siglas en inglés), iniciativa conjunta de la Universidad de Tulane y el Inter-American Dialogue dirigido por Nora Lustig y Peter Hakim (www. commitmentoequity.org). Los hallazgos, interpretaciones y conclusiones expresados en este estudio no reflejan necesariamente los puntos de vista del Banco Mundial, su Directorio Ejecutivo o los gobiernos que representan. El Banco Mundial no garantiza la precisión de los datos contenidos en este documento. Asimismo, nada de lo incluido aquí constituirá una limitación o renuncia a los privilegios e inmunidades del Banco Mundial, los que por este medio quedan reservados de manera expresa. Las cifras que se muestran en este informe se basan en un esfuerzo de armonización de datos regionales conocido como Base de Datos Socioeconómicos para LAC (SEDLAC, por sus siglas en inglés), lo cual facilita la comparabilidad entre países de los resultados derivados de las encuestas de los hogares. Por este motivo, las cifras que aquí se analizan podrían diferir de las estadísticas oficiales de los gobiernos y de las oficinas nacionales de estadística. Estas diferencias no deben interpretarse de ninguna manera como una afirmación de superioridad metodológica, puesto que las dos fuentes estadísticas contribuyen a los mismos objetivos importantes: poder comparar los datos a nivel regional y tener la mejor representación posible de las realidades de cada país. La medida agregada del bienestar utilizada en este estudio se basa en el ingreso. La traducción del estudio original “Social Gains in the Balance: A Fiscal Policy Challenge for Latin America and the Caribbean” estuvo a cargo de Verónica Allende y Language Translations Services (LTS). 6 Ganancias sociales en la balanza Resumen ejecutivo E n 2012, la región de América Latina y el Caribe (LAC) continuó su exitosa campaña de reducción de la pobreza y de aumento de la clase media. La proporción de las aproximadamente 600 millones de perso- nas de la región que vivía en condiciones de pobreza extrema, definida como subsistencia con menos de $2.50 al día, se redujo a la mitad entre 2003 y 2012, alcanzando el 12.3%. Como reflejo de la movilidad ascenden- te al salir de la pobreza, los hogares vulnerables a caer de nuevo en la pobreza, pasaron a ser el grupo demográ- fico más numeroso de LAC en 2005, representando casi el 38% de la población. Sin embargo, en los últimos dos años el porcentaje de los hogares vulnerables ha comenzado a disminuir. La clase media, que en la actualidad constituye el 34.3% de la población, está creciendo con rapidez y se pronostica que para 2016 sustituirá a los vul- nerables como el grupo económico más numeroso de LAC. La región del Cono Sur (incluido Brasil) sigue siendo la región más dinámica y la principal fuerza que impulsa la reducción de la pobreza en la región, mientras que la pobreza en América Central y México demostró ser más difícil de vencer. El crecimiento económico explica cerca del 68% de la disminución de la pobreza entre 2003 y 2012, mientras que el 32% restante es resultado de la disminución de la desigualdad. Ganancias sociales en la balanza La reducción de la pobreza estuvo acompañada de un fuerte crecimiento del ingreso entre el 40% más pobre de la población, siendo éste el indicador de Prosperidad Compartida del Banco Mundial. Entre 2003 y 2012, el ingreso real per cápita del 40% más pobre aumentó en más de un 5% anual, en tanto que el ingreso total de LAC se incrementó cerca de un 3.3%. Sin embargo, los avances que se logren en la reducción de la pobreza y en el incremento de la prosperidad compartida probablemente enfrentarán importantes desafíos en el futuro. La región sufrió una desaceleración de la actividad económica y el crecimiento del PIB anual per cápita, de alrededor del 4.3% en 2010, se redujo a un 1.3% estimado en 2013 y se proyecta que crezca sólo 1.7% en 2014. De igual manera, tras la constante dismi- nución de la desigualdad en LAC entre los años 2001 y 2010, los avances logrados en esta área se estancaron y el coeficiente de Gini ha permanecido prácticamente constante en 0.52%. Esta medida regional de desigualdad captura las tendencias en la desigualdad de ingresos tanto entre países como al interior de ellos. Dadas las futuras expectativas modestas de un crecimiento económico y que probablemente la desigualdad se mantenga constante, la estrategia para la reducción de la pobreza en la región debe enfocarse en la implemen- tación de políticas que restablezcan el crecimiento y mantengan la estabilidad macroeconómica, al mismo tiem- 7 po que fortalezcan la participación y contribución al crecimiento por parte de los grupos más desfavorecidos. En este informe se evalúa el progreso en dos áreas de política pública relevantes para vincular el crecimiento y la equidad y acelerar la reducción de la pobreza: (1) la política fiscal y su capacidad para redistribuir los beneficios del crecimiento económico y (2) los avances en la creación de igualdad de condiciones, de manera que todos los niños de América Latina y el Caribe tengan el mismo acceso a bienes y servicios básicos necesarios para que puedan disfrutar la vida que elijan. A medida que el ámbito fiscal sea más limitado, en caso de que el crecimiento se mantenga a los niveles moderados proyectados, las políticas en estas áreas tendrán que ser aún más eficaces en promover el crecimiento inclusivo. A pesar de la prevalencia de los programas de transferencias condicionadas de dinero en efectivo (CCT, por sus siglas en inglés) y un mayor gasto público social, el efecto neto de la política fiscal en la desigualdad en Argen- tina, Bolivia, Brasil, México, Perú y Uruguay ha sido muy modesto, según los cálculos del proyecto Compromiso con la Equidad, una iniciativa conjunta de la Universidad de Tulane y el Inter-American Dialogue. Los tres países que han logrado el mayor impacto en la reducción de la desigualdad a través de la política fiscal (Brasil, México y Uruguay), han registrado una disminución neta de apenas 0.03 en el coeficiente de Gini. Si bien los impuestos directos (como el impuesto sobre la renta) y las transferencias tienden a reducir la desigualdad en la región, su dependencia en materia de impuestos indirectos (tales como impuesto al valor agregado) contrarresta mucho de estos avances. En un contexto de desaceleración económica regional, es cada vez más importante entender, de manera integral, la política fiscal de la región y usarla de manera eficiente con miras a generar avances adicio- nales en la reducción de la desigualdad. En general, la igualdad de acceso a bienes y servicios básicos para la infancia ha mejorado en los últimos años. Sin embargo, el acceso puede mejorarse aún más, ya que persisten problemas graves en cuanto a calidad de esos bienes y servicios, particularmente en educación y en la infraestructura de vivienda. Además, el acceso aumenta con la educación de los padres y con el ingreso o los activos, situación que refleja la baja movilidad intergenera- cional en muchos países de la región. Al igual que con la reducción de la pobreza, desde el 2000 la mayoría de los avances en la igualdad de acceso se han logrado en el Cono Sur y la región Andina, mientras que en muchos de los países de América Central sólo se han logrado mejoras marginales. También existen grandes diferencias a nivel subnacional y entre las zonas urbanas y rurales, hecho que resalta la necesidad de fortalecer la capacidad de los gobiernos locales con el fin de proporcionar servicios básicos de alta calidad a todos sus ciudadanos. Desde una perspectiva global, la región ha logrado enormes avances en la reducción de la pobreza en la primera década del siglo XXI, impulsada por un gran desempeño en términos de crecimiento y reducción de la desigual- Ganancias sociales en la balanza dad. La pobreza extrema, medida por el umbral global de US$1.25 per cápita al día, ha disminuido en LAC casi tanto como en Asia Oriental, región conocida por sus impresionantes logros en este terreno. En el 2010, la tasa de pobreza extrema de 5% en LAC se redujo casi a la mitad con respecto a la cifra de 2002, una caída que casi igualaba a la de Asia Oriental. No obstante, los niveles persistentemente altos de desigualdad en LAC siguen frenando los avances contra la de pobreza extrema. La región de Europa y Asia Central (ECA), con un PIB per cá- pita ligeramente inferior en el 2010 y con niveles más bajos de desigualdad, tiene una tasa de pobreza extrema global inferior al 1%. En LAC, un nivel de pobreza similar implicaría que alrededor de 24 millones de personas dejen de formar parte del grupo que vive en pobreza extrema. Debido a que las tendencias recientes sugieren que la disminución en la desigualdad pudo haberse detenido, el promover un crecimiento más inclusivo será fundamental. El reajuste de la política fiscal y la prestación de bie- nes y servicios básicos de mejor calidad son dos instrumentos importantes para el crecimiento inclusivo. Cabe mencionar que los hallazgos de este informe, a la vez que enfatizan los avances significativos en la prestación de servicios, destacan que estos dos instrumentos de política no están logrando todo su potencial para reducir la desigualdad ni el cumplimiento del doble objetivo del Banco Mundial de erradicar la pobreza extrema y pro- mover la prosperidad compartida en LAC. 8 I. A pesar del descenso en las tasas de crecimiento, LAC sigue reduciendo satisfactoriamente la pobreza y promoviendo la prosperidad compartida E l año de 2012 trajo consigo nuevos avances en la campaña para reducir la pobreza y construir la clase media en la región de LAC. Al inicio del nuevo milenio, casi 25.1% de los residentes de LAC vivían en condiciones de pobreza extrema (definida en la región con base en un ingreso de subsistencia me- nor de US$2.5 diarios). Sin embargo, a partir del 2003 la región ha logrado reducir la pobreza extrema de manera constante y drástica, casi a la mitad al alcanzar una cifra de 12.3% (Gráfico 1) en 2012.1 La pobreza total (definida como de subsistencia con menos de US$4 diarios) también disminuyó sustancialmente al caer de 42% en 2000 a 25.3% en 2012. Gracias a estos impresionantes logros, el porcentaje de hogares vulnerables a caer de nuevo en la pobreza (definida como la población con un ingreso entre US$4 y US$10 diarios) aumentó a un ritmo constante entre 2000 y 2010. También se produjo un desplazamiento histórico hacia la clase media2 (personas con ingresos entre US$10 y US$50 al día). Este grupo aumentó su participación en la población al su- perar a la de los pobres y se prevé que para el 2016 la clase media será el segmento más numeroso de la región, Ganancias sociales en la balanza sobrepasando a la población vulnerable.3 En el 2012, el Cono Sur (Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay) ha seguido liderando la reducción de la pobreza en la región, mientras que en México y América Central el porcentaje de pobres se mantuvo prácticamente constante. En el 2003, el Cono Sur era el hogar del 48% de la población pobre de la región (Grá- 1  El indicador básico del Banco Mundial para medir la pobreza extrema global es el porcentaje de personas que vive con menos de US$1.25 al día. Sin embargo, dado el nivel de desarrollo económico alcanzado en LAC, los analistas decidieron usar líneas de po- breza más altas. Para fines de este estudio, las líneas de pobreza extrema de US$2.50 diarios (el promedio de las líneas nacionales de pobreza extrema) y de US$4 diarios para la pobreza total son más adecuadas en vista del costo de la vida en LAC. Las tasas regionales de pobreza son promedios –ponderados por la población– de índices de pobreza específicos por país calculados usando líneas de pobreza internacionales. Cuando no se disponía de datos para un año determinado, estas tasas se estimaron recurriendo a los datos de encuestas de los hogares de los años disponibles, junto con información macroeconómica sobre las tasas de crecimiento del consumo privado provenientes de los Indicadores del Desarrollo Mundial del Banco. El presente informe usa encuestas de hogares de 17 países de la región (vea el anexo 2). 2  El principal informe regional del Banco Mundial sobre LAC (Ferreira et al., 2012) caracteriza a la clase media basándose en el concepto de seguridad económica y define tres clases económicas: 1) los pobres, quienes tienen un ingreso per cápita de menos de US$4 diarios; 2) los vulnerables, esto es, quienes fácilmente podrían recaer en la pobreza y tienen un ingreso de US$4 a US$10 al día; y 3) la clase media, con ingresos de US$10 a US$50 al día (todos los valores expresados en paridad del poder adquisitivo de 2005). 3  Si la proporción de la población de clase vulnerable y clase media sigue cambiando a la tasa registrada durante 2002-2012, la clase media superará al grupo vulnerable en 2016. Sin embargo, si esto sucede a las tasas más aceleradas de los años 2011-2012, la clase media sobrepasará a la vulnerable en 2014. 9 Gráfico 1. Las tasas de pobreza de redujeron drásticamente en LAC entre 2003 y 2012 50 42,0 40 37,8 34,1 34,3 Porcentaje (%) 30 25,1 25,3 20 21,9 10 12,3 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Pobreza extrema Pobreza total Vulnerables Clase media Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: Las estimaciones de pobreza, vulnerabilidad y clase media a nivel regional son promedios ponderados por la población de las estimaciones especí cas de cada país. Los ricos, que viven con más de US$50 per cápita al día (aproximadamente el 2% de la población), no se muestran en el grá co. Con el n de analizar el mismo conjunto de países cada año, se realizó una interpolación en los casos en que no se disponía de datos de un país para un año dado. Para conocer más detalles metodológicos, véase el Anexo 1. Cuadro 1. LAC está erradicando la pobreza extrema, al igual que otras regiones con buen desempeño Entre 2002 y 2010 la pobreza extrema, medida en términos de US$1.25 al día, se redujo a la mitad en LAC, pasando de una tasa del 9.9% a 5%. Esta caída es similar a lo que sucedió en Asia oriental y el Pacífico, región que experimentó una disminución del 55%, y en Oriente Medio y Norte de África, donde el índice descendió en 43%. Al mismo tiempo, Europa y Asia central (ECA), con un PIB per cápita levemente inferior y niveles más bajos de desigualdad, experimentó una caída de 70%, desde una tasa ya baja de 2.3%, a menos de 1%. Si LAC hubiera alcanzado el nivel de ECA, habrían alrededor de 24 millones menos de pobres extremos. Gráfico B1.1. La pobreza extrema, medida por el umbral estándar de US$1.25 per cápita, se redujo a la mitad en LAC 60 55,7 48,5 50 44,3 Ganancias sociales en la balanza 40 31,0 30 27,6 20 12,5 9,9 10 5,5 2,3 0,7 4,2 2,4 0 Asia oriental Europa Oriente Medio África Subsahariana Asia del Sur América Latina y el Pací co y Asia central y Norte de África y el Caribe 2002 2010 Fuente: SEDLAC (Banco Mundial y CEDLAS) para tasas de pobreza de LAC e Indicadores del Desarrollo Mundial para las otras regiones. Nota: La tasa de pobreza de LAC incluye a Chile, país de ingresos altos, mientras que las tasas de todas las demás regiones excluyen a los países de ingresos altos. 