82134 Noviembre 2013 Capacidades financieras en MÉXICO: Resultados de la encuesta nacional sobre comportamientos, actitudes y conocimientos financieros Capacidades financieras en México: resultados de la encuesta nacional sobre comportamientos, actitudes y conocimientos financieros REKHA REDDY MIRIAM BRUHN CONGYAN TAN BANCO MUNDIAL Washington, DC © Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento / Banco Mundial 1818 H Street, NW Washington, DC 20433 Teléfono: 202-473-1000 Internet: www.worldbank.org Las opiniones, interpretaciones y conclusiones aquí expresadas no son necesariamente reflejo de la opinión del Directorio Ejecutivo de la institución ni de los países representados por este. El Banco Mundial no garantiza la exactitud de los datos que figuran en esta publicación. Las fronteras, los colores, las denominaciones y demás datos que aparecen en los mapas de este documento no implican juicio alguno, por parte del Banco Mundial, sobre la condición jurídica de ninguno de los territorios, ni la aprobación o aceptación de tales fronteras. Publicado originalmente en inglés como Financial Capability In Mexico: Results from a National Survey on Financial Behaviors, Knowledge and Attitudes por el Banco Mundial el 2013. En casos de discrepancias, prima el idioma original. Propiedad intelectual El material contenido en esta publicación está registrado como propiedad intelectual. Su repro- ducción o transmisión total o parcial sin la debida autorización puede constituir una violación de la ley vigente. El Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento/Banco Mundial alienta la difusión de sus publicaciones y, normalmente, autorizará su reproducción sin demora. 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Fotografía de cubierta: Banco Mundial; fotografía de los estudiantes © Esther Vargas/Octubre 2012 Traducción al castellano: Unidad de Servicios de Interpretación y Traducción, Grupo del Banco Mundial Diseño de portada y diagramación: Nita Congress Índice Agradecimientos — vii Siglas y abreviaturas  —  ix Resumen — xi 1 Introducción — 1 1.1 Contexto  — 1 1.2 Justificación de este informe — 2 1.3 ¿Qué son las capacidades financieras?  — 5 2 Administración diaria del dinero y planificación financiera  —  7 2.1 Características de los encargados de las decisiones financieras  — 7 2.2 Planificación del presupuesto y seguimiento de gastos — 9 2.3 Cubrir totalmente los gastos del mes: lograr el equilibrio entre ingresos y gastos — 11 2.4 Planificación para hacer frente a gastos importantes previstos e imprevistos — 12 2.5 Planes para el futuro de los hijos y la vejez — 13 2.6 Actitudes  — 15 3 Decisiones sobre servicios y conocimientos financieros  —  17 3.1 Uso de los servicios financieros — 19 3.2 Toma de decisiones sobre servicios de crédito y ahorro — 22 3.3 Conocimientos financieros — 24 4 Comparación de las capacidades financieras  —  27 4.1 Componentes de las capacidades financieras — 27 4.2 Perfiles de las capacidades financieras en México — 30 4.3 Variación regional de las capacidades financieras — 33 4.4 Las capacidades financieras de los jóvenes — 35 5 Comparaciones internacionales — 41 6 Vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera  —  47 6.1 Conocimientos financieros y capacidades financieras — 47 6.2 Conocimientos financieros, capacidades financieras y uso del crédito y el ahorro — 49 6.3 Capacidades y conocimientos financieros, acceso a las finanzas y uso de productos formales — 52 v CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO 7 C onclusiones y recomendaciones  —  55 APÉNDICES A Construcción de los puntajes de las capacidades financieras — 67 B Segmentación de la población mediante el análisis de conglomerados — 73 C Los jóvenes y las capacidades financieras — 77 D Metodología para analizar los vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera — 83 E Revisión bibliográfica capacidades, comportamientos y conocimientos financieros — 93 Referencias — 97 LISTA DE RECUADROS 1.1 Datos de la encuesta sobe capacidades y conocimientos financieros que se presentan en este informe — 3 3.1 Comparación de diferentes fuentes de datos sobre la inclusión financiera en México — 18 LISTA DE GRÁFICOS 1.1 Alcance de la encuesta sobre las capacidades financieras de México — 4 2.1 Contribuciones al presupuesto del hogar y participación en la toma de decisiones financieras, por edad y sexo  —  8 2.2 Planificación y cumplimiento de los planes sobre el presupuesto — 9 2.3 Planificación del comportamiento, por sexo, ubicación e ingreso — 10 2.4 Precisión en la administración del dinero — 10 2.5 Insuficiencia de dinero para cubrir las necesidades  — 11 2.6 Estrategias para resolver la insuficiencia de dinero  — 12 2.7 Capacidad para cubrir gastos importantes imprevistos, por grupo de ingreso — 13 2.8 Estrategias aplicadas para cubrir los gastos de la vejez — 14 2.9 Cobertura de gastos de la vejez, por sexo y empleo (menos de 60 años de edad) — 14 2.10 Actitud con respecto al futuro — 15 2.11 Horizontes de planificación financiera — 16 2.12 Orientación hacia el logro de objetivos — 16 3.1 Uso actual y pasado de los servicios financieros (porcentaje de la población Mexicana) — 19 3.2 Distribución de respuestas a las preguntas sobre conocimientos financieros — 24 3.3 Distribución de respuestas correctas a las preguntas sobre conocimientos financieros — 25 3.4 Distribución de las fuentes de información en la administración del dinero — 26 4.1 Puntuaciones medias de los componentes de las capacidades financieras en México — 29 4.2 Tamaño de los conglomerados, por logro educativo e inclusión financiera — 32 vi Índice 4.3 Características sociodemográficas de cada conglomerado — 32 4.4 distribución de las puntuaciones de las capacidades financieras en función de los comportamientos y conocimientos, por región  — 34 4.5 Conocimientos financieros, por grupo etario  — 36 4.6 Porcentaje que está de acuerdo con cada afirmación, por grupo etario — 37 4.7 Puntajes promedio en los componentes de las capacidades financieras referidos al comportamiento — 38 5.1 Comparación entre países de los componentes de las capacidades financieras — 42 6.1 Correlaciones entre conocimientos financieros y capacidades financieras en función de las desviaciones estándar — 49 6.2 Uso de productos financieros entre las personas con escasas o elevadas capacidades financieras — 52 6.3 Distribución de las sucursales bancarias y los corresponsales bancarios en los municipios — 53 B.1 Puntajes de los componentes de las capacidades financieras, por conglomerado — 75 C.1 Nivel educativo, por edades — 78 C.2 Empleo en los jóvenes (de 18 a 24 años) — 78 C.3 Puntajes medios para el índice compuesto referido a las actitudes, por edad — 80 LISTA DE CUADROS E.1 Recomendaciones para fomentar mejoras en la administración del dinero y la planificación financiera y reducir la vulnerabilidad en México — xviii 2.1 Funciones en la toma de decisiones financieras — 8 3.1 Razones para ahorrar, por encuestado que ahorra (%) — 21 3.2 Uso de los programas sociales y productos/servicios financieros, por encuestado (%) — 21 3.3 Percepción de la capacidad de endeudamiento, por encuestado que ahorra (%) — 22 3.4 Diligencia del encuestado a la hora de tomar decisiones relacionadas con los servicios, por instrumento de crédito o ahorro (%) — 23 4.1 Componentes de las capacidades financieras — 28 4.2 Conglomerados de capacidades financieras en la población — 30 4.3 Puntuaciones promedio de las capacidades financieras en función de los comportamientos y conocimientos, por región  — 33 5.1 Resumen estadístico de variables sociodemográficas clave — 44 5.2 Comparación internacional de los porcentajes respuestas correctas a preguntas sobre conocimientos financieros — 45 6.1 Correlaciones parciales entre los conocimientos financieros, los componentes de las capacidades financieras y el uso de servicios financieros — 50 A.1 Estadísticas sobre factores sociodemográficos clave de la muestra — 72 D.1 Relación entre las capacidades y los conocimientos financieros — 84 D.2 Conocimientos financieros y uso de productos financieros — 87 D.3 Capacidades financieras y uso de productos financieros — 88 vii CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO D.4 Correlaciones parciales entre puntos de acceso financiero y uso de productos financieros, por nivel de capacidades y conocimientos financieros — 90 D.5 Definiciones de las variables utilizadas en la encuesta sobre conocimientos financieros en México. Capacidades y conocimientos financieros — 91 D.6 Definiciones de las variables utilizadas en la encuesta sobre conocimientos financieros en México. Uso de productos financieros — 91 D.7 Definiciones de las variables utilizadas en la encuesta sobre conocimientos financieros en México: Variables de control referidas a los individuos — 92 D.8 Definiciones y fuentes de las variables referidas a los municipios utilizadas en la encuesta sobre conocimientos financieros en México — 92 viii Agradecimientos L a preparación de este informe estuvo a cargo de un equipo del Banco Mundial encabezado por Rekha Reddy e integrado por Miriam Bruhn y Congyan Tan. Pallavi Nuka proporcionó un análisis de las capacidades financieras de la población joven. Valeria Perotti facilitó investigaciones para respaldar la comparación interna- cional de los datos sobre capacidades financieras de México. Además, Sarah Antos y Katie McWilliams aportaron conocimientos especializados sobre sistemas de infor- mación geográfica, y Nita Congress y Odette Maciel proporcionaron apoyo para la edición y diseño. Este proyecto se vio favorecido, en todo el proceso de diseño e implementación, por una alianza con las contrapartes de la CNBV y la CONDUSEF: Luis Treviño Garza (CNBV), Arturo Luna Canales, Sara Gutiérrez y Jesús David Chávez Ugalde (CONDUSEF) proporcionaron respaldo y opiniones invalorables. Además, el equipo desea agradecer a Ana Luisa Saavedra y Javier Suárez (de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público) por sus orientaciones durante todo el proyecto. Por último, también quiere expresar su reconocimiento por la inspiración que aportó Raúl Hernández-Coss (CNBV) (ya fallecido), que respaldó este proyecto desde su creación. El equipo está en deuda con numerosos colegas, que proporcionaron comentarios, aportes y sugerencias sobre la ejecución de este proyecto y sobre los borradores de los informes, como Lily Chu, Eva Gutiérrez y P. S. Srinivas. También da las gracias a los expertos evaluadores —Annamaria Lusardi, Samuel Maimbo y James Seward—, por sus valiosos comentarios para este documento y para el diseño del proyecto. El equipo agradece especialmente al Fondo Fiduciario de Rusia para la Capacita- ción y la Educación Financieras y a la Oficina Regional de América Latina y el Caribe del Banco Mundial por el respaldo financiero que facilitó la recolección de datos y su análisis. Aprecia sinceramente la orientación estratégica brindada por Richard Hinz, gerente de programas del Fondo Fiduciario, y Kinnon Scott, jefe del proyecto piloto sobre capacidades financieras a nivel mundial. Por último, fueron invaluables las ideas del equipo académico internacional que participó en el diseño de esta encuesta, conformado por Gerritt Antonides, Sharon Collard, Elaine Kempson, Olga Kuzina y Christian Poppe. ix CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO Una gran parte de este informe se basa en datos nuevos de una encuesta realizada en el país por la empresa Ipsos Bimsa. El grupo agradece en particular a María José Gentili, Patricia López y Edgar Monsalvo por el respaldo y las opiniones brindados durante el proceso de investigación. Por último, expresa su gratitud a los 2,022 mexi- canos encuestados, que brindaron su tiempo para que obtuviéramos las ideas utili- zadas en este informe. x Siglas y abreviaturas ACP análisis de componentes principales AFORES Administradoras de fondos para el retiro BANSEFI Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros, S. N. C. CEF Comité de Educación Financiera CNBV Comisión Nacional Bancaria y de Valores CONDUSEF Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros ENIF Encuesta Nacional de Inclusión Financiera IMSS Instituto Mexicano del Seguro Social INEGI Instituto Nacional de Estadística y Geografía INFE Red Internacional de Educación Financiera ISSSTE Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado OCDE Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos ONG Organización no gubernamental SOFIPO Sociedad Financiera Popular xi Resumen L os resultados de la encuesta relativa a las capacidades financieras de México —la primera encuesta representativa a nivel nacional sobre comportamientos, acti- tudes y conocimientos financieros— señalan áreas de oportunidad para apoyar la población en una sólida toma de decisiones financieras. „„ Administración diaria del dinero: La administración diaria del dinero y la plani- ficación son imprecisas. Solo el 41% de los encuestados informó que planifica habitualmente su presupuesto y el 20% hace un seguimiento riguroso de sus gastos. „„ Cubrir totalmente los gastos del mes y planificar: Muchas personas son vulnera- bles a las alteraciones económicas. Solo el 34% considera que podría cubrir un gasto importante imprevisto y el 70% informó que había tenido dificultades habi- tuales u ocasionales para cubrir gastos básicos tales como alimentos y vivienda. Incluso los acontecimientos previstos de la vida son difíciles de afrontar. „„ Solo el 28% de las personas de menos de 60 años tiene planes para cubrir completamente sus gastos de la vejez después de la jubilación, y apenas algo más de un tercio de los mayores de 60 años ha tomado medidas para afrontar los gastos de la tercera edad. „„ A pesar de un fuerte aumento en la disponibilidad de productos y servicios financieros en los últimos años, la inclusión financiera continúa siendo un reto. Casi la mitad de los encuestados (49%) no usa ningún servicio finan- ciero actualmente (formal o informal) y existe un alto grado de utilización de fuentes de ahorro y crédito informal. Incluso los canales diseñados para aumentar el acceso financiero, como los corresponsales bancarios, benefician principalmente a quienes tienen un mayor nivel de aptitud y conocimientos financieros (capacidad financiera). „„ Si bien la mayoría de los usuarios de productos financieros informó que toma sus decisiones cuidadosamente. El gran parte de los encuestados respondió correctamente las preguntas sobre matemática básica y la definición de infla- ción, y conocía el concepto de interés de un préstamo. Sin embargo, muchos xiii CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO mostraron oportunidades de mejorar sus conocimientos financieros formales; por ejemplo, solo el 37% pudo calcular una tasa de interés simple y la mitad de la población entrevistada declaró que nunca le habían enseñado a adminis- trar el dinero. En este informe se detalla cómo varían los resultados entre los distintos segmentos de la población y se ofrecen recomendaciones para ayudar a la población mexicana a resolver estos desafíos. CONTEXTO Durante la última década, los consumidores mexicanos han observado un aumento drástico en la disponibilidad y diversidad de productos financieros. A medida que estos productos llegan a más beneficiarios, las capacidades financieras —la posibi- lidad de que los consumidores tomen decisiones financieras adecuadas y utilicen los productos en forma eficaz y responsable— son cruciales para acelerar la inclusión financiera. La promoción de la inclusión y la educación financieras es una de las máximas prio- ridades para el Gobierno mexicano. Teniendo en cuenta esta prioridad, el Gobierno de México, en asociación con el Banco Mundial, encomendó este estudio sobre las capacidades financieras con los siguientes objetivos „„ lograr una comprensión empírica de los comportamientos, las actitudes y los conocimientos financieros de la población mexicana; „„ respaldar el diseño de políticas públicas para mejorar los conocimientos sobre los servicios financieros y su calidad; „„ detectar vulnerabilidades y deficiencias en segmentos específicos de la pobla- ción para mejorar y orientar las políticas e intervenciones públicas hacia los aspectos más urgentes; „„ establecer una base de comparación internacional, puesto que se han completado encuestas similares en otros seis países. Este estudio amplía y complementa los conjuntos de datos financieros sobre consu- midores que existen en la actualidad. El Banco Mundial trabajó con sus contrapartes de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) para preparar e implementar esta encuesta en una muestra representativa a nivel nacional de 2,022 mexicanos mayores de 18 años. En la encuesta se recopilaron datos sobre prácticas de administración diaria del dinero; planificación financiera; información y elección de productos financieros; actitudes y conocimientos financieros, y características sociodemográficas. xiv Resumen En este informe se presenta una medición de referencia de las capacidades finan- cieras de la población mexicana adulta. En el capítulo 1 se describe el contexto del país y se presenta la justificación del estudio sobre las capacidades financieras. En el capítulo 2 se describen los principales resultados sobre la administración diaria del dinero y los comportamientos y actitudes relativos a la planificación financiera. En el capítulo 3 se analizan las decisiones relativas al uso de productos financieros y el nivel de conocimientos financieros. En el capítulo 4 se resumen los principales comportamientos y actitudes, traducidos en calificaciones sobre capacidades finan- cieras, lo que facilita la creación de perfiles y las comparaciones entre distintos segmentos de la población. En el capítulo 5 se presentan comparaciones interna- cionales. En el capítulo 6 se estudia la relación entre las capacidades financieras, los conocimientos financieros y la inclusión financiera. En el capítulo 7 se ofrecen recomendaciones de política en relación con los principales desafíos en materia de capacidades financieras planteados en el documento. ADMINISTRACIÓN DIARIA DEL DINERO Más del 90% de los adultos mexicanos son responsables de algún aspecto de la gestión de las finanzas del hogar, ya sea pagar cuentas, decidir cómo gastar el dinero o planificar el presupuesto. De los encuestados que toman decisiones financieras en el hogar, un 46% son hombres y un 54% son mujeres. Las mujeres tienen un papel fundamental en las finanzas del hogar, aunque casi la mitad de las mujeres de la muestra informó que no contribuye al presupuesto familiar. El 9% de adultos que dijo que no participaba en las decisiones financieras del hogar estaba constituido principalmente por jóvenes y ancianos. Para la mayoría de los mexicanos, la planificación presupuestaria y el segui- miento de los gastos son procesos imprecisos e irregulares. Si bien aproximada- mente el 70% de los mexicanos informa que planifica cómo gastar el ingreso, solo el 41% lo hace en forma habitual y apenas un tercio se ajusta siempre al presupuesto. La mayoría de los mexicanos, más del 80%, no sabía exactamente cuánto había gastado la semana anterior y solo una quinta parte sabía exactamente de cuánto disponía para los gastos corrientes. Los hogares con mayores ingresos y los resi- dentes de zonas urbanas tienen más probabilidades de controlar sus gastos más detalladamente y hacer planes más exactos sobre las finanzas familiares. CUBRIR TOTALMENTE LOS GASTOS DEL MES Y PLANIFICAR Más del 70% de la población ha experimentado dificultades financieras; así lo indican los casos de insuficiencia de ingresos —habitual u ocasional— para cubrir gastos básicos tales como alimentación y vivienda. Las personas de menores ingresos, los ancianos y los que están empleados en el sector informal o que solo accedieron a la educación primaria son especialmente vulnerables a las difi- xv CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO cultades económicas. La estrategia más común para hacer frente a esta situación es el endeudamiento informal. La mayoría de los mexicanos no toma recaudos para hacer frente a gastos importantes, ya sean previstos (matrícula escolar, boda) o imprevistos (pérdida del trabajo, accidente). De los encuestados que preveían un gasto importante, solo el 45% creía que podía afrontarlo, y apenas el 34% dijo que podría cubrir un gasto importante imprevisto. Algo menos de un tercio de las personas con niños a cargo no había hecho ningún plan para su futuro; la mayoría de estos casos correspondía a familias de ingreso bajo. La planificación para la vejez y la jubilación también es poco frecuente: menos de un tercio de la población de menos de 60 años informa que ha hecho planes para cubrir sus gastos de la tercera edad. De las personas de más de 60 años, casi dos tercios informaron que sus preparativos para afrontar el costo de vida eran escasos o nulos, y muchos dependían del respaldo de familiares y amigos en edad laboral. Casi dos tercios de los mexicanos encuestados manifestaron una mayor orien- tación al presente y no al futuro. El 16% de los encuestados informó que no tenía planes financieros, un 27% dijo que su marco temporal de planificación era de una semana o menos y un 27% indicó que tenía un horizonte de entre una semana y un mes. Al mismo tiempo, dos tercios de los encuestados expresaron una fuerte orien- tación al logro de objetivos, lo que significa que sentían que trabajaban duro para dar lo mejor y forjarse un futuro; esto indica una necesidad de encauzar estas aspira- ciones hacia medidas concretas de planificación financiera. TOMAR DECISIONES SOBRE SERVICIOS FINANCIEROS Los mexicanos utilizan una variedad de instrumentos formales e informales de ahorro y crédito. Prácticamente la mitad de los entrevistados (49%) informó que en este momento no utiliza ningún servicio financiero (formal o informal) como ahorro o crédito, y el 42% afirmó que no ha usado ningún servicio financiero en los últimos cinco años. Para el 51% que actualmente los utiliza, los productos financieros formales más comunes eran los instrumentos de ahorro, como las cuentas en insti- tuciones financieras, y las tarjetas de crédito. Entre las fuentes informales de crédito y ahorro, habitualmente se mencionaban las tandas (término mexicano para las asociaciones informales de ahorro y crédito rotativo) y los préstamos de familiares y amigos. La mayoría de quienes actualmente usan servicios financieros afirmó que toma las decisiones cuidadosamente, incluso aunque haya elegido servicios informales de alto costo, como los préstamos de casas de empeño. A la hora de considerar las alternativas de productos financieros, el 62% de los encuestados xvi Resumen informó que conocía exactamente los términos y condiciones. Las personas que utilizan productos financieros formales, que tienen un empleo en el sector formal o que pertenecen a los grupos de ingreso más alto suelen ser quienes más investigan antes de tomar decisiones de esta índole. CONOCIMIENTOS FINANCIEROS El nivel de conocimientos financieros formales de los encuestados mostró oportunidades de mejora, especialmente en lo que respecta al cálculo de tasas de interés. La mayoría de los mexicanos no entiende cómo se conforma y calcula el interés ni está familiarizada con el concepto de diversificación de la cartera. Sin embargo, gran parte de los encuestados respondió correctamente las preguntas sobre matemática básica y la definición de inflación, y conocía el concepto de interés de un préstamo. El nivel de conocimientos financieros tiene una correlación positiva con la educación y el ingreso. Las deficiencias de conocimientos financieros indican desafíos para elegir productos financieros. La mitad de la pobla- ción entrevistada declaró que nunca le habían enseñado a administrar el dinero; para quienes sí recibieron orientación, el principal educador fue un progenitor. COMPARACIÓN DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS A partir del análisis de los datos de la encuesta se extraen siete componentes relacionados con el comportamiento y tres relacionados con la actitud en el ámbito de las capacidades financieras (planificación del presupuesto, vivir de acuerdo a las propias posibilidades, seguimiento de los gastos, uso de la infor- mación, no gastar en exceso, cobertura de gastos imprevistos, ahorro, actitud respecto del futuro, comportamiento no impulsivo y orientación al logro de objetivos). Los conocimientos financieros se asocian positivamente con un aumento de las capacidades financieras en relación con 7 de los 10 componentes y, después del control estadístico de los factores sociodemográficos, se correlacionan en gran medida con la capacidad de no gastar en exceso, seguida de la orientación al logro de objetivos y la oportunidad de vivir de acuerdo a las propias posibilidades. En la muestra de la población se identificaron cinco conglomerados definidos utilizando puntajes individuales sobre cada capacidad financiera. Estos grupos son: administradores de dinero poco experimentados (22%); administradores de dinero con visión a corto plazo (33%); gastadores jóvenes impulsivos (12%); personas pudientes pero desorganizadas (9%), y administradores del dinero y planificadores prudentes (25%). Las primeras dos categorías, que abarcan el 55% de la pobla- ción, están conformadas principalmente por trabajadores del sector informal y de ingresos bajos. Los administradores de dinero poco experimentados consiguen vivir de acuerdo a sus posibilidades, pero demuestran poca capacidad de planificación, preparación del presupuesto y seguimiento de las finanzas, y usan muy poco los xvii CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO productos de ahorro y crédito. Los administradores de dinero a corto plazo, por el contrario, pueden manejar adecuadamente sus finanzas diarias; la mitad de ellos usa servicios financieros. Sin embargo, la mayoría no tiene las habilidades ni los ingresos para ahorrar adecuadamente y hacer planes para el futuro. PERSPECTIVAS INTERNACIONALES En comparación con encuestados de otros países (Armenia, Colombia, Líbano, Nigeria, Turquía y Uruguay), los mexicanos informaron que manejan un hori- zonte temporal relativamente más corto para la planificación financiera y no están tan acostumbrados a planear el modo en que gastarán su dinero. No obstante, informan que se inclinan más por el ahorro. El puntaje de México en plani- ficación del presupuesto, es decir, la medida en que las personas organizan el uso de los ingresos, fue menor que en seis de los siete países donde se obtuvieron datos (excepto en Líbano). Los mexicanos también exhibieron una orientación al corto plazo, como quedó demostrado con los puntajes de las preguntas sobre preferencias temporales. Sin embargo, en el puntaje sobre orientación al ahorro, que registra la percepción sobre la capacidad de ahorrar, México se ubicó entre los más altos de los siete países. NEXOS ENTRE CAPACIDADES FINANCIERAS E INCLUSIÓN FINANCIERA Tanto los conocimientos financieros como las capacidades financieras se asocian positivamente con el uso de los productos financieros formales, como las cuentas bancarias y las tarjetas de crédito. El uso de productos financieros formales (cuentas bancarias, tarjetas de crédito, préstamos personales, hipotecas y seguros) es más común en el caso de los hombres, los habitantes de zonas urbanas, las personas de altos ingresos y los empleados del sector formal. Las personas de bajos ingresos utilizan en gran medida, según sus necesidades, las fuentes infor- males de ahorro y crédito (tandas, préstamos de casas de empeño, préstamos de familiares y amigos) para ahorrar anticipándose a situaciones de emergencia y cubrir las fluctuaciones de ingreso, así como para comprar alimentos y otros artículos de primera necesidad. Los resultados indican que los corresponsales bancarios incre- mentan el acceso a productos financieros formales principalmente para las personas que tienen capacidades o conocimientos financieros elevados (calculados a través de una batería de preguntas sobre conocimientos financieros). CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES DE POLÍTICAS La promoción de las capacidades y los conocimientos financieros pueden acelerar la inclusión financiera y respaldar el uso responsable de los productos financieros por parte de los consumidores de todos los niveles de ingreso. Los resultados que se presentan en este informe demuestran que las capacidades financieras y la inclusión financiera varían considerablemente debido a factores xviii Resumen tales como el nivel educativo alcanzado, el ingreso, el empleo y la ubicación geográ- fica. Asimismo, en el análisis se señala cuáles son los puntos fuertes (disposición al ahorro) y débiles (comportamiento respecto de la planificación) de las capacidades financieras en general de la mayoría de los mexicanos. Para aumentar las capacidades financieras de los mexicanos, será nece- sario contar con una estrategia pluridimensional en la que intervengan las diversas partes interesadas y en la que se contemple la mejora del diseño de las herramientas de gestión financiera y de los productos financieros, la educación financiera focalizada para mejorar las capacidades y la regulación de respaldo que asegure la adecuada protección del consumidor. Los orga- nismos gubernamentales de nivel nacional y local y otras instituciones financieras, instituciones educativas, los medios de comunicación y las organizaciones no guber- namentales pueden tener un papel importante para mejorar las capacidades finan- cieras. Distintas estrategias —como la preparación de herramientas de planificación y seguimiento financieros fáciles de usar, el fortalecimiento de la infraestructura para la ampliación del uso de productos financieros adecuadamente diseñados y la creación de regulación de respaldo que garantice una correcta protección del consu- midor y la implementación de intervenciones sobre educación financiera bien dise- ñadas— ofrecen la posibilidad de ampliar las capacidades financieras en México. En el cuadro E.1 se resumen las recomendaciones de políticas públicas del informe en relación con cada uno de los desafíos mencionados. xix CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO E.1  RECOMENDACIONES PARA FOMENTAR MEJORAS EN LA ADMINISTRACIÓN DEL DINERO Y LA PLANIFICACIÓN FINANCIERA Y REDUCIR LA VULNERABILIDAD EN MÉXICO OBJETIVO DE LAS INSTRUMENTO O PROGRAMA DE POLÍTICAS DESAFÍO PRINCIPAL POLÍTICAS (Y MARCO CRONOLÓGICO RECOMENDADO) Administración diaria del dinero y planificación Limitaciones para planificar Generar conciencia sobre ƒƒRespaldar la creación de herramientas de control de las finanzas el presupuesto y hacer el comportamientos rela- personales mediante teléfonos celulares o Internet (como seguimiento de los gastos; tivos al presupuesto y el Juntos Finanzas y la aplicación móvil Presupuesto Familiar de solo el 41% calcula habi- seguimiento de los gastos CONDUSEF) y su distribución a través de instituciones financieras tualmente el presupuesto y ofreciendo tecnologías que y educativas (corto plazo). el 20% controla sus gastos