10 Gráfico 2. Los pobres se concentran cada vez más en América Central y México 45 40 24% 23% 35 30 Porcentaje (%) 25 22% 46% 48% 20 15 37% 10 30% 29% 41% 5 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 México y América Central Cono Sur extendido Región Andina Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: Las estimaciones de pobreza son promedios ponderados por la población de las estimaciones especí cas por país. Con el n de analizar el mismo conjunto de países cada año, se realizó una interpolación en los casos en que no se disponía de un país para un año dado. Para conocer más detalles metodológicos, vea el Anexo 1. fico 2), México y América Central (Costa Rica, República Dominicana, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicara- gua y Panamá), alojaba el 29%; y el restante 23% vivía en la región Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú). En la última década, el Cono Sur fue la región con más dinamismo y el principal impulsor de la reducción de la pobreza en LAC. Como resultado, el porcentaje del total de los pobres de esta región se redujo a 37% en 2012, mientras que en América Central y México, esta participación aumentó durante la década hasta llegar a 41%. En tanto, la región Andina logró una ligera disminución de este porcentaje llegando a 22%. Si se descomponen los factores que inciden en la reducción de la pobreza por subregión, se destaca la importancia del crecimiento y la redistribución en el fomento del bienestar económico de los menos favorecidos. Ambos factores primaron por igual en el Cono Sur, mientras que la región Andina se destacó por haber tenido las tasas de crecimiento más elevadas (pero una contribución más baja en términos de redistribución). Por otro lado, aunque el crecimiento y la redistribución de los ingresos tuvieron la misma incidencia en la caída de la pobreza en América Central y México, la contribución relativa del crecimiento fue la más baja de las tres subregiones (vea el Anexo 4). Aunque la pobreza cayó de manera generalizada en las zonas urbanas y rurales, esta caída fue más pro- nunciada en la población urbana. Las tasas de pobreza rural en LAC siguen superando en más del doble a las Ganancias sociales en la balanza dela zona urbana (Gráfico 3). En el caso de la pobreza extrema las diferencias son aún más marcadas: en 2012, el 29% de la población era pobre extremo en las zonas rurales en comparación con sólo el 8% en las zonas ur- banas; de hecho, la tasa de pobreza extrema rural disminuyó 4.8% entre 2010 y 2012, en comparación con una reducción del 10% en las zonas urbanas. Junto con esta disminución de la pobreza hubo un aumento considerable de los ingresos del 40% más pobre de la población (indicador del Banco Mundial para medir la prosperidad compartida). Entre 2003 y 2012, el ingreso medio real per cápita se incrementó en 3.3% en la región de LAC en su conjunto, mientras que para el 40% más pobre de la distribución del ingreso creció un 5% (Gráfico 4). A nivel nacional, esta tendencia se confirmó en todos los países, salvo en Colombia. En Guatemala el ingreso del 40% más pobre disminuyó, aunque a una tasa menor a la del ingreso promedio de la población total del país. 11 Gráfico 3. La pobreza se ha reducido más en las zonas urbanas 80 69,7 70 60 Índice de pobreza (%) 49,4 49,7 50 40 33,5 28,8 30 17,6 19,0 20 8,0 10 0 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Pobreza extrema urbana Pobreza moderada urbana Pobreza extrema rural Pobreza moderada rural Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: Las estimaciones de pobreza son promedios ponderados por la población de las estimaciones especí cas de cada país. Con el n de analizar el mismo conjunto de países cada año, se realizó una interpolación al no disponerse de datos de un país para un año dado. Para conocer más detalles metodológicos, vea el Anexo 1. Gráfico 4. En casi todos los países de LAC, el crecimiento de los ingresos del 40% inferior de la distribución de ingresos superó al crecimiento promedio 10 8 Tasa de crecimiento anualizada 6 4 2 0 -2 Brasil El Salvador Argentina - urbana Chile Costa Rica Guatemala Honduras Nicaragua LAC 2003-2012 2004-2012 2004-2011 2004-2012 2003-2011 Colombia 2003-2012 2003-2009 2003-2012 Ecuador 2003-2012 2004-2012 2000-2011 2003-2011 México 2004-2012 2005-2009 Panamá 2007-2012 Paraguay 2003-2011 Perú 2004-2012 Uruguay 2003-2012 Bolivia R. Dominicana Tasa de crecimiento anualizado del 40% más pobre Tasa de crecimiento anualizado del ingreso promedio Ganancias sociales en la balanza Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: Las cifras para LAC se calcularon usando datos nacionales agregados. Con el n de analizar el mismo conjunto de países cada año, se realizó una interpolación al no disponerse de datos de un país para un año dado. El Índice de Convergencia de la Prosperidad Compartida (SPCI, por sus siglas en inglés),4 el cual examina los avances del crecimiento ajustado por la igualdad, muestra la reducción de la brecha entre LAC y las otras regiones con mejor desempeño. Entre 2003 y 2012, el SPCI aumentó del 15.2% al 20.1% del promedio de los diez países con mejor desempeño global, en términos del PIB per cápita ajustado por la igualdad del año 2000 (Gráfico 5). Si bien cualquier incremento es una buena noticia, el hecho de que el SPCI se mantenga por de- 4  El SPCI mide la brecha entre la medida que se conoce como Índice de bienestar de Sen (PIB per cápita ajustado por la desigualdad de ingresos) para un país dado y el índice promedio de Sen de los 10 países con mejor desempeño en el mundo en 2000. El índice se introdujo por primera vez en el pasado Poverty and Labor Brief (Banco Mundial, 2013). Desde entonces, los ajustes aplicados a los datos sobre el PIB se tradujeron en una leve modificación de los países de referencia. El valor de referencia utilizado en este análisis es de 65.9 y deriva del promedio ponderado por la población del índice de Luxemburgo, Qatar, Noruega, Dinamarca, Estado Unidos, Países Bajos, Suiza, Austria, Canadá y Singapur. El Índice de bienestar de Sen se calcula como el ingreso medio (m) multiplicado por uno menos el coeficiente de Gini (G), es decir S=m(1-G), El coeficiente de Gini, en tanto, mide la distribución de ingresos de un país. Un coeficiente de Gini igual a cero indica igualdad perfecta; mientras que uno igual a uno indica desigualdad perfecta. Sin embargo, debido a que este coeficiente no satisface la propiedad de la descomposición por grupos, el coeficiente regional de Gini se calcula sobre la base de datos agrupados por países específicos previamente reducidos a 4000 percentiles. 12 Gráfico 5. El Índice de Convergencia de la Prosperidad Compartida muestra una amplia brecha entre el PIB ajustado por la igualdad en LAC y los países con mejor desempeño global 0,22 Porcentaje respecto al valor de referencia 0,20 0,18 0,16 0,14 0,12 0,10 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial) e Indicadores de desarrollo mundial. Nota: Los coe cientes de Gini se calculan con la agregación de los datos de todos los países, mientras que las cifras del PIB per cápita para LAC son promedios de los países ponderados por la población. Gráfico 6. El ingreso laboral es el motor principal en la reducción de la pobreza Trabajo masculino Trabajo femenino Otros ingresos Transferencias Otros ingresos Porcentaje ocupados Ingresos laborales Porcentaje ocupados Ingresos laborales Pensiones (públicas y privadas) no laborales 0 Fracción del cambio en puntos porcentuales -5 -10 -8% -11% -9% -15 -14% -14% -16% -20 -26% -25 -32% -30 -28% -35 -40 -42% -45 -50 Ganancias sociales en la balanza Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Las estimaciones de pobreza a nivel regional son promedios ponderados por la población de tasas de pobreza especí cas de los países. El grá co muestra la descomposición de Shapley de los cambios en la pobreza (ver Barros et al. (2006) y Azevedo, Sanfelice, y Cong Nguyen (2012) para más detalles) entre 2003 y 2012 o el año más cercano en aquellos casos en que no se disponía de datos de 2003 o 2012. Los porcentajes no suman 100% debido al redondeo. bajo de un cuarto del valor de referencia del año 2000, señala que la región debe seguir centrando sus esfuerzos en mejorar aún más el crecimiento económico y reducir la desigualdad de los ingresos. Esta caída en la pobreza ha sido el resultado del aumento de los ingresos en el mercado laboral, con ayu- da de las transferencias y las pensiones, las cuales también contribuyeron a esta reducción. Casi el 70% de la reducción de la pobreza entre los años 2003 y 2012 se atribuye directamente a la mejora en los ingresos laborales (Gráfico 6), mientras que las transferencias aportaron el 9% y las pensiones el 14%. Los incrementos en los ingresos laborales corresponden en su mayoría a la de los hombres (42% de la reducción de la pobreza), aunque las mujeres también desempeñaron un importante papel al respecto (26%). La caída sostenida en los niveles de pobreza en LAC ha sido impulsada principalmente por el crecimiento económico en lugar de la redistribución del ingreso, tendencia que se ha mantenido pese a la desacelera- 13 Gráfico 7. Aunque el crecimiento fue la fuente principal de la reducción de la pobreza, la redistribución aceleró el proceso Fracción del cambio en la incidencia en puntos porcentuales 0% -10% -20% -30% -27% -32% -40% -50% -44% -60% -56% -70% -68% -73% -80% 2003-2007 2007-2012 2003-2012 Crecimiento Redistribución Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Las estimaciones de pobreza a nivel regional son promedios ponderados por la población de tasas de pobreza especí cas de cada país. El grá co muestra la descomposición de Datt-Ravalion (1992) de los cambios en la pobreza. Gráfico 8. La reducción de la desigualdad se estancó a partir del 2010 $11000 0,58 PIB per cápita (PPP internacional constante 2005 ) 0,57 $10000 0,56 $9000 0,55 0,54 Gini $8000 0,53 0,52 $7000 0,51 $6000 0,50 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 PIB per cápita Gini Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial) para el coe ciente de Gini e Indicadores de Desarrollo Mundial para el PIB per cápita. Con el n de analizar el mismo conjunto de países cada año, se realizó una interpolación al no disponerse de datos de un país para un año dado. Los coe cientes de Gini se calculan usando datos agregados de los países, mientras que las cifras sobre el PIB per cápita de LAC son promedios de los países ponderados por la población. Para datos detallados sobre las metodologías usadas, vea el Anexo 1. Ganancias sociales en la balanza ción del crecimiento en los últimos años.5 Entre 2003 y 2007, alrededor del 73% de la reducción en la pobreza se debió a la expansión económica. Esta cifra se redujo a cerca del 56% entre 2007 y 2012, ya que durante la crisis financiera en 2009 y en la recuperación subsiguiente, la redistribución jugó un papel más importante en la disminución de la pobreza durante este periodo (Gráfico 7). A pesar del extraordinario avance en la lucha contra la pobreza, los niveles de desigualdad siguen siendo altos en LAC. En 2012, el coeficiente de Gini de la región se mantenía en 0.52, prácticamente sin variación con respecto a 2011 y 2010 (Gráfico 8).6 Si bien la reducción de la pobreza ha mostrado ser vigorosa a partir del 2003, la reducción de la desigualdad ha mostrado menos fortaleza al estancarse en el 2005, recuperándose le- vemente en los cuatro años siguientes, para luego frenarse en el 2010. Este continuo y elevado nivel de desigual- dad no sólo sugiere una disparidad de oportunidades en la región, sino que además debilita el impacto del cre- 5  El crecimiento económico ha disminuido de alrededor del 6% en 2010 a un estimado de 2.5% en 2013 (ver de la Torre y colabora- dores 2013) y se espera que aumente a 3.3% en el mediano plazo (Banco Mundial, 2014). 6  Debido a que el coeficiente de Gini no permite la descomposición por grupos, el coeficiente regional de Gini se calcula sobre la base de datos agrupados por países específicos previamente reducidos a 4000 percentiles. 14 Cuadro 2. El crecimiento del ingreso en LAC se ha distribuido de manera más uniforme a partir del 2010 El estancamiento en la reducción de la desigualdad, mostrada en la Figura 8, se refleja también en los patrones de aumento en los ingresos de los hogares en LAC desde 2003. Entre 2003 y 2010, durante el periodo de sólida reducción en desigualdad, el aumento de los ingresos de los hogares en la parte inferior de la distribución del ingreso fue significativamente más alto al de la parte superior. Por ejemplo, mientras que los ingresos del percentil 10 crecieron a una tasa de 6.1 por ciento al año, el percentil noventa creció a 2.8 por ciento. Esta diferencia en crecimiento a lo largo de la distribución del ingreso fue menos pronunciada entre 2010 y 2012. Mientras que el percentil 10 creció a 4.7 por ciento al año, el percentil noventa creció a 3.6 por ciento. Debido a que los hogares en la parte superior de la distribución tiene mayores ganancias (en el 2010, 41 por ciento del ingreso de los hogares de LAC estuvo en manos del 10 por ciento más rico), reducciones a la desigualdad requieren un aumento en los ingresos significativamente más alto en los hogares en la parte inferior de la distribución en comparación de los ingresos de la parte superior. Gráfico B2.1. Los hogares de ingresos bajos registraron ganancias mucho más modestas en sus ingresos a partir de 2010 10% Tasa de de crecimiento anualizada 8% 6% 4% 2% 0% 3 8 13 18 23 28 33 38 43 48 53 58 63 68 73 78 83 88 93 98 Percentil de la población clasi cado por el ingreso familiar GIC anualizada (2003-2010) GIC anualizada (2010-2012) Crecimiento medio del ingreso (2003-2010) Crecimiento medio del ingreso (2010-2012) Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (Banco Mundial y CEDLAS). La gura presenta las Curvas de Incidencia del Crecimiento (GIC, por sus siglas en ingles), las cuales presentan la tasa de crecimiento anualizada del ingreso per cápita para cada percentil de la distribución del ingreso para dos periodos: 2003-2010 y 2010-2012. Las líneas punteadas horizontales muestran el crecimiento promedio en LAC para esos dos periodos. Las Curvas de Incidencia del Crecimiento son calculadas usando datos agrupados de cada país. Ganancias sociales en la balanza cimiento económico en la reducción de la pobreza. Aún cuando se requiere mayor investigación, la emergente clase media alta con crecimiento más rápido de sus ingresos podría explicar parcialmente la falta de reducción en desigualdad reciente (ver Cuadro 2). En vista de la reciente desaceleración del crecimiento económico y la probabilidad de que la desigualdad se estanque, el rápido progreso en la reducción de la pobreza y la promoción de la prosperidad compar- tida podrían ser más difíciles. LAC fue testigo de una desaceleración en el crecimiento del PIB per cápita de 4.8% en 2010 a 1.3% estimado en 2013 y un 1.7% proyectado para 2014.7 Suponiendo que la pobreza responda al crecimiento tal como lo hizo en la última década, se prevé que la pobreza total caiga de 25.3% en 2012 a 23.8% en 2014 y que la velocidad anual de su reducción se frene de una tasa promedio de 1.8 puntos porcentuales anuales en el periodo 2003-2012 a sólo 0.8 puntos porcentuales. De igual manera, se proyecta que la pobreza extrema se reduzca a 11.3% en 2014 de 12.3% en 2012, reflejando una disminución anual de apenas 0.5 puntos porcentuales, en comparación con la caída promedio de 1.4 puntos porcentuales anuales entre 2003-2012. 7  Banco Mundial (2014). 15 Si bien restablecer tasas de crecimiento más elevadas y mantener la estabilidad macroeconómica siguen siendo la prioridad principal en LAC para conservar el impulso que se observó en el pasado, es igualmen- te importante fortalecer los vínculos entre ese crecimiento y la reducción de la desigualdad. Este informe se enfoca en dos de las principales vías para construir estos vínculos. De esta manera, se examina el impacto de la política fiscal en la redistribución y se analiza los avances y desafíos recientes en promover la igualdad de oportunidades a través del mejor acceso a bienes y servicios básicos. En la sección 2 del informe se destaca el papel de la política fiscal en LAC, mostrando que si bien las trans- ferencias y los impuestos directos en general reducen la desigualdad en ciertos países, la dependencia de los gobiernos en los impuestos indirectos, como el impuesto al valor agregado, puede ser una carga significativa para el 40% más pobre de la distribución de ingresos.8 Este análisis se basa en estudios espe- cíficos de países comparables llevado a cabo por el Compromiso con la Equidad (CEQ, por sus siglas en inglés), el cual es un proyecto conjunto de la Universidad de Tulane y el Inter-American Dialogue. Uno de los hallazgos más importantes de estos estudios es que los indicadores de desigualdad se reducen sustancialmente cuando se monetizan las transferencias en especies, particularmente la oferta de servicios públicos de educación y salud. La sección 3 del informe muestra los significativos avances que LAC ha realizado en el otorgamiento de oportunidades básicas infantiles asociadas a una mayor acumulación de capital humano, como es el ac- ceso a la educación. Sin embargo, el Índice de Oportunidades Humanas (IOH)9 revela que el acceso a oportu- nidades de buena calidad es bajo y desigual. Éste es un indicador que mide cómo el acceso a oportunidades básicas de un niño (educación, agua, electricidad y saneamiento) es afectado por sus circunstancias (lugar de residencia o la educación del jefe de familia). El IOH muestra una fuerte correlación entre dicho acceso y las cir- cunstancias de un niño, las cuales están fuera de su control, especialmente en medidas de calidad. Esto sugiere que, si no existen esfuerzos concertados para mejorar la calidad de la educación, en particular en zonas más re- motas y más pobres, los niños que nacen en condiciones socioeconómicas desfavorables no podrán desarrollar las habilidades necesarias para transformarse en adultos competitivos en el mercado laboral. Es probable que promoviendo un acceso más igualitario a bienes y servicios básicos de calidad en una fase temprana de la vida se reduzca la desigualdad en la edad adulta10 y se incremente la eficiencia económica,11 situación que fortalecerá el círculo virtuoso entre crecimiento y reducción de la pobreza. A medida que los encargados de la formulación de políticas de la región buscan acelerar el progreso económico y social, los indicadores IOH y CEQ serán herramientas importantes para identificar aquellas áreas donde una mayor inversión y una mejor selección pueden otorgar mayores retornos. Ganancias sociales en la balanza 8  Lustig, Pessino y Scott (2014). 9  Barros y colaboradores (2009) crearon el índice, el que también ha sido aplicado a nivel regional en Molinas y colaboradores (2012). 10  Barros y colaboradores (2009). 11  Ferreira y colaboradores (2012). 16 II. Los efectos de la política fiscal en la desigualdad en LAC12 E 12 n la última década, LAC ha utilizado cada vez más las políticas fiscales para promover conquistas sociales. Entre 2000 y 2011, el gasto social se incrementó de 11.7% a 14.5% como porcentaje del PIB; mientras que el gasto público en educación aumentó de 3.9% a 5%, los gastos de capital de 3.5% a 4.5% y el gasto en salud, de 3% a casi 4% en los 18 países analizados por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).13 De igual manera, el número de países de la región con programas de transferencias moneta- rias condicionadas aumentó a 18 en este periodo,14 al tiempo que se multiplicaron los programas de pensiones no contributivas en toda la región. Para financiar este aumento del gasto, la región aumentó la recaudación fiscal de 16% a 20% del PIB entre 2000 y 2010.15 ¿Cuál fue el impacto de estas políticas fiscales sobre la desigualdad? La metodología de Compromiso con la Equidad (CEQ) cuantifica estos impactos, permitiendo comparar la eficacia tributaria y el gasto público Ganancias sociales en la balanza entre los países.16 El proyecto CEQ aplica una metodología de análisis de incidencia consistente en seis países (Argentina, Bolivia, Brasil, México, Perú y Uruguay), lo cual permitió comparar directamente el éxito de estos gobiernos en la aplicación de la política fiscal para reducir la desigualdad. Debido a que estos estudios proveen coeficientes de Gini basados en diferentes tipos de políticas fiscales, se puede diferenciar entre el efecto de impuesto directos, transferencias directas e impuestos indirectos y subsidios. El enfoque constituye un análisis estático y no captura respuestas de comportamiento. Por el lado del gasto, se concentra en transferencias, salud y educación (dejando de lado el gasto en infraestructura) y no toma en cuenta la calidad de los servicios públi- cos ni las externalidades del gasto fiscal (vea el Cuadro 3). 12  Gran parte de los análisis e indicadores usados en la sección II se elaboraron en el marco del proyecto Compromiso con la Equi- dad (CEQ), iniciativa conjunta de la Universidad de Tulane y el Inter-American Dialogue (www.commitmentoequity.org/). Para más información sobre la metodología del CEQ, vea Lustig y Higgins (2012). Las referencias bibliográficas del análisis de cada país son las siguientes: Argentina: Lustig y Pessino (2014), Bolivia: Paz Arauco y colaboradores (2014), Brasil: Higgins y Pereira (2014), México: Scott (2014), Perú: Jaramillo (2014), Uruguay: Bucheli y colaboradores (2014). 13  Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) (2014). 14  Cecchini y Madariga (2011), Banco Mundial (2013a). 15  OCDE/CEPAL/Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (2012). 16  Lustig y Higgins (2012). Nótese que el estudio de CEQ para Argentina (Lustig y Pessino, 2014) excluye todo análisis por el lado de los impuestos debido a limitaciones en los datos disponibles y, por lo tanto, no es estrictamente comparable con los otros estudios. 17 Cuadro 3: El método del Compromiso con la Equidad 17 El proyecto Compromiso con la equidad (CEQ) es un esfuerzo conjunto del Centro Interamericano de Política e Investigación, del Departamento de Economía de la Universidad de Tulane y el Inter-American Dialogue. Este proyecto analiza el impacto fiscal de una selección de países aplicando una metodología sistemática. La metodología aplicada utiliza datos de encuestas de hogares y cuentas nacionales para examinar el impacto de la política fiscal sobre la desigualdad del ingreso familiar. La metodología mide el impacto fiscal usando cinco definiciones de ingreso, cado uno de los cuales captura el efecto de tipos específicos de impuestos, subsidios y transferencias. En primer lugar, el Ingreso de Mercado se refiere al ingreso que recibe cada hogar antes de deducir los impuestos y las transferencias. En segundo lugar, el Ingreso Neto de Mercado es el Ingreso de Mercado una vez deducidos los impuestos sobre el ingreso y la nómina. En tercer lugar, el Ingreso Disponible, es la suma del impacto de las transferencias directas al Ingreso Neto de Mercado. Esta es la definición del ingreso que suele utilizarse para medir la desigualdad en otros estudios y análisis. En cuarto lugar, la metodología de CEQ también considera el Ingreso Post-fiscal que incorpora el efecto de los subsidios e impuestos indirectos en el Ingreso Disponible. Y por último, el Ingreso Final agrega al ingreso familiar el costo fiscal estimado por unidad de transferencias públicas en especie (educación y prestación de salud públicas) menos la contribución pagada por el hogar. En el siguiente gráfico se detalla estas definiciones de ingreso. Se debe tener cuidado en formular implicaciones de política de este análisis, dado que los efectos indirectos de la tributación y del gasto no se capturan por completo. Al igual que en otros análisis de incidencia estáticos, los impactos medidos no incorporan las respuestas de comportamiento, los impactos a largo plazo y las externalidades. Por ejemplo, la inversión en educación terciaria puede tener un efecto directo solo en los jóvenes de clase media que tienen la capacidad de asistir a la universidad, pero esta inversión puede generar externalidades positivas para la sociedad en general a largo plazo, al mejorar la productividad e innovación del país. Además, el CEQ no tiene en cuenta el gasto público y la inversión en infraestructura, tales como caminos, proyectos de abastecimiento de agua y electricidad, los cuales pueden tener un impacto significativo en las oportunidades económicas y del mercado laboral. CEQ-Definiciones de ingreso Ingreso de Mercado TRANSFERENCIAS Sueldos y salarios, renta del capital, transferencias privadas; IMPUESTOS antes de deducir impuestos, contribuciones al seguro social Ganancias sociales en la balanza y transferencias. Incluye pensiones contributivas. Impuestos sobre la renta de las personas físicas y contribuciones de los empleados al seguro social Ingreso Neto de Mercado (sólo contribuciones que no se destinan a la pensiones) Transferencias directas Ingreso Disponible Subsidios indirectos Impuestos indirectos Ingreso Post- scal Transferencias en especie (servicios públicos de Co-pagos, cargos a usuarios educación y salud gratuitos o subvencionados) Ingreso Final 17 17  Para conocer una descripción general de la metodología, vea Lustig y Higgins (2012). 18 Gráfico 9. Las transferencias en especie impulsan el impacto redistributivo de la política fiscal 0,60 0,58 0,55 0,51 Coe ciente de Gini 0,50 0,50 0,49 0,49 0,47 0,45 0,45 0,45 0,44 0,43 0,40 0,39 0,35 Ingreso de mercado Ingreso neto de mercado Ingreso disponible Ingreso post- scal Ingreso nal Argentina Bolivia Brasil México Perú Uruguay Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y colaboradores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta en este informe es propiedad del Fondo Educacional de Tulane y del Inter-American Dialogue. Nota: El grá co muestra los coe cientes de Gini calculados con cada una de las cinco de niciones de CEQ (vea el cuadro 3). Las líneas discontinuas representan el cambio en el coe ciente de Gini atribuido a transferencias en especie, que a diferencia de las demás de niciones del ingreso de CEQ se basan en transferencias no monetarias. El impacto redistributivo total de la política fiscal es moderado en los seis países analizados.18,19 Uruguay, México y Brasil lograron una caída de 0.03 puntos en el coeficiente de Gini mediante la combinación de impues- tos directos, transferencias directas, impuestos indirectos y subsidios, mientras que en Perú y Bolivia este impac- to fue insignificante (Gráfico 9). Los impuestos y las transferencias directas redujeron la desigualdad de ingresos, en tanto que los subsidios y los impuestos indirectos tuvieron efectos mínimos o bien contrarrestaron algunos de los avances logrados. Por ejemplo, esto se refleja en países como en Brasil y Bolivia, donde el coeficiente de Gini del ingreso post-fiscal es más alto que el coeficiente de Gini del ingreso disponible. De los instrumentos fiscales utilizados en LAC, las transferencias gubernamentales en especie para edu- cación y salud pública son las que más incidieron en reducir la desigualdad.20 En los cinco países donde se llevó a cabo un análisis completo, un promedio del 63% de la reducción de la desigualdad fue debido a la políti- ca fiscal a través de transferencias gubernamentales en especie. En Brasil, la desigualdad disminuyó 10.7 puntos porcentuales debido sólo a la prestación de bienes y servicios públicos, la cual es la fuente más importante de la caída de 14 puntos porcentuales en la desigualdad logrado a través de la política fiscal. En el otro extremo se sitúa Perú, el cual sólo logró reducir la desigualdad en 3.8% mediante la política fiscal, aunque la prestación Ganancias sociales en la balanza de servicios explica dos tercios de esa disminución. Estos resultados sugieren que las transferencias en especie son muy progresivas. Sin embargo, las cifras no reflejan la calidad de los servicios, aunque sí podrían indicar un bajo aprovechamiento de los servicios por hogares de ingresos más altos que optan por proveedores privados de mejor calidad.21 Impuestos directos e indirectos: bajos ingresos fiscales y la alta dependencia de impuestos indirectos En América Latina, la recaudación fiscal total como porcentaje del PIB fluctúa entre un máximo de 33% en Argentina y Brasil y un mínimo de 12% en Guatemala.22 Este rango es inferior al 34% promedio de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Además, la composición de los impuestos difiere de la norma de la OCDE. Si bien sólo el 32.5% de los impuestos recaudados en la OCDE en 18  Se realizó un análisis completo para todos los países, salvo en Argentina, ya que no se disponía de datos claves. Las cifras que se muestran para este país se basan en un análisis parcial. 19  Lustig, Pessino y Scott (2014). 20  Lustig, Pessino y Scott (2014). 21  Por ejemplo, Ferreira y coautores (2012) muestran que la clase media tiene una mayor probabilidad de asistir a escuelas privadas en LAC. 22  Según la base de datos fiscales de 2010 de las estadísticas de la OCDE. 19 Gráfico 10. Los impuestos indirectos, muchos de ellos regresivos, son la fuente más importante del ingreso fiscal en LAC 40 30 Porcentaje del PIB 20 10 0 Brasil Argentina Bolivia Costa Rica Chile Nicaragua Honduras Países de la OCDE Uruguay México Panamá Colombia Perú Ecuador El Salvador R. Dominicana Guatemala Paraguay Impuestos directos: impuestos individuales sobre la renta, utilidades y ganancias de capital Impuesto indirectos: impuestos sobre bienes y servicios Otros impuestos Fuente: Estadísticas de la OCDE: Base de datos sobre impuestos, 2010. Nota: "otros" incluye impuestos corporativos, contribuciones al seguro social, impuestos sobre la nómina, impuestos a la propiedad y otras fuentes. 2010 fueron impuestos indirectos, éstos representaron la mayor recaudación en casi todos los países de LAC. A su vez, los países de la OCDE dependen mucho más de los impuestos directos que los de LAC (principalmente impuestos sobre la renta). La composición de la recaudación fiscal en LAC tiene implicaciones importantes para la progresividad, ya que los impuestos directos, principalmente a los ingresos, suelen ser los más progresivos, en tanto que los impuestos al consumo son los más regresivos. Una de las razones de que en LAC se recauden relativamente pocos impuestos directos puede ser la existencia de mecanismos de recaudación fiscal débiles y por consiguiente, el gran tamaño de los sectores laborales informales. Los mercados laborales informales redu- cen los ingresos provenientes del impuesto sobre la renta, lo cual incrementa la dependencia gubernamental de los impuestos al consumo. Los impuestos directos reducen la desigualdad en los cinco países de CEQ para los cuales se dispone de da- tos fiscales, especialmente en Perú, en tanto que los impuestos indirectos son regresivos en Bolivia, Brasil y Uruguay (Gráfico 11).23 Dado que los impuestos indirectos constituyen el grueso de la recaudación fiscal en LAC (Gráfico 10), la progresividad total de la recaudación fiscal en la región (que se muestra mediante barras azules Ganancias sociales en la balanza en el Gráfico 11) es muy inferior a la progresividad de los sistemas de impuestos directos vigentes. El coeficiente de Kakwani se usa para medir el efecto de los impuestos en la desigualdad, aunque los supuestos utilizados para determinar la incidencia de los distintos impuestos también tienen un fuerte impacto en los resultados.24 El impacto regresivo de la estructura fiscal es especialmente fuerte en los más pobres (Gráfico 12).25 La pro- porción de los impuestos por cada decil relativo a su porcentaje del ingreso muestra que el decil más bajo paga un porcentaje más alto en impuestos de lo que recibe en ingresos de mercado, especialmente en Bolivia, Brasil 23  Lustig, Pessino y Scott (2014). 24  Los estudios de CEQ de México y Perú, los dos países donde la tributación indirecta no resultó ser regresiva, se basaron en el supuesto de que los hogares rurales no pagan impuestos indirectos. La incidencia de estos impuestos se calculó de manera diferente para cada uno de los países incluidos en el estudio al basarse en supuestos diferentes sobre la evasión fiscal (vea Lustig, Pessino y Scott, 2014, para conocer un tratamiento más detallado de los supuestos utilizados en cada estudio del país). Mientras que no hay ajuste por evasión del impuesto al consumo en los estudios de Uruguay y Brasil (Bucheli y coautores, 2014; Higgins y Pereira, 2014), en los demás estudios existe cierto grado de ajuste por evasión. Por ejemplo, en el estudio de Perú se asume que las personas que viven en aldeas de menos de 100 hogares no pagan impuestos, pues compran todo a vendedores ambulantes, mercados agrícolas locales u otros sectores informales (Jaramillo, 2014). Los estudios de Bolivia y México también dan cabida a tasas de evasión diferenciadas (sobre la base del lugar de compra, por ejemplo) cuando se calculan las tasas impositivas efectivas; además, el estudio de México supone que los hogares rurales no pagan nada de impuesto al valor agregado (Paz Arauco y coautores, 2014; Scott, 2014). 25  Lustig, Pessino y Scott (2014). 20 Cuadro 4: Medición de la progresividad de la política fiscal 26 Una política fiscal progresiva es aquella que genera una distribución de ingresos menos desigual que la del ingreso de mercado. De manera similar, un sistema tributario o de transferencias es regresivo cuando genera una distribución más desigual de los ingresos que la del ingreso de mercado. El gráfico a continuación muestra descriptivamente las definiciones matemáticas de la progresividad y regresividad usando la curva de Lorenz (la distribución acumulativa de ingresos, impuestos o transferencias ordenada por el ingreso de mercado per cápita) y la línea de igualdad absoluta (la línea en 45 grados) como valores de umbral importantes. El coeficiente de Gini se calcula para medir la desigualdad de ingresos de cada definición de ingreso utilizada en los estudios de CEQ. El coeficiente de Gini mide el área entre la curva de Lorenz y la línea de igualdad absoluta, expresada como porcentaje del área máxima debajo de la línea. Por consiguiente, un coeficiente de Gini de cero representa la igualdad perfecta, en tanto que un coeficiente igual a uno señala perfecta desigualdad. Los estudios de CEQ calculan los coeficientes de concentración para medir la progresividad de cada tipo de transferencia y se calculan usando la misma metodología que el coeficiente de Gini, pero basándose en el porcentaje del total de las transferencias (en lugar de los ingresos) recibidas a lo largo de la distribución de ingresos. Las transferencias que benefician más a los deciles de ingresos más bajos que a los de ingresos más altos se consideran progresivas y se pueden dividir en dos grupos: 1) aquellas que son absolutamente progresivas y ayudan más a los que están en peor situación que a los grupos de ingresos más altos, y 2) aquellas que son relativamente progresivas, donde el gasto en trasferencias se distribuye de manera más pareja que el ingreso de mercado, pero que de todas maneras favorecen más a los individuos de ingresos más altos que a los menos prósperos. Esta situación se refleja en un coeficiente de concentración negativo para las transferencias absolutamente progresivas y en uno positivo pero inferior al coeficiente de Gini del ingreso de mercado para aquellas que son relativamente progresivas. La transferencia es neutra si se distribuye igual que el ingreso (el coeficiente de concentración es igual al coeficiente de Gini del ingreso de mercado), pero es regresiva si los deciles de ingresos más altos reciben un porcentaje más alto del gasto que lo que corresponde a su ingreso de mercado (el coeficiente de concentración es mayor que el coeficiente de Gini de mercado). Para medir la progresividad del sistema fiscal, los estudios de CEQ usan el coeficiente de Kakwani, que se calcula restando el coeficiente de concentración del impuesto al coeficiente de Gini del ingreso de mercado. Los impuestos progresivos tienen coeficientes de Kakwani positivos, en tanto que los regresivos tienen coeficientes negativos. Un impuesto perfectamente neutro tiene un coeficiente de Kakwani igual a cero. Definiciones de progresividad y regresividad de impuestos y transferencias Ganancias sociales en la balanza Proporción acumulada de bene cios, impuestos o ingreso trasferencia progresiva en términos absolutos línea de 45 grados trasferencia progresiva en términos relativos; impuesto regresivo transferencia regresiva; impuesto progresivo curva de Lorenz del ingreso de mercado; transferencia o impuesto neutral 0 Proporción acumulada de la población (ordenada por ingreso de mercado) 1 26 26  Lustig y Higgins (2012). 