faciliten estos procesos ƒƒAlentar a las instituciones financieras y a otras partes intere- rigurosamente sadas a utilizar los mensajes de texto por celular y/o los medios sociales para enviar periódicamente mensajes simples relacio- nados con aspectos de las finanzas personales, como la gestión de los saldos de las cuentas, el reembolso de préstamos, etc. (corto plazo). Vulnerabilidad a las ƒƒImpulsar a las personas a ƒƒExigir que las instituciones financieras estatales incorporen, conmociones económicas: ahorrar para gastos impor- en forma experimental, características en el diseño de los un 34% considera que tantes imprevistos productos que promuevan la movilización hacia el ahorro, y podría cubrir un gasto ƒƒCrear mecanismos que fomentar esta práctica entre las instituciones privadas (mediano importante imprevisto y alienten a los receptores plazo). un 70% informa que tiene de asistencia social a ƒƒModificar el contrato entre los organismos gubernamentales per- dificultades habituales u ahorrar tinentes para que los receptores de asistencia social ahorren una ocasionales para cubrir los parte de sus beneficios en la cuenta asociada, y hacer hincapié gastos básicos en la movilización hacia el ahorro a través de capacitación sobre conocimientos financieros para dichos beneficiarios (mediano plazo). Fondos limitados para la Fomentar una cultura del ƒƒImpulsar campañas de sensibilización sobre la necesidad de jubilación y otros aconte- ahorro para la jubilación y aumentar el ahorro voluntario para la jubilación a través de cimientos de la vida previ- otros eventos previsibles de canales de entretenimiento y otros medios (mediano plazo). sibles: el 28% de quienes la vida ƒƒInstar a las instituciones públicas y privadas que proporcionan tienen menos de 60 años educación financiera a que preparen programas centrados en tiene planes para cubrir en “momentos propicios”, como la jubilación u otros hitos de la vida su totalidad los gastos de la (comienzo de la educación superior o nacimiento de un niño) tercera edad (mediano plazo). (Continua en la siguiente página) xx Resumen CUADRO E.1  RECOMENDACIONES PARA FOMENTAR MEJORAS EN LA ADMINISTRACIÓN DEL DINERO Y LA PLANIFICACIÓN FINANCIERA Y REDUCIR LA VULNERABILIDAD EN MÉXICO (continuación) OBJETIVO DE LAS INSTRUMENTO O PROGRAMA DE POLÍTICAS DESAFÍO PRINCIPAL POLÍTICAS (Y MARCO CRONOLÓGICO RECOMENDADO) Decisiones sobre productos financieros y conocimientos financieros formales Brechas persistentes en la Continuar construyendo la ƒƒAmpliar el alcance de los servicios de depósitos respaldando inclusión financiera: el 49% infraestructura financiera regulaciones que permitan a las cooperativas financieras y las no usa actualmente ningún para ampliar la oferta de instituciones de microfinanzas reguladas que reciben depósitos producto financiero (formal productos regulados actuar como corresponsales bancarios en zonas rurales y margi- o informal) como medio de nales (corto plazo) ahorro o crédito ƒƒAmpliar el alcance de las operaciones realizadas a través de un agente bancario promoviendo la justificación comercial de las cuentas de depósito de bajo riesgo y servicios adicionales tales como los microseguros (mediano plazo) ƒƒCrear una red de pagos móviles más sólida mejorando la regula- ción que respalda la interoperabilidad entre distintos operadores de redes móviles y promoviendo modelos de negocios con capacidad de transformación (como los esquemas de puntos de venta móviles) (mediano plazo) ƒƒAmpliar los programas que tengan buenas perspectivas de res- paldar la aplicación de los pagos móviles en zonas rurales, como la experiencia piloto de Telecomm en Oaxaca (corto plazo) ƒƒLos bancos de desarrollo estatales podrían poner en marcha un programa para respaldar los vínculos entre fuentes formales e informales de ahorro y crédito, como en el caso de las tandas y los bancos (mediano plazo) ƒƒLas autoridades mexicanas podrían establecer reglas más espe- cíficas para promover el uso de las cuentas bancarias básicas (mediano plazo) El nivel limitado de cono- Respaldar actividades de ƒƒLas autoridades mexicanas podrían establecer un marco de polí- cimientos financieros educación financiera defi- tica sobre educación financiera que abarque la totalidad de pro- formales obstaculiza la nidas y oportunas que lle- gramas existentes e incorpore las pruebas positivas y negativas toma de decisiones sobre guen a todos los segmentos del impacto de la educación (corto plazo) productos financieros: solo de la población para que ƒƒLas autoridades mexicanas podrían considerar la inclusión de el 37% de los encuestados utilicen los servicios finan- módulos sobre finanzas en los planes escolares y el aprendizaje podía calcular una tasa de cieros formales de manera experiencial, que implica que los miembros del hogar parti- interés simple responsable cipen en las tareas para maximizar los efectos de repercusión (mediano plazo) ƒƒContinuar recopilando y analizando datos para fortalecer la base empírica de las políticas relativas a la capacidad financiera, por ejemplo, a través de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) (mediano plazo) (Continua en la siguiente página) xxi CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO E.1  RECOMENDACIONES PARA FOMENTAR MEJORAS EN LA ADMINISTRACIÓN DEL DINERO Y LA PLANIFICACIÓN FINANCIERA Y REDUCIR LA VULNERABILIDAD EN MÉXICO (continuación) OBJETIVO DE LAS INSTRUMENTO O PROGRAMA DE POLÍTICAS DESAFÍO PRINCIPAL POLÍTICAS (Y MARCO CRONOLÓGICO RECOMENDADO) Quienes usan principal- Respaldar las intervenciones ƒƒLas autoridades mexicanas y otras partes interesadas podrían mente los productos finan- sobre protección del consu- ampliar la participación en los medios masivos de comunicación cieros formales, incluso midor que ayuden a mitigar (por ejemplo: telenovelas, programas de radio) para divulgar los de corresponsales los efectos de contar con mensajes claros relacionados con las capacidades financieras bancarios, son personas conocimientos financieros (corto plazo) con elevadas capacidades limitados ƒƒLas autoridades mexicanas podrían solicitar a las instituciones financieras o grandes cono- financieras reguladas que incorporen investigaciones sobre cimientos financieros buenas prácticas de divulgación y fijación de precios para los consumidores de servicios financieros; estas medidas podrían promover el uso de productos financieros formales por parte de los segmentos de la población con menos conocimientos (mediano plazo) ƒƒFormular regulaciones sobre la conducta del mercado que rijan las operaciones bancarias realizadas fuera de la infraestructura bancaria tradicional (mediano plazo) xxii I CAPÍTULO 1 ntroducción 1.1 CONTEXTO En la última década, el panorama financiero de México se ha visto alterado por un marcado aumento de la disponibilidad de productos y servicios financieros para el consumidor. Para ampliar el alcance y estimular la competencia, las autoridades banca- rias de México han respaldado cambios jurídicos para permitir la participación de bancos especializados. Esto ha facilitado la creación de bancos respaldados por comer- cios como el Banco Azteca y el Banco Walmart, que tienen una fuerte presencia física en todo el país. Las leyes que establecían un marco habilitante para que terceros, como las tiendas de barrio o las farmacias, prestaran servicios bancarios (corresponsales) y abrieran cuentas bancarias gestionables a través de los teléfonos móviles se promul- garon en 2009 y 2010, respectivamente; en conjunto, esta legislación aumenta la acce- sibilidad y la conveniencia de los servicios financieros en otros lugares además de los centros urbanos de tamaño mediano. En octubre de 2012, un 60% de los 2,456 munici- pios de México contaba con una sucursal o un corresponsal bancarios, en comparación con el 36% registrado en junio de 2009 (CNBV, 2009). El uso de las tarjetas de crédito también se ha ampliado considerablemente. En consecuencia, los consumidores mexi- canos se enfrentan a una serie de decisiones financieras sobre créditos, ahorro, inver- siones y seguros que son más complejas que en décadas anteriores. Ante la ampliación del acceso al financiamiento, la capacidad de tomar decisiones financieras acertadas y usar productos financieros de manera responsable se ha convertido en un elemento clave. Si los consumidores tienen aptitudes para tomar decisiones financieras, logran mayor bienestar individual y familiar, especialmente en hogares que son vulnerables a las alteraciones económicas, como las pérdidas de ingreso. Cuando los recursos se vuelven limitados, los efectos de tomar decisiones menos adecuadas pueden ser más graves. Después de la crisis financiera mundial, los conocimientos financieros y la protección del consumidor son temas que han captado la atención tanto en México como en el resto del mundo. La promoción de la inclusión y la educación financieras con responsabilidad es una de las máximas prioridades del Gobierno mexicano. De hecho, en 2006, el Gobierno determinó específicamente que la educación financiera para la población mexicana 1 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO sería una prioridad. En 2008, se creó dentro de la CNBV una unidad dedicada exclusi- vamente a respaldar la inclusión financiera. En 2009 y 2010, las modificaciones de la Ley para la Transparencia y el Ordenamiento de los Servicios Financieros ampliaron la capacidad normativa y de supervisión de la CONDUSEF, con el objetivo de ayudar a eliminar prácticas abusivas en los préstamos. El Gobierno estableció dos órganos de coordinación en 2011 para ampliar la educación financiera y la inclusión financiera en México. El Comité de Educación Financiera (CEF), presidido por el Secretario de Hacienda y Crédito Público, se creó como consejo de coor- dinación y consulta para el sector público y otras partes interesadas en el desarrollo de la educación financiera (incluidos la CONDUSEF, los bancos estatales y las instituciones financieras públicas). El CEF se encarga de diseñar e implementar la Estrategia Nacional de Educación Financiera. El Consejo Nacional de Inclusión Financiera (CONAIF) se creó como órgano de consulta, asesoría y coordinación entre los órganos internos de regula- ción financiera y para supervisar la política nacional sobre inclusión financiera. En el ámbito internacional, México ha adoptado un papel de liderazgo en la promoción de la inclusión financiera. Fue miembro fundador de la Alianza para la Inclusión Finan- ciera (AFI), cuyo directorio también encabeza el presidente de la CNBV. La inclusión financiera fue una prioridad clave establecida por México cuando el país presidió el G-20 en 2012. En este contexto, México ha trabajado con la Alianza Mundial para la Inclusión Financiera y la Red Internacional de Educación Financiera (INFE). La prioridad asignada por el país a estas cuestiones condujo al encargo del presente estudio sobre las capa- cidades financieras, realizado por el Banco Mundial, el primero de su tipo en México. Acelerar la inclusión financiera responsable de los pobres es una parte importante del objetivo del Banco Mundial de promover la prosperidad compartida en México. Un número creciente de instituciones promueven programas de educación finan- ciera entre distintos públicos. En un mapa de las iniciativas de educación finan- ciera (Heimann y Sainz, 2009), se identificaron 53 programas nacionales dirigidos a distintos segmentos, como estudiantes, docentes, amas de casa, empresarios y trabajadores migrantes. Las iniciativas eran responsabilidad de distintas instituciones financieras, organizaciones públicas y organizaciones no gubernamentales (ONGs), pero en muchos casos carecían de un análisis de diagnóstico de mercado preciso. 1.2 JUSTIFICACIÓN DE ESTE INFORME La CNBV y la CONDUSEF solicitaron apoyo del Banco Mundial para preparar y realizar una encuesta representativa nacional sobre las capacidades financieras. Este instru- mento se preparó e implementó con el apoyo del Fondo Fiduciario de Rusia para la Capacitación y la Educación Financieras, como parte de un programa mundial (recuadro 1.1). Se llevó a cabo una etapa inicial de investigaciones cualitativas en las 2 CAPÍTULO 1.  INTRODUCCIÓN RECUADRO 1.1  DATOS DE LA ENCUESTA SOBE CAPACIDADES Y CONOCIMIENTOS FINANCIEROS QUE SE PRESENTAN EN ESTE INFORME Mediante la encuesta sobre las capacidades financieras en México, llevada a cabo por la CONDUSEF, la CNBV y el Banco Mundial, se recolectó una amplia variedad de información relativa al comportamiento y los conocimientos financieros. Los datos incluyen características sociodemográficas, prácticas de administración diaria del dinero, planificación para eventos futuros, uso de productos/servicios financieros y decisiones conexas, y conocimientos financieros. En la encuesta se usaron tanto preguntas objetivas como actitudinales. La encuesta de México de 2012 abarcó una muestra representativa a nivel nacional de 2,022 adultos. Podían participar en la encuesta las personas de más de 18 años que tomaran decisiones financieras por su grupo familiar y/o por ellos mismos. Los participantes se seleccionaron aleatoriamente de cada hogar elegido que reunía las características necesarias mediante el método de la tabla de Kish. Las personas seleccionadas para la encuesta se sometieron a una entrevista personal en su hogar con empleados de la empresa de encuestas Ipsos Bimsa durante julio y agosto de 2012. Se aplicó un diseño de encuesta probabilístico y por estadios múltiples, lo que significa que cada persona admisible tenía la misma posibilidad de ser elegida. Como base de referencia se utilizó el Registro Federal de Electores. La población de la muestra se estratificó por zonas urbanas y rurales (en esta última categoría se incluyeron los municipios con menos de 15 000 habitantes), y se utilizaron las localidades (unidades pequeñas de enumeración censal) como unidad primaria de muestreo. La distribución de la muestra, tanto en zonas rurales como urbanas, se realizó de acuerdo con la proporción del peso de las localidades respecto de la población total, con ajustes que otorgan una mayor representación a las zonas urbanas, que contienen a una proporción más grande de la población. El margen de error estimado de la muestra es de ±3% con un nivel de confianza del 95%. Se construyeron y aplicaron ponderaciones muestrales en el análisis de este informe. Se dispone de datos comparables de una serie de países de ingreso bajo y mediano. Las preguntas de la encuesta fueron preparadas por el Fondo Fiduciario de Rusia para la Capacitación y la Educación Financieras, que facilitó la recolección de datos similares utilizando metodologías comparables en otros seis países: Armenia, Colombia, Líbano, Nigeria, Turquía y Uruguay. El cuestionario de México se adaptó para incluir preguntas adicionales sobre conocimientos financieros a partir del estudio de la Red Internacional de Educación Financiera de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (INFE-OCDE) y preguntas sobre el uso de los programas del Gobierno que no formaban parte del núcleo básico sobre capacidades financieras. En esta encuesta de 2012 se recopilaron datos de adultos de todas las regiones de México, con una amplia variedad de características sociodemográficas. Del total de encuestados, algo más de la mitad (53%) eran mujeres. Se logró la distribución total de edad de la población adulta de más de 18 años. Las estadísticas resumidas de los factores sociodemográficos seleccionados se presentan en el cuadro A.1 del apéndice A. seis regiones geográficas de México, en una variedad de entornos urbanos y rurales. Esto incluyó 13 grupos de trabajo, que se reunieron en octubre de 2010, y 50 entrevistas exhaustivas realizadas desde abril hasta junio de 2011. Estas investigaciones cualitativas, y las que se realizaron en diversos países de ingreso bajo y mediano de todo el mundo, se utilizaron para preparar un cuestionario amplio sobre capacidades financieras que se aplicó inicialmente en el estado de Puebla en noviembre de 2011 y luego, en forma general, a 2,022 mexicanos adultos de todo el país en junio y julio de 2012 (gráfico 1.1). 3 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO 1.1  ALCANCE DE LA ENCUESTA SOBRE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS DE MÉXICO Sonora Baja Chihuahua California Coahuila de Zaragoza Baja Nuevo California Sur Sinaloa Leon Durango Zacatecas Tamaulipas San Luis Nayarit Potosí Querétaro de Arteaga Guana- Tlaxcala Aguascalientes juato Yucatan Hidalgo Jalisco Veracruz-Llave Michoacán México Quintana de Ocampo Roo Colima Puebla Campeche Tabasco Distrito Federal Guerrero Oaxaca Morelos Chiapas Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: Estados encuestados, en color naranja; el resto, en gris. Si bien México tiene gran cantidad de datos disponibles sobre inclusión financiera, este informe es el primer estudio representativo a nivel nacional en el que se deta- llan el comportamiento, las actitudes y los conocimientos que componen las capa- cidades financieras. Otros estudios nacionales que complementan la labor son la Encuesta sobre Cultura Financiera (Banamex-UNAM, 2008), la Encuesta Nacional de Finanzas y Competitividad de las Empresas (ENAFIN) realizada en 2011 por Banxico, el Banco Interamericano de Desarrollo y la CNBV; y la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) realizada en 2012 por la CNBV y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Además, en 2012 comenzó el proyecto de Financial Diaries, que mantiene un registro cualitativo de las actitudes financieras de las personas pobres. Algunas bases de datos mundiales que se actualizan anualmente, como Global Findex del Banco Mundial, la encuesta del Fondo Monetario Internacional sobre acceso al financiamiento y los datos de la encuesta de empresas del Banco Mundial también ofrecen información complementaria sobre la inclusión financiera. 4 CAPÍTULO 1.  INTRODUCCIÓN Este informe tiene cuatro objetivos: „„ proporcionar pruebas empíricas para comprender los comportamientos, las actitudes y los conocimientos financieros de la población mexicana; „„ respaldar el diseño de políticas públicas para mejorar los conocimientos sobre los servicios financieros y su calidad; „„ detectar vulnerabilidades y deficiencias en segmentos específicos de la pobla- ción para mejorar y orientar las políticas e intervenciones públicas hacia los aspectos más urgentes; „„ ofrecer una base de comparación internacional. 1.3 ¿QUÉ SON LAS CAPACIDADES FINANCIERAS? El término “capacidades financieras” hace referencia a un concepto más amplio que el de “conocimientos financieros”. Si bien la definición específica varía de un estudio a otro, los conocimientos financieros suelen ser los saberes y aptitudes para tomar decisiones financieras clave. En los estudios se tiende a medir los conocimientos financieros a partir de preguntas que evalúan el manejo de conceptos financieros — como el valor del dinero en el tiempo (inflación), tasa de interés, interés compuesto y diversificación del riesgo—, que son necesarios para tomar decisiones financieras importantes (Huston, 2010; Lusardi y Mitchell, 2011; Xu y Zia, 2012). Las capacidades financieras incluyen el comportamiento y las actitudes de una persona en relación con sus finanzas. Los enfoques pueden ser diferentes, pero en la definición de capacidades financieras se reconoce que el conocimiento por sí solo es necesario pero no es suficiente para tomar decisiones financieras adecuadas y para acceder a productos/servicios financieros y utilizarlos responsablemente. El análisis de las capacidades financieras que se aplicó inicialmente en el Reino Unido se centraba en cuatro esferas: administración del dinero, planificación, selección de productos e información (Atkinson y cols., 2006). En un estudio hecho en los Estados Unidos (Lusardi, 2011), se medían las capacidades financieras de los ciudadanos en cuatro aspectos: capacidad para cubrir totalmente los gastos del mes, planificación, administración de los productos financieros, y conocimientos financieros y toma de decisiones. En el informe se describen las capacidades de México en relación con la administración diaria del dinero, la planificación y la selección de los productos/servi- cios financieros, pero también se analizan los niveles de conocimientos financieros y la compleja relación entre capacidades, conocimientos e inclusión financieros. Algunos elementos de las capacidades financieras —especialmente los conoci- mientos financieros— se relacionan con distintos resultados del comportamiento. Los comportamientos asociados con los conocimientos financieros se han anali- 5 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO zado en diversas publicaciones hasta la fecha. En estudios sobre los Estados Unidos (Lusardi y Mitchell, 2009), Italia (Fornero y Monticone, 2011) y Japón (Sekita, 2011), se observa que quienes poseen un nivel inferior de conocimientos financieros tienen menos probabilidades de planificar su jubilación. Asimismo, es menos probable que elijan fondos de pensión con comisiones más bajas (Hastings y Tejeda-Ashton, 2008). También existen vínculos entre los conocimientos financieros y el endeudamiento. Lusardi y Tufano (2009) observan que las personas con menos conocimientos sobre manejo de deudas suelen realizar operaciones que implican altos costos, lo que magnifica la carga de la deuda y acrecienta el costo de endeudamiento. Quienes no tienen en claro los conceptos también informan de cargas de deuda excesivas o reconocen que no son capaces de definir el estado de sus deudas. Aunque, hasta el momento, existen menos pruebas al respecto, las actitudes y las preferencias también se consideran elementos importantes de las capacidades financieras. Mandell y Klein (2007) han encontrado evidencias que respaldan que la motivación es un factor importante para mejorar los conocimientos financieros de los encuestados. Los resultados de este informe facilitarán las deliberaciones sobre el mejor modo de incrementar las capacidades financieras y reforzar las aptitudes para que las personas administren sus finanzas en México. Las intervenciones educativas (a través de escuelas, instituciones financieras y los medios masivos de comunicación) son las estrategias más mencionadas, pero las capacidades financieras dan lugar a un enfoque más integral que contempla comportamientos y actitudes para ayudar a las personas a tomar mejores decisiones en relación con los productos y servicios que tienen a su alcance. En este informe se describe una medición de referencia de las capacidades finan- cieras de la población mexicana adulta y se destacan los principales resultados de la primera encuesta nacional de 2,022 mexicanos mayores de 18 años. En el capítulo 2 se describen los principales resultados sobre administración diaria del dinero y los comportamientos y actitudes relativos a la planificación financiera. En el capítulo 3 se analizan las decisiones relativas al uso de productos financieros y el nivel de conocimientos financieros. En el capítulo 4 se resumen los principales comporta- mientos y actitudes, traducidos en calificaciones sobre capacidades financieras, lo que facilita la creación de perfiles y las comparaciones entre distintos segmentos de la población. En el capítulo 5 se presentan comparaciones internacionales. En el capítulo 6 se estudia la relación entre las capacidades financieras, los conocimientos financieros y la inclusión financiera. En el capítulo 7 se ofrecen recomendaciones de política en relación con los principales desafíos en materia de capacidades finan- cieras planteados en el documento. 6 A CAPÍTULO 2 dministración diaria del dinero y planificación financiera E n este capítulo se analizan las actitudes y los comportamientos relacionados con la participación en la toma de decisiones financieras, la planificación presupues- taria y el seguimiento del uso del dinero, la búsqueda del equilibrio entre ingresos y egresos para cubrir los gastos del mes, el ahorro y la planificación financiera a largo plazo. Los resultados de la encuesta muestran que el 91% de los adultos mexicanos participa en las decisiones sobre gastos del hogar. La mayoría de los administradores financieros de los hogares son mujeres (el 54%), aunque su contribución al ingreso familiar sea menor que la de los hombres. En la mayoría de los hogares, la adminis- tración diaria del dinero y los procesos de planificación son imprecisos. Menos de la mitad del total de hogares (41%) planifica el presupuesto regularmente y apenas un 20% controla los gastos en forma rigurosa. Muchos hogares mexicanos sufren dificultades financieras: el 70% informa de insuficiencia de ingresos —habitual u ocasional— para cubrir gastos básicos, como alimentación y vivienda. La mayoría de los mexicanos no ha tomado recaudos para hacer frente a gastos importantes, ya sean previstos (como la matrícula escolar o una boda) o imprevistos (como la pérdida del trabajo o un accidente). Casi dos tercios de los encuestados manifiestan una orientación al presente más que al futuro. La planificación para la vejez y la jubi- lación también es poco frecuente: menos de un tercio de la población de menos de 60 años informa que ha hecho planes para cubrir sus gastos de la tercera edad. 2.1 CARACTERÍSTICAS DE LOS ENCARGADOS DE LAS DECISIONES FINANCIERAS Del total de adultos encuestados, el 91% participaba activamente en una serie de decisiones sobre gastos del hogar, mientras que el 6% era responsable únicamente de sus gastos personales. El 3% restante se excluyó de la encuesta porque las personas de este grupo informaron que no tomaban decisiones por sí mismos o por el hogar; esto dio lugar a una muestra total de 2,022 personas. Entre las decisiones sobre gastos del hogar más comunes se encontraban la planificación de cómo gastar el dinero, el pago de las cuentas (por ejemplo, el alquiler) y/o la toma de decisiones financieras para el grupo familiar. 7 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO Las mujeres tienen un papel fundamental en los asuntos financieros de un hogar, incluso cuando no son el jefe de familia. Casi la mitad de las mujeres de la muestra informó que no contribuía financieramente al hogar, en comparación con apenas el 12% de los hombres (gráfico 2.1). Sin embargo, las mujeres encuestadas intervenían más que los hombres en las decisiones financieras (cuadro 2.1). Un porcentaje mayori- tario de mujeres dijo que se aseguraba de que se pagaran todos los gastos corrientes del hogar. Algo más de la mitad de las mujeres que tomaban las decisiones financieras se identificaron como parejas o esposas, mientras que el 27% eran jefas de hogar y el resto constituía otro tipo de relación familiar. GRÁFICO 2.1  CONTRIBUCIONES AL PRESUPUESTO DEL HOGAR Y PARTI- CIPACIÓN EN LA TOMA DE DECISIONES FINANCIERAS, POR EDAD Y SEXO Porcentaje 100 80 60 40 20 0 18–24 25–29 30–39 40–49 50–59 60–69 70–79 ≥ 80 Hombres Mujeres Contribuye al presupuesto Participa en la toma de decisiones Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. CUADRO 2.1  FUNCIONES EN LA TOMA DE DECISIONES FINANCIERAS PORCENTAJE QUE TOMA PORCENTAJE QUE TOMA DECISIONES FINANCIERAS DECISIONES FINANCIERAS PORCENTAJE QUE NO TOMA CARACTERÍSTICA DEL HOGAR PERSONALES NINGUNA DECISIÓN Hombres 88 6 6 Mujeres 94 5 1 Edad 18–24 82 17 1 25–46 94 4 2 47–59 91 2 7 ≥ 60 90 3 6 Nivel educativo alcanzado Nivel primario o inferior 94 3 3 Nivel secundario 90 6 3 Educación superior 83 11 6 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: n = 2,090. 8 CAPÍTULO 2.  Administración diaria del dinero y planificación financiera Los pocos adultos que informaron que no tomaban decisiones financieras por el hogar eran principalmente jóvenes (18 a 24 años) y ancianos (60 años o más). Como se muestra en el cuadro 2.1, los adultos jóvenes constituían el grupo más amplio (17%) de quienes informaron ser responsables solo por sus gastos personales. Quienes infor- maron que no tomaban ninguna decisión financiera, especialmente los jóvenes y los ancianos, tenían más tendencia a depender económicamente del jefe del hogar y mani- festaron que no contribuían al presupuesto familiar. 2.2 PLANIFICACIÓN DEL PRESUPUESTO Y SEGUIMIENTO DE GASTOS Si bien cerca del 70% de los adultos dijo que planificaba el modo en que usaba el dinero recibido, el cumplimiento de estos planes era más limitado. Los adultos que planificaban se separaban en dos grupos: los que siempre planificaban y los que solo lo hacían a veces (gráfico 2.2). Mientas que el 61% de los entrevistados informó que se ajustaba a su plan de gastos (aproximadamente un tercio dijo que seguía el plan siempre y más de un cuarto lo mantenía solo a veces), un 9% nunca seguía el plan y un 31% no tenía ningún plan. Solo el 21% de los encuestados afirmó que sus planes eran exactos y no aproximados (gráfico 2.3). Ser mujer, ser habitante de zonas urbanas o tener un ingreso más alto se asociaba con una probabilidad mayor de hacer planes exactos. El 31% de la población encuestada que informó que no hacía ningún plan se caracterizaba por tener un nivel de educación más bajo y empleo informal y vivir en una zona rural. GRÁFICO 2.2  PLANIFICACIÓN Y CUMPLIMIENTO DE LOS PLANES SOBRE EL PRESUPUESTO Siempre A veces Para nada / nunca Planifica el uso del 41% 28% 31% dinero recibido Se ajusta al plan 34% 27% 39% 0 50 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Menos de un cuarto de los encuestados sabía exactamente cuánto había gastado la semana anterior, lo que indica que el nivel de precisión de la administración diaria del dinero es bajo. Aunque el 63% de los entrevistados dijo que sabía de cuánto disponía su grupo familiar para gastos diarios, la mayoría manifestó que este conoci- miento era aproximado y no exacto (gráfico 2.4). Y mientras que el 52% sabía cuánto 9 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO 2.3  PLANIFICACIÓN DEL COMPORTAMIENTO, POR SEXO, UBICACIÓN E INGRESO Porcentaje 80 Hace un plan aproximado Hace un plan exacto 60 40 20 0 Hombres Mujeres Zona Zona Ingreso Ingreso Ingreso Ingreso rural urbana más bajo mediano mediano más alto bajo alto Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. GRÁFICO 2.4  PRECISIÓN EN LA ADMINISTRACIÓN DEL DINERO Porcentaje 60 Sabe los gastos Sabe el monto disponible de la última semana para los gastos actuales 48 41 40 37 33 22 18 20 0 Exactamente Aproximadamente No sabe Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. había gastado en forma personal la semana anterior, solo el 18% lo sabía con exac- titud1. Ser un empleado del sector formal o una personal de ingreso alto se corre- laciona con una mayor posibilidad de controlar el gasto. En lo que concierne a las actitudes, considerarse disciplinado con las cuestiones monetarias se correlaciona con un mayor grado de precisión en la administración del dinero. 1  Estos resultados son similares a los de la primera encuesta sobre cultura financiera (Banamex-UNAM, 2008), en la que el 18% de los encuestados informó que mantenía algún tipo de registro de su ingreso, sus gastos y sus deudas. 10 CAPÍTULO 2.  