21 Gráfico 11. Los impuestos indirectos reducen la progresividad de los sistemas tributarios de LAC 0,5 0,4 0,3 Coe ciente de Kakwani 0,2 0,1 0,0 -0,1 -0,2 Bolivia Brasil México Perú Uruguay Impuestos directos Impuestos indirectos Todos los impuestos Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y colaboradores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). © El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Inter-American Dialogue. Nota: El grá co muestra el índice de Kakwani, el cual es una medida de la progresivi- dad del sistema scal calculado como el coe ciente de concentración de los impuestos menos el coe ciente de Gini del ingreso de mercado (ver el Cuadro 3 para de niciones del ingreso y el Cuadro 4 para un análisis del índice de Kakwani). Gráfico 12. En Bolivia, Brasil y Uruguay, el primer decil paga un porcentaje elevado de su ingreso en impuestos 3,5 Cociente entre la fracción de impuestos pagados 3,0 y la fracción del ingreso de total de mercado 2,5 2,0 1,5 1,0 0,5 0,0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Decile Bolivia Brasil México Perú Uruguay Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). ©El Compendio de indicadores de Ganancias sociales en la balanza CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y del Inter-American Dialogue. Nota: El grá co muestra la tasa entre el porcentaje de los impuestos pagados y el porcentaje de total de los ingresos de mercado por cada decil de ingresos. y Uruguay. Por ejemplo, la proporción de la recaudación total de impuestos de quienes pertenecen al primer decil en Bolivia es más de tres veces su participación del ingreso del país.27 Un problema similar existe en Brasil y Uruguay, aunque en menor medida. En estos dos países, las personas que están el primer decil también contri- buyeron más al total de la recaudación fiscal que a su porcentaje en el ingreso de mercado: 1.3 veces en Uruguay y 1.5 veces en Brasil.28 De manera interesante, sólo los individuos que se encuentran en los deciles extremos de la distribución del ingreso en estos dos países pagan un porcentaje mayor de impuestos de lo que reciben en ingresos de mercado. Por otro lado, en México y Perú sólo el decil más alto (los de mayores ingresos) paga un porcentaje mayor relativo a sus ingresos, mientras que el 90% restante paga un porcentaje menor. Como se mencionó anteriormente, estos resultados pueden ser sensibles a los supuestos en que se basan los estudios del CEQ con respecto a los mercados formales de cada país. 27  Es decir, mientras que el primer decil de Bolivia recibe solo 0.7% del ingreso de mercado de la nación, paga 2.3% de los impues- tos cobrados a las personas. 28  Cabe observar que ambos estudios asumen que no hay evasión de impuestos indirectos, mientras que los estudios de los demás países consideran algún grado de evasión (vea nota al pie 24). 22 Gráfico 13. El gasto en los programas de CCT está relativamente bien dirigido ya que el 40% más pobre recibe la mayor parte 100% 80% Distribución acumulada 60% 40% 20% 0% 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Decil de ingresos Argentina Bolivia Brasil México Perú Uruguay Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Inter-American Dialogue. Nota: El grá co muestra la distribución acumulada del gasto en CCT por decil de ingresos. Transferencias directas e indirectas: inversiones en oportunidades y capital humano Las transferencias directas en efectivo, incluyendo las CCT, representan entre 0.4% y 3.7% del PIB en los seis países de este estudio.29 Las transferencias directas incluyen las transferencias en efectivo condi- cionadas y no condicionadas y las pensiones no contributivas. Mientras que estas últimas están dirigidas a los ancianos, las CCT generalmente se destinan a las familias de ingresos bajos. Según los resultados del CEQ, en Argentina, Brasil, México, Perú y Uruguay, entre 80% y 90% del gasto en este tipo de transferencias se adjudica al 40% inferior de la distribución del ingreso (Gráfico 13).30 Sin embargo, en Bolivia la asignación es mucho menos progresiva, ya que sólo el 60% del gasto en las CCT está dirigido al 40% más pobre. Esto sucede porque el programa de Bolivia no incluye la pobreza como requisito de elegibilidad.31 Si bien el pro- grama de Bolivia es absolutamente progresivo, es mucho menos progresivo que los programas de las CCT de otros países,32 y como resultado, la reducción en la desigualdad es menor en Bolivia cuando se compara con las reducciones logradas a través de sus respectivos programas de las CCT en Brasil, México, Perú y Uruguay (vea el Anexo 7). Ganancias sociales en la balanza Un porcentaje importante del gasto social se destina a servicios públicos, especialmente a educación y salud.33 En conjunto, el gasto en educación y salud no contributiva representa más del 10% del PIB en Brasil y Bolivia y apenas 4.7% en Perú (Gráfico 14). Bolivia es un caso atípico en dos aspectos relacionados con el gasto en educación: gasta mucho más que los demás países en educación, pero gran parte del dinero se destina a la educación terciaria. De manera similar, el gasto en salud varía considerablemente en la región: mientras que Brasil destina más de 5.2% del PIB a salud no contributiva, México y Perú gastan menos del 2% en este tipo de salud (y sólo 3.1% en salud cuando se incluye el gasto contributivo). 29  Lustig, Pessino y Scott (2014). 30  El Gráfico 13 resalta el porcentaje del gasto en las CCT que recibe el 40% más pobre de la distribución del ingreso, pese a que los programas no están enfocados específicamente hacia ese grupo. Los programas insignia de las CCT que se incluyen en el análisis son: 1) en Argentina, Asignación Universal por Hijo, Jefes y Jefas de Hogar Desocupados, Programa Familias para la Inclusión Social, y Programa Nacional de Becas Estudiantiles; 2) en Bolivia, Bono Juancito Pinto y Bono Juana Azurduy; 3) en Brasil, Bolsa Familia; 4) en México, Oportunidades; (5) en Perú, Juntos; y 6) en Uruguay, AFAM - Asignaciones Familiares (Plan de Equidad). 31  Los programas de CCT que se incluyen en el estudio de CEQ de Bolivia se destinan a todos los niños que asisten a escuelas públicas hasta octavo grado (Bono Juancito Pinto), y a madres (incluidas embarazadas) y niños de hasta dos años sin seguro de salud (Bono Juana Azurduy), (Paz Arauco y coautores, 2014). 32  Vea en el recuadro 4 un análisis de la progresividad absoluta y relativa. 33  Lustig, Pessino y Scott (2014). 23 Gráfico 14. Los sistemas públicos de salud y educación constituyen el grueso del gasto social en LAC 25% Gasto público como porcentaje del PIB 20% 15% 2,6% 1,9% 5,2% 10% 5,4% 2,4% 4,5% 1,3% 5% 4,6% 1,9% 3,7% 2,9% 3,7% 2,2% 0,8% 0,7% 0,8% 0,4% 1,7% 0% Argentina Bolivia Brasil México Perú Uruguay Transferencias en efectivo Pensiones Educación Educación Salud Salud Subsidios (excl pensiones) no contributivas (sin ed. terciaria) terciaria (no contributiva) (contributiva) indirectos Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Diálogo Interamericano. Nota: el grá co informa el gasto público como porcentaje del PIB, según lo indicado en las cuentas públicas o ciales. Gráfico 15. La incidencia del gasto en salud varía considerablemente entre países 25% 20% Participación del gasto 15% 10% 5% 0% 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Decil Argentina Bolivia Brasil México Perú Uruguay Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y colaboradores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y colaboradores (2014). ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Inter-American Dialogue. Nota: El grá co presenta la concentración del gasto público en Ganancias sociales en la balanza salud por decil de ingresos. Gráfico 16. A excepción de Bolivia, el gasto en educación es más elevado para los estudiantes de ingresos bajos 18% 16% 14% Participación del gasto 12% 10% 8% 6% 4% 2% 0% 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Decil Argentina Bolivia Brasil México Perú Uruguay Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Diálogo Interamericano. Nota: el grá co informa la concentración del gasto en educación a lo largo de la 24 distribución del ingreso por decil de ingresos. Gráfico 17. El gasto en educación es progresivo, especialmente a nivel preescolar y primario Coe ciente de concetracion y coe ciente de GINI 0,5 0,4 0,3 0,2 0,1 0,0 -0,1 -0,2 -0,3 -0,4 -0,5 Argentina Bolivia Brasil México Perú Uruguay Preescolar Primaria Secundaria Terciaria Todos los niveles educ. Gini de mercado Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Inter-American Dialogue. Nota: El grá co muestra los coe cientes de concentración del gasto en educación para cada uno de los países analizados por el CEQ y el coe ciente de Gini del ingreso de mercado como punto de referencia. Cabe observar que los coe cientes de concentración mayor que cero e inferior al coe ciente de Gini son relativamente progresivos (vea el Cuadro 4). En términos generales, el gasto público en salud se destina a toda la población, salvo en Argentina y Brasil, donde se favorece más a los pobres.34 En Argentina, el gasto en salud está dirigido especialmente a los individuos con bajos ingresos de manera que el 40% más pobre recibe más de dos tercios de todas las transfe- rencias fiscales para salud (Gráfico 15).35 En contraste, Perú destina sólo una cuarta parte de su gasto público en salud al 40% más pobre.36 Cinco de los seis países incluidos en el análisis de CEQ destinan mayores proporciones del gasto en edu- cación a los deciles de menor ingreso, aunque esto puede reflejar el hecho de que familias con mayores ingresos optan por no enviar a sus hijos a las escuelas públicas, al creer que la educación privada es de mejor calidad (Gráfico 16).37 Bolivia es la excepción, en donde el gasto en educación alcanza sus niveles más altos en los deciles seis a ocho, quizás como reflejo de este país por su inclinación a dirigir el gasto hacia la edu- cación terciaria.38 Si bien el gasto total en educación pública es progresivo, el gasto en enseñanza preescolar y educación primaria es el más progresivo de todos (Gráfico 17).39 La progresividad del gasto en la educación primaria y Ganancias sociales en la balanza secundaria, se debe en parte a que los niños de familias de ingresos más altos asisten en su gran mayoría a es- cuelas privadas.40 La progresividad de la educación terciaria es solo relativa, es decir, es progresiva en términos del coeficiente de Gini del ingreso de mercado, pero no con respecto al gasto igualitario entre deciles (vea la definición de la progresividad en el Cuadro 4). La baja tasa de matriculación en educación terciaria de estudiantes de ingresos bajos refleja, entre mu- chos otros factores, la menor calidad de la educación primaria y secundaria que recibieron. Como se muestra en el Cuadro 5, hay diferencias significativas entre los resultados que arrojan las pruebas de estudiantes de escuelas privadas y públicas en toda la región. Los niños de hogares con ingresos más altos tienen mayor probabilidad de asistir a escuelas privadas con mejores resultados de enseñanza, en tanto que los niños menos favorecidos dependen más de la calidad de la educación pública. Esta desigualdad se examina también en la sección 3 de este informe usando el Índice de Oportunidades Humanas (IOH). Según se muestra en esa sección, la educación y la ocupación de los padres son los factores más importantes que determinan si un menor tiene 34  Lustig, Pessino y Scott (2014). 35  Lustig y Pessino (2014). 36  Jaramillo (2014). 37  Lustig, Pessino y Scott (2014). 38  Paz Arauco y coautores (2014). 39  Lustig, Pessino y Scott (2014). 40  Ferreira y coautores (2012). 25 Cuadro 5: Diferencias entre escolaridad privada y pública en LAC Las puntuaciones en los exámenes internacionales del Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE muestran diferencias importantes en las tasas de aprobación de los estudiantes en LAC que asisten a escuelas privadas versus aquellos matriculados en escuelas públicas. En Perú, por ejemplo, solo 18% de los alumnos de escuelas públicas lograron una puntuación de 2 o más en la prueba de matemáticas, calificación que obtuvo el 75% de sus contrapartes en las escuelas privadas. Aunque es posible que condiciones tales como, los efectos de los compañeros, la situación socioeconómica y la selección de los estudiantes influyan en los resultados escolares, las notables brechas en los exámenes internacionales confirman que hay diferencias sustanciales entre la calidad de las escuelas públicas y privadas. Gráfico B5.1. En LAC, los estudiantes de las escuelas privadas tienen un mejor desempeño que los de las escuelas públicas en las pruebas internacionales Porcentaje del estudiantes con resultados igual a 2 o mayores 100% 80% 60% 40% 20% 0% Matem. Lectura Matem. Lectura Matem. Lectura Matem. Lectura Matem. Lectura Matem. Lectura Matem. Lectura Matem. Lectura Argentina Brasil Chile Colombia Costa Rica México Perú Uruguay Privadas Públicas Todas Fuente: Cálculos de los autores con datos de PISA de 2012 (OCDE). acceso a buenas oportunidades en su infancia. Asimismo, se muestra que el acceso a la educación de mejor calidad es menor y más desigual en LAC en comparación con los países de la OCDE que no pertenecen a LAC. Ganancias sociales en la balanza En conclusión, aunque LAC es una de las regiones más desiguales del mundo, su política fiscal solo des- empeña un papel débil para aliviar esta situación tanto en términos absolutos como relativos, en compa- ración con los países desarrollados. Los países de la OCDE que no pertenecen a LAC y una selección de países de esta región tienen niveles similares o levemente inferiores de desigualdad en el ingreso de mercado (ingreso familiar antes de impuestos y transferencias fiscales), con un coeficiente de Gini por lo general entre 0.4 y 0.5 (Gráfico 18).41 Sin embargo, hay una diferencia notoria en el efecto de la política fiscal en la desigualdad en estos dos grupos de países. El coeficiente de Gini del ingreso disponible (ingreso familiar después de deducir impues- tos directos y sumar las transferencias directas) en el primer grupo suele ser alrededor de 0.3 o menos, mientras que tiende a ser alrededor del 0.5 en los países de LAC, cifra muy cercana al coeficiente de Gini del ingreso de mercado. La baja recaudación fiscal y la alta dependencia de los impuestos indirectos de América Latina es una causa importante de la diferencia con los países desarrollados en materia de desigualdad de ingresos.42 Estos resultados parecen indicar que la política fiscal es todavía un mecanismo muy poco explotado con el fin de im- pulsar la reducción de la pobreza y la prosperidad compartida en la región. 41  Goni, Lopez y Serven (2011). Este análisis compara los efectos de la política fiscal en la desigualdad de ingresos entre un grupo seleccionado de países de LAC y de Europa occidental. 42  Goni, Lopez y Serven (2011). 26 Gráfico 18. Las políticas fiscales de LAC no logran el nivel de reducción de la desigualdad que se registra en los países de la OCDE 0,7 0,6 0,5 Gini 0,4 0,3 0,2 0,1 0,0 Australia Brasil Austria Islandia Rep. Eslovaca Alemania Israel México Eslovenia Noruega Dinamarca Rep. Checa Finlandia Bélgica Luxemburgo Francia Polonia Corea, Rep. de Nueva Zelandia Estonia Italia Irlanda Japón Grecia España Reino Unido Portugal Estados Unidos Uruguay Bolivia Perú Chile Suecia Países Bajos Suiza Canadá Gini después de política scal (OCDE que no pertenecen a LAC) Gini después de política scal (LAC) Gini antes de política scal Fuente: Los coe cientes de Gini para países de la OCDE que no pertenecen a LAC y Chile provienen de las Estadísticas de la OCDE y reportan datos tributarios de 2010 para todos los países salvo Hungría, Irlanda, Japón, Nueva Zelandia, Suiza y Turquía, que reportan cifras de 2009, y Chile, cuyas cifras son de 2011. Los coe cientes de Gini para LAC provienen de Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014) y re ejan datos de 2009, excepto en el caso de México, que se basan en datos de 2010. Nótese que los métodos de la OCDE y del CEQ son diferentes y posiblemente no sean comparables de manera directa, aunque una comparación de países donde se han aplicado ambas metodologías revela coe cientes de Gini similares. ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y del Inter-American Dialogue. Ganancias sociales en la balanza 27 III. A pesar de que los países han avanzado en materia de prestación de bienes y servicios, el acceso a algunas oportunidades sigue siendo bajo y en gran medida desigual en LAC I maginémonos a Julia, una niña de seis años que vive en una zona rural de Brasil. Tiene tres hermanos, su madre no recibió educación y su hogar pertenece al segundo quintil de la distribución del ingreso. La probabilidad de que Julia tenga acceso a agua corriente y saneamiento es de alrededor de 77% en 2012 (Gráfico 19). Es probable que la niña finalice a tiempo el sexto grado (con 60% de probabilidad), un determinante importante de su capacidad de cursar oportunamente la enseñanza secundaria y tener mejores oportunidades de trabajo después de graduarse. Si se compara con su hermana Ana María, que tiene 17 años, Julia tiene más oportunidades que se consideran im- portantes para tener una vida productiva de su elección. La probabilidad de que Ana María tuviera acceso al agua corriente y saneamiento durante su crecimiento era del 60% y muy probablemente no lograría terminar a tiempo el sexto grado (tenía apenas una probabilidad del 40% de lograrlo). Aunque las oportunidades de Julia son mejores que las de su hermana, todavía enfrenta importantes desventajas cuando se compara con Thiago, un niño de seis años que vive en una zona urbana de Brasil con sólo dos hermanos y Ganancias sociales en la balanza ambos padres con educación secundaria. El hogar de Thiago pertenece al cuarto quintil de la distribución del ingreso y tiene una probabilidad cercana al 100% de disponer de agua corriente y saneamiento y una probabilidad del 84% de terminar a tiempo el sexto grado (casi 24% más alto que la de Julia). Resulta interesante el hecho de que Pedro, el hermano mayor de Thiago, tenía incluso una probabilidad más alta que éste de terminar a tiempo la educación secundaria y más del doble que la de Ana María. Estas tendencias destacan los avances importantes que se han lo- grado en acortar las brechas de oportunidades en Brasil, pero también resaltan la persistencia de estas brechas y los crecientes desafíos que se tienen en la prestación de servicios de educación de calidad a todos los niños. Es de suma importancia permitir que los niños tengan las mismas oportunidades de acceso a educación básica, salud e infraestructura de vivienda con el fin de crear una sociedad equitativa, sin pobreza y ayu- dar a los niños de hoy a alcanzar su pleno potencial productivo como adultos. Un estudio muestra que en Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala, México, Panamá y Perú, entre un tercio y un quinto de la desigualdad de in- gresos de los individuos se explica por la desigualdad de oportunidades durante la infancia.43 Estas disparidades 43  Barros y coautores (2009). Para medir el grado en que la desigualdad de resultados nace de oportunidades disímiles, los autores desglosan la desigualdad de ingresos en: 1) una parte atribuida a circunstancias que escapan del control de un individuo, y 2) una parte generada por el esfuerzo, el talento y la suerte. Cuanto menor sea la fracción de la desigualdad de ingresos que se explica por factores 28 Gráfico 19. Las oportunidades de Julia y Thiago difieren desde su inicio 100 80 Probabilidad de Acceso 60 40 20 0 2001 2012 2001 2012 2001 2012 2001 2012 2001 2012 2001 2012 2001 2012 2001 2012 Saneamiento Agua Matrícula escolar Finaliz. oportuna sexto grado Thiago Julia Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). El acceso a agua corriente y saneamiento se calculó con versiones no armonizadas de las encuestas de hogares (vea las de niciones en el Cuadro 6). pueden tener también consecuencias macroeconómicas. Las oportunidades básicas en la infancia, como acceso a la educación de calidad, nutrición, saneamiento y agua corriente son esenciales para la formación del capital humano, el cual a su vez es un ingrediente esencial para la innovación y el crecimiento sostenible a nivel nacional. Esta sección utiliza una tasa de cobertura ajustada por la desigualdad conocida como Índice de Oportuni- dades Humanas (IOH) para examinar la evolución del acceso a oportunidades en América Latina en la últi- ma década.44 El IOH mide cómo circunstancias específicas (por ejemplo, lugar de residencia, género y la educación del jefe de familia) pueden afectar el acceso de un niño a bienes y servicios básicos como educación, agua potable, electricidad y saneamiento. La cobertura se penaliza por el nivel de desigualdad, razón por la cual se requieren dos elementos para calcularla: 1) la tasa de cobertura, que es el porcentaje de niños con acceso a una oportuni- dad determinada, y 2) el índice-D de disimilitud, que mide la desigualdad de acceso en todas las circunstancias.45 Un aumento en el IOH puede estar relacionado, ya sea con un aumento en la cobertura o a una distribución más equitativa de esa oportunidad a través de todas las circunstancias. Por lo general, el índice se calcula con niños de hasta 16 años para eliminar los efectos del esfuerzo y las decisiones individuales y así centrarse en aquellas oportunidades que son esenciales para el desarrollo temprano. El IOH se expresa en una escala de 1 a 100, don- de las cifras más altas reflejan adecuados niveles de igualdad y las más bajas, un acceso deficiente y/o desigual. Ganancias sociales en la balanza Esta sección del informe se centra en las oportunidades agrupadas en tres dimensiones principales: 1) educación, 2) vivienda y 3) tecnología de la información y las comunicaciones (TIC). Se escogió educación y vivienda porque, por lo general, ambas son consideradas como servicios básicos vitales, tienden a ser inclui- das en los índices multidimensionales de la pobreza y han sido analizadas en estudios anteriores. Dado que la calidad de la educación es tan importante, el análisis no sólo examina el acceso, sino también la igualdad de los resultados relacionados con la calidad. También se incluyó la tecnología de la información y las comunicaciones (TIC), porque se reconoce cada vez más su importancia para conectar a los niños con el conocimiento global y facilitar su integración en la economía de mercado.46,47 El Cuadro 6 presenta una explicación más detallada del conjunto de oportunidades seleccionado para este estudio. que la persona no puede modificar, mayor será la igualdad de oportunidades de un país. Las circunstancias consideradas son: género, raza o etnicidad, lugar de nacimiento, nivel educacional de la madre, nivel educacional del padre y la principal ocupación de éste. 44  Barros y coautores (2009) crearon el índice, que es una adaptación de la función de bienestar sugerida por Sen (1976). 45  Ver una explicación más detallada del IOH y el índice-D de disimilitud en el Anexo 8. 46  Ver, por ejemplo, Beuermann, McKelvey y Vakis (2012). 47  La mayoría de los indicadores de esta sección se calcularon mediante el método usado en dos informes regionales previos sobre el IOH (Barros y coautores, 2009; Molinas y coautores, 2012) y pueden no coincidir con otros informes específicos de países, como los de Escobal y coautores (2012) para Perú; y Banco Mundial (2011) para Bolivia. 29 Cuadro 6: Las oportunidades seleccionadas para calcular el IOH48 Aunque en la vida de un niño inciden numerosas oportunidades, en muchos países no siempre se dispone de datos sobre todas ellas. Debido a esta limitación, el Índice de Oportunidades Humanas (IOH) se enfoca en ocho oportunidades agrupadas en tres dimensiones. El acceso a todas es fundamental para que los niños lleven una vida adulta plena. Todos los indicadores (excepto aquellos que se sustentan en puntuaciones de PISA) se calculan según encuestas de hogares (vea una descripción de estos conjuntos de datos en los Anexos 1 y 2). Dimensión 1: Educación: Aunque el acceso a la educación abre muchas oportunidades en el futuro, es importante considerar no sólo la asistencia del niño a la escuela, sino además que la educación que reciba sea de buena calidad para que desarrolle las destrezas que requiere. a. Matrícula escolar: esta oportunidad examina la tasa de asistencia escolar de niños entre 10 y 14 años. El indicador mide si los niños tienen acceso equitativo a la enseñanza. b. Finalización del sexto grado a tiempo: para captar la calidad de la educación, se mide la finalización del sexto grado en un plazo oportuno. Si bien esto no captura completamente la calidad, indica que los niños asisten a escuelas de buena calidad que les impiden repetir grados. Sin embargo, es complejo hacer comparaciones entre países debido al sistema de promoción automática, limitación que probablemente se supere con el indicador de matrícula escolar (y la puntuación de PISA a continuación). c. Puntuaciones de PISA: el IOH para puntuaciones en pruebas captura el acceso equitativo a educación de buena calidad. Las puntuaciones logradas en las pruebas de lectura, matemáticas y ciencia se obtienen del Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés) de la OCDE.49 Las circunstancias, los métodos de muestreo y los países (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Panamá, Perú y Uruguay) incluidos en este programa difieren de los utilizados en el resto de los indicadores que se incluyen en otras puntuaciones de IOH. Por esta razón, los resultados basados en los datos de PISA en estricto rigor no son comparables con los resultados de encuestas de hogares. El IOH para el programa PISA que se presenta en este informe se basa en la igualdad en todas las circunstancias que permiten a los estudiantes de cada uno de los países lograr una puntuación de 2. Este nivel es considerado la destreza básica necesaria para usar el contenido de las asignaturas en situaciones de la vida real. Este IOH facilita la comparación más directa de la calidad de las escuelas entre países. Dimensión 2: Vivienda (niños de hasta 16 años): d. Electricidad: acceder a electricidad potencia enormemente la calidad de vida de un niño pues mejora la salud y el bienestar general e incrementa su acercamiento a otras oportunidades, como el estudio de noche y el acceso a Internet. e. Agua: el acceso a agua por tubería mejora drásticamente la salud en la infancia ya que mejora la higiene y evita Ganancias sociales en la balanza que los niños tengan que ir a recoger agua, una actividad ardua que demanda mucho tiempo. f. Saneamiento: el acceso a un sistema de saneamiento mejora mucho la higiene y reduce la incidencia de enfermedades contagiosas. En vista de las limitaciones de datos, se utiliza la forma más sencilla de todas estas oportunidades para velar por la comparabilidad entre países. Se considera que un hogar tiene acceso a energía eléctrica cuando informa tener electricidad, cualquiera que sea la fuente. De la misma forma, se estima que una vivienda tiene acceso a saneamiento si cuenta con un inodoro dentro de la propiedad conectado a cualquier sistema de eliminación de desechos. Por último, se asume que un grupo familiar tiene acceso a agua solamente si tiene agua por tubería al interior de la vivienda. Dimensión 3: Tecnologías de la información y las comunicaciones (niños de hasta 16 años): Aunque no se ha incluido en los informes regionales anteriores sobre el IOH, muchas sociedades consideran fundamental el acceso a servicios telefónicos y a Internet porque permite acceder a otros servicios y participar en el sistema productivo.50 Por consiguiente, en este informe se calcula el IOH para el acceso a Internet en la vivienda y para el acceso a un teléfono móvil en el hogar. 48 49 50 Ver Molinas y coautores (2012) para una explicación más detallada de estas oportunidades y circunstancias. 48  Este cuadro se basa en gran medida en Molinas y coautores (2012). 49  Ver OCDE (2013). 50  Escobal y coautores (2012). 30 Gráfico 20. El acceso al agua corriente es bajo y desigual en los países Andinos y de América Central 100 80 60 40 20 0 El Salvador Brasil Costa Rica Guatemala Argentina Nicaragua Honduras México R. Dominicana Paraguay Ecuador Perú Colombia Chile Uruguay Bolivia IOH Cobertura Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: El grá co muestra el IOH de los países de LAC en 2012 (o en el año más cercano cuando no se disponía de datos para ese año). Vea en el Anexo 8 los detalles metodológicos de este índice. El acceso al agua se calculó con versiones no armonizadas de encuestas de hogares (ver las de niciones en el Cuadro 6). Al igual que con las oportunidades, el conjunto de circunstancias utilizado en este informe se eligió sobre la base de la disponibilidad de datos comparables y la utilización de indicadores similares en estudios previos. Las circunstancias incluyen educación y género del jefe de familia, género del niño, número de hermanos, lugar de residencia, ingreso per cápita y el número de padres presentes en el hogar. Aunque el acceso a educación, vivienda y tecnología/conectividad adecuadas se considera fundamental para que los niños se transformen en adultos productivos, dicho acceso todavía es muy desigual y en algunos casos dista mucho de ser universal. • Los índices IOH para el acceso al agua y saneamiento varían mucho entre los países de LAC y en algu- nos, son inferiores al 30% (Gráfico 20 y Anexo 8). El IOH para el agua corriente fluctúa entre el 17% en El Salvador y el 98% en Argentina y, en el caso del saneamiento, entre el 17% en El Salvador y el 99% en Uru- guay. Estas cifras tan bajas son muy preocupantes considerando que el agua y el saneamiento son esenciales para la salud y otras oportunidades importantes durante la infancia, tales como impedir la inasistencia a la escuela debido a ciertas enfermedades que pueden prevenirse. Desde un punto de vista positivo, el acceso Ganancias sociales en la balanza a electricidad está mucho más cerca de tener cobertura universal y en tan sólo tres países presenta un IOH inferior al 80% (Anexo 8). • El acceso a la conectividad se ha expandido muy rápidamente, lo cual sugiere que los servicios de in- formación y comunicación son muy valiosos y relativamente fáciles de obtener. El IOH para el acceso a teléfonos móviles fluctúa entre 47% en Nicaragua y 98% en Chile (Anexo 8), y es de alrededor del 70% o más en la mayoría de los países. Hace una década, el acceso a teléfonos móviles solía ser inferior a 21% (excepto en Costa Rica) y en muchas naciones no superaba el 10%. Por otra parte, el acceso a Internet es incipiente en la región, con un IOH inferior al 40% en todos los países para los que se dispone de información. • El IOH de asistencia escolar (de 10 a 14 años) es alto en la mayoría de los países analizados, lo que su- giere que los niños de todos los grupos de circunstancias generalmente asisten a la escuela. Este IOH fluctúa entre 80% en Nicaragua y 99% en Chile. Para esta oportunidad específica, la tasa de cobertura (los cuadrados celestes del Gráfico 21) es marginalmente superior al índice IOH (barras azules). Este hecho indica que, en todas las circunstancias, la distribución desigual de oportunidades tiene una penalidad baja.51 51  La distancia vertical entre los cuadrados celestes y las barras más oscuras representa la desigualdad en el acceso para las dife- rentes circunstancias (ver una explicación detallada de la penalidad por la desigualdad en el Anexo 8). 