Administración diaria del dinero y planificación financiera 2.3 CUBRIR TOTALMENTE LOS GASTOS DEL MES: LOGRAR EL EQUILIBRIO ENTRE INGRESOS Y GASTOS Más del 70% de la población encuestada ha experimentado dificultades econó- micas habituales u ocasionales, como no tener suficiente dinero para satisfacer las necesidades básicas. Solo el 29% de los encuestados informó que le sobraba dinero después de cubrir gastos básicos, como los de comida y otros artículos necesarios. Un 20% de la muestra dijo que habitualmente no tenía suficiente para cubrir los gastos básicos y el 51% informó que ocasionalmente se encontraba en esa situación. En el caso de los que se quedaban con fondos después de pagar los gastos básicos, la práctica más común era ahorrar para protegerse de eventos inesperados en el futuro. Las personas de ingresos bajos, los ancianos, los empleados en sectores informales y quienes solo recibieron educación primaria (completa o incompleta) eran espe- cialmente vulnerables ante las dificultades económicas. Un nivel bajo de ingreso y las fluctuaciones estacionales de ingreso eran dos de las razones más mencionadas para justificar la insuficiencia de fondos para cubrir las necesidades básicas. No llama la atención, entonces, que los niveles de ingreso tengan una elevada correlación con las limitaciones para cubrir los gastos (gráfico 2.5). Tener un control escaso o nulo de cuánto dinero se gastó la semana anterior se correlacionaba con no tener suficiente dinero para cubrir las necesidades básicas. GRÁFICO 2.5  INSUFICIENCIA DE DINERO PARA CUBRIR LAS NECESIDADES Periódicamente A veces No Ingreso más alto 18 38 43 Ingreso mediano alto 12 51 36 Ingreso mediano bajo 14 55 31 Ingreso más bajo 28 54 17 0 50 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. El endeudamiento informal era una estrategia de contención habitual para aliviar las dificultades financieras. Prácticamente la mitad de quienes se quedaban sin dinero suficiente mencionaron que pedían prestado a familiares o amigos como solución 11 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO más común, y un 29% de los encuestados informó que estaba endeudado con un amigo o un miembro de la familia. El 30% de los encuestados dijo que habitual u ocasionalmente pedía prestado para comprar alimentos u otros artículos de primera necesidad, y el 43% informó que pedía dinero para saldar deudas (gráfico 2.6). Si las demás variables se mantenían estables, una educación inferior a la de nivel secun- dario y un ingreso bajo se asociaba con una mayor probabilidad de tener que pedir prestado para hacer frente a deudas. El uso de los servicios financieros se analiza más detalladamente en los capítulos 3 y 6. GRÁFICO 2.6  ESTRATEGIAS PARA RESOLVER LA INSUFICIENCIA DE DINERO Periódicamente A veces No Pide prestado para comprar 5 25 70 alimentos y otros artículos básicos Pide prestado para pagar deudas 4 39 57 0 50 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 2.4 PLANIFICACIÓN PARA HACER FRENTE A GASTOS IMPORTANTES PREVISTOS E IMPREVISTOS Menos de la mitad (45%) de los que habían previsto un gasto importante creía que podía afrontarlo. Un 21% de los encuestados había previsto un gasto importante equivalente a un mes de ingreso para el año próximo, como una boda, otro aconteci- miento o la matrícula escolar. De los que pensaban que no podían afrontar los gastos previstos, menos de la mitad había hecho planes para cumplir la obligación. En general, apenas un tercio de los encuestados consideraba que podía financiar un gasto imprevisto importante, mientras que esta proporción se reducía a una cuarta parte de las personas en los grupos de ingreso bajo. Solo el 34% de los encuestados había hecho algún preparativo para un gasto imprevisto equivalente a un mes de ingreso. La percepción sobre la posibilidad de hacer frente a gastos imprevistos aumenta en gran medida junto con el ingreso, como se muestra en el gráfico 2.7. Los empleados del sector formal también demostraron una mayor capacidad que los del sector informal para resolver conmociones inesperadas. Esta vulnerabilidad a las alteraciones genera estrés: el 82% de los entrevistados se preocupaba por la situa- ción, incluidos algunos que sabían que podían hacer frente a este gasto inesperado. 12 CAPÍTULO 2.  Administración diaria del dinero y planificación financiera GRÁFICO 2.7  CAPACIDAD PARA CUBRIR GASTOS IMPORTANTES IMPREVISTOS, POR GRUPO DE INGRESO No los podría No los podría cubrir; No los podría cubrir; Los podría cubrir; no lo pensó pensó en hacer algo hizo algo para planificar cubrir Ingreso más bajo 50 10 16 24 Ingreso mediano bajo 42 10 18 31 Ingreso mediano alto 28 7 19 46 Ingreso más alto 23 6 14 57 0 20 40 60 80 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 2.5 PLANES PARA EL FUTURO DE LOS HIJOS Y LA VEJEZ Prácticamente la mitad de quienes tenían uno o más niños a cargo había hecho planes para encargarse de su educación. De la muestra, el 55% tenía hijos a cargo en el hogar y el número de niños en el hogar no se correlacionaba con estos planes. Los planes de ahorrar dinero para dejarlo como herencia a los hijos eran menos frecuentes: solo el 16% de los encuestados con hijos a cargo había hecho elegido esta opción. Algo menos de un tercio de las personas con niños a cargo no había hecho ningún plan para su futuro; esta proporción era mayor entre las familias de ingreso bajo. Menos de un tercio de la población menor a 60 años tomó recaudos para poder pagar la totalidad de sus gastos de la vejez. Las estrategias más utilizadas por este grupo para cubrir dichos gastos eran acumular ahorros u otros activos financieros o buscar apoyo financiero de la familia; solo el 13% informó que hacía aportes previsionales (ya sea voluntaria u obligatoriamente) a través de su empleador o del Gobierno (gráfico 2.8). Una minoría de los encuestados de menos de 60 años (28%) pensaba que estas estra- tegias servirían para cubrir todos sus gastos de la vejez y un 21% dijo que lograría una cobertura parcial; la mayoría (51%) manifestó que no tenía estrategias para afrontar esos gastos. La ausencia de una estrategia se correlacionaba en gran medida con un nivel de ingreso bajo. Y un porcentaje más alto de quienes estaban empleados en el sector informal no había tomado recaudos para la vejez porque no se beneficiaba del apoyo del Gobierno ni del empleador (gráfico 2.9). En una comparación entre hombres 13 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO 2.8  ESTRATEGIAS APLICADAS PARA CUBRIR LOS GASTOS DE LA VEJEZ Ahorro/otros activos financieros Apoyo de familia/amigos Jubilación del Estado (IMSS/ISSTE) Ingreso comercial Continúa trabajando siempre Más de 60 años Menos de 60 años Pensión del empleador 0 10 20 30 40 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. GRÁFICO 2.9  COBERTURA DE GASTOS DE LA VEJEZ, POR SEXO Y EMPLEO (MENOS DE 60 AÑOS DE EDAD) No tomó previsiones Tomó previsiones; Tomó previsiones; la cobertura no es total la cobertura es total Mujeres 54 21 26 Hombres 50 21 29 Informal 61 16 22 Formal 52 16 32 0 20 40 60 80 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. y mujeres, era mayor el porcentaje de mujeres que no había hecho planes para la vejez; esto refleja, posiblemente, que su participación en la fuerza de trabajo formal es más limitada (aproximadamente una brecha del 5% respecto de los hombres, según datos de 2011 de la Organización Internacional del Trabajo). La gran mayoría de los entre- vistados (87%) mencionó que la capacidad para cubrir los gastos de la vejez es una cuestión preocupante. En un análisis mundial, Lusardi y Mitchell (2011) observan que la planificación para la jubilación es un buen indicador del nivel económico que se gozará 14 CAPÍTULO 2.  Administración diaria del dinero y planificación financiera cuando llegue esa etapa, ya que quienes han calculado cuánto necesitan ahorrar llegan a ese período con tres veces más riqueza que aquellos que no hicieron cálculos. Prácticamente dos tercios de las personas de más de 60 años informaron que no habían tomado suficientes recaudos o no habían planificado nada para la vejez. Buscar apoyo de la familia y los amigos era la estrategia más mencionada por un tercio de la población de más de 60 años; las jubilaciones del Estado eran importantes para casi una cuarta parte de los encuestados de este grupo, seguidas de los ahorros y otros activos (15%) (gráfico 2.8). En otras encuestas (por ejemplo, CNBV/INEGI, 2012) se ha indicado que, si bien la ley exige que todos los trabajadores del sector formal puedan acceder a una jubilación o a una cuenta de ahorro para el retiro, una parte de la pobla- ción no sabía que tenía cuentas individuales de ahorro para este fin. 2.6 ACTITUDES Casi dos tercios de la población indicaron una orientación al presente más que al futuro con respecto al ahorro y la planificación. Quedó demostrado que la impa- ciencia es un factor importante en el comportamiento financiero, especialmente en relación con el ahorro y la jubilación (Hastings y Mitchell, 2010). Más de dos tercios de los encuestados estaban de acuerdo con las afirmaciones referidas a centrar la atención en el tiempo presente (gráfico 2.10). Un nivel de educación e ingreso infe- rior se correlaciona con esta orientación al presente, mientras que ser de mediana edad (a diferencia de ser joven o mayor) se correlaciona con una mayor orientación al futuro (véase el capítulo 4). Esta orientación al presente también tenía correlación con afirmaciones en las que los encuestados se describían como impulsivos. Más de la mitad de los encuestados manifestó que su marco temporal de planifi- cación financiera era menor a un mes. Dos grupos de encuestados con el mismo GRÁFICO 2.10  ACTITUD CON RESPECTO AL FUTURO Muy de acuerdo Parcialmente de acuerdo Parcialmente en desacuerdo Muy en desacuerdo Solo me enfoco en el corto plazo 39 26 16 19 Dios proveerá 47 25 11 16 Vivo más para el presente que para el futuro 46 25 14 15 0 20 40 60 80 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 15 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO porcentaje (27%) informaron que su horizonte de planificación financiera era inferior a una semana o de entre una semana y un mes; un 16% indicó que no realiza ningún tipo de plan financiero para el futuro (gráfico 2.11). Quienes están empleados en el sector formal utilizan horizontes temporales más prolongados, lo mismo que las personas de grupos de ingreso más alto. Un ingreso estable puede facilitar el acceso a productos y servicios; esto, a su vez, simplifica la planificación, como en el caso de las deducciones automáticas para cuentas de ahorro o de jubilación. GRÁFICO 2.11  HORIZONTES DE PLANIFICACIÓN FINANCIERA Porcentaje 100 11 10 10 80 19 17 25 Más de 6 meses 60 25 Mensualmente/menos de 6 meses 27 32 Semanalmente/menos de un mes 40 27 29 Diario/menos de una semana 20 21 Sin planes para el futuro 16 18 10 0 Todos Sector formal Sector informal Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Más de dos tercios de los encuestados expresaron una fuerte orientación al logro de objetivos. La mayoría de los mexicanos se identificó con las preguntas que confirman que trabajan duro para ser los mejores, que tienen muchas aspiraciones y que buscan oportunidades para mejorar su situación (gráfico 2.12). Después de controlar estadísticamente distintos factores socioeconómicos y de ubicación, se llegó a la conclusión de que un ingreso más elevado se correlaciona con mayores probabili- dades de estar de acuerdo con estas tres afirmaciones. GRÁFICO 2.12  ORIENTACIÓN HACIA EL LOGRO DE OBJETIVOS Muy de Parcialmente de Parcialmente en Muy en acuerdo acuerdo desacuerdo desacuerdo Siempre trabajo mucho para estar entre los mejores en lo que hago 66 19 10 5 Tengo mis aspiraciones 72 16 6 6 Siempre busco oportunidades 73 17 6 4 para mejorar mi situación 0 20 40 60 80 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 16 D CAPÍTULO 3 ecisiones sobre servicios y conocimientos financieros E l modo en que las personas eligen productos financieros que se adecuan a sus necesidades y se deciden entre propuestas financieras similares es un aspecto importante de las capacidades financieras. El conocimiento formal de los conceptos financieros clave y la capacidad de realizar operaciones matemáticas en situaciones financieras también son importantes para asegurar el uso responsable de los servi- cios financieros. En este capítulo se ofrece un panorama general del uso de los productos financieros en México y se analiza cómo se toman las decisiones sobre estos productos y el nivel de conocimientos que se requiere para ello. Los datos muestran que el 49% de la población encuestada no utiliza servicios finan- cieros formales ni informales1. Entre quienes los utilizan, las formas más utilizadas son los préstamos informales de familiares o amigos y las cuentas en instituciones financieras. Las personas de bajos ingresos utilizan en gran medida, según sus nece- sidades, las fuentes informales de crédito y ahorro —tandas (asociaciones informales de ahorro y crédito rotativo), casas de empeño, y préstamos de familiares o amigos— para ahorrar anticipándose a situaciones de emergencia y cubrir las fluctuaciones de ingreso, así como para comprar alimentos y otros artículos de primera necesidad. Más del 60% de quienes usan servicios financieros informó que había verificado los términos y condiciones y comparado varios productos antes de tomar la decisión financiera. Sin embargo, solo el 37% de la población encuestada pudo hacer el cálculo de la tasa de interés simple que se requiere para comparar servicios financieros. Cabe señalar que, como se menciona en el cuadro 3.1, en las encuestas financieras reali- zadas en México se definen de distinta manera los servicios financieros. En la encuesta sobre las capacidades financieras, los servicios financieros incluyen tanto los 1  productos financieros formales (por ejemplo, cuentas en instituciones financieras, tarjetas de crédito) como fuentes informales de crédito y ahorro (por ejemplo, préstamos de familiares o amigos, casas de empeño o tandas). 17 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO RECUADRO 3.1  COMPARACIÓN DE DIFERENTES FUENTES DE DATOS SOBRE LA INCLUSIÓN FINANCIERA EN MÉXICO México cuenta con numerosos datos sobre inclusión financiera provenientes de encuestas que se diferencian por el alcance, la definición de los indicadores y la cobertura. En este recuadro se comparan los datos sobre capacidades financieras utilizados en este informe con dos bases de datos adicionales que brindan información complementaria acerca del desarrollo de la inclusión financiera en México: 1) la ENIF, que aborda exhaustivamente el uso de productos financieros y las barreras al uso de estos productos, el uso previsto de las remesas, el acceso a canales financieros y los elementos de las capacidades financieras, la educación financiera y la protección del consumidor, 2) la base de datos sobre la inclusión financiera en el mundo (Global Findex), una encuesta realizada en 148 países de todo el mundo, incluido México, que mide el modo en que los adultos ahorran, se endeudan, hacen pagos y gestionan riesgos. Las tres encuestas abarcan algunos indicadores, lo que permite comparar datos recopilados a través de distintas metodologías y preguntas. Como se muestra en el cuadro que sigue, los datos sobre algunos indicadores son de magnitudes similares, como el uso de seguros en la encuesta sobre las capacidades financieras y Findex, el uso de tarjetas de crédito en las tres encuestas y el uso de préstamos (en su conjunto) en Findex y la ENIF. Los datos sobre otros indicadores, como el uso de cuentas de ahorro formal, difieren en más del 10%. Las diferencias en el fraseo de las preguntas de la encuesta, las metodologías y las poblaciones seleccionadas pueden generar disparidades en los indicadores de inclusión financiera. Por ejemplo, a quienes participaron en la encuesta sobre las capacidades financieras no se les preguntó explícitamente acerca del uso de cuentas para la acreditación del sueldo en el marco de la ENIF, de modo que probablemente menos encuestados las hayan incluido en sus respuestas. Asimismo, en la ENIF los servicios financieros se definen conforme a lo establecido en la legislación mexicana y las tandas y las casas de empeño no se consideran servicios financieros, como en Findex y en la encuesta sobre las capacidades financieras. A pesar de esas diferencias, la triangulación de las tres bases de datos permite a los encargados de formular las políticas obtener una mayor comprensión de la inclusión financiera y abundante información al respecto. ENCUESTA SOBRE LAS CAPACI- CATEGORÍA DADES FINANCIERAS (2012) FINDEX (2011) ENIF (2012) Indicadores ƒƒ Seguros: 7.6% ƒƒ Se pagaban su propio ƒƒ Usurarios de seguros privados: 22% ƒƒ Cuenta en una institución financiera seguro médico: 8.5% ƒƒ Adultos con al menos un producto de formal (por ej., un banco): 14.7% ƒƒ Cuenta en una institu- ahorro formal: 36% ƒƒ Tarjeta de crédito: 13% ción financiera formal: ƒƒ Tarjeta de crédito de un banco: 9% ƒƒ Préstamo personal/de nómina: 9.1% 27.4% ƒƒ Préstamo personal: 3.5% ƒƒ Crédito para la compra de un auto- ƒƒ Tarjeta de crédito: 13% ƒƒ Préstamo de nómina: 2.6% móvil: 3.2% ƒƒ Préstamo de una insti- ƒƒ Préstamo para la compra de un automóvil: 1% ƒƒ Crédito hipotecario: 1.7% tución financiera en el ƒƒ Credito hipotecario: 2% último año: 7.6% Entidad de gestión Banco Mundial, CNBV, CONDUSEF Banco Mundial CNBV, INEGI Número de encuestados 2,022 1,000 6,113 Edad 18+ 15+ 18–70 Número de estados 23 + Distrito Federal 28 + Distrito Federal 31 + Distrito Federal abarcados Muestra Encargados de las decisiones financieras Personas Personas Nota: Estos porcentajes son con respecto al total de personas en cada una de las encuestas. 18 CAPÍTULO 3.  Decisiones sobre servicios y conocimientos financieros 3.1 USO DE LOS SERVICIOS FINANCIEROS De todos los servicios de ahorro y crédito utilizados por la población de México, los más populares eran los préstamos informales y las cuentas en instituciones finan- cieras (gráfico 3.1). Menos de un cuarto de los encuestados (22%) manifestó que recibía préstamos informales de familiares y amigos. Las cuentas en instituciones financieras o la participación en tandas eran los productos de ahorro más utilizados por la población mexicana. El 15% de los encuestados tenía cuenta en una institu- ción financiera, en tanto que el 11% participaba en tandas. Casi la mitad de los encuestados (49%) informó que no utilizaba ningún producto finan- ciero. Apenas alrededor del 10% de la población señaló que utilizaba tarjetas de crédito (13%), préstamos personales y de nómina (9%), productos de seguro (8%), o préstamos de cajas de ahorro (instituciones de ahorro) o casas de empeño (8% y 7%, respecti- vamente); un porcentaje incluso menor (entre el 2% y el 4%) recurría a los préstamos hipotecarios o para la compra de un automóvil, o a las inversiones financieras. GRÁFICO 3.1 USO ACTUAL Y PASADO DE LOS SERVICIOS FINANCIEROS (PORCENTAJE DE LA POBLACIÓN MEXICANA) Préstamo de familiares y amigos Cuenta en una instituciónfinanciera Tarjeta de crédito Tanda Préstamo personal o de nómina Préstamos de caja de ahorro Adquirió productos financieros en los últimos cinco años Seguros Actualmente utiliza productos financieros Préstamod de casas de empeño Inversiones Crédito para la compra de un automóvil Crédito hipotecario 0 5 10 15 20 25 30 35 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 19 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO Dado que las personas usan los servicios financieros a medida que los necesitan, se espera que el uso actual informado sea menor que el registrado en los últimos cinco años. Pero el uso de algunas fuentes financieras —en particular, servicios informales como préstamos de familiares y amigos, tandas y casas de empeño— es incluso más esporádico. El 52% de quienes habían participado en tandas y el 63% de quienes habían recurrido a casas de empeño en los cinco años anteriores manifestó que utilizaba esos servicios. En cambio, los porcentajes son más elevados en el caso de los productos financieros formales, como cuentas bancarias (88%) y tarjetas de crédito (77%). El uso de productos financieros formales (cuentas bancarias, tarjetas de crédito, préstamos personales, hipotecas y seguros) era más común en el caso de los hombres, los habitantes de zonas urbanas, las personas de altos ingresos y los empleados del sector formal. Las mujeres, los habitantes de zonas rurales y los grupos de bajos ingresos utilizaban más habitualmente préstamos de cajas de ahorro y fuentes informales de crédito y ahorro, como las tandas y los préstamos de familiares o amigos. Un mayor porcentaje de hombres que de mujeres usaba todos los servicios financieros, con excepción de las tandas. El grupo de ingresos más altos (con ingresos mensuales superiores a 5,000 pesos) usaba muchos más productos financieros formales (sobre todo tarjetas de crédito) que los otros grupos de ingresos, mientras que los grupos de menores ingresos estaban más habituados a pedir prestado a familiares o amigos. En general, los encuestados que dijeron que no usaban ningún producto financiero pertenecían a grupos de bajos ingresos y estaban empleados en el sector formal. Los trabajadores del sector informal solían utilizar con más frecuencia servicios informales, como las tandas y las casas de empeño, y eran más propensos a pedir prestado a familiares y amigos. A la hora de ahorrar, las situaciones imprevistas fueron la motivación más mencio- nada, independientemente del mecanismo elegido. Al menos la mitad de las personas que ahorraban en cuentas bancarias, a través de las tandas o sin la asis- tencia de un intermediario financiero informó que lo hacía para estar preparada ante situaciones imprevistas (cuadro 3.1). Entre las motivaciones menos frecuentes se mencionaron las de compensar fluctuaciones de ingreso, comprar alimentos y artículos de primera necesidad y cubrir gastos importantes conocidos o previstos. Quienes alegaron esas motivaciones fueron, en mayor medida, ahorristas que parti- cipaban en tandas y los que prescindían de intermediarios financieros, en relación con los que utilizan cuentas bancarias. Quienes recibían cobertura de seguro social por estar empleados en el Gobierno o el sector formal evidenciaron un uso mucho mayor de los productos de ahorro que quienes reciben algún tipo de asistencia social del Gobierno (cuadro 3.2). Apenas más de la mitad de los afiliados al Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS, el programa de seguro social para los empleados del sector privado y sus familias) y 20 CAPÍTULO 3.  Decisiones sobre servicios y conocimientos financieros CUADRO 3.1  RAZONES PARA AHORRAR, POR ENCUESTADO QUE AHORRA (%) ENCUESTADOS QUE AHORRABAN A TRAVÉS DE SIN INTERMEDIARIO RAZÓN EN BANCOS TANDAS FINANCIERO Situaciones imprevistas, emergencias, honorarios médicos 64.2 49.0 54.3 Fluctuaciones de ingreso 15.8 21.7 22.8 Alimentos y otros artículos necesarios 13.5 17.9 19.0 Un gasto importante conocido 8.7 12.5 10.0 Una compra planificada para el futuro 9.5 5.0 3.0 Ningún propósito específico 12.3 6.4 5.0 Inversión en una empresa o activos 6.2 6.2 5.1 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. CUADRO 3.2 USO DE LOS PROGRAMAS SOCIALES Y PRODUCTOS/SERVICIOS FINANCIEROS, POR ENCUESTADO (%) PRODUCTO/SERVICIO DE AHORRO PRODUCTO/SERVICIO DE PRÉSTAMO INSTITU- PRÉSTAMOS DE CAJA DE FAMI- PROGRAMAS PORCENTAJE DE CIONES FINAN- PERSO- DE LIARES O SOCIALES ENCUESTADOS CIERAS TANDAS NINGUNO NALES AHORRO AMIGOS NINGUNO Asistencia social 19 18 38 49 7 10 29 85 Seguro Popular 25 16 36 51 6 11 25 85 IMSS 7 51 51 35 24 8 11 74 ISSSTE 19 81 38 40 15 7 17 81 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. el 81% de los afiliados al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Traba- jadores del Estado (ISSSTE, el programa de seguro social para los trabajadores del Gobierno federal y sus familias) ahorraba en bancos. En cambio, menos del 20% de quienes reciben beneficios sociales o de los afiliados al Seguro Popular (un programa del Ministerio de Salud que presta servicios de salud a las personas que trabajan en la economía informal) tenían cuentas de ahorro en una institución financiera formal. Incluso utilizan los productos de ahorro informales, como las tandas, en menor medida que los beneficiarios del IMSS y el ISSSTE. En cambio, estos últimos utilizan productos de créditos del sector formal en una proporción mucho mayor que quienes reciben asistencia social y los participantes del programa Seguro Popular. Los usuarios de los servicios de ahorro formales eran menos propensos a quedarse sin dinero suficiente. El 25% de los usuarios de bancos informó que alguna vez le había faltado dinero para alimentos y otras necesidades, en comparación con el 55% de quienes 21 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO recurrían a las tandas y el 30% de quienes prescindían de intermediarios financieros. El 80% de los que no tenían suficiente dinero no se asociaba con ningún intermediario finan- ciero. A modo de explicación, los que usaban servicios de ahorro formales tenían un nivel de ingresos más elevado, lo que contribuía a su relativa estabilidad financiera. Si bien más del 60% de quienes solicitaban financiamiento consideraba que podía asumir mayores niveles de deuda, quienes recurrían al crédito bancario eran más propensos a sentirse sobreendeudados. Más del 60% de quienes recibían préstamos personales, préstamos de caja de ahorro o préstamos de familiares y amigos se creía en condiciones se seguir endeudándose (cuadro 3.3). Un mayor porcentaje de personas que habían solicitado préstamos de caja de ahorro y habían pedido pres- tado a familiares y amigos consideraba que había llegado al límite de su capacidad de endeudamiento (30% y 28%, respectivamente), en relación con quienes solici- taban financiamiento a bancos. Una mayor proporción de estas personas que no han recurrido a bancos siente que se ha endeudado en exceso (9% y 10%, respectiva- mente), respecto de quienes solicitan préstamos de nómina o personales a bancos. Las mujeres eran ligeramente más propensas que los hombres a informar que se habían endeudado por encima de sus posibilidades; por su parte, los deudores de grupos de altos ingresos y los residentes de zonas rurales mostraban una fuerte tendencia a pensar que podían seguir endeudándose. CUADRO 3.3  PERCEPCIÓN DE LA CAPACIDAD DE ENDEUDAMIENTO, POR ENCUESTADO QUE AHORRA (%) FUENTE DE CRÉDITO PRÉSTAMO PERSONAL O DE CAJA DE FAMILIARES PERCEPCIÓN NÓMINA (DE UN BANCO) AHORRO O AMIGOS TODOS Podrían endeudarse más 68.1 60.6 62.2 63.1 Han llegado al límite de endeudamiento y 28.5 30.1 27.8 26.1 no pueden endeudarse más Se han endeudado por encima de su límite 3.4 9.3 10.0 9.2 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 3.2 TOMA DE DECISIONES SOBRE SERVICIOS DE CRÉDITO Y AHORRO La mayoría de los encuestados que utilizaban servicios financieros manifestó que habían sido prudentes al tomar decisiones sobre estos. Los resultados de la encuesta demuestran que más de la mitad de los encuestados que tenían productos financieros buscaba información y consideraba muchas alternativas antes de tomar decisiones. Asimismo, al considerar las alternativas de productos financieros, el 62% de los 22 CAPÍTULO 3.  Decisiones sobre servicios y conocimientos financieros encuestados informó que conocía exactamente los términos y condiciones del caso (cuadro 3.4). Sin embargo, estos resultados deben analizarse con cierto escepticismo, puesto que quienes recurren a las tandas, cuyos términos y condiciones no se prestan a la comparación, y a las casas de empeño, conocidas por las elevadas tasas de interés que cobran, también manifiestan, con similar grado de precisión, que han verificado los términos y condiciones. Un tercio de los encuestados señaló que no hacía muchos esfuerzos para obtener información relacionada con los productos. Esto genera dudas sobre la mejor forma de adaptar los productos financieros a las necesidades del consumidor, debido al nivel de sofisticación cada vez mayor que presentan. Las personas que utilizaban productos financieros formales, tenían empleo formal y pertenecían a grupos de altos ingresos manifestaron que dedicaban más tiempo al análisis relacionado con las decisiones sobre productos financieros. La mitad de los entrevistados declaró que siempre había buscado asesoramiento antes de tomar una decisión financiera importante. Como se muestra en el cuadro 3.4, en comparación con las personas que recurrían a las tandas, era mayor el porcentaje de personas con cuentas en instituciones financieras que buscaban información, consideraban alternativas, elegían el mejor producto y verificaban las condiciones antes de contratar el servicio. Asimismo, es 15% mayor el porcentaje de empleados del sector formal, con respecto a los del sector informal, que buscaba información antes de tomar decisiones sobre productos financieros y un 25% más de personas del grupo de ingresos más elevados buscaba información, respecto de las de ingresos más bajos. El género no parece ser un factor que influya en el rigor con que las personas toman decisiones financieras. CUADRO 3.4  DILIGENCIA DEL ENCUESTADO A LA HORA DE TOMAR DECISIONES RELACIONADAS CON LOS SERVICIOS, POR INSTRUMENTO DE CRÉDITO O AHORRO (%) TODOS LOS CUENTA EN UNA PRÉSTAMOS PERSONALES ACTITUD A LA HORA DE SERVICIOS INSTITUCIÓN DE INSTITUCIONES CASAS DE TOMAR DECISIONES FINANCIEROS FINANCIERA FINANCIERAS FORMALES TANDA EMPEÑO Buscó información de distintas 57 71 66 53 52 fuentes Consideró varias alternativas 62 76 71 60 60 antes de decidir Buscó hasta encontrar el 68 76 74 68 68 producto más adecuado a sus necesidades Verificó los términos y 68 81 76 72 64 condiciones antes de celebrar el contrato Verificó en detalle los términos y 62 66 51 61 60 condiciones Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 23 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO 3.3 CONOCIMIENTOS FINANCIEROS Los conocimientos financieros son la habilidad para comprender conceptos técnicos que complementan la capacidad financiera (Lusardi y Mitchell, 2011). Los conoci- mientos financieros que tiene una persona pueden ayudarla a tomar decisiones acertadas sobre ahorro, endeudamiento e inversión. Los conocimientos financieros se analizan separados de los demás componentes de la capacidad financiera para poder comparar resultados entre países, dado que no todos los países que parti- cipan en el proyecto sobre capacidades financieras utilizaron el mismo conjunto de preguntas para medir los conocimientos financieros. En México, la encuesta contenía ocho preguntas sobre conocimientos financieros, que abordaban desde cuestiones relativamente básicas para evaluar la capacidad de realizar operaciones matemá- ticas (división) hasta preguntas más complejas sobre diversificación de la cartera. La mayoría de los encuestados respondió correctamente las preguntas sobre mate- mática básica, la definición de inflación y el concepto de interés de un préstamo. En el gráfico 3.2 se muestra la distribución de las respuestas a preguntas que medían los niveles de conocimientos financieros. Más del 80% de los encuestados contestó correctamente una pregunta sobre matemática básica (división) y una pregunta sobre el concepto de interés que se paga por un préstamo. Casi el 60% comprendió el concepto del valor del dinero en el tiempo (es decir, que una cantidad de dinero de hoy no tendrá la misma capacidad de compra en el futuro). GRÁFICO 3.2  DISTRIBUCIÓN DE RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS SOBRE CONOCIMIENTOS FINANCIEROS Correctas No sabe Incorrectas Concepto de interés pagado 83 12 5 sobre un préstamo División básica 81 8 11 Valor del dinero en el tiempo 58 9 33 Definición de inflación 56 18 26 Riesgo y rendimiento 50 23 27 Cálculo/interés simple 37 33 30 Diversificación de la cartera 31 23 46 Interés compuesto 31 29 40 0 20 40 60 80 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 24 CAPÍTULO 3.  Decisiones sobre servicios y conocimientos financieros Sin embargo, la mayoría de los mexicanos encuestados no fue capaz de calcular una tasa de interés ni estaba familiarizada con el concepto de diversificación de la cartera. La mayoría de los encuestados mostró una marcada incapacidad para hacer cálculos básicos: solo el 37% logró calcular una tasa de interés simple, mientras que apenas el 31% comprendía el concepto de interés compuesto2. Este resultado coincide en gran medida con las autoevaluaciones de los encuestados, en las que tan solo el 14% de ellos se consideró muy capaz de calcular tasas de interés. La dificultad para calcular tasas de interés sugiere que a la mayoría de las personas le resultó más difícil calcular un porcentaje que hacer una división. Esta falta de comprensión pone en duda la capacidad de muchos mexicanos para tomar deci- siones integrales sobre productos financieros. La mayoría de los mexicanos encuestados respondió correctamente al menos la mitad de las preguntas sobre conocimientos financieros. Como se muestra en el gráfico 3.3, el 30% de los encuestados respondió correctamente hasta tres preguntas. Cabe señalar, sin embargo, que calcular un puntaje sobre conocimientos financieros utilizando simplemente la suma de respuestas correctas es dar por sentado que todas las preguntas son equivalentes, cuando en realidad algunas podrían considerarse más importantes o más complejas que otras. Los habitantes de zonas urbanas y las personas con educación superior (nivel secundario completo) e ingresos más altos (más de 3,000 pesos por mes) tenían más probabilidades de responder correctamente la mayoría de las preguntas. GRÁFICO 3.3  DISTRIBUCIÓN DE RESPUESTAS CORRECTAS A LAS PREGUNTAS SOBRE CONOCIMIENTOS FINANCIEROS Porcentaje de encuestados 20 15 Puntajes bajos Puntajes altos 10 5 0 0 1 2 3 4 5 6 7 8 Numero de preguntas correctamente contestadas Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 2  En un estudio de varios países, Atkinson y Messy (2012) registraron que los participantes respondían correctamente la respuesta de opciones múltiples sobre el interés compuesto solo si también realizaban de manera adecuada el cálculo de una tasa de interés simple. Si se aplica esta última modalidad, se obtiene que el 31% de los mexicanos respondió correctamente la pregunta sobre interés compuesto. 25 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO La mitad de la población encuestada manifestó que nunca se le había enseñado a administrar su dinero. En la mayoría de las escuelas de México no se enseña educa- ción financiera sistemáticamente y los padres eran la fuente más común mencio- nada por quienes habían recibido algún tipo de orientación para administrar su dinero (gráfico 3.4). GRÁFICO 3.4  DISTRIBUCIÓN DE LAS FUENTES DE INFORMACIÓN EN LA ADMINISTRACIÓN DEL DINERO La madre El padre Un maestro Otro miembro de la familia Otros Nadie 0 10 20 30 40 50 60 Porcentaje de encuestados Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: Los resultados no totalizan 100, puesto que los encuestados podían elegir varias respuestas. Si bien estos resultados fueron similares, independientemente del estatus del jefe de hogar, estaban correlacionados con la edad y la educación: a medida que avanzaba la edad, disminuía el número de personas que afirmaba haber recibido algún tipo de instrucción financiera. Cuanto mayor era el nivel educativo, menor era la tendencia de los encuestados a afirmar que les habían enseñado a administrar el dinero. Los hombres eran quienes más mencionaban que sus padres les habían enseñado a administrar el dinero; las respuestas de las mujeres, en cambio, se repartían equili- bradamente entre los dos progenitores. 26 C CAPÍTULO 4 omparación de las capacidades financieras E n este capítulo se examinan los siete componentes de las capacidades finan- cieras relacionados con los comportamientos y los tres componentes relacio- nados con las actitudes, lo que permite identificar los aspectos positivos y negativos en los distintos segmentos de la población mexicana. Los componentes de mayor peso en México son la orientación al logro de objetivos y vivir de acuerdo a las propias posibilidades. La educación, los ingresos y la participación en la gestión de las finanzas del hogar se asocian positivamente a la mayoría de los componentes de las capacidades financieras. Estos 10 componentes se utilizan para elaborar el perfil de cinco grupos bien definidos de capacidades financieras que se observan en la población mexicana y destacar así la diversidad de los desafíos que enfrentan grupos específicos. El desempeño del grupo más grande, que abarca un tercio de la pobla- ción encuestada, es particularmente sólido en aspectos referidos a la administración diaria del dinero y la planificación presupuestaria, y poco satisfactorio a la hora de ahorrar y hacer previsiones para gastos imprevistos y objetivos a largo plazo. En otro análisis de la variación de las capacidades financieras por región, las personas que viven en el noreste y noroeste en general mostraron una capacidad relativa- mente mayor. La comparación entre los jóvenes y los adultos muestra que, si bien los jóvenes poseen más conocimientos financieros formales, también manifestaron tener cierta dificultad para controlar el gasto excesivo en relación con el resto de la comunidad. 4.1 COMPONENTES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS La capacidad financiera es un concepto multidimensional que consta de 10 compo- nentes bien diferenciados. Estos componentes, que abarcan una variedad de compor- tamientos y actitudes relacionadas con el manejo diario del dinero, la planificación y la elección de productos financieros, surgen de un informe del Fondo Fiduciario de Rusia para la Capacitación y la Educación Financieras, en el que se resumen los resultados de siete países que participaron en el proyecto de medición de la capacidad financiera de ese fondo (Kempson, Perotti y Scott, 2013). Se estimaron a través de un análisis 27 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO de componentes principales1 y representan una manera uniforme de medir sistemá- ticamente la dimensión de la capacidad financiera en los siete países que abarca el proyecto. No todos estos países recopilan información sobre los conocimientos finan- cieros, de modo que ese concepto se analiza por separado. Los 10 componentes de las capacidades financieras se detallan en el cuadro 4.1. CUADRO 4.1  COMPONENTES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS COMPONENTE DESCRIPCIÓN DE LA MEDIDA Componentes relacionados con la conducta Planificación del presupuesto Si las personas planificaban cómo gastar su dinero, con qué frecuencia y con cuánta precisión planificaban el presupuesto, y con qué frecuencia respetaban sus planes. Vivir de acuerdo a las propias Si las personas se quedaban con poco dinero debido al gasto excesivo, con qué frecuencia posibilidades pedían prestado y si lo hacían en medida razonable. Seguimiento de los gastos Con cuánta precisión sabían los entrevistados cuánto dinero gastaban y de cuánto disponían para gastar. Uso de la información Combinación que resulta de obtener información y asesoramiento antes de tomar decisiones financieras importantes, aprender de los errores de otras personas en temas financieros y ser disciplinado. No gastar en exceso Con qué frecuencia el entrevistado compró productos que excedían sus posibilidades o dio prioridad a productos innecesarios por sobre los esenciales. Cobertura de gastos imprevistos El entrevistado tenía capacidad para cubrir gastos imprevistos o mostraba su preocupación por el tema. Ahorro Con qué frecuencia las personas trataban de ahorrar para el futuro, ahorrar regularmente (aunque fuera un poco), de modo de contar con fondos para emergencias y gastos imprevistos. Componentes relacionados con la actitud Actitud respecto del futuro Orientación al futuro, y no al presente. Comportamiento no impulsivo La persona actúa sin reflexionar, se reconoce a sí misma como impulsiva, habla sin pensar. Orientación al logro de objetivos Busca oportunidades constantemente, tiene aspiraciones, se esfuerza para ser el mejor. Se calcula una puntuación media para cada componente en una escala de 0 (menos capaz) a 100 (más capaz). Los componentes de las capacidades financieras en los El análisis de componentes principales es un método de reducción de datos que utiliza la 1  estructura de correlación de las variables en un conjunto de datos para encontrar el menor número posible de combinaciones lineales de esas variables que mejor sinteticen la infor- mación que proporcionan los datos (véase el apéndice A). Una vez que se identifica una combinación de variables para un mismo componente, puede calcularse un solo puntaje por componente para cada encuestado a partir de un promedio ponderado de las variables de la combinación. Las ponderaciones son los coeficientes obtenidos mediante análisis de compo- nentes principales. El objetivo consiste en agregar variables que permitan medir diferentes matices del mismo componente a fin de obtener una única medida para dicho componente, lo que facilita el análisis y las comparaciones internacionales. 28 CAPÍTULO 4.  Comparación de las capacidades financieras que México obtuvo la puntuación media más alta se relacionaban con la orientación al logro de objetivos y vivir según las propias posibilidades (gráfico 4.1). Se obtu- vieron puntajes más bajos en actividades relacionadas con la planificación del presu- puesto, el seguimiento de los gastos y la actitud respecto del futuro. GRÁFICO 4.1  PUNTUACIONES MEDIAS DE LOS COMPONENTES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO Orientación al logro de objetivos Vivir de acuerdo a las propias posibilidades Uso de la información No gastar en exceso Cobertura de gastos imprevistos Compartamiento no impulsivo Ahorro Planificación del presupuesto Seguimiento de los gastos Actitud respecto del futuro 0 20 40 60 80 100 Puntaciones medias Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. La educación, los ingresos y la participación en las decisiones sobre gastos del hogar se asocian positivamente a capacidades financieras más elevadas en la mayoría de los componentes. En el análisis de regresión que se presenta en el cuadro D.1 del apéndice D se señala cómo varían las capacidades financieras según el sexo, la edad, la educación, el empleo, los ingresos y la ubicación. En promedio, las mujeres obtuvieron puntajes mucho más altos que los hombres en los componentes referidos a la planificación presupuestaria y el ahorro. Quienes habían completado la educación terciaria obtuvieron puntajes mucho más elevados que quienes solo habían finalizado la secundaria en lo que respecta a planificación del presupuesto, actitud respecto del futuro y comportamiento no impulsivo, aunque se mostraron más inclinados a realizar gastos innecesarios. Los grupos de altos ingresos en general obtuvieron mejores puntajes que los de bajos ingresos en casi todos los componentes de las capacidades financieras. La participación en las deci- siones sobre los gastos del hogar (en lugar de ser responsable únicamente por los gastos personales) se asocia fuertemente a mayores puntajes en planificación del presupuesto, seguimiento de los gastos, uso de la información, cobertura de gastos imprevistos y ahorro. 29 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO 4.2 PERFILES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO Se identificaron cinco grupos distintos de capacidades financieras en la población mexicana (cuadro 4.2). Esto se realizó a partir del análisis de conglomerados (en el apéndice B se detalla la metodología; Kempson, Perotti, y Scott 2013) para ayudar a los responsables de las políticas en México y otras partes interesadas a comprender la diversidad de los desafíos que enfrentan grupos específicos de la población. El análisis de conglomerados se utilizó en particular debido a que permite comparar la distribución de los puntajes en los 10 componentes de las capacidades financieras. La identificación de los grupos podría eventualmente facilitar intervenciones más CUADRO 4.2  CONGLOMERADOS DE CAPACIDADES FINANCIERAS EN LA POBLACIÓN CONGLOMERADO CONDUCTA Y ACTITUDES CARACTERÍSTICAS 1. Administradores Puntajes inferiores a la media en todos los compo- El 83% es de bajos ingresos; muchos perciben de dinero poco nentes de las capacidades financieras, salvo dos (no ingresos variables. Son más propensos a no estar experimentados gastar en exceso y vivir de acuerdo a las propias empleados formalmente. Muchos tienen bajo nivel (~22% de los posibilidades). Puntajes muy bajos en preparación de educativo (el 47% completó, como máximo, la pri- encuestados) presupuestos y seguimiento de las finanzas; bajos maria). Pese al número de personas, superior a la niveles de inclusión social. Visión a corto plazo, en media, de 60 años o más (18%), el grupo registra la términos relativos, de las finanzas y limitada preocu- proporción más baja de personas que se describen pación por la vejez. a sí mismos como jubiladas (3%). 2. Administradores Puntajes elevados en los componentes referidos a la El 80% es de bajos ingresos; suelen ser de edad de dinero con administración diaria del dinero (especialmente la pla- mediana (entre 41 y 60 años) y tener hijos a cargo; la visión a corto nificación del presupuesto); desempeño poco satisfac- mayoría (70%) vive en zonas urbanas. La mitad (49%) plazo (~33% de torio a la hora de ahorrar y hacer planes para el futuro, usaba productos o servicios financieros. encuestados) en particular para afrontar gastos imprevistos. 3. Gastadores Más impulsivos y propensos a gastar en exceso. Tal Incluye el mayor porcentaje de jóvenes; menos jóvenes impulsivos vez por ello registran los puntajes más bajos como probabilidades de tener un hijo a cargo; prevalece (~12% de los grupo en lo que respecta a vivir según las propias el nivel de educación secundaria o inferior. Ingresos encuestados) posibilidades y la puntuación más alta en cobertura medianos, pero el mayor nivel de empleo informal. de gastos imprevistos. Buen desempeño a la hora de controlar los gastos. 4. Personas Muestran poca capacidad para preparar presu- Ingresos altos en relación con otros conglomerados; pudientes pero puestos, pero logran vivir de acuerdo a sus posibili- el grupo con la mayor proporción de personas que desorganizadas dades; son los menos impulsivos y los más orientados tienen al menos el secundario completo; alto por- (~9% de los al futuro, en relación con los otros grupos que ahorra centaje en las zonas rurales. encuestados) y planifica para gastos imprevistos. Registran el nivel más alto de inclusión social. 5. Administradores Puntajes superiores a la media en todos los compo- Ingresos estables en la mitad de la distribución; de dinero y nentes, excepto en seguimiento del gasto. Excelente los niveles de educación más altos; el porcentaje planificadores desempeño a la hora de planificar el presupuesto, más alto de personas que viven con una pareja; el prudentes vivir de acuerdo a las propias posibilidades y buscar porcentaje más alto de personas con hijos a cargo; (~25% de los información; son quienes que más planifican para el viven mayormente en zonas urbanas. encuestados) futuro y la vejez y los más orientados al logro de obje- tivos, en relación con otros grupos. 30 CAPÍTULO 4.  Comparación de las capacidades financieras específicas destinadas a mejorar las capacidades financieras. En el gráfico B.1 del apéndice B se presentan las puntuaciones medias correspondientes a cada grupo en los 10 componentes de la capacidad financiera. Más de la mitad de la población se ubica en los conglomerados 1 (administradores de dinero poco experimentados) y 2 (administradores de dinero con visión a corto plazo). Estos dos grupos registraron los puntajes agregados más bajos en capacidades finan- cieras. Sus integrantes mostraban, en promedio, un nivel educativo inferior al de los demás conglomerados y los niveles más bajos de inclusión financiera. Los administra- dores de dinero menos experimentados, en particular, tuvieron un desempeño poco satisfactorio en todos los componentes de las capacidades financieras, excepto uno (véase el gráfico B.1). Este conglomerado contenía el mayor porcentaje de personas de bajos ingresos, muchas de las cuales vive en zonas rurales, y registró el puntaje medio más bajo en conocimientos financieros. Asimismo, registró el nivel más bajo de inclu- sión financiera, dado que solo el 37% de sus integrantes tenían productos financieros. Los administradores de dinero con visión a corto plazo (conglomerado 2) se desta- caron especialmente en aspectos relacionados con la administración diaria del dinero y la preparación de presupuestos, pero mostraron deficiencias a la hora de ahorrar y hacer planes para el futuro, sobre todo para gastos imprevistos. Este grupo registraba el segundo nivel de ingresos más bajo (el 80% de sus integrantes estaba ubicado en los dos cuartiles de ingresos más bajos), pero la segunda puntuación promedio más alta en conocimientos financieros, y la mayoría (62%) había completado la educación secundaria. Comparado con los administradores de dinero poco experimentados (conglomerado 1), este conglomerado era más propenso a tener productos finan- cieros y a estar empleado en el sector formal. Comparado con los otros grupos, mostraba una mayor propensión a ser de edad mediana y tener hijos a cargo. El 45% restante de la población encuestada se encuadraba en tres grupos: gasta- dores jóvenes, personas pudientes pero desorganizadas y administradores de dinero y planificadores prudentes. Los administradores de dinero prudentes constituían el más grande de los tres grupos y mostraron un desempeño superior a la media en todos los componentes, excepto en el que se refiere a vivir según las propias posi- bilidades. Este grupo registra el mayor porcentaje de personas que viven en pareja (73%), con ingresos estables (no sujetos a variación estacional) (36%) y con nivel terciario completo (16%) (gráfico 4.2). El conglomerado de los gastadores jóvenes impulsivos (conglomerado 3) registraron el porcentaje más alto de empleo formal (40%), pero puntajes bajos en lo que se refiere a vivir según las propias posibilidades y, por ende, puntajes altos en el componente referido a la cobertura de gastos imprevistos como mecanismo de afrontamiento. El grupo restante, constituido por personas pudientes pero desorganizadas, registró los ingresos más altos respecto de otros grupos y el mayor nivel de inclusión financiera, ya que el 61% de sus inte- 31 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO 4.2  TAMAÑO DE LOS CONGLOMERADOS, POR LOGRO EDUCATIVO E INCLUSIÓN FINANCIERA Porcentaje de personas que tiene productos financieros 100 80 189 60 279 507 40 606 441 20 0 0 5 10 15 20 Porcentaje de personas con nivel de educación terciaria completo Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: El tamaño de los círculos refleja los porcentajes. grantes declaró tener productos financieros. No obstante, los puntajes que obtuvo en planificación del presupuesto y planificación para la vejez fueron comparables a la puntuación obtenida por los administradores de dinero no experimentados. En el gráfico 4.3 se muestra cómo los conglomerados varían en función de los factores sociodemográficos más importantes. GRÁFICO 4.3  CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DE CADA CONGLOMERADO Grupo 1 Grupo 2 Grupo 3 Grupo 4 Grupo 5 Mujeres 49 57 53 53 52 De 18 a 30 años 32 28 37 26 26 Educación primaria como máximo 47 38 25 36 30 Carece de empleo formal 88 78 60 71 71 No tiene productos financieros 63 51 41 39 43 Tiene hijos a cargo 49 57 54 52 57 Es responsable de elegir los productos 50 64 79 64 75 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: El tamaño de los círculos refleja los porcentajes. 32 CAPÍTULO 4.  Comparación de las capacidades financieras 4.3 VARIACIÓN REGIONAL DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS Comprender las variaciones regionales de los comportamientos y los conocimientos financieros puede ayudar a las autoridades a orientar mejor las intervenciones para mejorar las capacidades financieras. Los niveles de desarrollo de las regiones de México varían2. En el cuadro 4.3 figuran los puntajes de las capacidades financieras, por región, y el gráfico 4.4 muestra la distribución de dichos puntajes en distintos mapas. CUADRO 4.3  PUNTUACIONES PROMEDIO DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS EN FUNCIÓN DE LOS COMPORTAMIENTOS Y CONOCIMIENTOS, POR REGIÓN CENTRO SUR/ CENTRO OESTE NORESTE NOROESTE SURESTE Componente de las capacidades financieras referido al comportamiento Planificación del presupuesto 56 47 50 54 52 Vivir de acuerdo a las propias posibilidades 77 78 80 78 78 Seguimiento de los gastos 39 41 47 45 36 No gastar en exceso 62 72 67 86 71 Cobertura de gastos imprevistos 64 59 72 52 65 Obtención de información 69 76 65 75 70 Ahorro 52 51 56 79 56 Conocimientos financieros 4.2 4.4 4.0 3.0 4.4 Fuente: CNBV, INEGI y Estadísticas Financieras Internacionales (IFS). Nota: Las capacidades financieras se evalúan con puntajes que van del 0 al 100. La puntuación de los conocimientos financieros va de 1 a 8 respuestas correctas. Los promedios regionales solo tienen en cuenta los estados incluidos en la encuesta. Las regiones Noreste y la Noroeste registran puntajes relativamente más elevados en la mayoría de los componentes de las capacidades financieras. La región Noreste comprende estados de altos ingresos, como el de Nuevo León, y estados que lindan con Estados Unidos, como el de Chihuahua. Asimismo, muestra una gestión financiera sólida en lo que respecta a vivir según las propias posibilidades y cubrir gastos impre- vistos; registra una solidez relativa, respecto de las demás regiones, en lo que respecta 2  En esta sección, las regiones geográficas de los estados encuestados se definieron siguiendo las definiciones utilizadas en el Plan Nacional de Desarrollo de México: Región Central: Distrito Federal, Queretaro, Morelos, estado de México, Hidalgo, Tlaxcala; región Centro Oeste: Colima, Jalisco, Guanajuato, San Luis Potosí, Michoacan, Zacatecas; región Noreste: Nuevo León, Tamau- lipas; región Sur/Sudeste: Tabasco, Quintana Roo, Puebla, Veracruz, Guerrero, Oaxaca, Chiapas. Cabe señalar que la encuesta sobre las capacidades financieras no abarcó todos los estados de México. 33 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO 4.4  DISTRIBUCIÓN DE LAS PUNTUACIONES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS EN FUNCIÓN DE LOS COMPORTAMIENTOS Y CONOCIMIENTOS, POR REGIÓN a. Planificación del presupuesto b. Vivir de acuerdo a las propias posibilidades Noro- Noro- este este Nordeste Nordeste Centro Centro Centro Centro Oeste Oeste 53–56 Sur/Sureste 78–81 Sur/Sureste 51–52 78–78 48–50 77–78 47–48 76–77 c. Seguimiento de los gastos d. Uso de la información Noro- Noro- este este Nordeste Nordeste Centro Centro Centro Centro Oeste Oeste 41–47 Sur/Sureste 72–87 Sur/Sureste 40–41 67–72 37–39 63–67 36–37 62–63 e. No gastar en exceso f. Cobertura de gastos imprevistos Noro- Noro- este este Nordeste Nordeste Centro Centro Centro Centro Oeste Oeste 65—73 Sur/Sureste 59—65 56–79 Sur/Sureste 53–56 52—59 52–53 51—52 51–52 g. Ahorro h. Conocimientos financieros Noro- Noro- este este Nordeste Nordeste Centro Centro Centro Centro Oeste Oeste 70–77 Sur/Sureste 4.25–4.5 Sur/Sureste 69–70 4.0–4.25 65–69 3.0–4.0 64–65 2.75–3.0 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 34 CAPÍTULO 4.  Comparación de las capacidades financieras al control de los gastos, pero obtuvo puntajes bajos en uso de la información. La región Noroeste obtuvo puntajes altos en componentes referidos a la prudencia en el gasto, el ahorro y la obtención de información, pero registra una puntuación baja en cober- tura de gastos imprevistos y conocimientos financieros. Las regiones Sur/Sureste, Centro Oeste y Central muestran un desempeño dispar en los componentes de las capacidades financieras. La región Sur/Sureste, que incluye a los estados más pobres de Chiapas y Oaxaca, registra niveles bajos en el seguimiento de los gastos. La región Centro Oeste también registra puntajes relativamente bajos en planificación presupuestaria y ahorro, y una puntuación más alta en obtención de información y conocimientos financieros. La región Central, con sus distintos niveles de desarrollo (incluye el Distrito Federal, de gran riqueza, y los estados pobres de Hidalgo y Tlaxcala), obtuvo puntajes relativamente altos en planificación del presupuesto y una puntuación más baja en lo que se refiere a vivir según las propias posibilidades y no gastar en exceso. 4.4 LAS CAPACIDADES FINANCIERAS DE LOS JÓVENES En esta sección se compara la población joven con la población adulta en tres aspectos clave de las capacidades financieras (conocimientos, actitudes y comporta- mientos) con el fin de proporcionar información significativa sobre una población que suele ser objeto de iniciativas de educación financiera. En el apéndice C se expone en mayor detalle el análisis presentado en esta sección. A los efectos de este análisis, se entiende por “joven” la persona que tienen entre 18 y 24. La población adulta se divide en dos categorías: los que tienen entre 25 y 59 años (por lo general, el rango de edad de quienes participan activamente en la fuerza de trabajo) y los de 60 años o más (que aquí se consideran adultos mayores). Los jóvenes mexicanos tienen, en promedio, un nivel educativo más alto que el de las cohortes de mayor edad. La gran mayoría (84%) completó la educación secundaria, en comparación con tan solo el 59% del grupo de 25 a 59 años y el 18% del grupo de 60 años y más. Apenas el 6% de los mexicanos de entre 18 y 24 años afirma haber completado la educación terciaria, en comparación con el 18% de los que tienen entre 25 y 29, lo que indica que una fracción significativa aún se encuentra en el nivel de educación terciaria. Esto se ve confirmado por el hecho de que el 22% de los encuestados jóvenes en México son estudiantes, en comparación con tan solo el 2% de los que tienen entre 25 y 29 años. En general, los jóvenes mexicanos son menos proclives a contribuir al hogar y a participar en las decisiones financieras de la familia que los adultos. La mayoría de los jóvenes (59%) de entre 18 y 24 años aún vive con sus padres, en comparación 35 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO con tan solo el 32% de los que integran la cohorte de entre 25 y 29. El 51% de los jóvenes mexicanos contribuye al presupuesto del hogar y el 55% participa en las decisiones familiares. El 37% indica que son los responsables “principales” de sus gastos personales, en comparación con el 66% de los adultos de entre 25 y 59 y el 60% de los de 60 años y más. Una minoría de los jóvenes (11%) afirma que son jefes de hogar y responsables de los gastos tanto personales como familiares. Los jóvenes mexicanos registran puntajes ligeramente más elevados que los adultos en la mayoría de las medidas de conocimientos financieros, pero dicha ventaja no resulta significativa a los fines estadísticos. Si bien los jóvenes obtienen puntua- ciones más altas en algunas de las preguntas sobre conocimientos financieros que el grupo de más de 60 años y más, sus conocimientos son en gran medida equipa- rables a los de los adultos de entre 25 y 59 años (gráfico 4.5). El 85% de los jóvenes mexicanos puede hacer una división sencilla, en comparación con el 81% de los adultos de entre 25 y 59 años y con apenas el 74% de los adultos de 60 años y más. En los grupos de menor edad es más común que se entienda cómo disminuye el valor del dinero en el tiempo debido a la inflación: el 58% tanto de los jóvenes como de los adultos de entre 25 y 59 años señaló que entendía el valor del dinero en el tiempo (inflación), en comparación con apenas el 46% de los adultos de 60 años y más. También es más común que los grupos de menor edad estén familiarizados con el concepto de diversificación de la cartera, con respecto al grupo de adultos de 60 años y más. Esto no sorprende, dado que el nivel educativo promedio de los jóvenes es superior al de los grupos de mayor edad. GRÁFICO 4.5  CONOCIMIENTOS FINANCIEROS, POR GRUPO ETARIO Diversificación de la cartera 18–24 Riesgo y rendimiento 25–59 Definición de inflación ≥ 60 Interés compuesto Principal más intereses Tasa de interés Valor del dinero en el tiempo División básica 0 20 40 60 80 100 Porcentaje de respuestas correctas Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 36 CAPÍTULO 4.  