31 Gráfico 21. La matrícula escolar es casi universal en LAC (niños de 10 a 14 años) 100 80 60 40 20 0 El Salvador Brasil Guatemala Argentina Nicaragua México Costa Rica R. Dominicana Honduras Colombia Paraguay Ecuador Bolivia Panamá Uruguay Perú Chile IOH Cobertura Fuente: Cálculos de los autores con SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: El grá co muestra el IOH de los países de LAC en 2012 (o en el año más cercano cuando no se disponía de datos para ese año). Ver en el Anexo 8 los detalles metodológicos de este índice. • Si bien el IOH para el acceso a la educación es alto, las brechas que existen en la finalización del sexto grado a tiempo resaltan las importantes preocupaciones de calidad que persisten con respecto a la igualdad en la calidad de estas oportunidades. Como se puede ver en el Gráfico 22, éste índice es superior a 90% solamente en México; mientras que en El Salvador, Colombia, Guatemala, Honduras y Nicaragua es inferior a 60%. Sin embargo, es posible que parte de la variabilidad entre los países apunte más bien a diver- gencias en las políticas sobre estándares académicos y retención de grado, y no a las diferencias en la calidad de la enseñanza. Las puntuaciones del IOH para la finalización del sexto grado a tiempo son relativamente bajas y, además, señalan una penalización a la desigualdad relativamente amplia (brecha entre cobertura e IOH). Esto se debe a que el acabar el sexto grado a tiempo se ve mayormente afectado por las circunstancias de un niño al nacer que por su asistencia a la escuela. La penalización de la desigualdad es especialmente fuerte cuando las tasas de cobertura son bajas, como sucede en los países de América Central y también en Colombia, Brasil y la República Dominicana. El IOH revela los retos que se tienen en la prestación de una educación de calidad para todos los estudian- Ganancias sociales en la balanza tes de LAC, especialmente para los niños en circunstancias desfavorables. El análisis de los resultados del programa PISA de la OCDE (una medida más directa de la calidad de la enseñanza que el acabar el sexto grado a tiempo) destaca la falta de acceso a educación de buena calidad en LAC. Al comparar las puntuaciones logradas en una selección de países de LAC en 2012 con las de los países de la OCDE que no pertenecen a la región de LAC, surgen grandes diferencias entre ambos grupos, en particular en matemáticas y ciencias (Gráfico 23).52 Por ejemplo, el IOH de LAC para las tasas de aprobación en matemáticas fluctuó entre 18% y 42% en 2012, mien- tras que el mismo IOH para una selección de países de la OCDE fue superior a 73%. Además, los países de LAC tuvieron una brecha relativamente grande entre tasas de cobertura y IOH con respecto a los países de la OCDE no ubicados en LAC, lo que significa que la penalización de la desigualdad en el acceso es más alta en LAC para todas las circunstancias. La deficiente calidad de la educación en América Latina repercute fuertemente en el crecimiento de la región. Investigaciones recientes proporcionan pruebas irrefutables sobre el hecho de que los bajos niveles de capital humano en LAC atribuibles a la deficiente calidad de la enseñanza pueden explicar más del 50% de la diferencia de crecimiento entre esta región y el resto del mundo.53 52  La oportunidad de las puntuaciones de los exámenes se basa en saber si un estudiante logra el nivel 2 de competencia, el mínimo requerido en un contexto de la vida real (Molinas y colaboradores, 2012). 53  Hanushek y Woessmann (2012). 32 Gráfico 22. El completar el sexto grado a tiempo es aún bajo y relativamente desigual 100 80 60 40 20 0 El Salvador Brasil Costa Rica Guatemala Argentina Nicaragua Honduras Colombia Paraguay Panamá Uruguay Perú Chile Ecuador México Bolivia R. Dominicana IOH Cobertura Fuente: Cálculos de los autores con SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: El grá co muestra el IOH de los países de LAC en 2012 (o en el año más cercano cuando no se disponía de datos para ese año). Ver en el Anexo 8 los detalles metodológicos de este índice. Las circunstancias al momento de nacer afectan no sólo el acceso a servicios, sino también su calidad. Una medida simple del acceso a bienes y servicios básicos no captura las diferencias en la calidad del acceso, ya que las interrupciones de los servicios públicos pueden afectar más a algunos grupos que a otros. Para abordar este problema, los IOH del Gráfico 24 se calculan usando dos definiciones del acceso a una oportunidad: cualquier tipo de acceso (es decir, tener acceso al agua corriente o electricidad en general, sin importar la calidad del servicio) y tener acceso permanente (tener agua corriente o electricidad sin haber sufrido más de siete días de suspensión en el último mes). Hay limitaciones en los datos que no permiten medir el acceso a condiciones de vivienda de buena calidad para los países de LAC, con excepción de Guatemala. El gráfico muestra que las medi- das son muy similares cuando se considera la electricidad en Guatemala: la mayoría de las casas con electricidad la tiene a diario. Sin embargo, la situación cambia en cuanto al agua corriente, donde hay una diferencia de 11 puntos porcentuales entre ambas definiciones: aunque el 43% de los hogares tiene servicio de agua corriente, sólo alrededor del 32% disfruta del servicio de manera permanente. El nivel educativo y el de los activos que tengan de los padres influyen bastante en el acceso a la edu- Ganancias sociales en la balanza cación de calidad; esta situación sugiere que aún persisten obstáculos importantes para la movilidad intergeneracional en LAC. La educación, la ocupación y los bienes de los padres son circunstancias que explican la mayor parte de la desigualdad en el acceso de los niños a una educación de buena calidad.54,55 El índice-D permite comprender como una oportunidad, en este caso las puntuaciones en los exámenes, tendría que ser reasignada entre los niños para asegurar que no exista relación entre el rendimiento y las circunstan- cias que enfrentan estos niños al momento de nacer. El Gráfico 25 muestra la gran influencia que ejercen las circunstancias de un niño al nacer en sus puntuaciones en pruebas, ya que sería necesario reasignar entre 15% y 30% de las puntuaciones de aprobación en matemática para evitar cualquier asociación con sus cir- cunstancias. Perú presenta el nivel de desigualdad más elevado y México el más bajo. La descomposición de los índices–D de desigualdad revela que alrededor de tres cuartas partes de las diferencias en las pun- tuaciones de las pruebas de matemática están relacionadas con las circunstancias de los padres (su nivel de educación, de bienes y su ocupación), y el resto con el género y lugar de residencia del niño. La desigualdad 54  Para la construcción de este perfil, se siguió la metodología sugerida por Hoyos y Narayan (2012), la cual se basa en la descom- posición propuesta por Shorrocks (1999). Los índices-D para matrícula escolar y electricidad no se descomponen, ya que son relativa- mente bajos en comparación con el índice-D de las otras cinco oportunidades. 55  Ferreira y coautores (2012). 33 Gráfico 23. La calidad de la educación es considerablemente inferior y mucho más desigual en los países de LAC comparada con la de las economías más desarrolladas (a) IOH para un nivel 2 de competencia en matemáticas 100 80 60 40 20 0 Brasil Argentina Costa Rica Chile Perú Colombia México Uruguay Italia Portugal España Noruega Reino Unido Alemania Canadá Suecia (b) IOH para un nivel 2 de competencia en lectura 100 80 60 40 20 0 Brasil Argentina Chile Costa Rica Perú Colombia Uruguay México Italia España Portugal Noruega Reino Unido Alemania Canadá Suecia (c) IOH para un nivel 2 de competencia en ciencias 100 Ganancias sociales en la balanza 80 60 40 20 0 Brasil Argentina Costa Rica Chile Perú Colombia México Uruguay Italia Noruega Portugal España Reino Unido Alemania Canadá Suecia IOH Cobertura Fuente: Cálculos de los autores con datos de PISA de 2012 (OCDE). Nota: Ver los detalles metodológicos de este índice en el Anexo 8. 34 Gráfico 24. En Guatemala, las interrupciones de los servicios pueden afectar más a algunos grupos que a otros 80 70 60 50 40 30 20 10 0 Electricidad Agua Calidad Acceso Fuente: Cálculos con la ayuda de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: El grá co muestra el IOH de Guatemala en 2011. Vea los detalles metodológicos sobre el IOH en el Anexo 8. La de nición del acceso a agua potable di ere de la usada en SEDLAC (vea la de nición de esta variable en el Cuadro 6). Este grá co mide el IOH de dos formas: Por “Acceso” se entiende haber tenido agua potable o electricidad al menos un día durante el último mes, mientras que por “Calidad” se entiende que el hogar tuvo agua potable o electricidad con una interrupción no mayor a siete días durante el último mes. Gráfico 25. Las posibilidades de un niño de tener buen rendimiento en la escuela dependen de los resultados de los padres (descomposición del índice–D de las puntuaciones para una competencia de nivel 2 en matemática) 35 30 25 20 15 10 5 0 México Chile Uruguay Argentina Costa Rica Brasil Colombia Perú Educación de los padres Ocupación del padre Género Región Bienes en el hogar Fuente: Datos de las pruebas PISA de 2012 (OCDE). Nota: El grá co muestra la descomposición del índice–D para los países de LAC en 2012. Vea los detalles metodológicos de las estimaciones del IOH en el Anexo 8. Ganancias sociales en la balanza en el acceso a enseñanza de calidad basada en la educación y ocupación de los padres está asociada con la baja movilidad intergeneracional y resalta la necesidad de romper con dicha trampa a través de la expansión de inversiones en educación de calidad. Las oportunidades de vivir en un hogar con acceso a agua corriente parecen estar muy correlaciona- das con la residencia en zonas urbanas o rurales. Un niño que vive en un hogar rural tiene mucho menos probabilidades de tener acceso a agua corriente, especialmente en los países de América Central (salvo Costa Rica), los países Andinos y Paraguay, República Dominicana y México. Sin embargo, la educación de los padres y el ingreso per cápita también son factores importantes que inciden en que un niño viva o no en un hogar con agua. Las diferencias rurales/urbanas en infraestructura básica, como el acceso al agua corriente (Gráfico 26) y saneamiento adecuado (Anexo 9), subrayan la necesidad de dirigir los programas de infraestructura en las regiones rurales y fortalecer la capacidad de los gobiernos locales en estas áreas para proveer servicios de calidad. 35 Gráfico 26. El lugar de residencia, la educación de los padres y el ingreso per cápita influyen en las posibilidades de un niño de tener servicio de agua corriente en su hogar 0,45 0,40 0,35 0,30 0,25 0,20 0,15 0,10 0,05 0,00 Brasil El Salvador Argentina Costa Rica Guatemala Chile Honduras Nicaragua Uruguay Colombia Perú Paraguay México Ecuador Bolivia R. Dominicana Educación de los padres Género Género jefe del hogar Ingreso per cápita Urbano o Rural Presencia de ambos padres Número de hermanos Fuente: Cálculos realizados con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: El grá co muestra la descomposición del índice–D para países de LAC en 2012 o el año más cercano en caso que los datos de ese año no estuvieran disponibles. Ver los detalles metodológicos de la medición del índice IOH en el Anexo 8. La de nición de acceso al agua potable di ere de la usada en SEDLAC (vea la de nición de estas variables en el Cuadro 6). Evolución de las oportunidades en LAC desde el 2000 Entre 2000 y 2012, muchos países de LAC lograron avanzar considerablemente en la ampliación del acce- so a bienes y servicios básicos. Hubo algunas mejoras importantes en el acceso a las oportunidades esenciales para los niños de LAC en los últimos 12 años, particularmente en la terminación del sexto grado a tiempo y en el acceso a electricidad (Gráficos 27a y 27b). En general, los países que inicialmente reportaban los niveles más bajos de oportunidades se destacaron por tener las tasas de crecimiento más altas. La oportunidad que mostró mayor dinamismo fue el acceso a teléfonos móviles; su IOH se incrementó drásticamente en casi todos los países de LAC en ese período, partiendo de niveles bajos (menos de 31%) en casi todos los países de la región para los cuales había datos disponibles (Gráfico 27c). Ganancias sociales en la balanza Con el fin de lograr la igualdad de oportunidades desde la infancia se requiere de varios años de inver- sión pública en infraestructura social y física. Por ejemplo, a Brasil le tomó más de 30 años aumentar su IOH de matrícula escolar de 72 en 1981 a 98 en 2012 (Gráfico 28). Al mismo tiempo, el IOH de finalización del sexto grado a tiempo ascendió en casi 46 puntos desde 2003, pero su actual nivel de 62 todavía es muy inferior al IOH de la matrícula escolar. Los gobiernos enfrentan crecientes costos marginales mientras más cerca están de lograr el acceso uni- versal. El Gráfico 28 muestra la desaceleración en el crecimiento de la matrícula escolar y de acceso a electri- cidad en Brasil, a medida que los IOH para cada una de estas oportunidades se acercan a 100. Probablemente, esto se deba a que proveer acceso a los segmentos más desfavorecidos y de más difícil alcance de la sociedad suele requerir altos niveles de recursos, dado los altos costos fiscales que se necesitan para alcanzar a estos grupos. Sin embargo, debido a la fuerte correlación entre los resultados socioeconómicos de los padres y los de sus hijos, es justamente este grupo el que necesita mayor acceso a oportunidades para escapar de las trampas intergeneracionales de la pobreza. 36 Gráfico 27. A pesar de los avances, todavía existen diferencias marcadas en el acceso a oportunidades entre los países de LAC (a) Finalización del sexto grado a tiempo 100 90 MEX ARG PER ECU CHL 80 URY CRI PAN 70 BOL DOM BRA IOH Circa 2012 60 HND GTM NIC 50 SLV 40 30 20 10 0 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 IOH Circa 2000 (b) Electricidad DOM BRA CHLURY 100 PRY MEX CRI 90 SLV ECU BOL 80 PER GTM 70 HND IOH Circa 2012 60 NIC 50 40 30 20 10 0 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 IOH Circa 2000 (c) Teléfonos móviles 100 CHL Ganancias sociales en la balanza CRI 90 SLV PRY BRA 80 PER 70 IOH Circa 2012 60 50 NIC 40 30 20 10 0 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 IOH Circa 2000 Fuente: Cálculos realizados con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: El grá co muestra el IOH de los países de LAC de 2000 y 2012, o del año más cercano en caso que no hubiera datos para esos años. Ver los detalles metodológicos en el Anexo 8. 37 Gráfico 28. Evolución de las oportunidades seleccionadas en Brasil a largo plazo, 1981 a 2012 100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0 1981 1990 2001 2012 Finalización del sexto grado a tiempo Electricidad Matrícula escolar Saneamiento Agua Fuente: Cálculos realizados con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: vea los detalles metodológicos del IOH en el anexo 8. La de nición de acceso al agua potable y saneamiento di ere de la usada en CEDLAS y Banco Mundial (vea la de nición de estas variables en el recuadro 6). Gráfico 29. Persisten grandes diferencias en el acceso al agua corriente entre los estados de Brasil Rio Grande do Sul 100 90 Brasil Argentina 80 70 IOH Circa 2012 60 Maranhão 50 40 30 20 El Salvador 10 0 0 20 40 60 80 100 IOH Circa 2000 Fuente: Cálculos realizados con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: vea los detalles metodológicos del IOH en el anexo 8. La de nición de acceso al agua potable di ere de la usada en CEDLAS y Banco Mundial (vea la de nición de estas variables en el recuadro 6). Existen diferencias importantes al interior de los países cuando se trata de asegurar las mismas posibili- Ganancias sociales en la balanza dades para todos los niños. En Brasil, por ejemplo, el estado más pobre, Maranhão, tiene un IOH de acceso al agua corriente de 59% (Gráfico 29). En cambio, el IOH de Río Grande do Sul es de 99%, más alto que el promedio nacional e incluso más que el IOH de Argentina, el país de LAC con el mejor desempeño en esta materia. Sin em- bargo, aun cuando todavía existen diferencias muy grandes entre los estados de Brasil, hubo avances notables en el acceso a esta variable entre 2000 y 2012. Si los países de LAC siguen teniendo el mismo desempeño en cuanto a expandir las oportunidades bá- sicas al ritmo de los últimos 12 años, es probable que muchos alcancen cobertura universal en 2030 y algunos incluso antes. Seis de los 16 países han incrementado el IOH de finalización de sexto grado a tiempo a un ritmo mayor que el necesario para lograr universalidad en 2030 (Anexo 10), asumiendo que las tasas de creci- miento del IOH se mantengan constantes. No obstante, es posible que esta proyección sea demasiado optimista en vista del aumento de los costos marginales a medida que los países se acercan a la meta de universalidad. La situación es incluso mejor en cuanto al acceso al agua potable (con nueve de 15) y el saneamiento (con 10 de 15). Sin embargo, las perspectivas son menos prometedoras para muchos países de América Central, los cuales deben crecer a un ritmo aún más rápido para cumplir este objetivo. Se trata de una situación muy preocupante ya que en la actualidad estos países tienen niveles de IOH excepcionalmente bajos y las oportunidades son alta- mente desiguales para los niños en esta región. 