Comparación de las capacidades financieras Las respuestas a preguntas sobre preferencias temporales indican que los jóvenes se preocupan más por el futuro que los grupos de mayor edad. Las actitudes cons- tituyen un nexo decisivo entre los conocimientos y las conductas. Al analizar las capacidades financieras de los jóvenes, resulta particularmente interesante observar cómo estos dan mayor prioridad a las necesidades de corto plazo, qué nivel de impulsividad tienen y en qué medida están orientados al logro de objetivos. Solo el 37% de los jóvenes está completamente de acuerdo con la afirmación “Dios proveerá”, en comparación con el 45% de los adultos (gráfico 4.6) y el 63% de los adultos mayores (gráfico 4.6). Sin embargo, esta preocupación al parecer no se traduce en planificación para necesidades de más largo plazo, como lo indica el nivel de respuestas positivas a las preguntas sobre la tendencia a vivir para el presente y enfocarse en el corto plazo. GRÁFICO 4.6  PORCENTAJE QUE ESTÁ DE ACUERDO CON CADA AFIRMACIÓN, POR GRUPO ETARIO Totalmente Parcialmente Parcialmente Totalmente de acuerdo de acuerdo en desacuerdo en desacuerdo 18–24 “Dios proveerá” 25–59 ≥ 60 18–24 “Vivo más para el presente que para 25–59 el futuro” ≥ 60 18–24 “Solo me enfoco 25–59 en el corto plazo” ≥ 60 0 20 40 60 80 100 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Los jóvenes suelen obtener puntajes más bajos en relación con los comportamientos financieros, pero las diferencias no son significativas en todos los casos (gráfico 4.7). La principal diferencia entre los grupos de jóvenes y los de mayor edad reside en el gasto excesivo. A los jóvenes mexicanos les resulta considerablemente más difícil no gastar en exceso que a los grupos de mayor edad. En los indicadores de gestión financiera adecuada (como los referidos a planificar el presupuesto y poder cubrir gastos imprevistos), el puntaje de los jóvenes es considerablemente inferior al de 37 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO 4.7  PUNTAJES PROMEDIO EN LOS COMPONENTES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS REFERIDOS AL COMPORTAMIENTO No gastar en exceso Seguimiento de los gastos Vivir de acuerdo a las propias posibilidades Planificación del presupuesto Uso de la información Ahorro 18–24 25–59 Cobertura de ≥ 60 gastos imprevistos 0 20 40 60 80 100 Puntaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. los adultos de entre 25 y 59 años, y es equiparable al de los de 60 años y más. Hay dos factores que pueden contribuir a que se obtengan puntajes más bajos en estos aspectos del comportamiento financiero. Uno de ellos es que los jóvenes simple- mente afrontan mayores gastos que los adultos, puesto que intentan establecerse profesionalmente y fundar un hogar, por lo que sus gastos sencillamente superan sus ingresos. El otro es que, como en la mayoría de los casos viven con sus padres, tienen cierto margen para amortiguar las consecuencias del gasto excesivo y la gestión financiera deficiente, y son menos propensos a controlar el gasto. Pocos jóvenes (y adultos) sostienen que hacen el seguimiento activo de sus gastos. El puntaje medio de los jóvenes en seguimiento de los gastos es 35, lo que indica que tienen apenas un conocimiento aproximado de la cantidad de dinero disponible y de la manera en que gastan los fondos. Sin embargo, los jóvenes en su mayoría señalan que viven de acuerdo a sus posibilidades. El puntaje promedio de los jóvenes en el componente referido a esa tendencia es 77, lo que indica tasas de endeuda- miento y de préstamos a corto plazo bastante bajas. 38 CAPÍTULO 4.  Comparación de las capacidades financieras La mayoría de los jóvenes encuestados obtuvo y utilizó información antes de tomar una decisión financiera. El puntaje promedio de los jóvenes mexicanos en uso de la información es 68, mientras que las poblaciones de adultos y adultos mayores regis- tran un 72. Si bien los jóvenes y los adultos muestran comportamientos similares en relación con el ahorro, los adultos tienen un mejor desempeño en lo que se refiere a la capacidad de cubrir gastos imprevistos. Es mucho menor el porcentaje de jóvenes mexicanos que ha obtenido información antes de elegir productos financieros en los últimos cinco años. 39 C CAPÍTULO 5 omparaciones internacionales L a encuesta sobre las capacidades financieras utilizada en México también se aplicó en otros seis países que fueron seleccionados para recibir financiamiento para implementar esta primera serie de encuestas sobre capacidades financieras. México fue seleccionado por el Fondo Fiduciario de Rusia para la Capacitación y la Educación Financieras de entre un conjunto de países candidatos (Armenia, Colombia, Líbano, Nigeria, Turquía y Uruguay) para participar en el proceso de elaborar y llevar a cabo esas encuestas. Estos países utilizados como comparadores estaban más relacionados entre sí por el interés en implementar un nuevo instru- mento de encuesta que en las condiciones socioeconómicas comunes o similares. En este capítulo se comparan las capacidades financieras de los mexicanos encues- tados con las de los encuestados en esos otros países. Las comparaciones internacionales se basan en los 10 componentes de las capaci- dades financieras, antes que una sola puntuación de las capacidades financieras. El análisis reveló que no era posible elaborar una puntuación única basada en índices para las capacidades financieras combinando puntajes referidos a los 10 compo- nentes1. En el gráfico 5.1 se comparan las respuestas de los mexicanos con las proporcionadas en otros países (cuando estén disponibles) sobre cada componente. En comparación con los encuestados de los otros seis países, los encuestados mexi- canos mostraron un comportamiento más sólido en relación con el ahorro. Obtu- vieron, en promedio, puntajes más altos en un conjunto de preguntas orientadas a medir la tendencia a ahorrar y a destinar fondos para gastos importantes impre- vistos. La puntuación promedio en otros componentes, como el seguimiento de los gastos, el uso de la información y la orientación al logro de objetivos, fue similar a la registrada en los demás países encuestados. Sin embargo, la planificación del presupuesto y la actitud respecto del futuro son menos notorias en México que en otros países. El puntaje de México en planificación del presupuesto (que permite determinar en qué medida las personas organizan el uso del dinero y si se atienen a lo planificado) fue menor que en cualquiera de los 1  Para obtener una explicación más detallada, véase la nota al pie 1 del capítulo 4. 41 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO 5.1  COMPARACIÓN ENTRE PAÍSES DE LOS COMPONENTES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS a. Planificación del presupuesto b. Vivir de acuerdo a las propias posibilidades 100 100 80 80 60 60 40 40 20 20 0 0 Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay c. Seguimiento de los gastos d. Uso de la información 70 100 60 80 50 40 60 30 40 20 20 10 0 0 Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay e. No gastar en exceso f. Cobertura de gastos imprevistos 100 80 80 60 60 40 40 20 20 0 0 Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay g. Ahorro h. Actitud respecto del futuro 60 60 40 40 20 20 0 0 Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay i. Compartamiento no impulsivo j. Orientación al logro de objetivos 80 100 80 60 60 40 40 20 20 0 0 Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay Armenia Colombia Líbano México Nigeria Turquía Uruguay Fuente: Kempson, Perotti y Scott 2013. 42 CAPÍTULO 5.  COMPARACIONES INTERNACIONALES otros donde se obtuvieron datos (excepto en Líbano). Asimismo, los mexicanos expre- saron una mayor inclinación a manejarse con un horizonte a corto plazo en relación con otros países, salvo Armenia. Los comparadores de América Latina, Colombia y Uruguay, si bien obtuvieron puntajes más altos que México en relación con la actitud respecto del futuro, también manifestaron cierta inclinación al corto plazo. Los países sobre los cuales se dispone de datos referidos a las capacidades finan- cieras muestran condiciones socioeconómicas diversas, sobre todo en relación con los logros educativos, la estructura del empleo y los flujos de ingresos. Como se muestra en el cuadro 5.1, algunas características eran similares en todos los países, como la mayor proporción de mujeres en las muestras estadísticas (53% en México). Otras características, como el porcentaje de encuestados que había completado la educación secundaria variaba ampliamente: el 20% en Nigeria, el 55% en México y el 69% en Armenia, lo que ponía de manifiesto importantes diferencias en cuanto a los logros educativos. Tanto México como Colombia registraron menores porcentajes de encuestados que consideraban que sus ingresos eran estables (30%). Asimismo, se dispone de datos comparables a nivel internacional relacionados con una variedad de preguntas sobre conocimientos financieros. No todos los países incluyeron preguntas de ese tipo en la encuesta sobre las capacidades financieras, de modo que el desempeño de México se compara con una muestra de países que participaron en el estudio piloto de la INFE‑OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), de donde se extrajeron las preguntas sobre temas financieros a las que aquí se hace referencia. El cuadro 5.2 muestra el desempeño de ocho países que participaron en el estudio mencionado. Las comparaciones internacionales de conocimientos financieros deben realizarse con cierta prudencia. La estructura de muestras para México incluyó solamente a personas que toman decisiones financieras, lo que puede sesgar los resultados en relación con los países de la INFE-OCDE, que contaron con muestras representativas a nivel nacional sin restricciones a la admisibilidad. Asimismo, algunos países modifi- caron el cuestionario, como Perú, que eliminó una pregunta sobre tasas de interés. En cuanto a los conocimientos financieros formales, el nivel de respuestas correctas de los mexicanos a las preguntas relacionadas con operaciones matemáticas, el valor del dinero en el tiempo y el interés que se paga sobre un préstamo coincidió con el de otros países encuestados. Sin embargo, México registró un menor porcen- taje de respuestas correctas a las preguntas sobre el cálculo de la tasa de interés simple que todos los demás países, con excepción de Colombia. El menor nivel de conocimientos sobre riesgo y rendimiento y de conciencia de los beneficios de la diversificación de la cartera fue menor que el de otros países. El nivel de conoci- mientos sobre tasas de interés compuesto fue inferior al de todos los demás países encuestados, excepto Colombia y Perú. Asimismo, México registró un porcentaje 43 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO 5.1  RESUMEN ESTADÍSTICO DE VARIABLES SOCIODEMOGRÁFICAS CLAVE ARMENIA COLOMBIA LÍBANO MÉXICO NIGERIA TURQUÍA URUGUAY DESV. DESV. DESV. DESV. DESV. DESV. DESV. VARIABLE MEDIA EST MEDIA EST MEDIA EST MEDIA EST MEDIA EST MEDIA EST MEDIA EST Mujeres 0.66 0.48 0.63 0.48 0.55 0.50 0.53 0.50 0.51 0.50 0.50 0.50 0.53 0.50 De 18 a 30 años 0.26 0.44 0.27 0.45 0.30 0.46 0.29 0.46 0.26 0.44 0.36 0.48 0.29 0.45 Más de 60 años 0.23 0.42 0.16 0.37 0.14 0.35 0.14 0.35 0.15 0.36 0.10 0.31 0.20 0.40 Educación primaria 0.02 0.14 0.34 0.47 0.27 0.45 0.36 0.48 0.66 0.47 0.51 0.50 0.31 0.46 como máximo Educación secundaria 0.69 0.46 0.45 0.50 0.46 0.50 0.55 0.50 0.20 0.40 0.41 0.49 0.52 0.50 como máximo Educación terciaria 0.29 0.46 0.21 0.41 0.27 0.44 0.09 0.28 0.13 0.34 0.08 0.27 0.18 0.38 Número de miembros 3.56 1.45 3.19 1.49 3.51 1.50 2.82 1.17 2.94 1.57 3.10 1.48 2.49 1.03 del hogar mayores de 18 años Tiene hijos a cargo 0.50 0.50 0.61 0.49 0.46 0.50 0.55 0.50 — — 0.52 0.50 — — Zona rural 0.39 0.49 0.34 0.47 0.33 0.47 0.38 0.49 0.71 0.45 0.04 0.20 0.09 0.28 Tiene productos 0.81 0.39 0.55 0.50 0.57 0.50 0.51 0.50 0.21 0.42 0.58 0.49 0.87 0.33 financieros Empleado formal 0.26 0.44 0.19 0.39 0.31 0.46 0.24 0.43 0.42 0.49 0.22 0.41 0.41 0.49 Empleado informal 0.06 0.24 0.06 0.23 0.11 0.31 0.15 0.36 — — 0.08 0.27 0.08 0.28 Autónomo 0.16 0.36 0.10 0.30 0.16 0.36 0.03 0.16 — — 0.08 0.27 0.09 0.29 Desempleado 0.07 0.25 0.03 0.18 0.02 0.13 0.05 0.22 0.08 0.28 0.03 0.17 0.04 0.20 Jubilado 0.18 0.39 0.05 0.22 0.05 0.21 0.04 0.20 0.36 0.48 0.16 0.37 0.17 0.38 Tareas domésticas 0.21 0.41 0.25 0.43 0.31 0.46 0.27 0.44 0.02 0.13 0.33 0.47 0.12 0.32 Otros 0.01 0.08 0.29 0.45 0.00 0.02 0.15 0.35 0.04 0.20 0.01 0.12 0.04 0.20 Estacionalidad de los 0.03 0.18 0.07 0.26 0.05 0.22 0.10 0.30 — — 0.15 0.36 0.24 0.43 ingresos: sin ingresos Estacionalidad de los 0.45 0.50 0.63 0.48 0.47 0.50 0.60 0.49 — — 0.24 0.42 0.32 0.47 ingresos: ingresos variables Estacionalidad de los 0.52 0.50 0.30 0.46 0.48 0.50 0.30 0.46 — — 0.62 0.49 0.43 0.50 ingresos: ingresos estables Fuente: Banco Mundial y Gobierno de Colombia Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras. Nota: — = No disponible. relativamente bajo de personas que obtuvieron puntajes altos en la batería de preguntas: solo el 34% de los encuestados contestó seis o más preguntas correctas, porcentaje inferior al de todos los países encuestados, con excepción de Sudáfrica. 44 CAPÍTULO 5.  COMPARACIONES INTERNACIONALES CUADRO 5.2  COMPARACIÓN INTERNACIONAL DE LOS PORCENTAJES RESPUESTAS CORRECTAS A PREGUNTAS SOBRE CONOCIMIENTOS FINANCIEROS SUD- REINO PREGUNTA ARMENIA COLOMBIA HUNGRÍA IRLANDA MÉXICO PERÚ ÁFRICA UNIDO Operaciones matemáticas (divi- 86 86 96 93 82 90 79 76 sión) Valor del dinero en el tiempo 83 69 78 58 58 63 49 61 Interés que se paga sobre un 87 87 95 88 83 — 65 90 préstamo Cálculo de capital e intereses 53 35 61 76 37 40 44 61 Cálculo del interés simple (y 18 10 46 29 14 14 21 37 cálculo correcto de capital e intereses) Riesgo y rendimiento 67 — 86 84 55 69 73 77 Definición de inflación 57 — 91 88 68 86 78 94 Diversificación 59 — 61 47 30 51 48 55 Porcentaje de encuestados que 46 — 69 60 34 41 33 53 obtuvieron puntajes altos (seis o más preguntas correctas) Fuente: Análisis de las encuestas sobre las capacidades financieras realizadas en Colombia y México en 2012. Salvo en lo que respecta a Colombia y a México, los datos provienen de la encuesta de la OCDE que se describe en Atkinson y Messy (2012). Nota: — = no disponible. Atkinson y Messy (2012) registraron que los participantes respondían correctamente la respuesta de opciones múltiples sobre el interés compuestos (fila 5 del cuadro) solo si también respondía correctamente la pregunta anterior sobre el cálculo de una tasa de interés simple (fila 4). En otros estudios (por ejemplos, Xu y Zia, 2013) se tienen en cuenta solo las respuestas correctas a la pregunta de opción múltiple sobre interés compuesto, independientemente de la respuesta a la pregunta sobre el interés simple. Si se aplica esta última modalidad, se obtiene que el 31% de los mexicanos encuestados respondió correctamente la pregunta sobre interés compuesto, un resultado que se destaca en la sección 3.3. 45 V CAPÍTULO 6 ínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera E n México, el diálogo y las políticas relacionados con el mejoramiento de las capacidades y los conocimientos financieros suelen complementar cuestiones relativas a la promoción de la inclusión financiera responsable. Comprender los nexos que existen entre estas cuestiones puede ayudar a diseñar y orientar mejor las intervenciones en materia de políticas. En este capítulo se ofrecen muestras contundentes de los vínculos que existen entre los conocimientos financieros, las capacidades financieras y la inclusión financiera en función del uso de productos financieros formales. Se sugiere que incrementar los conocimientos financieros y aumentar las capacidades financieras son pasos cruciales hacia el objetivo de acelerar la inclusión financiera responsable. Específicamente, se concluye que las capacidades y los conocimientos financieros se asocian positivamente al uso de productos financieros formales como cuentas bancarias y tarjetas de crédito. Los resultados que aquí se presentan también sugieren que el uso de corresponsales bancarios incrementa el acceso a productos financieros formales principalmente para las personas que tienen capacidades y conocimientos financieros elevados, y no para quienes muestran deficiencias en este sentido. 6.1 CONOCIMIENTOS FINANCIEROS Y CAPACIDADES FINANCIERAS En numerosos trabajos se han encontrado vínculos entre los conocimientos finan- cieros y elementos del comportamiento financiero. Utilizando datos referidos a Estados Unidos, Lusardi y Tufano (2009) observan que las personas con escaso nivel de conocimientos tienden a efectuar los pagos mínimos en sus tarjetas de crédito, pagar las tarjetas con recargo por mora y recurrir a fuentes de crédito informales. Stango y Zinman (2009) muestran que quienes cometen errores al calcular el interés y el valor futuro tienden a pedir más préstamos y ahorrar menos. Lusardi y Mitchell (2009) explican que las personas con escasos conocimientos financieros piensan menos en la jubilación y que la mayoría no ha hecho ningún plan al respecto. Una encuesta realizada en hogares rusos muestra que el nivel de conocimientos finan- cieros se relaciona de manera significativa y positiva con la planificación de la jubila- 47 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO ción que abarca mecanismos y fondos de pensión privados (Klapper y Panos, 2011). En México, Hastings y Tejeda-Ashton (2008) realizaron una encuesta, según la cual las personas con menos conocimientos tienden a elegir los fondos de inversiones y pensión que cobran comisiones más caras. En el apéndice E se analiza más deteni- damente esta bibliografía. La encuesta sobre las capacidades financieras en México ofrece una oportunidad de complementar dichos trabajos, debido a la variedad de información que aporta sobre conocimiento y capacidades financieras. En México, una mayor puntuación en conocimientos financieros se asocia a una mayor medida de las capacidades financieras en 7 de los 10 componentes de estas últimas. En el análisis se aborda el vínculo entre la puntuación obtenida en cono- cimientos financieros y cada una de las 10 medidas de capacidades financieras (enumeradas en el cuadro 4.1), para lo cual se controlan varias características personales y de los municipios que podrían generar una relación espuria entre conocimientos y capacidades (para más detalles sobre la metodología, véase el apéndice D). Cuatro de los componentes relativos al comportamiento (no gastar en exceso, vivir de acuerdo con las propias posibilidades, cobertura de gastos impre- vistos y ahorro) y los tres componentes relacionados con la actitud se relacionan con los conocimientos financieros (véase el cuadro D.1 del apéndice D). Los otros tres componentes de las capacidades (planificación del presupuesto, seguimiento de los gastos y uso de la información) no muestran una relación estadísticamente significa- tiva con los conocimientos financieros. Los conocimientos financieros mostraron la correlación más importante con el componente “no gastar en exceso”, al que siguieron “orientación al logro de obje- tivos”, “ahorro” y “vivir de acuerdo a las propias posibilidades”. En el gráfico 6.1 se compara la magnitud de las correlaciones con los conocimientos financieros en los diversos componentes de las capacidades financieras mostrando las correlaciones en función de las desviaciones estándar1. Las correlaciones entre los conocimientos financieros y los componentes “comportamiento no impulsivo”, “actitud respecto del futuro” y “cobertura de gastos imprevistos” son menores y, como ya se ha señalado, son inexistentes en el caso de los otros tres componentes. 1  Esto es, el gráfico muestra cuánto aumenta la medida de cada componente de las capaci- dades financieras cuando la puntuación de los conocimientos financieros aumenta una desvia- ción estándar (la desviación estándar de esta puntuación es 1.8), en donde el incremento en la medida de la capacidad está ajustado para representar puntos porcentuales de la desviación estándar de la medida de capacidad. Este ajuste se utiliza debido a que el mismo incremento de tamaño (por ejemplo, 2 puntos) podría ser grande o pequeño, dependiendo de cuánto varíe la medida de capacidad. Por ejemplo, si la mayoría de las personas obtiene una puntuación de alrededor de 50 en una medida de capacidad, un incremento de dos puntos representará una magnitud mayor que si la mayoría de las personas obtiene entre 10 y 90. 48 CAPÍTULO 6.  Vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera GRÁFICO 6.1  CORRELACIONES ENTRE CONOCIMIENTOS FINANCIEROS Y CAPACIDADES FINANCIERAS EN FUNCIÓN DE LAS DESVIACIONES ESTÁNDAR Planificación del presupuesto Seguimiento de los gastos Uso de la información Cobertura de gastos imprevistos 6.4 Actitud respecto del futuro 7.7 Compartamiento no impulsivo 10.7 Vivir de acuerdo a las propias posibilidades 13.2 Ahorro 14.5 Orientación al logro de objetivos 14.6 No gastar en exceso 17.7 0 5 10 15 20 Porcentaje Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: Las correlaciones se basan en las estimaciones que se muestran en el apéndice D. Las correlaciones muestran cuánto aumenta el puntaje de cada componente de las capacidades financieras cuando la puntua- ción de los conocimientos financieros aumenta una desviación estándar (la desviación estándar de esta pun- tuación es 1.8), en donde el incremento en la medida de la capacidad está ajustado para representar puntos porcentuales de la desviación estándar de la medida de capacidad. 6.2 CONOCIMIENTOS FINANCIEROS, CAPACIDADES FINANCIERAS Y USO DEL CRÉDITO Y EL AHORRO En esta sección se utilizan las medidas de los componentes de las capacidades y los conocimientos financieros analizados anteriormente en este informe y se examina hasta qué punto permiten predecir si una persona o un hogar utiliza una variedad de servicios financieros formales e informales. Este análisis se centra en los seis servi- cios financieros más comunes en México, según la encuesta sobre las capacidades financieras: cuentas bancarias, tarjetas de crédito, préstamos bancarios, tandas, crédito de casas de empeño, y préstamos de familiares O amigos. La relación que existe entre los conocimientos financieros o las capacidades financieras y el uso de estos productos se mide a través de un análisis de regresión que se describe en detalle en el apéndice D. En el cuadro 6.1 se muestran los resultados abreviados de este análisis y la correlación parcial entre la medida de cada componente de los conocimientos financieros o las capacidades financieras y las probabilidades de que se utilice cada producto financiero. Estas correlaciones parciales miden la relación entre las capacidades o los conocimientos financieros y el uso de productos finan- cieros después de controlar por otros factores que podrían ser la causa de esta rela- ción (véase el apéndice D). Una puntuación elevada en conocimientos financieros se asocia positivamente al uso de cuentas bancarias y tarjetas de crédito, pero no muestra ninguna relación esta- dísticamente significativa con el uso de otros servicios financieros. Como se muestra 49 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO 6.1  CORRELACIONES PARCIALES ENTRE LOS CONOCIMIENTOS FINANCIEROS, LOS COMPONENTES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS Y EL USO DE SERVICIOS FINANCIEROS VARIABLE DEPENDIENTE: VARIABLE FICTICIA QUE INDICA SI EL INDIVIDUO TIENE O PARTICIPA EN ALGUNO DE LOS SIGUIENTES PRODUCTOS PRÉSTAMO PRÉSTAMO DE FAMI- CUENTA TARJETA DE PRÉSTAMO DE CASAS LIARES O   BANCARIA CRÉDITO BANCARIO TANDA DE EMPEÑO AMIGOS Puntaje de los conocimientos 0.029*** 0.017 ** 0.006 0.000 0.005 −0.013 financieros Componente de las capacidades financieras Planificación del presupuesto 0.000 0.000 0.006** 0.002 0.001 −0.003 Seguimiento de los gastos 0.011*** 0.010** 0.003 0.002 0.001 −0.010** Uso de la información 0.010** 0.011*** −0.004 −0.003 −0.006* −0.012** No realizar gastos innecesarios 0.006 −0.008 −0.005 −0.011*** −0.006** −0.015** Cobertura de gastos imprevistos 0.013*** 0.015*** 0.004* 0.001 0.001 −0.006* Ahorro 0.012*** 0.010*** 0.002 0.001 −0.005** −0.008* Preferencia temporal 0.013*** 0.006 −0.001 −0.001 −0.001 −0.004 Comportamiento no impulsivo 0.017*** 0.009** −0.002 −0.001 −0.004** −0.001 Orientación al logro de objetivos 0.014*** 0.008** 0.007** 0.004 0.002 0.009 Índice de capacidades financierasa 0.056*** 0.037*** 0.009 0.005 −0.014** −0.033*** Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: Para consultar las fuentes de las variables de control y más detalles, véase el apéndice D. Las correlaciones parciales miden la relación entre las capacidades o los conocimientos financieros y el uso de productos financieros después de controlar por las características personales y del municipio que podrían ser la causa de esta relación (para más detalles, ver el apéndice D). Niveles de significancia estadística: * 10%, ** 5%, *** 1%. a. Promedio de los componentes enumerados previamente. en el cuadro 6.1, el aumento de un punto porcentual en el puntaje correspondiente a los conocimientos financieros2 se asocia al aumento de 2.9 puntos porcentuales en la probabilidad de tener una cuenta corriente y de 1.7 puntos porcentuales en la de tener una tarjeta de crédito. Los resultados del cuadro no son causales, y no se puede determinar a ciencia cierta si es más probable que las personas con cono- cimientos formales estén más interesadas en abrir cuentas bancarias u obtener tarjetas de crédito, o si las personas tienen más conocimientos debido a que utilizan esos servicios financieros. Los conocimientos financieros no muestran una relación Dado que el puntaje correspondiente a los conocimientos financieros mide cuántas de las 2  ocho preguntas el encuestado respondió correctamente, el aumento de un punto equivale a responder correctamente otra pregunta. 50 CAPÍTULO 6.  Vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera estadísticamente significativa con el uso de otros servicios financieros (préstamos bancarios, tandas, préstamos de casas de empeño, o préstamos familiares o amigos). La mayoría de los componentes de las capacidades financieras muestra también una relación positiva y estadísticamente significativa con el hecho de tener una cuenta bancaria y una tarjeta de crédito. En el cuadro 6.1 se observa la relación que existe entre nueve medidas de capacidades financieras y el uso de productos financieros3. Los resultados muestran que los comportamientos positivos relacionados con el uso de la información, la prudencia en el gasto, el ahorro y la actitud no impulsiva se asocian a una menor probabilidad de pedir un préstamo a una casa de empeño o a familiares o amigos. Las capacidades financieras elevadas se relacionan con una mayor probabilidad de utilizar productos financieros formales. En la última fila del cuadro 6.1 se resumen los resultados mostrando la relación entre el uso de productos y un índice de capa- cidades financieras que es el promedio de los nueve componentes de las capaci- dades enumerados. Los resultados que muestra este índice indican que en general las elevadas capacidades financieras se relacionan con una mayor probabilidad de utilizar productos financieros formales (cuentas bancarias y tarjetas de crédito) y una menor probabilidad de solicitar crédito informal (de casas de empeño o de familiares o amigos). El gráfico 6.2 ilustra estos resultados mostrando el porcentaje de personas con escasas o elevadas capacidades financieras que tiene cuentas bancarias, tarjetas de créditos, préstamos de casa de empeño, o préstamos de fami- liares o amigos. Las personas con escasas (elevadas) capacidades financieras son aquellas cuyo índice de capacidades financieras es inferior (superior) a la mediana. Las personas con elevadas capacidades financieras tienen el doble de probabilidades de tener una cuenta bancaria o una tarjeta de crédito que las personas con escasas capacidades financieras. Además, las probabilidades de que soliciten un préstamo a una casa de empeño o a familiares o amigos son entre 30% y 40% menores, aproxi- madamente. 3  La medida “vivir de acuerdo a las propias posibilidades” no se ha incluido en la lista, dado que se basa, en parte, en preguntas relativas al uso de préstamos, por lo que puede correlacio- narse automáticamente con el uso de productos financieros. En algunos países desarrollados, como Estados Unidos y el Reino Unido, las medidas de capacidad financiera incluyen el uso de productos entre sus componentes. No obstante, en el marco del proyecto general del Fondo Fiduciario de Rusia para la Capacitación y la Educación Financieras, se decidió elaborar medidas de capacidad financiera que no se basaran en el uso de productos financieros, dado que un gran porcentaje de la población de numerosos países en desarrollo no posee ningún producto (como es el caso en Colombia y México), lo que, en parte, se debe a que la oferta de servicios financieros suele ser más limitada que en los países desarrollados. Véase también Kempson, Perotti y Scott (2013). Las cifras se ajustan para que se correspondan con un incremento de 10 puntos en la medida de la capacidad. Por ejemplo, el aumento de 10 puntos en el aspecto de la capacidad relacionado con el seguimiento de los gastos se asocia a un incremento de 1.1 puntos porcentuales en la probabilidad de tener una cuenta bancaria. 51 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO 6.2 USO DE PRODUCTOS FINANCIEROS ENTRE LAS PERSONAS CON ESCASAS O ELEVADAS CAPACIDADES FINANCIERAS Porcentaje de individuos con capacidades financieras bajas/altas 30 Escasa capacidad financiera Elevada capacidad financiera 26.1 25 17.9 20 15.4 14.1 10 9.4 8.1 7.6 5.7 5 0 Cuenta bancaria Tarjeta de crédito Préstamo de Préstamo de casas de empeño familiares o amigos Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: Se considera que una persona tiene escasas (elevadas) capacidades financieras cuando su índice de capacidades financieras es inferior (superior) a la mediana. El índice es un promedio de los nueve compo- nentes de las capacidades financieras enumerados en el cuadro 6.1. Las diferencias que se muestran en este gráfico controlan por las características personales y del municipio (véase el apéndice D). 6.3 CAPACIDADES Y CONOCIMIENTOS FINANCIEROS, ACCESO A LAS FINANZAS Y USO DE PRODUCTOS FORMALES En esta sección se analizan los datos sobre capacidades financieras con datos sobre infraestructura financiera municipal para comprobar si el mayor acceso a los servi- cios financieros a través de los corresponsales bancarios se asocia a un mayor uso de productos financieros, y de qué manera esto se correlaciona con las capacidades financieras. Como se señaló en el capítulo 3, solo el 15% de los encuestados mani- festó tener una cuenta formal en una institución financiera, el 14% tenía tarjeta de crédito y el 9%, un préstamo bancario. Un primer paso para incorporar más personas en el sistema bancario formal consiste en proporcionar puntos de acceso para las instituciones financieras. En gráfico 6.3 se utilizan datos obtenidos del Consejo Nacional de Inclusión Financiera (2011) para ilustrar la distribución de las sucur- sales bancarias en los 95 municipios incluidos en la encuesta sobre las capacidades financieras realizada en México. Como se muestra, 19 municipios no tienen ninguna sucursal bancaria y la mayoría de los restantes tienen entre 1 y 3 por cada 10,000 adultos. El número promedio de sucursales bancarias por cada 10,000 adultos de la muestra es 1.2. Los datos del Consejo Nacional de Inclusión Financiera incluyen también información sobre el número de corresponsales bancarios de cada municipio. Desde 2009, los bancos celebran contratos de corresponsalía con tiendas minoristas y otras insti- 52 CAPÍTULO 6.  Vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera GRÁFICO 6.3  DISTRIBUCIÓN DE LAS SUCURSALES BANCARIAS Y LOS CORRESPONSALES BANCARIOS EN LOS MUNICIPIOS Número de municipios 40 33 Sucursales bancarias Corresponsales bancarios 30 26 25 20 19 20 18 14 11 10 10 10 3 1 0 0 0–1 1–2 2–3 3–4 >4 Número de puntos de acceso en el municipio (por cada 10 000 adultos) Fuente: Consejo Nacional de Inclusión Financiera, 2011. Nota: Se incluyen solo los 95 municipios que abarca la encuesta sobre las capacidades financieras realizada en México. tuciones, como la cadena de tiendas OXXO y Telecomunicaciones de México, para brindar acceso a los servicios bancarios a través de la red de tiendas o sucursales de esos establecimientos. Los servicios que se brindan mediante corresponsales varían según el banco, pero suelen incluir pago de servicios, retiro de efectivo, recepción de depósitos y pago de créditos (para más información, véase Consejo Nacional de Inclusión Financiera, 2011). Los 95 municipios incluidos en la encuesta sobre las capacidades financieras realizada en México cuentan con un promedio de 2 corresponsales bancarios por cada 10,000 adultos, lo que supera las 1.2 sucursales bancarias por cada 10,000 adultos. El gráfico 6.3 muestra que en esos municipios los corresponsales proporcionan más puntos de acceso que las sucursales bancarias. Solo 11 municipios no tienen corresponsales, mientras que en 19 no hay ninguna sucursal bancaria. Además, 20 municipios tienen 3 o más corresponsales bancarios por cada 10,000 adultos, en tanto que solo 4 cuentan con ese número de sucursales bancarias por cada 10,000 adultos. En el cuadro D.4 del apéndice D se analiza en qué medida la presencia de sucursales bancarias y de corresponsales bancarios en un municipio se asocia al uso de productos financieros entre los encuestados que parti- ciparon del estudio sobre las capacidades financieras realizado en México. Los resultados indican que los corresponsales bancarios incrementan el acceso a productos financieros formales solo para las personas que tienen capacidades y conocimientos financieros elevados. Según los resultados del cuadro D.4 del apéndice D, no existe una relación estadísticamente significativa entre el número de sucursales de bancos comerciales en un municipio y el número de personas 53 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO encuestadas que usan productos financieros formales. Si bien la relación no es causal, la cantidad de corresponsales bancarios se asocia a un mayor uso de cuentas bancarias o tarjetas de crédito para las personas con capacidades o cono- cimientos financieros elevados. En el caso de las personas con bajo nivel de capa- cidades y conocimientos financieros, cuando se controlan otros factores (incluidos los ingresos), ni las sucursales bancarias ni los corresponsales se asocian al uso de productos financieros. Como se señaló anteriormente, las personas que tienen escasas capacidades financieras se inclinan más por los productos financieros infor- males que por los formales. Los resultados obtenidos sugieren que el aumento de los puntos de acceso del sector formal a través de los corresponsales bancarios no ha sido suficiente para integrar a estas personas en el sector financiero formal. 54 C CAPÍTULO 7 onclusiones y recomendaciones A partir de los datos obtenidos en esta primera encuesta nacional sobre capa- cidades financieras, se han identificado importantes desafíos relacionados con el comportamiento, las actitudes y los conocimientos financieros de distintos segmentos de la población mexicana. „„ En el capítulo 2 se destacan las deficiencias en la administración diaria del dinero y los procesos de planificación, y se concluye que el 41% de los encuestados planifica el presupuesto regularmente y que apenas el 20% controla los gastos en forma rigurosa. Asimismo, se sugiere que muchos hogares mexicanos sufren dificultades financieras, dado que el 70% informa insuficiencia de ingresos —habitual u ocasional— para cubrir gastos básicos y la mayoría no toma recaudos para hacer frente a gastos importantes, ya sean previstos o imprevistos. La planificación para la vejez es poco frecuente: menos de un tercio de la población de menos de 60 años informa que ha hecho planes para cubrir sus gastos de la tercera edad. „„ En el capítulo 3 se muestran las deficiencias que existen en materia de inclu- sión financiera y se concluye que actualmente el 49% de la población no utiliza productos financieros. Entre quienes sí los utilizan, las formas de uso más habitual son los préstamos informales y las cuentas en instituciones financieras. Más del 60% de quienes usan servicios financieros informó que había verificado los términos y condiciones y comparado varios productos antes de tomar la decisión financiera. Sin embargo, solo el 37% de la pobla- ción encuestada pudo hacer el cálculo de la tasa de interés simple, una capa- cidad necesaria para analizar productos financieros. „„ En el capítulo 4 se describen cinco grupos bien diferenciados dentro de la población de la muestra utilizando puntajes individuales para los compo- nentes de las capacidades financieras. Los grupos más comunes eran los administradores de dinero con visión a corto plazo y los administradores de dinero poco experimentados, que representaban el 33% y el 25% de la pobla- ción encuestada, respectivamente. Uno de los grupos más pequeños era el de los gastadores jóvenes impulsivos (12% de los encuestados). 55 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO „„ En el capítulo 5 se comparan las capacidades financieras de los mexicanos con las de encuestados de otros seis países y se concluye que los primeros manejan un horizonte temporal de planificación relativamente más corto y no suelen planificar el modo en que gastarán su dinero. Sin embargo, los mexi- canos encuestados mostraron una tendencia bastante mayor al ahorro en relación con los demás países. Con respecto a los conocimientos financieros, los mexicanos mostraron un desempeño menos satisfactorio que los encues- tados de la mayoría de los demás países en el cálculo de la tasa de interés y en la comprensión de los conceptos de riesgo y rendimiento y diversificación de la cartera. „„ En el capítulo 6 se ofrecen muestras de los vínculos que existen entre los conocimientos financieros, las capacidades financieras y la inclusión finan- ciera en función del uso de productos financieros formales. Se sugiere que los corresponsales bancarios aumentan el acceso a los productos financieros formales, principalmente para las personas con capacidades y conocimientos financieros elevados. Esto indica, a su vez, que incrementar los conocimientos financieros y aumentar las capacidades financieras son pasos cruciales hacia el objetivo de acelerar la inclusión financiera responsable. Para aumentar las capacidades financieras de los mexicanos, será necesario contar con una estrategia pluridimensional en la que intervengan las diversas partes intere- sadas y en la que se contemple la mejora del diseño de las herramientas de gestión financiera y de los productos financieros, la educación financiera focalizada para mejorar las capacidades y la regulación de respaldo que asegure la adecuada protec- ción del consumidor. Las siete recomendaciones de políticas que se formulan a continuación se basan en las enseñanzas aprendidas y describen intervenciones que se han implementado con éxito en otros países. Tomadas en conjunto, permitirían abordar los desafíos que enfrentan los mexicanos en relación con las capacidades financieras. 1. La promoción de una tecnología que incremente el acceso oportuno a información financiera personal puede contribuir a fomentar una admi- nistración diaria del dinero más precisa y alentar los comportamientos relacionados con la planificación que no se observan en la mayoría de los encuestados. –– Las autoridades mexicanas designadas y otras partes interesadas podrían respaldar el desarrollo de herramientas de control de las finanzas personales mediante teléfonos celulares o Internet y su distribución a través de instituciones financieras y educativas. Estas herramientas pueden ayudar a los hogares a controlar los gastos dividiendo las operaciones en categorías y alentando el ahorro para cumplir objetivos presupuestarios. 56 CAPÍTULO 7.  C onclusiones y recomendaciones En los últimos años, se han creado varias herramientas con interfaces para la Web y/o teléfonos celulares como Hello Wallet, Mint, Pageonce, Rocket y Juntos Finanzas. En particular, Juntos Finanzas (ganador del certamen instituido en 2012 durante la presidencia mexicana del Grupo de los 20, denominado Desafío G2012 México: Soluciones Innovadoras para la Inclu- sión Financiera) resulta adecuado para una gran variedad de hogares mexi- canos, dado que se creó específicamente para ayudar a las familias que se manejan con dinero en efectivo, está disponible en inglés y español, y es una aplicación basada en mensajes de texto que funciona en los teléfonos móviles menos sofisticados. Las autoridades financieras podrían alentar a los diseñadores de herramientas a asociarse con instituciones financieras para promover el uso de esas herramientas entre sus clientes y crear otras complementarias para las finanzas personales. La CONDUSEF lanzó recien- temente una aplicación móvil con la finalidad de apoyar el presupuesto familiar. Casi toda la población mexicana tiene acceso a la telefonía celular y una cuarta parte usa Internet (INEGI, 2010), por lo que las herramientas de finanzas personales basadas en estas tecnologías constituyen una forma sumamente adecuada de llegar a los jóvenes, entre quienes los niveles de uso de estos medios son desproporcionadamente altos. –– Los entes reguladores del sector financiero y otras autoridades designadas podrían también alentar a las instituciones financieras y a otras partes interesadas a utilizar los mensajes de texto y los medios sociales para enviar información y notificaciones simples relacionadas con las finanzas personales, como la gestión de los saldos de las cuentas, el reembolso de préstamos, la adhesión a planes de gestión de deuda y la movilización de los ahorros. En un ensayo aleatorio controlado realizado en Filipinas se demostró que los recordatorios personalizados referidos al pago de prés- tamos se vinculaban con la puntualidad en los reembolsos (Karlan, McCon- nell y Zinman, 2012). Un estudio de las instituciones financieras en Bolivia, Perú y Filipinas mostró que las cartas, o los recordatorios por mensajes de texto, para alentar el ahorro habían incrementado en un 3% las probabili- dades de alcanzar los objetivos de ahorro y en un 6% el total ahorrado en la institución financiera que aplicaba el sistema de recordatorios (Karlan y cols., 2012). En India, algunas ONGs canalizado contenidos relacionados con los comportamientos financieros a través de mensajes de voz para llegar a las poblaciones analfabetas. Esta recomendación también presenta un potencial particular para llegar a los jóvenes que utilizan activamente teléfonos móviles y los medios sociales. La promoción de los mensajes sobre educación y hábitos financieros debe basarse en conceptos respal- dados por datos empíricos y un acuerdo generalizado. 57 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO 2. Para encarar el desafío referido a la insuficiencia de los fondos que se reservan para la jubilación y otros hechos previsibles de la vida, se debe promover la cultura del ahorro voluntario. –– Las autoridades mexicanas y otras partes interesadas podrían llevar a cabo campañas mediáticas, por ejemplo a través de programas de televisión, para transmitir los mensajes principales relacionados con las capacidades financieras, como la necesidad de incrementar los ahorros voluntarios para la jubilación. En 2010, el 95% de los mexicanos tenían un televisor (INEGI, 2010). Mediante mensajes clave concisos transmitidos a través de los medios de comunicación, se podría captar la atención de grandes segmentos de la población. Por ejemplo, las personas que reci- bieron mensajes sobre educación financiera canalizados a través de una exitosa telenovela sudafricana exhibieron conocimientos notablemente más elevados sobre los temas subrayados en la telenovela y, en compa- ración con quienes no habían visto el programa, se mostraron casi dos veces más propensos a solicitar préstamos de fuentes formales y menos proclives a dedicarse al juego (Berg y Zia, 2013). Las telenovelas mexicanas son muy populares y podrían utilizarse para difundir mensajes clave. –– Las autoridades financieras (como la CONDUSEF) podrían mejorar los contenidos que ofrecen en los momentos propicios, esto es, cuando las personas estén buscando información sobre decisiones financieras. El momento propicio podría ser el pago de la educación, la compra de una vivienda, una ocasión especial, como el casamiento, el nacimiento de un hijo o la jubilación, o incluso el momento en que un consumidor presenta una reclamación acerca de un producto financiero. A partir de una muestra de migrantes indonesios, Doi, McKenzie y Zia (2012) concluyen que la educación financiera puede tener efectos importantes cuando se imparte en un momento propicio, pero que su impacto varía según quién la recibe. Según Duflo y Saez (2011), la educación financiera tiene un impacto posi- tivo en la planificación de la jubilación o en las elecciones respecto de la cartera de inversión, lo que genera una mayor participación en los planes jubilatorios. El nuevo contenido en español del sitio web de la Oficina de Protección al Consumidor de Estados Unidos constituye un modelo de cómo se puede brindar información clara en momentos cruciales de deci- sión. Incluye explicaciones sobre cómo comprar un auto o una vivienda, o pagar la universidad1. Esto podría utilizarse para incrementar la información que ofrece actualmente la CONDUSEF sobre las calculadoras de préstamos. 1  La información en español está disponible en http://www.consumerfinance.gov/es/. 58 CAPÍTULO 7.  C onclusiones y recomendaciones 3. Fortalecer la movilización de ahorros, especialmente para hacer frente a crisis financieras imprevistas, alentando a las instituciones finan- cieras a adoptar elementos de diseño de los productos que resulten atractivos. –– Establecer objetivos específicos de ahorro es una forma sencilla y relativamente económica de hacer que los beneficios de tener una cuenta de ahorro se vuelvan tangibles y de controlar la tendencia a efectuar gastos excesivos. En Colombia, bancos como el AV Villas están poniendo en marcha billeteras móviles con distintos “compartimentos” asignados a objetivos específicos (como vacaciones, eventos especiales o educación). En México, las billeteras móviles que proporcionan diversas instituciones financieras, incluso de microfinanciamiento, podrían equiparse de modo similar. En un ensayo controlado aleatorio se concluyó que en Ghana los grupos de tratamiento que tenían acceso a cuentas con distintas denomi- naciones para objetivos específicos ahorraban 31% más, en promedio, que el grupo de control (Karlan y cols., 2012). Una institución financiera peruana creó rompecabezas con imágenes de los objetivos de ahorro (como un niño en la escuela o un vehículo). El grupo que recibía una pieza de rompe- cabezas por cada depósito tenía 2.3 puntos porcentuales más probabili- dades de cumplir su compromiso de ahorro que el grupo de control (Karlan y cols., 2009). –– Las cuentas de ahorro programado permiten a los usuarios restringir voluntariamente el acceso a sus ahorros durante un tiempo determinado, lo que los ayuda a establecer una disciplina y a no distraer fondos para gastos diarios menos necesarios. Por ejemplo, en Filipinas, al cabo de un año, las personas que habían decidido no acceder a sus ahorros durante un período determinado los incrementaron en un 81% en relación con el grupo de control (Ashraf, Karlan y Yin, 2006). En un experimento en el que se daba a agricultores keniatas en forma aleatoria la opción de destinar parte de sus ahorros inmediatamente a una cuenta de ahorros para fertilizantes o esperar algunos días antes de comprometer los fondos, se concluyó que el 57% de los que ahorraban inmediatamente en la cuenta compraban fertili- zantes en la siguiente temporada de siembra, en comparación con el 30% de los que integraban el grupo de control (Duflo, Kremer y Robinson, 2006). Por último, se ha propuesto un mecanismo de pago diferido que utiliza pagos móviles por adelantado (es decir, la posibilidad de enviarse dinero a uno mismo en una fecha futura) como el equivalente funcional de los tradicionales ahorros programados para celulares (Mas, 2013). No podría accederse a los fondos del cliente hasta que llegase la fecha y el cliente la asociaría a un propósito determinado (Mas, 2013). 59 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO –– Los productos vinculados a las remesas que se ajustan a los trabajadores migrantes y sus familias ofrecen la oportunidad de destinar las transferen- cias directamente a productos de ahorro. Esos productos podrían basarse en aportes derivados de un estudio de migrantes de El Salvador que vivían en Estados Unidos (Ashraf y cols., 2011), en el que se determinó que las cuentas de ahorro que ofrecen al remitente de la remesa un mayor segui- miento y control de su cuenta acumulan la mayor cantidad de ahorros. –– Alentar a los receptores de beneficios sociales a depositar las trans- ferencias en su cuenta bancaria asociada, en lugar de extraer la totalidad de las transferencias a la vez, fomentaría el ahorro en un segmento de la población que en la actualidad hace un uso relativamente escaso de los servicios financieros formales. Por ejemplo, las cuentas que se abren en el Banco de Ahorro Nacional y Servicios Financieros (BANSEFI) para los beneficiarios del programa Oportunidades no se aprovechan lo suficiente, debido, en gran parte, a que los beneficios de dicho programa no se depo- sitan en esas cuentas, aun cuando se utiliza la infraestructura del banco (tarjetas y terminales de puntos de venta) para realizar los pagos. En virtud del contrato suscrito entre la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) y el BANSEFI, no se permite a los beneficiarios del programa Oportuni- dades atrasar el cobro de los beneficios ni recibir pagos parciales, así como tampoco utilizar el dinero depositado en sus cuentas para realizar compras electrónicas en tiendas minoristas. Por el contrario, se podrían pagar programas sociales directamente en las cuentas bancarias de los receptores, de manera que estos puedan administrar sus fondos como lo crean conveniente. Asimismo, podría brindarse a los beneficiarios la opción de transferir la cuenta de un banco a otro, lo que incrementaría la competencia entre los bancos y generaría incentivos para ofrecer nuevos productos a los beneficiarios y extender las redes de corresponsales bancarios a las comunidades marginales. Asimismo, podría utilizarse un enfoque similar para los programas sociales con los que se procura aliviar la inseguridad alimentaria y brindar apoyo a los ingresos de los adultos mayores. 4. Se debe continuar desarrollando la infraestructura financiera para mejorar el acceso a los servicios financieros formales en los segmentos de la población que en la actualidad no los utilizan o que recurren a instrumentos informales poco adecuados. –– Las autoridades mexicanas podrían introducir cambios regulatorios que facultaran a otras instituciones financieras, como las cooperativas y las instituciones microfinancieras tomadoras de depósitos (sociedades 60 CAPÍTULO 7.  C onclusiones y recomendaciones financieras populares [SOFIPOs]), para operar a través de correspon- sales bancarios. Esta autorización permitiría ampliar el acceso a los servi- cios financieros, dado que la mayoría de las cadenas de corresponsales minoristas no llegan a los barrios marginales, a las zonas periurbanas ni a las ciudades pequeñas. Hoy en día, Telecomm (un organismo guberna- mental) es la única cadena de corresponsales bancarios de México que llega a las ciudades pequeñas. Las autoridades podrían permitir que las SOFIPO y las cooperativas tomadoras de depósitos ya presentes en esas áreas incorporaran corresponsales en las mismas condiciones que los bancos (esto es, con operaciones financiadas en su totalidad y en tiempo real). De este modo, estas instituciones financieras podrían ampliar su ámbito de cobertura geográfica y ofrecer a sus clientes servicios más convenientes. Se debe tener en cuenta que para permitir a las SOFIPO y a las cooperativas actuar como corresponsales bancarios, será necesario modificar las leyes que rigen su funcionamiento. Asimismo, las instituciones financieras, incluidas las entidades públicas, podrían sumar nuevas redes para que oficiaran de corresponsales bancarios. Por ejemplo, si se utilizara la totalidad de la amplia red de tiendas Diconsa de alimentos subsidiados para las zonas rurales, las gasolineras Pemex y las cajas de ahorro, se ampliarían las posibilidades de ofrecer instrumentos de ahorro básico. –– Los esfuerzos por ampliar los tipos de transacciones que se realizan a través de corresponsales bancarios respaldan la inclusión financiera. Si bien las normas vigentes permiten abrir cuentas de depósito de bajo riesgo, son muy pocos los bancos que lo hacen a través de corresponsales. En la actualidad, muchos agentes bancarios ofrecen solo un número limitado de operaciones, de modo que los puntos de acceso y uso son restringidos. Formular los argumentos comerciales que persuadan a las instituciones financieras de ofrecer otros productos y servicios a través de correspon- sales constituye un desafío clave. –– Las autoridades mexicanas podrían fortalecer las normas para conformar una red más sólida y abierta de pagos mediante teléfonos celulares. Por ejemplo, si se establecieran normas que permitieran la interoperabilidad del sistema de pagos por telefonía móvil, se podría garantizar a los consumidores la posibilidad de realizar transacciones sin importar el banco o el operador de telefonía celular que hubieran elegido. Actualmente para determinados servicios financieros no hay interoperabilidad entre los pres- tadores de servicios de telecomunicaciones y en algunos casos, tampoco entre los bancos, lo que limita el crecimiento del mercado. La promoción de nuevos modelos de negocios que respaldan el crecimiento de una red de pagos por telefonía móvil (como los sistemas de puntos de venta móviles) 61 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO ha dado resultados alentadores en otras economías en desarrollo y ha comenzado a implementarse también en México. –– Con la ampliación de los programas prometedores dirigidos a extender el acceso financiero en las zonas rurales, los mexicanos tendrán más oportunidades de ahorrar y participar en otras transacciones financieras formales. En un proyecto piloto encarado recientemente por Telecomm en Oaxaca, se observó que, luego de instalar la infraestructura de una red de telefonía móvil y de suministrar teléfonos celulares a la población, el 48% de los participantes en la experiencia piloto se convir- tieron en “ahorristas”, con saldos superiores a los 100 pesos, y el 33%, en usuarios activos de los servicios financieros móviles (CGAP, 2013). Los parti- cipantes recibieron capacitación sobre cómo usar dichos servicios, lo que constituye otro ejemplo del “momento propicio” para brindar educación financiera. –– Las autoridades mexicanas podrían promover la comercialización de cuentas bancarias básicas. En 2007, el Congreso mexicano aprobó una ley que disponía que todas las instituciones que recibieran depósitos debían ofrecer cuentas de sueldo básicas. En la actualidad hay cerca de 24 millones de este tipo de cuentas, en su mayoría asociadas con el cobro de sueldos de empleados formales. En un estudio realizado por Giné, Martínez‑Cuéllar y Mazer (de próxima aparición) a partir de numerosas visitas de “clientes misteriosos” a instituciones financieras, se observó que, si bien la ley mexicana exige que todos los bancos ofrezcan cajas de ahorro básicas, en más de 100 ocasiones esto no ocurrió, a pesar de que este producto de bajo costo se ajustaba a las necesidades de muchos de los consumidores que participaban en el ejercicio. Es posible que este tipo de cuentas bancarias no hayan generado el impacto previsto en el acceso de los consumidores de bajos ingresos a los servicios de ahorro. Para mejorar esta situación, podrían establecerse normas de comercialización más espe- cíficas en virtud de las cuales los proveedores den a conocer a sus clientes la existencia de este producto. –– Se podrían fomentar los programas que propiciaran los vínculos entre productos informales y formales, por ejemplo, entre tandas y bancos. En Egipto se combinó el modelo de asociaciones de ahorro y crédito rotativo (RoSCA) con seguros bancarios a fin de proteger los ahorros de los miembros de dichas asociaciones en caso de que uno de ellos incum- pliera con los pagos (El Gamal y cols., 2011). De manera similar, el Banco Nacional para el Desarrollo Rural de India (NABARD) cuenta desde 1992 con un programa que vincula grupos informales de autoayuda (que recolectan 62 CAPÍTULO 7.  C onclusiones y recomendaciones pequeños montos ahorrados por sus miembros) con bancos. Los bancos tratan con el grupo y no con cada uno de sus miembros, lo que permite minimizar los costos de transacción de estos depósitos relativamente pequeños a la vez que se pagan tasas de interés de mercado. 5. Se deben respaldar las intervenciones orientadas a la protección del consumidor que ayuden a mitigar los efectos de la falta de conoci- mientos financieros formales en ciertos segmentos de la población del país. –– Las autoridades mexicanas designadas podrían exigir a las instituciones financieras reguladas que incorporaran las buenas prácticas referidas a la difusión de información y los esquemas de fijación de precios en su relación con los consumidores financieros. En un estudio sobre el uso de las administradoras de fondos para el retiro (AFORES) de México, se concluye que los trabajadores con escasos conocimientos financieros están en mejores condiciones para analizar y comparar los aranceles que cobran dichos fondos cuando se los presenta como costos totales en pesos, y no como tasa porcentual anual (Hastings y Tejada-Ashton, 2008). En un estudio encarado por el Grupo Consultivo de Ayuda a los Pobres (CGAP), la CONDUSEF y el Banco Mundial, se consignan resultados similares respecto de la comprensión de los consumidores sobre los porcentajes. Se señala también que incluso los vendedores de los productos finan- cieros tenían escasos conocimientos sobre las definiciones de términos clave que debían transmitir a sus clientes, como el costo total anual o la ganancia total anual de las cajas de ahorro y las tarjetas de crédito (Giné, Martínez-Cuéllar y Mazer, de próxima aparición). En consecuencia, en el caso de los productos de crédito al consumo, el costo total anual debería presentarse como el “monto total que usted paga”, expresado en pesos y no como porcentaje. Los investigadores sugieren también otras medidas, como lograr que los bancos muestren a los nuevos consumidores, a modo de ejemplo, los perfiles de usuarios que más se acerquen a su comporta- miento (usuario ocasional o usuario frecuente), de modo de facilitarles las decisiones respecto de las diversas características de los productos. Las autoridades mexicanas podrían también tomar medidas para promover el control de los impulsos, por ejemplo, solicitar a las empresas emisoras de tarjetas de crédito que permitan a los usuarios fijar topes de consumo más bajos que los que estas aprobaron. –– Será esencial establecer regulaciones de la conducta de mercado para las operaciones que se realizan fuera de la infraestructura bancaria tradi- cional. Es posible que, a medida que se desarrollen nuevos métodos de 63 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO transacción, como la banca móvil, o que surjan nuevos tipos de corres- ponsales, las autoridades competentes deban adaptar la regulación para reflejar estas nuevas modalidades. 6. Los programas escolares de educación financiera podrían ayudar a resolver las deficiencias en las conductas y en los conocimientos finan- cieros señaladas en este informe, pero deberían diseñarse e implemen- tarse con atención, en vista de que hasta la fecha las iniciativas de este tipo encaradas en el mundo han tenido resultados dispares. –– Las autoridades mexicanas podrían poner en práctica programas esco- lares cuidadosamente diseñados para brindar con regularidad capacita- ción sobre finanzas a los jóvenes antes de que deban tomar decisiones financieras clave. En el diálogo que se desarrolla en la actualidad sobre el sistema de educación pública de México, se debate si se deben aumentar las horas de clase y dar más espacio a la educación experiencial. Estos dos elementos ofrecen oportunidades para incluir contenidos de educa- ción financiera. Se pueden extraer ideas de los programas ya existentes de educación financiera en escuelas. Por ejemplo, en el trabajo de Bruhn y colaboradores (2013) se presenta la evaluación aleatoria de un programa de este tipo en escuelas públicas brasileñas, en el que se incorporaban módulos de educación financiera en distintas áreas del plan de estudio y se exigían tareas integradas que involucraban la planificación del presupuesto familiar. Los autores encontraron efectos positivos en los comportamientos, las actitudes y los conocimientos financieros, por ejemplo, un aumento del 24% en las tasas de ahorro de los estudiantes, así como efectos secunda- rios en sus padres, como el incremento del 17% en la cantidad de padres que llevaban un control de los gastos mensuales. Los programas escolares de educación financiera podrían combinarse con otros que fomentaran el uso responsable de productos financieros, como la apertura de cuentas de ahorro para jóvenes. Una vez diseñados los cursos, también podrían dictarse a través de las “telesecundarias”, transmisiones televisivas mediante las cuales se imparte educación secundaria en zonas rurales o de difícil acceso. –– Las autoridades mexicanas deberían tener en cuenta los resultados dispares de los programas de educación financiera a la hora de planificar el marco normativo correspondiente. Los programas ofrecidos por instituciones financieras son particularmente complejos. Bruhn, Ibarra y McKenzie (2013) describen un curso de conocimientos financieros ofre- cido por una institución del sector en Ciudad de México y concluyen que la participación en programas voluntarios es extremadamente baja y que 64 CAPÍTULO 7.  C onclusiones y recomendaciones los beneficios de la capacitación son modestos (un aumento del 9% en los conocimientos financieros y del 9% en los ahorros, pero ningún impacto en el comportamiento relacionado con las tarjetas de crédito, los ahorros para la jubilación o el endeudamiento). Si bien estos cursos pueden ser bene- ficiosos para algunos segmentos de la población (como las personas con un nivel educativo más elevado, acostumbradas a aprender en un entorno escolar), probablemente se necesiten otros tipos de intervenciones para llegar a otros sectores de la comunidad. 7. Es necesario realizar análisis constantes para respaldar la promoción de las capacidades financieras en México. –– Tomando como referencia el exhaustivo conjunto de datos sobre capaci- dades financieras que se utilizó para elaborar este informe, las autoridades mexicanas podrían realizar el seguimiento de un subgrupo más acotado de preguntas de la encuesta sobre capacidades financieras, tal vez como parte de la encuesta nacional sobre inclusión financiera (ENIF). Si se la diseñara adecuadamente, una encuesta de este tipo permitiría evaluar el impacto de los programas de educación financiera a lo largo del tiempo. Asimismo, se podrían encarar con más frecuencia actividades de segui- miento y evaluación utilizando los indicadores recomendados por el G-20 en materia de capacidades financieras, que están actualmente en proceso de elaboración. –– Las autoridades mexicanas también podrían decidir participar en la próxima ronda del ejercicio sobre conocimientos financieros del Programa Internacional de Evaluación de Alumnos (PISA) de la OCDE. De este modo, se podría saber con mayor detalle cuáles son las defi- ciencias y los aspectos positivos de los conocimientos financieros de los jóvenes, y el país podría comparar los resultados obtenidos por sus estu- diantes con los de muchos otros países de la OCDE. –– Podrían encararse nuevas investigaciones para analizar los vínculos entre la encuesta sobre las capacidades financieras y otras fuentes de datos de México. 65 APÉNDICE A Construcción de los puntajes de las capacidades financieras El texto en las secciones A.1 y A.2 viene desde Kempson, Perotti y Scott (2013: 58–61), a publicación del Fondo Fiduciario de Rusia. El objetivo principal del proyecto del Fondo Fiduciario de Rusia fue elaborar indicadores de las capacidades finan- cieras tan neutrales como fuera posible respecto de la cultura, la educación o el nivel de ingresos. Una de las principales preguntas que debían responderse a partir del análisis empírico se refería a la posibilidad de construir unidades de medida válidas que pudieran utilizarse para comparar países. A.1 IDENTIFICACIÓN DE LOS COMPONENTES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS El objetivo del análisis es elaborar un puntaje Sc para cada componente c de las capa- cidades financieras (c = 1,…, C, donde el número de componentes C es desconocido) con la forma de una combinación lineal de las variables (estandarizadas) V1,V2,…, VK contenidas en el conjunto de datos, que tienen una matriz de correlación ∑: V1 − µ1 V − µ2 V − µK Sc = w c 1 + w c2 2 + w cK K σ1 σ2 σK donde μi y σi denotan respectivamente la desviación media y estándar de Vi, y las ponderaciones w son desconocidas. Una ventaja clave del análisis factorial —el enfoque utilizado por el equipo a cargo del proyecto— es que las ponderaciones atribuidas a cada componente no están determinadas de antemano, sino que se calculan mediante el análisis empírico y, por ende, reflejan la importancia de cada variable en el contexto de interés. Una ponderación específica wci (que denota la importancia de la variable i-ésima para el componente c) puede ser incluso cero, lo que significa que la variable i no es en absoluto relevante para el componente c. Esto significa que no estamos determinando de antemano ni el número ni la índole de los componentes. Por ejemplo, si hay 10 variables en el conjunto de datos, quizá encon- tremos dos componentes en total: el primero es una combinación de únicamente la primera, la tercera y la décima variables, mientras que las restantes variables son solo relevantes para el segundo componente. Al analizar qué variables específicas son pertinentes para un componente en particular, se puede determinar su natu- 67 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO raleza y comparar los resultados con las manifestaciones surgidas de los grupos de estudio. Si los componentes son comparables con los conceptos elaborados a partir de los grupos de estudio, pueden considerarse medidas confiables de esos conceptos. Hay varios procedimientos para extraer componentes. Un método que se aplica con frecuencia es el análisis de componentes principales (ACP), que capta todas las varianzas de las variables y es la técnica más adecuada cuando aún no se han vali- dado las escalas de medición. El ACP se basa en la maximización de la varianza de S1 para hallar las ponderaciones para el primer componente (w11, …, w1K), la maximi- zación de la varianza de S2 para hallar las ponderaciones del segundo componente (w21, …, w2K), y así sucesivamente. Las ponderaciones que resuelven este problema de maximización son una función de la matriz de correlación entre los componentes, y de sus valores propios y vectores propios. Este método produce una matriz Λ de cargas factoriales, que representa la correlación entre cada variable y los compo- nentes. Las columnas de esta matriz equivalen a los vectores propios de la matriz de correlación ∑, ampliados por la raíz cuadrada del valor propio correspondiente. Hay también otros métodos para la extracción de componentes, entre los que figuran la factorización del eje principal (con la que se reduce la varianza explicada por los componentes a la varianza compartida entre las variables, no a la varianza total) y la máxima verosimilitud (que tiene como objetivo reproducir la matriz de correlación. Es conveniente aplicar la factorización del eje principal cuando se presume una estructura a priori clara para las escalas y los constructos del análisis. La máxima verosimilitud permite poner a prueba la idoneidad estadística de la solución del componente. Un método completamente distinto es el del análisis factorial confirmatorio, en el cual las relaciones estructurales entre las variables están determinadas a priori y se ponen a prueba utilizando la estimación de máxima verosimilitud. Dado que el proyecto del Fondo Fiduciario de Rusia tenía el objetivo de elaborar mediciones de las capacidades financieras, se privilegió un tipo de análisis exploratorio, por lo cual se seleccionó el ACP como técnica principal. En el ACP se extraen tantos componentes como variables incluidas en la matriz de correlación, en orden decreciente de varianza explicada. Típicamente, los primeros componentes ya explican un gran porcentaje de la varianza, por ejemplo, más del 50%. En cierto punto, la contribución marginal de un componente se vuelve dema- siado baja, y los componentes restantes pueden obviarse. Uno de los criterios que se aplican habitualmente para decidir el número de componentes que se conservarán es que el valor propio sea mayor que 1, lo que significa que el componente explica más que la varianza promedio explicada por cada componente. Otro criterio, que a menudo se utiliza en combinación con el del valor propio, es la prueba de sedimen- tación (scree test), en la que los valores propios se muestran gráficamente frente a 68 Apéndice A.  Construcción de los puntajes de las capacidades financieras los componentes. Dado que los componentes principales están ordenados de mayor a menor, en un principio los valores propios caen con rapidez, para luego nivelarse. Por lo general se observa un quiebre entre la pendiente de la línea trazada a través de los primeros valores propios y la pendiente de la línea trazada entre los restantes valores propios. Este quiebre entre las dos líneas indica que debe retenerse el número de componentes ubicados antes del quiebre y que la contribución marginal de los componentes restantes es demasiado baja para que se los incluya. Se recomienda incluir al menos tres mediciones en el ACP, varias de las cuales debe- rían estar significativamente relacionadas. Para verificar si el conjunto de variables elegidas es adecuado para el ACP, por lo general se calcula la medida de adecua- ción de la muestra de Kaiser, y se considera que los valores superiores a 0.60 son adecuados (Tabachnick y Fidell, 2001). Si bien los componentes principales explican la varianza común entre las variables, las ponderaciones de los componentes (reflejados en la matriz de cargas) no pueden interpretarse fácilmente. La solución inicial de ACP representa las variables en el espacio ortogonal del componente. Al rotar el espacio, se pueden representar las variables de manera tal que estén máximamente correlacionadas con determinados componentes, lo que indica validez convergente, y mínimamente con otros, lo que indica validez discriminante. La rotación da como resultado ponderaciones elevadas para algunos componentes y bajas para otros componentes de la misma variable. La matriz rotada de cargas del componente puede interpretarse con mayor facilidad, dado que, por lo general, cada componente está relacionado con un conjunto parti- cular de variables y no con las restantes. La interpretación prosigue entonces a partir de la naturaleza de las variables de carga elevada. Por ejemplo, un componente que está estrechamente vinculado con preguntas tales como “Al recibir su dinero, ¿planea cómo usarlo?”, “¿Usted planea exactamente cómo usar el dinero o solo hace un plan aproximado?” y “¿Usted respeta el plan para usar su dinero?” puede interpretarse como referido a la “planificación del presupuesto”. La rotación puede lograrse de diversos modos; los principales son la rotación ortogonal, en la que se presupone que los componentes no están relacionados, y oblicua, en la que los componentes pueden estar correlacionados. Si no se conoce de antemano la estruc- tura de los datos, es recomendable aplicar primero un ACP con rotación oblicua y, si las correlaciones entre los componentes es baja (por ejemplo, inferior a 0.32), presentar entonces la rotación ortogonal, dejando de lado las correlaciones bajas (Tabachnick y Fidell, 2001). Los problemas de interpretación surgen cuando la misma variable tiene más de una carga elevada, en cuyo caso no se pueden interpretar los componentes de manera unívoca. En ocasiones, esto se resuelve eliminando esa variable del análisis. 69 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO Para evaluar la confiabilidad de los componentes, se utiliza el alfa de Cronbach, que se basa en el número de elementos vinculados con un componente (cuantos más elementos, mayor será la coherencia interna) y en la correlación promedio entre los elementos. El coeficiente alfa de Cronbach va de 0 a 1, y por lo general se considera que los valores superiores a 0.65 denotan una confiabilidad satisfactoria. Los resultados del análisis muestran que 10 componentes pueden ser identificados en cada país y que su composición es comparable entre los países. Dos compo- nentes adicionales fueron identificados, pero sólo aplican a sub-segmentos de la población (personas menores a 60 años y personas que personalmente eligen productos financieros). Estos componentes se detallan en el capítulo 6 de Kempson, Perotti y Scott (2013). A.2 CONSTRUCCIÓN DE LOS PUNTAJES DE LOS COMPONENTES Una vez que se identifica un grupo de variables que contribuye al mismo compo- nente, se puede calcular un único puntaje para cada individuo en relación con dicho componente; para esto, se pondera cada variable por los coeficientes obtenidos a través del ACP. El procedimiento utilizado con mayor frecuencia para obtener los coeficientes w es el enfoque de regresión, que calcula la matriz de los coeficientes de los puntajes como Λ∑−1. Los puntajes de los componentes están estandarizados (tienen varianza media y unitaria cero) y en principio pueden oscilar entre −∞ y +∞. Sin embargo, dado que el rango de valores de las variables observadas es limitado, el rango de los puntajes de los componentes también lo es. Una manera de presentar los puntajes de los componentes que resulta más fácil de interpretar consiste en ubicarlos entre los extremos formados por las respuestas de una persona sumamente incapaz (cuya puntuación sería 0) y las de alguien extremadamente capaz (cuya puntuación sería 100). Este procedimiento equivale a tener (hipotéticamente) los cuestionarios de estas dos personas ubicadas en los extremos opuestos del espectro, luego calcular sus respectivos puntajes y utilizarlos para ajustar la escala. La fórmula para ajustar la escala es la siguiente: S* = 100*(S − a)/(b − a) donde S es el puntaje original del componente, a es la puntuación mínima y b, la máxima. A.3 COMPARACIÓN DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS Se utilizó el análisis de regresión para analizar en qué medida las características individuales de los encuestados se relacionaban con cada uno de los 10 compo- nentes de las capacidades financieras. En el cuadro que se incluye a continuación se presentan las estadísticas resumidas de la muestra para las covariantes utilizadas 70 Apéndice A.  Construcción de los puntajes de las capacidades financieras en las regresiones. Todas las variables son binarias (equivalen a 1 si la categoría es aplicable al encuestado y a 0 en caso contrario), excepto el número de adultos que conforman el hogar y el puntaje de los conocimientos financieros. Los valores medios que se presentan para las variables binarias se interpretan de la siguiente manera: por ejemplo, si “mujeres” equivale, en promedio, a 0.53, significa que el 53% de la muestra son mujeres. 71 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO A.1  ESTADÍSTICAS SOBRE FACTORES SOCIODEMOGRÁFICOS CLAVE DE LA MUESTRA DESVIACIÓN VARIABLE MEDIA ESTÁNDAR Mujeres 0.53 0.50 De 18 a 30 años 0.29 0.46 De 31 a 40 años 0.25 0.43 De 41 a 50 años 0.19 0.40 De 51 a 60 años 0.12 0.33 Más de 60 años 0.14 0.35 Educación primaria como máximo 0.36 0.48 Educación secundaria 0.55 0.50 Educación terciaria 0.09 0.28 Número de miembros del hogar mayores de 18 años 2.82 1.17 Conviven con su pareja 0.69 0.46 Tienen hijos a cargo 0.55 0.50 Zona rural 0.38 0.49 Grupo de ingreso 1 0.37 0.48 Grupo de ingreso 2 0.34 0.47 Grupo de ingreso 3 0.17 0.37 Grupo de ingreso 4 0.13 0.33 Tiene productos financieros 0.51 0.50 E1: Empleado formal 0.24 0.43 E2: Empleado informal 0.15 0.36 E3: Autónomo 0.03 0.16 E4: Desempleado 0.05 0.22 E5: En espera de la temporada de trabajo 0.02 0.14 E6: Estudiante 0.04 0.19 E7: Jubilado 0.04 0.20 E8: Enfermo 0.01 0.12 E9: Tareas domésticas 0.27 0.44 E10: Otros 0.15 0.35 Puntaje de los conocimientos financieros 2.79 1.27 Responsable por el día a día 0.74 0.44 Responsable de la planificación 0.75 0.44 Responsable de la elección de prod. fin. 0.66 0.74 Estacionalidad de los ingresos: sin ingresos 0.10 0.30 Estacionalidad de los ingresos: ingresos variables 0.60 0.49 Estacionalidad de los ingresos: ingresos estables 0.30 0.46 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: n = 2,022. 72 APÉNDICE B Segmentación de la población mediante el análisis de conglomerados Este apéndice se basa en análisis contenidos en el informe del Fondo Fiduciario de Rusia, en los que se resumen los resultados de todos los países que se incluyeron en el proyecto sobre capacidades financieras (Kempson, Perotti y Scott 2013). El equipo a cargo del proyecto utilizó el análisis de conglomerados para segmentar la población en grupos que presentaran niveles de capacidades similares. Este proce- dimiento iterativo reúne individuos en grupos con características comunes que los distinguen de otras personas (en este caso, un grado similar de puntos fuertes y defi- ciencias en cuanto a capacidades financieras). Este enfoque se utilizó, por ejemplo, en el Reino Unido y en los Países Bajos. El proceso de elaboración de conglomerados consta de dos pasos: el análisis de proximidad (para calcular las medidas de disimilaridad entre los encuestados) y el análisis jerárquico de conglomerados (para determinar cuántos se utilizarán). A conti- nuación se describen estos pasos. B.1 ANÁLISIS DE PROXIMIDAD Solo se requiere este paso si no se puede elaborar una única medida para las capacidades financieras. En este caso, es necesario comparar los individuos respecto de numerosas dimensiones, calculando una medida de disimilaridad que tenga en cuenta todas las dimensiones. Para calcular la disimilaridad se pueden aplicar diversos métodos, pero uno de los más comunes es la distancia euclídea al cuadrado, que se define de la siguiente manera: d ( X ,Y ) = ∑ ( X i − Yi )2 i donde Xi e Yi son los valores de la variable i-ésima para los individuos X e Y. En otras palabras, la distancia entre dos observaciones se calcula como la suma de los cuadrados de las diferencias entre los valores de las observaciones. Nótese que esta medida no debe interpretarse como el índice general de las capacidades, sino simple- mente como un método práctico para detectar a los individuos con puntajes similares en las diversas dimensiones de las capacidades. 73 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO B.2 ANÁLISIS JERÁRQUICO DE CONGLOMERADOS Las distancias entre los encuestados sirven como punto de partida para el análisis jerárquico de conglomerados, en el que se determina el número de conglomerados (grupos de encuestados) que se utilizará. En el procedimiento, inicialmente se asigna cada uno de los N encuestados a un conglomerado distinto, de modo que en la primera iteración hay N conglomerados. En un máximo de N−1 pasos consecutivos, se fusionan dos conglomerados similares (esto es, separados por una distancia lo suficientemente pequeña). Los conglomerados que se combinan en etapas poste- riores presentan más disimilitudes que los que lo hacen en las primeras fases. Si en pasos adyacentes, las variaciones dentro del conglomerado se vuelven demasiado grandes, es señal de que los dos grupos son demasiado distintos y de que se debe concluir el proceso antes de fusionarlos. Las diferencias de la suma minimizada de cuadrados dentro de un conglomerado que se observan entre dos pasos se utilizan para determinar el número de conglomerados (método de Ward, véase Bacher y otros, 2010). Podemos describir los tipos de personas que tienden a ubicarse en cada uno de los conglomerados resumiendo sus características sociodemográficas (edad, género, relación con el jefe de familia, educación, ingresos, etc.) en un análisis de la varianza (este procedimiento se denomina “elaboración de perfiles”). Asimismo, se pueden calcular los modelos de regresión de modo de analizar todas estas características de manera conjunta. Por ejemplo, al estimar un modelo de regresión lógica para la probabilidad de pertenecer a cada uno de los conglomerados, quizá encontramos que las personas con ciertas características demográficas específicas (como mujeres o encuestados con hijos a cargo) tienen más probabilidades de pertenecer a un conglomerado en particular, en comparación con personas que presentan otros rasgos. En el gráfico B.1 se muestran los resultados del análisis de conglomerados y se consigna el puntaje promedio de cada conglomerado en los 10 componentes de las capacidades financieras 74 Apéndice B.  Segmentación de la población mediante el análisis de conglomerados GRÁFICO B.1  PUNTAJES DE LOS COMPONENTES DE LAS CAPACIDADES FINANCIERAS, POR CONGLOMERADO GRUPO 1 GRUPO 2 GRUPO 3 GRUPO 4 GRUPO 5 n Orientación al logro de objetivos 78.11 84.69 81.64 84.30 90.99 n Comportamiento no impulsivo 52.23 61.15 40.42 70.18 69.25 n Actitud respecto del futuro 30.92 33.09 30.68 36.39 40.26 n Ahorro 33.95 44.99 56.14 78.42 77.20 n Cobertura de gastos imprevistos 49.04 38.13 87.12 87.44 86.92 n No gastar en exceso 71.62 72.32 47.26 69.53 75.89 n Uso de la información 60.81 70.50 71.92 76.37 79.23 n Seguimiento de los gastos 24.88 34.23 62.29 51.23 40.14 n Vivir de acuerdo a las propias posibilidades 76.41 77.63 67.28 85.56 82.93 n Planificación del presupuesto 1.01 73.62 74.89 2.63 75.59 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. 75 APÉNDICE C Los jóvenes y las capacidades financieras En esta sección se compara la población joven, de 18 a 24 años, con la población adulta en relación con los conocimientos, las actitudes y los comportamientos finan- cieros con el fin de obtener información sobre una población que suele ser objeto de iniciativas de educación financiera. Los jóvenes están ingresando en un mercado de servicios financieros que se vuelve cada vez más complejo debido a los avances tecnológicos y la desregulación financiera. Asimismo, no todos los padres están en las mismas condiciones para transmitir conocimientos sólidos de gestión financiera. Las investigaciones muestran que las capacidades financieras se correlacionan estrechamente con el nivel económico y educativo de la familia, y que las desigual- dades en las capacidades financieras persisten a través de las generaciones (Lusardi, Mitchell y Curto, 2010). Por lo general, las poblaciones urbanas y de ingresos altos tienen más probabilidades de acceder a servicios financieros. En el caso de los padres más pobres, es posible que su nivel educativo (y por lo tanto sus conoci- mientos financieros) sea inferior al de sus hijos. El rango de edad de las personas que participaron en la encuesta sobre las capaci- dades financieras en México va de los 18 a los 97 años, con una mediana de 39. A los efectos de este análisis, se entiende por “joven” la persona que tiene entre 18 y 24 años. La población adulta se divide en dos categorías: los que tienen entre 25 y 59 años (por lo general, el rango de edad de quienes participan activamente en la fuerza de trabajo) y los de 60 años o más (que aquí se consideran adultos mayores). C.1 EDUCACIÓN, EMPLEO Y PARTICIPACIÓN EN LA TOMA DE DECISIONES FINANCIERAS Los jóvenes mexicanos tienen, en promedio, un nivel educativo más alto que el de las cohortes de mayor edad. La gran mayoría de los jóvenes (84%) completó la educación secundaria, en comparación con tan solo el 66% del grupo de 25 a 29 años y el 68% del grupo de 30 a 39. El 22% de los encuestados jóvenes en México son estudiantes, mientras que en el grupo de entre 25 y 29 años, solo el 2% estudia. La mayor parte de los jóvenes tiene empleo en el sector formal o informal, o está estudiando. El empleo formal alcanza el pico más alto en el grupo de personas de 25 a 29 años. El sector formal emplea al 22% de los jóvenes y al 42% de los adultos 77 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO C.1  NIVEL EDUCATIVO, POR EDADES Porcentaje 100 80 60 Terciaria Secundaria 40 Primaria 20 0 18–24 25–29 30–39 40–49 50–59 60–69 70–79 ≥ 80 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. GRÁFICO C.2  EMPLEO EN LOS JÓVENES (DE 18 A 24 AÑOS) Empleados, sector formal 22% Otros Empleados, 9% sector informal 14% Tareas domésticas/ Cuentapropistas, cuidado del hogar agricultores 18% 3% Buscan trabajo Estudiantes 10% 21% Enfermos/ Esperan temporada discapacitados de trabajo < 1% 3% Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: n = 267 (136 varones, 131 mujeres). de entre 25 y 29 años. En el grupo de personas de entre 30 y 49 años, las tasas de empleo formal rondan el 30% y decaen abruptamente en el grupo de entre 50 y 59 años, con un 16%. Una proporción significativa de los jóvenes mexicanos (17%) trabaja en el sector informal o es cuentapropista. El 34% de las jóvenes mexicanas de entre 18 y 24 años indica que no trabaja fuera de su casa. La proporción de mujeres amas de casa se incrementa considerablemente con la edad y llega al 52% en las de 25 a 60 años y al 67% en las de 60 años y más. Los jóvenes mexicanos son menos proclives que los adultos a contribuir al hogar y a participar en las decisiones financieras de la familia. Los jóvenes de entre 18 y 78 Apéndice C.  Los jóvenes y las capacidades financieras 24 años son los menos propensos a contribuir al presupuesto y participar en las decisiones financieras del hogar. Solo el 51% de este grupo contribuye al presu- puesto familiar y solo el 55% participa en las decisiones financieras. La mayor parte de los jóvenes mexicanos de entre 18 y 24 años (el 59%) declara vivir con sus padres, mientras que en la cohorte de 24 a 29 años, la proporción es del 32%. El 37% de los jóvenes indica que son los principales responsables de sus gastos personales, mien- tras que entre los adultos de 25 a 59, el porcentaje es del 66% y entre los de más de 60, del 63%. Solo el 11% de los jóvenes indica que son jefes de hogar y responsables tanto de sus gastos personales como de los del hogar, mientras que entre los adultos de 25 a 59 años el porcentaje es del 47% y entre los de más de 60, del 64%. C.2 COMPORTAMIENTOS, ACTITUDES Y CONOCIMIENTOS FINANCIEROS En general, los jóvenes mexicanos muestran puntajes ligeramente más elevados que los adultos en la mayoría de las medidas de conocimientos financieros; sin embargo, dicha ventaja no resulta significativa a los fines estadísticos. Si bien los jóvenes obtienen puntuaciones ligeramente más altas en las preguntas sobre conocimientos financieros que el grupo de 60 años o más, sus conocimientos son en gran medida equiparables a los de los adultos de entre 25 y 59 años (gráfico 4.5). Esto no sorprende, dado que el nivel educativo medio de los jóvenes es más elevado que el de las personas de más edad. A medida que aumente el poder adquisitivo del grupo de 18 a 24 años y a medida que sus miembros logren independencia financiera, es de esperar que mejoren sus conocimientos en esta materia hasta superar el nivel de la actual cohorte de adultos. Los grupos más jóvenes tienden a comprender cómo disminuye el valor del dinero a causa de la inflación: el 58% de los jóvenes y los adultos mexicanos de entre 25 y 59 años señaló que comprende el valor del dinero en el tiempo (inflación), mientras que entre las personas de más de 60 años, la proporción fue de solo el 46%. La mayoría de los jóvenes sabe hacer una división simple (85%) y comprende el concepto de tasa de interés (82%). Los jóvenes están más preocupados por el futuro que los grupos de más edad. Las actitudes constituyen un nexo decisivo entre los conocimientos y las conductas. Al analizar las capacidades financieras de los jóvenes, resulta particularmente inte- resante observar cómo dan mayor prioridad a las necesidades de corto plazo, qué nivel de impulsividad tienen y en qué medida están orientados al logro de objetivos. Solo el 37% de los jóvenes está completamente de acuerdo con la afirmación “Dios proveerá”, en comparación con el 45% de los adultos de entre 25 y 59 años y el 63% de los adultos mayores (gráfico 4.6). Sin embargo, al parecer esta preocupación no se traduce en una planificación en función de las necesidades de más largo plazo, como indica el nivel de respuestas positivas a las preguntas sobre la tendencia a vivir para el presente y enfocarse en el corto plazo. Del análisis de las respuestas a las preguntas sobre actitudes y orientación al logro de objetivos se concluye que, 79 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO GRÁFICO C.3  PUNTAJES MEDIOS PARA EL ÍNDICE COMPUESTO REFERIDO A LAS ACTITUDES, POR EDAD Puntaje del indice compuesto referido a las actitudes 100 80 rango intercuartil 60 la median 40 20 0 18–24 25–29 30–39 40–49 50–59 60–69 70–79 ≥ 80 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. si bien los jóvenes son más impulsivos para hablar y actuar, su orientación al logro es comparable a la de las cohortes de más edad. Para las actitudes se elaboró un puntaje compuesto que se basa en las respuestas individuales a las preguntas sobre actitud respecto del futuro, comportamiento no impulsivo y orientación al logro de objetivos. Como se muestra en el gráfico C.3, los jóvenes tienen el puntaje promedio más bajo de todos los grupos: 59 de 100. Sin embargo, las diferencias entre los puntajes de los jóvenes y los grupos de más edad no son significativas desde el punto de vista estadístico. Si bien los comportamientos financieros varían de un grupo etario a otro, dicha varia- ción es menor que en el caso de los conocimientos financieros. En los indicadores de gestión financiera adecuada, como los referidos a no gastar de más y a planificar el presupuesto, el puntaje de los jóvenes es ligeramente inferior al de los adultos. Para los jóvenes mexicanos, no gastar en exceso es considerablemente más difícil que para los grupos de mayor edad, y obtienen puntajes mucho más bajos que los adultos en planificación presupuestaria (gráfico 4.7). Esto podría deberse a que afrontan mayores gastos que los adultos, puesto que intentan establecerse profe- sionalmente y fundar un hogar, o por el contrario, a que tienen cierto margen para amortiguar las consecuencias del gasto excesivo dado que, en su mayoría, viven con sus padres. Pocos jóvenes (y adultos) sostienen que hacen el seguimiento activo de sus gastos. El puntaje medio de los jóvenes en seguimiento de los gastos es 35, lo que indica que tienen apenas un conocimiento aproximado de la cantidad de dinero disponible y de la manera en que gastan los fondos. Sin embargo, los jóvenes mexicanos por lo general señalan que viven de acuerdo a sus posibilidades. En el componente referido 80 Apéndice C.  Los jóvenes y las capacidades financieras a esta tendencia obtienen una puntuación promedio de 77, lo que indica tasas de endeudamiento y de préstamos a corto plazo bastante bajas. La mayoría de los jóvenes mexicanos se informa antes de tomar una decisión finan- ciera, aunque ligeramente menos que la población de adultos. El puntaje promedio obtenido por los jóvenes (de entre 18 y 24 años) en el uso de la información es 68, mientras que tanto en el grupo de adultos (25 a 59 años) como el de adultos mayores (más de 60 años), la puntuación fue de 72. La diferencia es más amplia en relación con la selección de entre varios productos financieros. La conducta de los jóvenes es similar a la de adultos en relación con el ahorro, pero estos últimos obtienen mejores resultados en las mediciones referidas a la capacidad para cubrir gastos imprevistos. Los jóvenes mexicanos son significativamente menos proclives que los adultos a obtener información y elegir productos financieros. Solo el 41% de ellos había elegido y adquirido personalmente un producto financiero en los últimos cinco años, mientras que entre los adultos, la proporción era del 54%. 