38 Conclusión L AC mostró un buen desempeño en la mitigación de la pobreza en los últimos años. En efecto, la pobreza extrema (US$2.50 per cápita al día) se redujo a la mitad entre 2003 y 2012, al tiempo que la clase media ha seguido aumentando hasta superar al grupo que vive en condiciones de pobreza con menos de US$4 diarios. Asimismo, los ingresos del 40% de la población situado en el segmento inferior de la distribución (el in- dicador del Banco Mundial para Prosperidad Compartida) han aumentado de manera considerable, incluso más que el nivel general de la región. Sin embargo, perspectivas de crecimiento económico moderadas y el reciente estancamiento en la reducción de la desigualdad de ingresos plantean desafíos para la continuidad de las ten- dencias actuales. Se proyecta que el PIB per cápita crecerá 1.7% en el período 2013-2015, comparado con 2.5% en 2003-2012, en tanto que la desigualdad ha frenado su tendencia a la baja en 2011 y 2012. Suponiendo que estas tendencias continúen, podrían reducir la tasa anual de reducción de la pobreza de 5 puntos porcentuales aproximados entre 2003 y 2012, a 3.1 puntos porcentuales en los próximos dos años (2013-2014). Ganancias sociales en la balanza A medida que las tendencias mundiales favorables se desvanecen y la disminución de la desigualdad es incierta, es necesario que la región preste más atención a la recuperación de sus altas tasas de crecimiento y asegure su inclusión. Para este fin, las políticas que se utilicen no sólo deben promover el crecimiento, sino también deben fortalecer la equidad y acelerar la reducción de la pobreza y la movilidad ascendente a través de una mayor igualdad oportunidades. La combinación de mayor crecimiento con más igualdad puede servir también para que la región mantenga la solidez de su desempeño económico a largo plazo.56 Los estudios de CEQ que se presentan en este informe sugieren que la política fiscal continúa siendo un instru- mento sub-utilizado para promover mayor equidad en LAC. Los bajos niveles de recaudación fiscal en algunos países, junto con la alta dependencia de impuestos a las ventas y al valor agregado, limitan el potencial de la política fiscal de ayudar a distribuir el ingreso de manera más equitativa y financiar adecuadamente la presta- ción de servicios básicos. 56  Ravallion (2004). 39 En respuesta al aumento en las inversiones requeridas para la prestación de servicios, las tasas de cobertura ajustadas por la igualdad (IOH) registran logros importantes en la expansión de las oportunidades en educación básica, vivienda y conectividad. No obstante, también revelan problemas importantes en materia de calidad y la fuerte incidencia de las circunstancias familiares en determinar la oportunidad de un niño de acceder a educación de calidad y a servicios básicos. A largo plazo, un acceso más equitativo a oportunidades básicas en la infancia puede facilitar el crecimiento y acelerar la reducción de la pobreza en LAC toda vez que aumenta el capital humano y la innovación. Si la región pretende mantener el impulso económico y social de la última década, gracias a lo cual pudo resistir la crisis financiera de 2009, no es suficiente con sólo mantener el patrón actual. A medida que la clase media en crecimiento de la región demanda más y mejores servicios y algunas de las desigualdades profundamente arrai- gadas en la región se tornan más críticas, tanto para los ciudadanos como para las autoridades, es el momento oportuno para implementar políticas fiscales más dinámicas y realizar esfuerzos para mejorar no sólo el acceso, sino también la calidad de los servicios básicos para los niños de todos los orígenes. Ganancias sociales en la balanza 40 Anexo 1. Bases de datos armonizadas en LAC y estimación de cifras regionales de pobreza y desigualdad Con el fin de monitorear las tendencias en la pobreza, la desigualdad y el desempleo de la región, es importante contar con datos estadísticos confiables, transparentes, comparables y disponibles de manera oportuna. Desde 1996, la Unidad de Pobreza y Género (LCSPP, por sus siglas en inglés) de la región de LAC del Banco Mundial ha invertido en estadísticas, proporcionando apoyo a los gobiernos de la región para la mejora de la calidad de sus respectivas bases de datos. La culminación de este importante esfuerzo es la colaboración con el Centro de Estudios Distributivos Laborales y Sociales (CEDLAS) de la Universidad de La Plata, Argentina, con el fin de mantener la Base de Datos Socioeco- nómica para LAC (SEDLAC, por sus siglas en inglés: http://sedlac.econo.unlp.edu.ar/eng/). Este proyecto permite acceder de manera oportuna las bases de datos armonizadas y de alta calidad sobre estadísticas socioeconómi- cas y del mercado laboral, las cuales abarcan más de 300 encuestas. Este informe utiliza los datos armonizados de SEDLAC para ofrecer una evaluación más precisa y comparable acerca de las tendencias de la pobreza y del mercado laboral en la región. Los cálculos estimados para la tasas de pobreza de LAC se basan en microdatos de 17 países para los cuales se disponían de datos para los años 2000. Estos países son Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Perú, Paraguay y Uruguay. Las tasas regionales de pobreza son promedios ponderados por la población de tasas de pobreza propias de cada país basadas en líneas internacionales de pobreza. En la medida de lo posible, las tasas de pobreza anuales se han calculado utilizando encuestas anuales a los hogares de 2000 a 2012. No obstante, muchos países care- cen de este tipo de encuestas para algunos años. Para superar este obstáculo, se estimaron las tasas regionales generando encuestas artificiales, para las cuales se utilizó información macroeconómica sobre las tasas de creci- miento del consumo privado de los Indicadores del Desarrollo Mundial del Banco Mundial. Debido a que no satisface la propiedad de la descomposición por grupos, el coeficiente de Gini de la región no puede calcularse como el promedio ponderado por la población de los coeficientes de Gini para cada país. En su lugar, este coeficiente regional se calculó sobre la base de datos agrupados por países específicos previamente Ganancias sociales en la balanza colapsados en 4000 percentiles. 41 Anexo 2. Encuestas de hogares usadas para el análisis del índice IOH a partir de la armonización de CEDLAS Tabla A.1. Household surveys used from SEDLAC harmonization for the HOI analysis País Nombre de la encuesta Sigla Alrede- Alrede- Cobertura dor de dor de 2000 2012 Argentina Encuesta Permanente de Hogares- Continua EPH-C 2004 2012 Urbana -31 ciudades Bolivia Encuesta Continua de Hogares- MECOVI ECH 2002 2012 Nacional Brasil Pesquisa Nacional por Amostra de Domicilios PNAD 2001 2012 Nacional Chile Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional CASEN 2000 2011 Nacional Colombia Gran Encuesta Integrada de Hogares GEIH 2012 Nacional Costa Rica Encuesta Nacional de Hogares ENAHO 2004 2012 Nacional Rep. Dominicana Encuesta Nacional de Fuerza de Trabajo ENFT 2000 2012 Nacional Ecuador Encuesta de Empleo, Desempleo, y Subempleo ENEMDU 2003 2012 Nacional El Salvador Encuesta de Hogares de Propósitos Mútiples EHPM 2000 2012 Nacional Guatemala Encuesta Nacional de Condiciones de Vida ENCOVI 2000 2011 Nacional Honduras Encuesta Permanente de Hogares de Propósitos Mútiples EPHPM 2001 2011 Nacional México Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares ENIGH 2000 2012 Nacional Nicaragua Encuesta Nacional de Hogares Sobre Medición de Niveles de Vida EMNV 2001 2009 Nacional Panamá Encuesta de Hogares EH 2000 2012 Nacional Paraguay Encuesta Permanente de Hogares EPH 2001 2011 Nacional Perú Encuesta Nacional de Hogares ENAHO 2000 2012 Nacional Ganancias sociales en la balanza Uruguay Encuesta Continua de Hogares ECH 2000 2012 Urbana - Montevideo e interior >5000 habitantes 42 Anexo 3. Tasas de pobreza y coeficientes de Gini por país, 2007-2012 Tabla A.2. Pobreza extrema (US$2.50 al día) y pobreza total (US$4 al día) por país, 2007-2012 Pobreza extrema Pobreza total 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Argentina 8,8 8,2 8,0 6,1 4,6 4,7 19,5 17,3 16,3 14,1 11,6 10,8 Bolivia 30,8 22,8 20,6 16,2 17,0 47,8 40,4 35,0 29,2 29,5 Brasil 18,1 15,6 14,9 12,6 10,4 31,8 29,1 27,4 24,5 21,5 Chile 4,1 2,9 11,6 9,9 Colombia 25,0 22,3 19,7 17,0 17,5 42,3 40,1 36,8 33,1 32,9 Costa Rica 4,5 5,1 4,7 12,7 13,0 12,2 Rep. Dominicana 17,9 18,4 16,4 16,1 14,0 14,6 36,4 37,9 34,7 35,1 33,3 33,3 Ecuador 19,8 19,3 18,9 15,9 13,6 12,9 38,1 36,8 37,1 33,4 29,5 27,8 El Salvador 15,2 20,2 19,0 19,7 16,5 14,7 35,7 41,0 39,2 39,3 37,8 34,8 Guatemala 41,1 63,1 Honduras 37,0 34,0 31,3 34,0 37,4 56,0 52,1 50,0 53,3 56,4 México 13,2 12,5 11,4 27,9 28,0 27,6 Nicaragua 29,3 52,3 Panamá 18,3 16,7 12,3 13,2 11,6 11,8 32,2 28,8 25,3 24,0 21,2 20,9 Paraguay 19,7 17,3 18,1 16,3 14,4 38,7 35,7 33,0 30,7 27,7 Perú 21,8 18,0 15,4 13,4 12,7 11,6 38,1 34,2 30,8 27,7 25,8 23,3 Uruguay 6,2 4,1 3,5 2,8 2,6 2,6 18,4 13,8 11,9 10,7 8,6 8,3 Ganancias sociales en la balanza Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). 43 Tabla A.3. Coeficientes de Gini por país, 2007-2012 2007 2008 2009 2010 2011 2012 Argentina 0,474 0,463 0,452 0,445 0,436 0,425 Bolivia 0,554 0,514 0,497 0,463 0,466 Brasil 0,559 0,550 0,545 0,536 0,531 Chile 0,520 0,508 Colombia 0,558 0,555 0,551 0,537 0,535 Costa Rica 0,481 0,486 0,486 República Dominicana 0,487 0,490 0,489 0,472 0,474 0,457 Ecuador 0,543 0,506 0,493 0,493 0,462 0,466 El Salvador 0,452 0,466 0,459 0,445 0,424 0,418 Guatemala 0,538 Honduras 0,562 0,557 0,516 0,534 0,574 México 0,506 0,478 0,494 Nicaragua 0,458 Panamá 0,533 0,527 0,520 0,519 0,518 0,519 Paraguay 0,521 0,510 0,497 0,518 0,526 Perú 0,497 0,471 0,463 0,451 0,457 0,453 Uruguay 0,479 0,465 0,465 0,455 0,437 0,415 Ganancias sociales en la balanza Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). 44 Anexo 4. Descomposición de Datt-Ravallion de los cambios en la pobreza total por subregiones Gráfico A.1. El crecimiento fue la principal fuente de reducción de la pobreza en la región Andina y en el Cono Sur Fracción del cambio en la incidencia en puntos porcentuales 0.0 -0.1 -0.2 -0,17 -0.3 -0.4 -0,36 -0.5 -0,47 -0.6 -0,53 -0.7 -0,64 -0.8 -0,83 -0.9 Región Andina México y América Central Cono Sur Crecimiento Redistribución Fuente: Cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: Los cálculos estimados de la pobreza a nivel subregional son promedios ponderados por población de tasas de pobreza especí cas por país. El grá co muestra la descomposición de Datt-Ravalion (Datt y Ravallion, 1992) de los cambios en la pobreza por subregiones. Ganancias sociales en la balanza 45 Anexo 5. Perfiles del 40% inferior y el 60% superior de la distribución de ingresos Tabla A.4. Características promedio del 40% inferior de la distribución de ingresos en 2012 40% inferior 60% superior Total Hogar Ingreso per cápita diario del hogar ($) 3,3 19,8 14,5 Residencia en zona urbana (%) 66,3 87,6 80,8 Edad del jefe/a de hogar 45,3 50,1 48,5 Años de educación del jefe del hogar 5,8 8,9 7,9 Tamaño del hogar 4,1 3,0 3,4 Fuerza de trabajo Tasa de participación laboral de las mujeres (25-65) (%) 45,5 63,7 57,2 Empleado (%) 46,8 68,3 61,8 Trabajador no remunerado (%) 11,6 3,3 5,8 Desempleado (%) 10,1 4,1 5,9 Trabajador independiente (%) 27,7 19,1 21,7 Empleador (%) 3,8 5,2 4,8 Sector del empleo Sector público (%) 4,1 13,9 11,2 Sector privado (%) 95,9 86,1 88,8 Sector primario (%) 33,5 8,7 15,9 Ganancias sociales en la balanza Servicio doméstico (%) 6,8 4,8 5,4 Comercio minorista (%) 23,0 26,3 25,4 Servicios (%) 12,1 31,3 25,8 Servicios públicos (%) 4,7 7,0 6,3 Construcción (%) 8,4 7,7 7,9 Manufactura (%) 11,5 14,0 13,3 Fuente: cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: el cuadro muestra el perfil del 40% inferior de la distribución de ingresos de los países de LAC en 2012 o en el año más cercano en caso de no disponer de datos de ese año. 46 Anexo 6. Compromiso con la equidad El proyecto Compromiso con la equidad (CEQ) es una iniciativa conjunta entre el Centro Interamericano de Política e Investigación (CIPR) y el Departamento de Economía de la Universidad de Tulane y el Inter-American Dialogue. Dirigido por Nora Lustig y Peter Hakim, el CEQ busca analizar el impacto de la política fiscal pública sobre la pobreza y la desigualdad en varios países. Si bien este informe incluye solamente datos de seis países de LAC, el proyecto está realizando investigaciones en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecua- dor, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Paraguay, Perú, Estados Unidos, Uruguay y Venezuela. Recurriendo a datos de encuestas de hogares y cuentas nacionales,57 el CEQ examina el impacto de la política fiscal en la pobreza y la desigualdad mediante la imputación o el cálculo del efecto que ha tenido la intervención gubernamental en los ingresos de los hogares.58 Esto se estudia en los cinco conceptos singulares del ingreso que capturan los diferentes tipos de intervenciones públicas. Estos conceptos son ingreso de mercado, ingreso neto de mercado, ingreso disponible, ingreso post-fiscal e ingreso final (vea las definiciones de cada concepto de ingreso en el recuadro 3). Si bien se siguen metodologías similares, las diferentes realidades políticas y económicas y la disponibilidad de datos en cada caso crean algunas diferencias en los resultados. El grado en que el ingreso se vea afectado por los impuestos indirectos depende del nivel de informalidad del país que se está examinando. En vista de la diversi- dad de situaciones, se utilizaron supuestos distintos para calcular el efecto de tales tributos en cada país. Estos supuestos posiblemente hayan llevado a una sobrestimación de la regresividad de los impuestos indirectos en Brasil y Uruguay, y a una subestimación en México y Perú. Una limitación adicional de la metodología del CEQ es la forma en que determina las transferencias en especie. Debido a la dificultad de calcular el beneficio exacto que deriva cada hogar específico de la transferencia, el pro- yecto CEQ atribuye el beneficio de los hogares receptores de manera uniforme sobre la base del gasto público indicado en las cuentas nacionales. Por ejemplo, el gasto nacional promedio por estudiante en educación (por tipo de educación) se aplica de manera uniforme a los hogares por cada niño matriculado en la educación públi- ca. Sin embargo, esto no captura las diferencias entre regiones o en la calidad de estos servicios. El proyecto CEQ no tiene en cuenta la inversión y el gasto público en infraestructura que repercute considerable- Ganancias sociales en la balanza mente en la calidad de vida y en las oportunidades laborales, como caminos, proyectos de agua y electricidad. Debido a esta omisión, es posible que se subestime la progresividad de la política fiscal pública. Por otra parte, el análisis del CEQ es estático y por este motivo no examina los beneficios a largo plazo de invertir en educación, atención de salud y otros tipos de infraestructura. Para más información sobre el proyecto CEQ, visite: www.commitmenttoequity.org. 57  Se usaron las siguientes encuestas de hogares: Argentina, Encuesta Permanente de Hogares, 1er semestre de 2009; Bolivia, En- cuesta de Hogares, 2009; Brasil, Pesquisa de Orçamentos Familiares, 2008-2009; Colombia, Encuesta Nacional de Condiciones de Vida para 2010; México, Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares, 2008; Perú, Encuesta Nacional de Hogares, 2009; y Uruguay, Encuesta Continua de Hogares, 2009. Los datos sobre los ingresos y gastos públicos provienen de las cuentas nacionales de cada país. 58  El método usado para calcular el impacto en los hogares varía por país en función de los datos disponibles. Vea Lustig, Pessino y Scott (2014). 47 Anexo 7. Resultados de la iniciativa Compromiso con la Equidad Tabla A.5. Efectos de la política fiscal gubernamental en la desigualdad País Ingreso de mercado Ingreso neto de mercado Ingreso disponible Ingreso post-fiscal Ingreso final Argentina 0,489 0,447 Bolivia 0,503 0,503 0,493 0,503 0,446 Brasil 0,579 0,565 0,544 0,546 0,439 México 0,511 0,497 0,488 0,481 0,429 Perú 0,504 0,498 0,494 0,492 0,466 Uruguay 0,492 0,478 0,457 0,459 0,393 Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). Nótese que no hay información tributaria disponible para el estudio del CEQ sobre Argentina. ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Inter- American Dialogue. Tabla A.6. Coeficientes de concentración Argentina Bolivia Brasil México Perú Uruguay Impuestos Coeficiente de Kakwani -0,132 0,016 0,111 0,080 0,068 CCT estrella Coeficiente de concentración -0,513 -0,254 -0,578 -0,536 -0,651 -0,611 Educación Coeficiente de concentración -0,167 -0,0184 -0,154 -0,087 -0,170 -0,110 Salud Coeficiente de concentración -0,37 -0,0447 -0,119 0,036 0,180 -0,103 Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). ©El Compendio de indicadores de Ganancias sociales en la balanza CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Inter-American Dialogue. 48 Tabla A.7. Incidencia del gasto público en el 40% inferior de la distribución de ingresos como porcentaje de gasto total por categoría de gasto Concepto Decil Argentina Bolivia Brasil México Perú Uruguay 1 2,3 1,1 0,6 0,7 1,5 2 3,8 1,8 1,1 1,3 2,1 Impuestos 3 5,1 2,5 1,9 2,3 2,8 4 6,4 3,3 2,5 3,5 3,6 40% inferior 17,7 8,7 6,2 7,8 10,0 1 28,2 15,8 31,9 32,8 41,2 37,6 2 25,6 14,8 25,4 20,5 25,1 26,1 CCT (programa 3 15,0 13,7 17,6 16,5 16,4 14,7 insignia) 4 10,8 13,6 10,9 11,1 8,1 8,7 40% inferior 79,7 57,9 85,7 80,9 90,7 87,1 1 12,8 10,0 15,7 11,5 13,8 14,4 2 15,0 9,9 13,4 11,2 12,9 12,5 Educación 3 12,8 10,1 12,0 11,4 12,8 11,1 4 11,7 10,6 11,0 11,1 12,1 10,3 40% inferior 52,4 40,6 52,1 45,1 51,6 48,2 1 20,4 9,6 10,5 9,1 5,7 12,4 2 20,3 10,3 11,3 9,3 6,2 12,0 Ganancias sociales en la balanza Salud 3 15,2 13,8 11,6 9,5 6,9 11,7 4 12,2 10,0 12,2 9,7 8,3 11,1 40% inferior 68,1 43,6 45,6 37,5 27,1 47,2 Fuente: Lustig y Pessino (2014), Paz Arauco y coautores (2014), Higgins y Pereira (2014), Scott (2014), Jaramillo (2014), Bucheli y coautores (2014). Nótese que no hay información tributaria disponible para el estudio del CEQ sobre Argentina. Los programas insignia de las CCT incluidos en los análisis son: 1) en Argentina: Asignación Universal por Hijo, Jefes y Jefas de Hogar Desocupados, Programa Familias para la Inclusión Social, y Programa Nacional de Becas Estudiantiles; 2) en Bolivia: Bono Juancito Pinto y Bono Juana Azurduy; 3) en Brasil: Bolsa Família; (4) en México: Oportunidades; (5) en Perú: Juntos; y (6) en Uruguay: AFAM - Asignaciones Familiares (Plan de Equidad). ©El Compendio de indicadores de CEQ que se presenta aquí es propiedad del Fondo Educacional Tulane y el Inter-American Dialogue. 49 Anexo 8. El Índice de Oportunidades Humanas59 59 El Índice de Oportunidades Humanas (IOH) fue creado por Barros y colaboradores (2009). Empíricamente, este índice considera dos conceptos: la cobertura promedio de un bien o servicio básico y la desigualdad en la distri- bución de ese bien o servicio en las distintas circunstancias. Para lograrlo, el IOH descuenta de la tasa de cobertu- ra total (C) con una penalidad (P) asociada a la desigualdad en el suministro de las oportunidades consideradas. (A.1) La cobertura C representa el porcentaje de miembros que tienen acceso al bien o servicio examinado, mientras que la penalidad P representa la desigualdad en el suministro de esa oportunidad. Es decir, el índice IOH mide el porcentaje de miembros que tienen acceso a determinados bienes y servicios y penaliza la medida por el grado de desigualdad en el acceso a esas oportunidades. La penalidad se escoge de manera tal que es igual a cero cuando las tasas de cobertura de todos los grupos o circunstancias son iguales, pero es positiva y va en aumento si la desigualdad ascienda entre los diferentes con- juntos de circunstancias. Para poder calcularla, es necesario identificar las tasas de cobertura de aquellos grupos que tienen un acceso inferior al promedio a la oportunidad que se examina. Es decir, la penalidad se computa como el promedio de las brechas en las oportunidades para estos grupos. (A.2) donde k denota un conjunto específico de circunstancias, v el número total de grupos cuyo acceso es menor al promedio, ak el porcentaje relativo del grupo k en las circunstancias que forman parte de la muestra y Ck la cobertura que corresponde a las circunstancias del grupo k. Por consiguiente, la penalidad P indica la cantidad del total de la cobertura C que debe reasignarse a los miembros de los grupos que tienen tasas bajas de cober- tura para que cada uno tuviera igual posibilidad de acceder a las mismas oportunidades. Es precisamente esta penalidad la que se resta a la tasa de cobertura total C para el índice IOH. Tanto la penalidad como el IOH pueden formularse en términos del índice de disimilitud (D). Es decir, el índice de Ganancias sociales en la balanza penalidad puede expresarse como P = C * D, después de lo cual el índice IOH puede enunciarse como (A.3) Intuitivamente, D representa la fracción de oportunidades que se debe reasignar para lograr una igualdad total en el suministro de un determinado bien o servicio. El Gráfico A.1 introduce una representación descriptiva del IOH. En este ejemplo, la tasa total de cobertura es de 59% y es representada por la línea horizontal discontinua. Sin embargo, en el gráfico las oportunidades de asig- nación dependen del percentil de circunstancias caracterizado por el eje horizontal. Es decir, el décimo percentil tiene una cobertura de alrededor de 20%, mientras que el percentil 50 tiene una cobertura de aproximadamente 60%. Cualquier asignación sobre la línea horizontal discontinua (la zona azul) representa una violación a la igual- dad de oportunidades y es considerada una penalidad. Por lo tanto, el IOH es la cobertura total (la zona bajo la línea horizontal discontinua) menos la penalidad, y es expresado por la zona celeste del gráfico. 59  Esta sección se basa en gran medida en Molinas y coautores (2012). 50 Gráfico A.1: Representación descriptiva del índice IOH 100 90 80 Acceso Inferior al Promedio 70 Penalidad Tasa de Cobertura 60 50 40 IOH 30 20 10 0 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 Percentil de Circunstancias El IOH puede calcularse mediante los siguientes cinco pasos:60 a. Calcular un modelo logit de la probabilidad de tener acceso a una oportunidad, donde la variable depen- diente es la oportunidad (de acceso a agua, saneamiento, finalizar el sexto grado a tiempo, etc.) y la variable independiente son las circunstancias (género, ingreso de los padres, lugar de residencia, etc.). b. Obtener las probabilidades predichas del modelo logit para cada individuo: (A.4) ^ donde Pi es la probabilidad estimada de un niño i de acceder a la oportunidad en estudio, xki es un vector de las ^ circunstancias k del individuo i, y bk es la estimación del parámetro relacionado con la circunstancia k. c. Calcular la cobertura total C: (A.5) Ganancias sociales en la balanza donde wi es una ponderación de muestreo y n es el número de observaciones. d. Estimar el índice de desigualdad-D: (A.6) e. Estimar el IOH: (A.7) 60  Los cálculos estimados del índice IOH en este informe se obtienen usando el software STATA a través del archivo ado denomi- nado “IOH”, de disponibilidad pública (ver Azevedo y coautores, 2010). 51 Tabla A.8: IOH por oportunidad (a) Matrícula escolar País Alrededor de 2000 Alrededor de 2012 HOI D-Index HOI D-Index Argentina 97,6 0,5 98,4 0,2 Bolivia 90,8 2,2 96,0 1,1 Brasil 95,4 1,0 98,0 0,4 Chile 97,9 0,6 99,1 0,2 Colombia 93,8 1,1 Costa Rica 92,6 1,8 95,5 1,1 Rep. Dominicana 96,9 0,7 96,7 0,8 Ecuador 84,2 4,0 95,0 1,3 El Salvador 83,3 4,3 92,3 2,1 Guatemala 73,7 5,9 86,6 2,6 Honduras 78,7 5,0 81,5 3,6 México 89,7 2,6 93,2 1,5 Nicaragua 81,1 5,1 79,9 4,9 Panamá 94,5 1,5 96,1 1,0 Paraguay 89,5 2,7 94,7 1,5 Perú 93,8 1,6 96,9 1,0 Uruguay 94,3 1,5 96,6 0,7 Fuente: cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: el cuadro muestra el índice IOH de los países de LAC en 2000 y 2012 o en el año más cercano si no hay datos disponibles para esos años. Ganancias sociales en la balanza 52 Tabla A.8: IOH por oportunidad (cont.) (b) Finalización del sexto grado a tiempo País Alrededor de 2000 Alrededor de 2012 IOH Índice-D IOH Índice-D Argentina 85,0 3,2 88,2 2,3 Bolivia 61,1 12,2 72,3 6,6 Brasil 46,4 18,7 61,9 10,1 Chile 80,3 4,0 84,2 2,5 Colombia 55,5 12,6 Costa Rica 64,8 9,2 73,6 6,4 Rep. Dominicana 38,6 20,1 63,5 10,3 Ecuador 73,0 7,3 85,4 3,4 El Salvador 33,6 22,2 51,6 12,0 Guatemala 26,0 30,0 53,8 12,9 Honduras 41,1 17,2 53,6 11,3 México 74,5 7,5 90,3 2,5 Nicaragua 42,7 21,4 51,0 15,7 Panamá 75,3 6,3 79,3 5,8 Paraguay 48,1 14,9 73,0 7,4 Perú 54,5 13,0 83,9 4,3 Uruguay 79,6 4,8 83,6 4,2 Fuente: cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: el cuadro muestra el índice IOH de los países de LAC en 2000 y 2012 o en el año más cercano si no hay datos disponibles para esos años. Ganancias sociales en la balanza 53 Tabla A.8: IOH por oportunidad (cont.) (c) Electricidad País Alrededor de 2000 Alrededor de 2012 IOH Índice-D IOH Índice-D Argentina Bolivia 46,4 25,1 83,9 6,5 Brasil 90,0 4,3 98,7 0,6 Chile 96,7 1,5 99,4 0,2 Colombia 93,1 2,9 Costa Rica 97,6 1,0 98,3 0,6 Rep. Dominicana 83,7 6,5 96,9 1,3 Ecuador 89,9 3,9 94,1 2,2 El Salvador 71,9 10,5 88,3 4,0 Guatemala 57,4 15,0 72,4 8,9 Honduras 50,9 21,9 66,0 12,9 México 95,5 1,7 98,3 0,7 Nicaragua 50,5 21,6 55,5 20,7 Panamá Paraguay 83,4 5,9 96,6 1,3 Perú 45,5 27,5 81,0 8,1 Uruguay 98,5 0,5 99,8 0,1 Fuente: cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: el cuadro muestra el índice IOH de los países de LAC en 2000 y 2012 o en el año más cercano si no hay datos disponibles para esos años. Ganancias sociales en la balanza 54 Tabla A.8: IOH por oportunidad (cont.) (d) Agua País Alrededor de 2000 Alrededor de 2012 IOH Índice-D IOH Índice-D Argentina 92,0 2,0 97,6 0,6 Bolivia 12,2 41,3 27,5 29,3 Brasil 72,0 11,3 87,1 5,1 Chile 84,8 6,1 93,4 1,6 Colombia 87,5 4,1 Costa Rica 93,4 2,0 96,3 1,2 Rep. Dominicana 63,1 12,2 63,2 11,2 Ecuador 48,2 21,2 57,5 18,6 El Salvador 14,4 46,4 17,3 41,1 Guatemala 38,4 20,5 42,6 19,4 Honduras 16,5 32,8 27,9 24,6 México 37,8 27,6 50,8 17,7 Nicaragua 10,5 42,1 24,4 35,8 Panamá Paraguay 24,9 36,6 47,1 14,6 Perú 42,8 18,6 64,0 10,0 Uruguay 88,6 3,9 96,1 1,4 Fuente: cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: el cuadro muestra el índice IOH de los países de LAC en 2000 y 2012 o en el año más cercano si no hay datos disponibles para esos años. El acceso al agua y saneamiento se calculó con versiones no armonizadas de las encuestas de hogares (vea las definiciones en el Cuadro 6). Ganancias sociales en la balanza 55 Tabla A.8: IOH por oportunidad (cont.) (e) Saneamiento País Alrededor de 2000 Alrededor de 2012 IOH Índice-D IOH Índice-D Argentina 59,4 13,5 72,2 7,9 Bolivia 20,9 36,5 37,0 30,0 Brasil 75,5 8,9 88,0 4,0 Chile 75,3 10,0 88,3 1,6 Colombia 79,7 7,8 Costa Rica 88,8 4,0 94,9 1,9 Rep. Dominicana 37,4 27,3 56,1 16,9 Ecuador 68,8 11,7 87,3 4,9 El Salvador 13,8 47,2 17,1 41,6 Guatemala 11,9 49,7 23,5 38,0 Honduras 34,8 23,0 30,0 31,1 México 57,8 18,6 80,3 7,6 Nicaragua 38,2 18,1 35,6 20,1 Panamá Paraguay 35,9 30,7 56,9 18,3 Perú 37,4 28,9 64,4 11,9 Uruguay 99,3 0,2 98,6 0,5 Fuente: cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: el cuadro muestra el índice IOH de los países de LAC en 2000 y 2012 o en el año más cercano si no hay datos disponibles para esos años. El acceso al agua y saneamiento se calculó con versiones no armonizadas de las encuestas de hogares (vea las definiciones en el Cuadro 6). Ganancias sociales en la balanza 56 Tabla A.8: IOH por oportunidad (cont.) (f) Teléfono móvil País Alrededor de 2000 Alrededor de 2012 IOH Índice-D IOH Índice-D Argentina Bolivia 86,5 4,5 Brasil 16,8 35,3 86,6 4,8 Chile 20,9 30,2 97,6 0,5 Colombia 91,5 2,5 Costa Rica 30,8 25,1 96,3 1,0 Rep. Dominicana 67,3 4,3 Ecuador 85,9 3,9 El Salvador 6,2 34,4 91,8 2,0 Guatemala 3,0 57,0 Honduras 82,4 4,4 México 68,3 10,2 Nicaragua 1,1 53,0 46,6 19,3 Panamá Paraguay 17,4 31,2 90,2 2,7 Perú 1,7 50,0 76,3 7,9 Uruguay 96,9 0,9 Fuente: cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: el cuadro muestra el índice IOH de los países de LAC en 2000 y 2012 o en el año más cercano si no hay datos disponibles para esos años. Ganancias sociales en la balanza 57 Tabla A.8: IOH por oportunidad (cont.) (g) Internet País Alrededor de 2000 Alrededor de 2012 IOH Índice-D IOH Índice-D Argentina Bolivia 3,8 53,6 Brasil 1,9 68,6 25,1 32,7 Chile 3,1 56,5 32,0 24,5 Colombia 12,5 42,3 Costa Rica 39,2 20,2 Rep. Dominicana Ecuador 11,1 43,8 El Salvador 8,7 45,2 Guatemala 0,1 85,9 1,8 63,0 Honduras 3,9 57,5 México 10,5 43,1 Nicaragua Panamá Paraguay 0,1 91,0 9,4 49,0 Perú 0,1 74,7 9,3 46,6 Uruguay 38,2 25,5 Fuente: cálculos de los autores con datos de SEDLAC (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: el cuadro muestra el índice IOH de los países de LAC en 2000 y 2012 o en el año más cercano si no hay datos disponibles para esos años. Ganancias sociales en la balanza 58 Anexo 9. Descomposición del índice-D Gráfico A.2. Descomposición de la desigualdad en el acceso a bienes y servicios básicos en LAC en 2012 (a) Saneamiento 0,45 0,40 0,35 0,30 0,25 0,20 0,15 0,10 0,05 0,00 Brasil El Salvador Argentina Costa Rica Guatemala Chile México R. Dominicana Nicaragua Honduras Uruguay Ecuador Colombia Perú Bolivia (b) Teléfono móvil Paraguay 0,25 0,20 0,15 0,10 0,05 0,00 El Salvador Brasil Chile Costa Rica R. Dominicana Honduras Nicaragua Uruguay Colombia Paraguay Ecuador Bolivia Perú México Ganancias sociales en la balanza (c) Internet 0,7 0,6 0,5 0,4 0,3 0,2 0,1 0,0 Brasil El Salvador Costa Rica Chile México Guatemala Honduras Uruguay Colombia Ecuador Perú Paraguay Bolivia Educación de los padres Género Género jefe del hogar Ingreso per cápita Urbano o rural Presencia de ambos padres Número de hermanos Fuente: Cálculos de los autores con datos de CEDLAS y el Banco Mundial (CEDLAS y Banco Mundial) en paneles a), b) y c) y datos de PISA 2012 (OCDE) en paneles d) y e). Nota: las cifras en los paneles a), b) y c) muestran la descomposición del índice-D para los países de LAC en 2012 o en el año más cercano cuando no hay datos disponibles para ese año. El acceso a saneamiento se calculó con versiones no armonizadas de las encuestas de hogares (ver las de niciones en el Cuadro 6). 59 Gráfico A.2. Descomposición de la desigualdad en el acceso a bienes y servicios básicos en LAC en 2012 (cont.) d) IOH para el nivel 2 de competencia en lectura 30 25 20 15 10 5 0 Costa Rica Chile México Argentina Uruguay Brasil Colombia Perú (e) IOH para el nivel 2 de competencia en ciencias 35 30 25 20 15 10 5 0 Chile Costa Rica México Argentina Colombia Uruguay Brasil Perú Educación de los padres Ocupación del padre Género Región Bienes del hogar Fuente: Cálculos de los autores con datos de CEDLAS y el Banco Mundial (CEDLAS y Banco Mundial) en paneles a), b) y c) y datos de PISA 2012 (OCDE) en paneles d) y e). Nota: las cifras en los paneles a), b) y c) muestran la descomposición del índice-D para los países de LAC en 2012 o en el año más cercano cuando no hay datos disponibles para ese año. El acceso a saneamiento se calculó con versiones no armonizadas de las encuestas de hogares (ver las de niciones en el Cuadro 6). Ganancias sociales en la balanza 60 Anexo 10. Años necesarios para lograr acceso universal a oportunidades básicas Gráfico A.3. Es probable que muchos países logren el acceso universal a oportunidades básicas en 2030 a) Finalizar el sexto grado a tiempo 8 7 6 5 4 3 2 1 0 Brasil El Salvador Argentina Chile Costa Rica Guatemala Honduras Nicaragua Ecuador México Panamá Perú Uruguay Bolivia Paraguay R. Dominicana b) Agua 12 10 8 6 4 2 0 -2 Brasil Argentina Costa Rica Guatemala Chile Honduras Nicaragua Ecuador El Salvador México Paraguay Perú Uruguay Bolivia R. Dominicana Ganancias sociales en la balanza c) Saneamiento 12 10 8 6 4 2 0 -2 -4 Brasil El Salvador Argentina Costa Rica Guatemala Chile Honduras Nicaragua Ecuador México Paraguay Perú Uruguay Bolivia R. Dominicana Tasa de crecimiento anualizada observada en 2000-2012 Tasa de crecimiento anualizada necesaria para lograr universalidad en 2030 Fuente: Cálculos de los autores con datos de CEDLAS y el Banco Mundial (CEDLAS y Banco Mundial). Nota: El grá co presenta la tasa de crecimiento anualizada observada entre 2000 y 2012 y la de crecimiento anualizada necesaria para alcanzar universalidad en 2030. El acceso a agua y saneamiento se calculó con versiones no armonizadas de encuestas de hogares (ver las de niciones en el Cuadro 6). Ver los detalles metodológicos del Índice IOH en el Anexo 8. 61 Referencias bibliográficas Azevedo, J. P., S. Franco, E. Rubiano y A. Hoyos. 2010. IOH Stata Module to compute Human Opportunity Index, en Statistical Software Components S457191. Boston College, Departmento de Economía. (http://ideas.repec.org/c/ boc/bocode/s457191.html). Azevedo, J. P., V. Sanfelice y M. C. Nguyen. 2012. “Shapley Decomposition by components of a Welfare Measure”. Banco Mundial (mimeografiado). Banco Mundial. 2006. “Equity and Development”. Informe sobre el Desarrollo Mundial. Washington, DC: Banco Mundial. Banco Mundial. 2011. Igualdad de Oportunidades para los Niños y Jóvenes de Bolivia. 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