81 APÉNDICE D Metodología para analizar los vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera D.1 RELACIÓN ENTRE LAS CAPACIDADES Y LOS CONOCIMIENTOS FINANCIEROS Para analizar la relación entre las capacidades y los conocimientos financieros, en el cuadro D.1 se muestran los resultados de 10 regresiones de mínimos cuadrados ordinarios obtenidos con la siguiente ecuación: Capacidadfinancierai,m =  + Conocimientosfinancierosi,m + Xi,m + Zm + i,m   (1) donde la Capacidadfinanciera es uno de los 10 aspectos de las capacidades finan- cieras (véase la lista completa en el cuadro D.1), Conocimientosfinancieros es el puntaje obtenido para los conocimientos financieros (véase la definición en el cuadro D.5), X es un conjunto de variables de control referidas a los individuos (véase la lista completa en el cuadro D.7), y Z es un conjunto de variables de control refe- ridas a los municipios (véase la lista completa en el cuadro D.8). Se incluyen las varia- bles de control para aislar la correlación entre las capacidades y los conocimientos financieros que no está impulsada por estas otras variables. Los errores estándar de la regresión están agrupados al nivel municipal. Los números consignados en la primera hilera del cuadro D.1 son los coeficientes  de las 10 regresiones. Esto es, muestran las correlaciones parciales entre los conoci- mientos financieros y cada una de las capacidades, luego de controlar por las carac- terísticas personales y del municipio que podrían estar impulsando esa correlación. Las magnitudes de las correlaciones representan el incremento en cada una de las capacidades financieras para un incremento de una unidad en el puntaje correspon- diente a los conocimientos financieros (como se describe más adelante, esta puntua- ción va de 0 a 8 y representa el número de respuestas correctas a ocho preguntas sobre conocimientos financieros, mientras que las capacidades financieras se miden de 0 a 100). En el gráfico 6.1 del texto principal se muestran gráficamente los resultados incluidos en la primera hilera del cuadro D.1. Los números consignados en este gráfico muestran cuánto aumenta la medida de cada capacidad financiera cuando el puntaje correspondiente a los conocimientos financieros aumenta una desviación estándar (la desviación estándar de este puntaje es 1.8), en donde el incremento en 83 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO D.1  RELACIÓN ENTRE LAS CAPACIDADES Y LOS CONOCIMIENTOS FINANCIEROS VARIABLE DEPENDIENTE: CAPACIDAD FINANCIERA VIVIR DE PLANIFICACIÓN ACUERDO A LAS DEL PRESU- SEGUIMIENTO USO DE LA NO GASTAR EN PROPIAS POSIBI- VARIABLE PUESTO DE LOS GASTOS INFORMACIÓN EXCESO LIDADES Puntaje de los conocimientos 1.536 (0.987) 0.772 (0.801) 0.530 (0.472) 2.712*** (0.619) 1.359*** (0.479) financieros Mujeres 4.910*** (1.857) 1.592 (1.499) 0.536 (1.187) 1.166 (1.190) 1.238 (0.922) Mediana edad (35 a 39 años) 2.433 (1.726) −0.481 (1.657) 0.989 (1.137) 4.653*** (1.532) 1.444 (1.274) Adultos mayores (más de 60 4.953* (2.947) 5.098** (2.422) 2.694 (1.877) 6.814*** (2.287) 5.330*** (1.296) años) Casados 1.017 (2.026) −3.244* (1.784) −0.335 (1.124) −1.123 (1.510) 1.178 (0.968) Educación secundaria 1.376 (2.525) 1.580 (2.114) −2.384 (1.533) -4.842 (1.623) *** −1.706 (1.061) Educación superior 7.205*** (2.713) 1.625 (2.130) −0.865 (1.721) −8.145*** (2.126) 1.390 (1.323) Empleo formal 8.980*** (3.157) 5.984** (2.615) 2.770 (2.027) −5.425** (2.533) −0.227 (1.784) Trabaja −1.572 (2.300) 0.281 (2.171) −2.571 (1.748) −1.526 (1.963) −1.788 (1.372) Ingreso mediano 1.803 (2.278) 5.109** (2.460) 3.293* (1.703) 3.056* (1.739) 2.708*** (0.955) Ingreso alto 9.038** (3.820) 19.801*** (3.026) 10.272*** (1.992) 0.695 (2.613) 1.981 (1.857) Preguntas relacionadas con 16.431*** (4.075) 13.201*** (3.344) 10.883*** (2.682) −1.268 (3.167) −2.618 (2.082) el hogar Zona rural −8.353* (4.902) −1.583 (4.051) −3.475 (2.439) −0.682 (3.157) 2.733* (1.657) Suc. bancarias cada 10,000 −0.240 (2.167) −2.699 (1.724) −1.102 (1.213) −3.544** (1.747) −0.605 (0.939) adultos Corresponsales cada 10,000 −1.808 (1.319) −1.742* (0.905) −0.731 (0.605) 1.415 (1.055) 0.765* (0.441) adultos PIB per cápita 34.657 (78.120) 33.744 (45.979) 16.395 (30.938) −59.161 (44.693) −20.463 (26.396) Región centro-oeste −7.784 (7.116) 2.893 (3.752) 7.415*** (2.856) 8.854* (4.594) 1.052 (2.502) Región noreste −4.204 (3.766) 8.192* (4.395) −0.214 (2.999) 0.397 (4.655) 0.908 (3.193) Región noroeste 6.144 (7.775) 8.395 (6.723) 10.005** (4.189) 29.342*** (5.044) −2.311 (3.061) Región sur/sureste −2.388 (3.800) −6.031* (3.597) 1.890 (2.654) 9.633*** (3.279) −0.072 (2.304) Constante 26.413*** (8.784) 23.678*** (7.015) 57.525*** (4.788) 56.806*** (4.908) 69.899*** (3.864) R al cuadrado 0.082 0.125 0.073 0.142 0.045 Observaciones 1,834 1,834 1,834 1,834 1,834 (Continua en la siguiente página) 84 Apéndice D.  Metodología para analizar los vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera CUADRO D.1  RELACIÓN ENTRE LAS CAPACIDADES Y LOS CONOCIMIENTOS FINANCIEROS (continuación) VARIABLE DEPENDIENTE: CAPACIDAD FINANCIERA COBERTURA DE ACTITUD COMPORTA- ORIENTACIÓN GASTOS IMPRE- RESPECTO DEL MIENTO NO AL LOGRO DE VARIABLE VISTOS AHORRO FUTURO IMPULSIVO OBJETIVOS Puntaje de los conocimientos 1.114* (0.590) 2.583*** (0.629) 1.123** (0.505) 1.739*** (0.638) 1.744*** (0.387) financieros Mujeres 1.830 (1.325) 2.272 (1.442) −1.169 (1.179) 1.860 (1.370) −1.259 (1.032) Mediana edad (35 a 39 años) 1.850 (1.472) −0.517 (1.924) 0.448 (1.437) 5.233*** (1.824) −0.182 (1.004) Adultos mayores (más de 60 2.269 (2.801) 2.229 (3.067) −2.860 (2.003) 7.556*** (2.366) −0.760 (1.748) años) Casados 1.226 (1.365) 1.663 (1.855) 0.340 (1.362) 1.893 (1.488) 1.261 (1.055) Educación secundaria 1.340 (1.972) 0.339 (1.907) 3.344 (1.641) ** 0.609 (1.729) −0.783 (1.445) Educación superior 1.938 (2.536) 2.610 (2.427) 4.526** (2.052) 3.413* (1.958) 0.031 (1.713) Empleo formal −0.094 (2.533) 4.716 (2.895) 0.350 (2.294) −3.198 (2.500) 2.189 (2.150) Trabaja 3.170 (2.046) −2.234 (2.460) −2.396 (1.841) −1.150 (1.990) −1.516 (1.825) Ingreso mediano 2.519 (1.912) 8.468*** (2.434) 3.466** (1.545) 1.600 (1.724) 3.746*** (1.280) Ingreso alto 13.961*** (2.212) 20.515*** (2.294) 3.571 (2.555) 3.606 (2.678) 5.775*** (1.811) Preguntas relacionadas con 12.411*** (3.490) 11.519*** (3.124) 3.690 (2.747) 1.415 (3.704) 4.723** (2.091) el hogar Zona rural 4.461 (2.736) −3.339 (3.330) −0.220 (2.603) 2.351 (2.887) −2.007 (2.226) Suc. bancarias cada 10,000 0.589 (1.429) −1.534 (1.703) −0.538 (1.395) −1.331 (1.294) −2.215 (1.351) adultos Corresponsales cada 10,000 −0.842 (0.823) − 1.337 (0.813) 1.121* (0.637) 1.156* (0.604) 0.594 (0.533) adultos PIB per cápita −7.433 (41.997 −3.762 (56.610 −90.654** (42.47) −65.438* (38.549) 40.333* (23.652) Región centro-oeste − 6.291* (3.487) −2.639 (3.991) −10.812***(3.466) 6.067 (4.017) 2.192 (2.545) Región noreste 5.416 (3.959) 6.961 (4.417) 1.713 (3.995) −6.153* (3.729) -10.092***(3.120) Región noroeste −11.252** (5.592 31.576*** (8.202) 3.232 (5.774) 4.544 (4.755) 13.930*** (2.560) Región sur/sureste −2.687 (3.459) −1.488 (4.141) −2.430 (3.603) 2.072 (3.327) 2.529 (2.015) Constante 39.851*** (5.746) 28.977*** (6.143) 26.738*** (5.174) 41.938*** (6.385) 71.041*** (3.900) R al cuadrado 0.078 0.160 0.066 0.056 0.112 Observaciones 1,834 1,834 1,834 1,834 1,834 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: Los errores estándar robustos, agrupados al nivel municipal, se muestran entre paréntesis. Niveles de significancia estadística: * 10%, ** 5%, *** 1%. 85 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO la medida de la capacidad está ajustado para representar puntos porcentuales de la desviación estándar de la medida de capacidad. D.2 RELACIÓN ENTRE LAS CAPACIDADES, LOS CONOCIMIENTOS Y EL USO DE PRODUCTOS FINANCIEROS Para analizar la relación entre las capacidades, los conocimientos y el uso de productos financieros, en el cuadro 6.1 del texto principal se muestran los resultados de 55 regresiones de mínimo cuadrado ordinario (5 medidas de uso de productos multiplicadas por 11 medidas de capacidades o conocimientos financieros) obte- nidos con la siguiente ecuación: Usodeproductosi,m =  + Capacidadfinancierai,m + Xi,m + Zm + i,m   (2) donde Usodeproductos es una variable ficticia que indica que el individuo i del muni- cipio m declara poseer el producto financiero (véase la lista completa de variables ficticias de uso de productos financieros más abajo en cuadro D.6), Capacidadfinan- ciera es una medida de las capacidades o los conocimientos financieros (véase la lista completa en cuadro D.5), X es un conjunto de variables de control referidas al individuo (véase la lista completa en cuadro D.7), y Z es un conjunto de variables de control referidas a los municipios (véase la lista completa en cuadro D.8). Se incluyen las variables de control para aislar la correlación entre capacidades financieras y uso de productos que no está impulsada por estas otras variables. Los errores estándar de la regresión están agrupados al nivel municipal. Los números consignados en el cuadro 6.1 del texto principal son los coeficientes  de las 55 regresiones. El cuadro D.2 y el cuadro D.3 muestran las regresiones completas para el puntaje de los conocimientos financieros y el índice de capaci- dades financieras. En el gráfico 6.2 del texto principal se representa el porcentaje de individuos con escasa educación financiera que declaran tener cada uno de los productos. Allí se definen las capacidades financieras escasas como las que presentan un índice inferior a la mediana. Las barras correspondientes a los individuos con elevadas capacidades financieras se computan como el porcentaje de personas con escasa educación financiera que declaran tener cada uno de los productos más el coefi- ciente  de la siguiente regresión multiplicado por 100 (para cada producto finan- ciero): Usodeproductosi,m =  + Capacidadesfinancieraselevadasi,m + Xi,m + Zm + i,m   (3) donde todas las variables se definen como en la ecuación (2), con la salvedad de que la Capacidadesfinancieraselevadas es una variable indicadora que corresponde a la persona con un índice superior a la mediana. Los errores estándar de la regresión están agrupados en el nivel municipal. 86 Apéndice D.  Metodología para analizar los vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera CUADRO D.2  CONOCIMIENTOS FINANCIEROS Y USO DE PRODUCTOS FINANCIEROS VARIABLE DEPENDIENTE: VARIABLE FICTICIA QUE INDICA SI EL INDIVIDUO TIENE O PARTICIPA EN ALGUNO DE LOS SIGUIENTES PRODUCTOS PRÉSTAMO PRÉSTAMO DE CUENTA BAN- TARJETA DE CRÉ- PRÉSTAMO BAN- DE CASAS DE FAMILIARES O VARIABLE CARIA DITO CARIO TANDA EMPEÑO AMIGOS Puntaje de los 0.029*** (0.007) 0.017** (0.008) 0.006 (0.005) 0.000 (0.005) 0.005 (0.004) −0.013 (0.009) conocimientos financieros Mujeres −0.003 (0.021) −0.008 (0.018) −0.025* (0.015) 0.055*** (0.017) −0.020 (0.014) −0.011 (0.017) Mediana edad 0.089*** (0.019) 0.076*** (0.018) 0.048*** (0.015) −0.006 (0.016) 0.007 (0.018) −0.011 (0.023) (35 a 39 años) Adultos mayores 0.142*** (0.025) 0.081*** (0.028) 0.039* (0.021) −0.030 (0.022) −0.010 (0.022) −0.080** (0.033) (más de 60 años) Casados −0.008 (0.017) 0.008 (0.016) −0.016 (0.014) 0.009 (0.018) −0.004 (0.012) 0.007 (0.021) Educación 0.020 (0.019) 0.055*** (0.019) 0.045** (0.019) 0.038* (0.020) 0.031* (0.017) 0.003 (0.031) secundaria Educación superior 0.108*** (0.026) 0.106*** (0.026) 0.051** (0.021) 0.001 (0.020) −0.007 (0.021) −0.005 (0.038) Empleo formal 0.094*** (0.028) 0.100*** (0.033) 0.060** (0.030) −0.029 (0.023) −0.057** (0.027) −0.070* (0.036) Trabaja −0.046** (0.021) −0.024 (0.022) −0.019 (0.019) −0.004 (0.020) 0.039* (0.022) 0.022 (0.028) Ingreso mediano 0.080*** (0.020) 0.014 (0.017) 0.034** (0.015) −0.018 (0.021) 0.004 (0.016) −0.047 (0.029) Ingreso alto 0.206*** (0.034) 0.191*** (0.037) 0.105*** (0.029) 0.010 (0.026) −0.013 (0.022) −0.098** (0.038) Preguntas rela- 0.017 (0.034) 0.045 (0.029) 0.048* (0.025) 0.064*** (0.021) −0.029 (0.033) 0.007 (0.051) cionadas con el hogar Zona rural −0.013 (0.032) −0.017 (0.040) −0.037 (0.030) 0.008 (0.023) −0.033* (0.019) 0.025 (0.040) Sucursales −0.004 (0.017) 0.016 (0.015) 0.011 (0.015) −0.007 (0.013) −0.002 (0.012) −0.033 (0.022) bancarias cada 10,000 adultos Correspon- 0.012 (0.009) 0.014 (0.010) −0.006 (0.006) 0.010 (0.006) −0.005 (0.005) 0.005 (0.011) sales cada 10,000 adultos PIB per cápita 0.375 (0.554) 0.449 (0.561) 0.290 (0.271) 0.367 (0.250) 0.219 (0.304) 0.141 (0.536) Región cen- 0.071* (0.043) 0.103** (0.048) 0.012 (0.024) 0.050 (0.032) −0.028 (0.030) 0.037 (0.043) tro-oeste Región noreste 0.068 (0.046) −0.013 (0.034) 0.025 (0.041) −0.033 (0.031) −0.002 (0.030) 0.022 (0.053) Región noroeste −0.028 (0.071) −0.037 (0.077) 0.024 (0.072) −0.088** (0.038) 0.084 (0.052) 0.196** (0.079) Región sur/ 0.063** (0.025) 0.052 (0.034) 0.057** (0.027) 0.021 (0.027) −0.012 (0.027) 0.056 (0.044) sureste Constante −0.244*** (0.069) −0.231*** (0.071) −0.079 (0.049) −0.012 (0.037) 0.118** (0.048) 0.322*** (0.077) R al cuadrado 0.182 0.184 0.072 0.031 0.020 0.039 Observaciones 1,834 1,834 1,834 1,834 1,834 1,834 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: Los errores estándar robustos, agrupados al nivel municipal, se muestran entre paréntesis. Niveles de significancia estadística: * 10%, ** 5%, *** 1%. 87 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO D.3  CAPACIDADES FINANCIERAS Y USO DE PRODUCTOS FINANCIEROS VARIABLE DEPENDIENTE: VARIABLE FICTICIA QUE INDICA SI EL INDIVIDUO TIENE O PARTICIPA EN ALGUNO DE LOS SIGUIENTES PRODUCTOS PRÉSTAMO PRÉSTAMO DE CUENTA BAN- TARJETA DE CRÉ- PRÉSTAMO BAN- DE CASAS DE FAMILIARES O VARIABLE CARIA DITO CARIO TANDA EMPEÑO AMIGOS Índice de capaci- 0.056*** (0.008) 0.037*** (0.010) 0.009 (0.006) −0.005 (0.007) −0.014** (0.006) −0.033*** (0.011) dades financieras Mujeres −0.012 (0.020) −0.007 (0.017) −0.023 (0.015) 0.061*** (0.017) −0.012 (0.013) −0.002 (0.020) Mediana edad 0.074 (0.019) *** 0.066 (0.016) *** 0.042 (0.015) *** −0.004 (0.015) 0.010 (0.017) 0.000 (0.022) (35 a 39 años) Adultos mayores 0.119*** (0.024) 0.066** (0.027) 0.029 (0.019) −0.024 (0.021) −0.008 (0.021) −0.065* (0.033) (más de 60 años) Casados −0.006 (0.016) 0.005 (0.016) −0.012 (0.014) 0.013 (0.017) −0.002 (0.012) 0.016 (0.022) Educación 0.027 (0.018) 0.054*** (0.017) 0.042** (0.018) 0.038* (0.020) 0.031** (0.015) −0.011 (0.029) secundaria Educación superior 0.116*** (0.025) 0.101*** (0.026) 0.050** (0.021) 0.005 (0.017) −0.000 (0.020) −0.000 (0.036) Empleo formal 0.091 (0.026) *** 0.093 (0.033) *** 0.051 (0.029) * −0.026 (0.022) −0.053 (0.026) ** −0.068 (0.036) * Trabaja −0.042** (0.020) −0.018 (0.021) −0.013 (0.018) −0.003 (0.019) 0.040** (0.020) 0.029 (0.029) Ingreso mediano 0.061*** (0.020) 0.004 (0.017) 0.036** (0.014) −0.013 (0.020) 0.013 (0.016) −0.037 (0.031) Ingreso alto 0.156*** (0.032) 0.167*** (0.038) 0.102*** (0.027) 0.021 (0.028) 0.007 (0.021) −0.073* (0.039) Preguntas rela- −0.024 (0.034) 0.012 (0.028) 0.038 (0.025) 0.071*** (0.020) −0.017 (0.031) 0.044 (0.051) cionadas con el hogar Zona rural −0.005 (0.033) −0.014 (0.039) −0.038 (0.030) 0.007 (0.022) −0.038** (0.019) 0.020 (0.039) Sucursales 0.004 (0.016) 0.016 (0.014) 0.009 (0.014) −0.006 (0.013) −0.006 (0.012) −0.034 (0.023) bancarias cada 10,000 adultos Correspon- 0.015 (0.009) 0.015 (0.010) −0.005 (0.006) 0.008 (0.007) −0.004 (0.005) 0.004 (0.012) sales cada 10,000 adultos PIB per cápita 0.431 (0.551) 0.511 (0.540) 0.256 (0.253) 0.478** (0.241) 0.190 (0.309) 0.245 (0.590) Región cen- 0.076 (0.043) * 0.093 (0.047) ** 0.012 (0.023) 0.043 (0.029) −0.031 (0.029) 0.038 (0.044) tro-oeste Región noreste 0.050 (0.041) −0.022 (0.031) 0.017 (0.038) −0.033 (0.031) −0.005 (0.031) 0.020 (0.055) Región noroeste −0.123 (0.077) −0.091 (0.079) 0.004 (0.070) −0.086** (0.036) 0.089 (0.055) 0.236*** (0.078) Región sur/ 0.067*** (0.024) 0.053* (0.031) 0.052** (0.026) 0.018 (0.025) −0.012 (0.027) 0.044 (0.044) sureste Constante −0.401*** (0.076) −0.332*** (0.080) −0.094 (0.059) −0.001 (0.050) 0.198*** (0.059) 0.405*** (0.098) R al cuadrado 0.195 0.190 0.069 0.032 0.023 0.042 Observaciones 1,935 1,935 1,935 1,935 1,935 1,935 Fuente: Datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México. Nota: Los errores estándar robustos, agrupados al nivel municipal, se muestran entre paréntesis. Niveles de significancia estadística: * 10%, ** 5%, *** 1%. 88 Apéndice D.  Metodología para analizar los vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera El coeficiente  en la ecuación (3) representa la diferencia en el uso de productos entre los individuos que muestran capacidades financieras elevadas y escasas, cuando se controla por las variables de las características individuales y del muni- cipio que podrían ser la causa de esta diferencia. El cuadro D.4 muestra los resultados de tres regresiones de mínimos cuadrados ordi- narios (una por cada producto financiero formal) obtenidos con la siguiente ecuación: Usodeproductosi,m =  + Capacidadesfinancieraselevadasi,m + 1Capacidadesfinancieraselevadasi,m × Sucursalesbancariasm + 2Capacidadesfinancierasescasasi,m × Sucursalesbancariasm + 1Capacidadesfinancieraselevadasi,m × Corresponsalesm + 2Capacidadesfinancierasescasasi,m × Corresponsalesm + Xi,m + Zm + i,m (4) donde todas las variables se definen como en la ecuación 2, pero en lugar de incluir variables de control para la cantidad de sucursales bancarias cada 10,000 adultos o para la cantidad de corresponsales cada 10,000 adultos, la regresión incluye cuatro términos de interacción entre 1) el número de sucursales bancarias cada 10,000 adultos en el municipio multiplicado por una variable indicadora para el indi- viduo con un nivel elevado de capacidades o conocimientos financieros, 2) el número de sucursales bancarias cada 10,000 adultos en el municipio multiplicado por una variable indicadora para el individuo de escasas capacidades o conocimientos financieros, 3) el número de corresponsales cada 10,000 adultos en el municipio multiplicado por una variable indicadora para el individuo con un nivel elevado de capacidades o conocimientos financieros, y 4) el número de corresponsales cada 10,000 adultos en el municipio multiplicado por una variable indicadora para el indi- viduo de escasas capacidades o conocimientos financieros. Los errores estándar de la regresión están agrupados al nivel municipal. En el cuadro D.4 se muestran los coeficientes 1, 2, 3 y 4 que representan la correlación parcial entre las sucursales y los corresponsales bancarios y el uso de productos financieros para los individuos con un nivel de capacidades (o de conoci- mientos) elevado o escaso, respectivamente. 89 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO D.4  CORRELACIONES PARCIALES ENTRE PUNTOS DE ACCESO FINANCIERO Y USO DE PRODUCTOS FINANCIEROS, POR NIVEL DE CAPACIDADES Y CONOCIMIENTOS FINANCIEROS VARIABLE DEPENDIENTE: VARIABLE FICTICIA QUE INDICA SI EL INDIVIDUO TIENE ALGUNO DE LOS SIGUIENTES PRODUCTOS CUENTA BANCARIA TARJETA DE CRÉDITO PRÉSTAMO BANCARIO Por nivel de capacidades financieras Sucursales de bancos comerciales cada 0.011 (0.027) 0.041 (0.026) 0.021 (0.021) 10,000 adultos × Personas con elevadas capacidades financieras Sucursales de bancos comerciales cada −0.013 (0.011) −0.016 (0.011) −0.005 (0.013) 10,000 adultos × Personas con escasas capacidades financieras Corresponsales bancarios cada 0.026* (0.016) 0.032** (0.014) 0.004** (0.009) 10,000 adultos × Personas con elevadas capacidades financieras Corresponsales bancarios cada 0.005 (0.007) 0.002 (0.008) −0.004 (0.007) 10,000 adultos × Personas con escasas capacidades financieras Por nivel de conocimientos financieros Sucursales de bancos comerciales cada −0.013 (0.024) 0.021 (0.022) −0.001 (0.021) 10,000 adultos × Personas con elevadas capacidades financieras Sucursales de bancos comerciales cada 0.003 (0.015) 0.009 (0.017) 0.023 (0.017) 10,000 adultos × Personas con escasas capacidades financieras Corresponsales bancarios cada 0.029** (0.014) 0.025* (0.013) −0.008 (0.007) 10,000 adultos × Personas con elevadas capacidades financieras Corresponsales bancarios cada −0.003 (0.007) 0.003 (0.009) −0.004 (0.008) 10,000 adultos × Personas con escasas capacidades financieras Fuentes: Consejo Nacional de Inclusión Financiera (2011) y datos de la Encuesta de Capacidades Financieras del Banco Mundial y el Gobierno de México (véanse más abajo los detalles y las fuentes de las variables de control). Nota: Las regresiones incluyen las siguientes variables de control (véanse las definiciones en los cuadros siguientes): mujeres, mediana edad, adultos mayores, casados, educación secundaria, educación superior, empleo formal, trabaja, ingreso mediano, ingreso algo, preguntas relacionadas con el logar, zona rural, sucursales bancarias cada 10,000 adultos, corresponsales cada 10,000 adultos, PIB per cápita (millones de pesos) y variables ficticias refe- ridas a la región. Los errores estándar robustos se muestran entre paréntesis. Niveles de significancia estadística: * 10%, ** 5%, *** 1%. 90 Apéndice D.  Metodología para analizar los vínculos entre las capacidades financieras y la inclusión financiera CUADRO D.5  DEFINICIONES DE LAS VARIABLES UTILIZADAS EN LA ENCUESTA SOBRE CONOCIMIENTOS FINANCIEROS EN MÉXICO. CAPACIDADES Y CONOCIMIENTOS FINANCIEROS VARIABLE DEFINICIÓN Índice de conocimientos financieros Número de respuestas correctas a ocho pre- guntas sobre conocimientos financieros (el índice va de 0 a 8) Nueve componentes de las capacidades Como se los definió en las secciones prece- financieras (planificación de presupuestos, dentes (la escala va de 0 a 100) seguimiento de gastos, uso de la infor- mación, ausencia de gastos excesivos, posibilidad de cubrir gastos imprevistos, ahorro, actitud respecto del futuro, com- portamiento no impulsivo, orientación al logro de objetivos) Índice de capacidades financieras Promedio simple de los nueve componentes de las capacidades financieras enumerados más arriba (la escala va de 0 a 100) CUADRO D.6  DEFINICIONES DE LAS VARIABLES UTILIZADAS EN LA ENCUESTA SOBRE CONOCIMIENTOS FINANCIEROS EN MÉXICO. USO DE PRODUCTOS FINANCIEROS VARIABLE DEFINICIÓN Cuenta ban- Basada en la pregunta d_1_6 caria Variable ficticia que indica si el encuestado declara tener una “cuenta ban- caria (o con otra institución financiera)” Tarjeta de Basada en la pregunta d_1_7 crédito Variable ficticia que indica si el encuestado declara tener una “tarjeta de crédito” Préstamo Basada en la pregunta d_1_5 bancario Variable ficticia que indica si el encuestado declara tener un “crédito per- sonal (bancario) crédito nómina” Tanda Basada en la pregunta d_1_10 Variable ficticia que indica si el encuestado declara tener “tandas” Casa de Basada en la pregunta d_1_9 empeño Variable ficticia que indica si el encuestado declara tener préstamos de una casa de “empeño” Préstamo de Basada en la pregunta d_1_11 familiares o Variable ficticia que indica si el encuestado declara tener “préstamos de amigos familiares o amigos” 91 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO CUADRO D.7  DEFINICIONES DE LAS VARIABLES UTILIZADAS EN LA ENCUESTA SOBRE CONOCIMIENTOS FINANCIEROS EN MÉXICO: VARIABLES DE CONTROL REFERIDAS A LOS INDIVIDUOS VARIABLE DEFINICIÓN Mujeres Basada en la pregunta r_2 Variable ficticia que indica si la persona es mujer. Edad Basada en la pregunta r_4 Dos variables ficticias que indican si la persona es de mediana edad (de 35 a 59 años) o adulto mayor (más de 60 años). Se omite la categoría “jóvenes” (de 18 a 34 años) en las regresiones. Estado civil Basada en la pregunta f_2 Variable ficticia que indica si la persona está casada. Educación Basada en la pregunta r_8 Dos variables ficticias que indican si el individuo ha completado la educación secundaria o superior. Se omite la categoría de educación primaria o nivel educativo inferior. Empleo Basada en la pregunta f_5 Una variable ficticia que indica si el individuo trabaja (ya sea como empleado o por cuenta propia). Otra variable ficticia que indica si el individuo está empleado en el sector formal. Ingreso Basada en la pregunta f_23_mx Dos variables ficticias que indican si el ingreso del hogar es mediano $3000 – $5000) o alto (>$5000). Se omite la categoría de ingreso bajo (<$3000). Preguntas de Basada en la pregunta a_6 la encuesta Variable ficticia que indica si el individuo respondió preguntas sobre los productos financieros que utiliza en forma personal o los que se emplean en el hogar. Zona rural Variable ficticia que indica si el individuo vive en una zona rural. Región Cuatro variables ficticias que indican si el individuo vive en la zona centro-oeste, noreste, noroeste o sur-sureste de México. Se omite la categoría México central. CUADRO D.8  DEFINICIONES Y FUENTES DE LAS VARIABLES REFERIDAS A LOS MUNICIPIOS UTILIZADAS EN LA ENCUESTA SOBRE CONOCIMIENTOS FINANCIEROS EN MÉXICO VARIABLE DEFINICIÓN FUENTE PIB per cápita Valor agregado (sumatoria de todos los sectores) dividido por la pobla- Valor agregado extraído del ción total (millones de pesos) censo 2009 del INEGI, dato de población extraído del censo de 2005 del INEGI Sucursales bancarias Número de sucursales de bancos comerciales dividido por el número Consejo Nacional de Inclu- cada 10,000 adultos de adultos que habitan en el municipio, multiplicado por 10,000 sión Financiera, 2011 Corresponsales cada Número de corresponsales bancarios dividido por el número de 10,000 adultos adultos que habitan en el municipio, multiplicado por 10,000 92 APÉNDICE E Revisión bibliográfica capacidades, comportamientos y conocimientos financieros La relación entre comportamientos y conocimientos financieros ha sido estudiada en numerosos trabajos. Utilizando datos referidos a Estados Unidos, Lusardi y Tufano (2009) observaron que las personas que tienen escaso nivel de conocimientos tienden a efectuar los pagos mínimos en sus tarjetas de crédito, pagar las tarjetas con recargo por mora y recurrir a fuentes de crédito informales. Stango y Zinman (2009) muestran que quienes cometen errores al calcular el interés y el valor futuro tienden a pedir más préstamos y ahorrar menos. Lusardi y Mitchell (2009) explican que las personas con escasos conocimientos financieros piensan menos en la jubi- lación y que la mayoría no ha hecho ningún plan al respecto. Una encuesta realizada en hogares rusos muestra que el nivel de conocimientos financieros se relaciona de manera significativa y positiva con la planificación de la jubilación que abarca mecanismos y fondos de pensión privados (Klapper y Panos, 2011). Y en México, Hastings y Tejeda-Ashton (2008) realizaron una encuesta que revela que las personas con menos conocimientos tienden a elegir los fondos de inversiones y pensión que cobran comisiones más caras. Estos estudios suelen medir los conocimientos financieros a partir de preguntas que buscan determinar cuánto sabe el encuestado sobre el valor del dinero en el tiempo (inflación), las tasas de interés simple y compuesto, y la diversificación del riesgo, aunque las medidas específicas utilizadas varían de un estudio a otro (véase también en Xu y Zia [2012] un análisis de las distintas medidas de conocimientos financieros). La mayoría de los trabajos no busca medir las capacidades financieras además de los conocimientos financieros y, por lo tanto, son muy pocas las pruebas acerca de la relación entre capacidades y comportamientos financieros. Cabe advertir que en los estudios mencionados, los resultados no son necesaria- mente causales. Se muestra una correlación entre medidas indicativas de cono- cimientos financieros y resultados de interés, pero estas correlaciones pueden simplemente estar reflejando características no observadas de los individuos, como sus nociones de aritmética, su capacidad, los antecedentes de sus padres u otros rasgos. Si bien en algunos trabajos se trata de medir estas características y de expli- carlas en el análisis, es posible que algunas de ellas no sean mensurables, lo que puede sesgar los resultados. 93 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO En un creciente número de estudios se intenta abordar esta cuestión recurriendo a la variación experimental o cuasiexperimental en la oferta de programas de educa- ción financiera para medir el impacto de los conocimientos de esta área en los comportamientos. El contexto de estos trabajos varía ampliamente, por ejemplo, en términos del entorno económico y del tipo de personas a las que se dirigen esos programas de educación financiera. Se han realizado numerosos estudios sobre las clases obligatorias de educación financiera impartidas en las escuelas secundarias. Bernheim, Garrett y Maki (2001) usan la variación exógena en la obligatoriedad de dar educación financiera en las escuelas secundarias de todos los estados de Estados Unidos para mostrar que los alumnos expuestos a esas clases ahorran más cuando llegan a adultos. Sin embargo, Cole y Shastry (2008) ponen en duda estas conclusiones al mostrar que pierden solidez cuando se controlan los efectos fijos referidos al estado de resi- dencia y los efectos de los exámenes a lo largo del tiempo. En Bruhn y cols. (2013) se ofrecen pruebas de más corto plazo. Los autores realizaron un experimento alea- torio en el que se brindó educación financiera en escuelas secundarias de Brasil. De allí concluyen que existen efectos positivos en el conocimiento, las actitudes y los comportamientos financieros, y observan un aumento en las tasas de ahorro. No obstante, estos impactos son pequeños en valores absolutos: un incremento de 3 puntos porcentuales en los conocimientos y de 1 punto porcentual en los ahorros. En Alemania, Lührmann, Serra-García y Winter (2012) observaron que los adolescentes que recibieron capacitación financiera muestran más interés por las cuestiones de este ámbito y un nivel de conocimientos mayor, y ahorran más en una tarea hipotética, pero no se midieron los ahorros reales. Otros estudios se han centrado en la educación financiera impartida a adultos que trabajan, reconociendo las diferencias entre los países desarrollados y en desarrollo en lo que respecta a las necesidades financieras de los hogares y a su grado de exposición. La bibliografía centrada en los países desarrollados tiende a estudiar el impacto de la educación financiera en la planificación de la jubilación o en las elecciones referidas a la cartera de inversiones. Duflo y Sáez (2011) muestran que la participación en seminarios sobre sistemas de ahorro jubilatorio conduce a un incre- mento en el grado de participación en planes de jubilación. En el contexto de los países en desarrollo, las evaluaciones del impacto de la educa- ción financiera se han centrado en las personas no bancarizadas, la aceptación de los productos de seguro y los migrantes. Uno de los primeros trabajos que anali- zaron el impacto de la educación financiera en un país en desarrollo fue el de Cole, Sampson y Zia (2011). Los autores llevaron a cabo un experimento en Indonesia, donde ofrecieron a hogares no bancarizados elegidos al azar un curso de educa- ción financiera que promovía la apertura de cajas de ahorro en bancos. Los autores 94 Apéndice E.  Revisión bibliográfica capacidades, comportamientos y conocimientos financieros observaron que, para la muestra completa, el curso de educación financiera no influía en la probabilidad de que los hogares abrieran una cuenta de ahorro, pero que sí generaba efectos moderados en los hogares sin educación ni conocimientos finan- cieros. Cai (2011) utilizó un experimento aleatorio para mostrar que los agricultores de las regiones rurales de China tienen más probabilidades de asegurar sus cultivos y ser menos vulnerables a las variaciones de los precios luego de asistir a sesiones de capacitación financiera. En Gibson, McKenzie y Zia (2012); Doi, McKenzie, y Zia (2012), y Seshan y Yang (2012), se analiza de qué manera influyen la información y la educación financiera en los comportamientos de los migrantes y de sus familias. Gibson, McKenzie y Zia (2012) trabajaron con migrantes en Nueva Zelandia y Australia y observaron que la educa- ción financiera incrementaba los conocimientos sobre los costos de transacción de las remesas, pero no generaba cambios en el monto de las remesas enviadas ni en el uso del método más barato. Al estudiar una muestra de migrantes indonesios, Doi, McKenzie y Zia (2012) observaron que el impacto en los comportamientos y los conocimientos financieros y en el ahorro son mayores cuando tanto los migrantes como sus familias reciben educación en la materia. Este resultado muestra que la educación financiera puede tener efectos significativos cuando se imparte en un momento propicio, pero que su impacto varía según quién la recibe. Seshan y Yang (2012) señalan que los inmigrantes indios asentados en Qatar incrementaron sus ahorros luego de recibir educación financiera, pero solo si en un principio tenían escasos conocimientos en esta materia. De este modo, en general, en los estudios se encuentra una correlación positiva entre los conocimientos financieros y el uso de productos financieros formales. Las evaluaciones de impacto de los cursos de educación financiera sugieren que esta correlación es, al menos en parte, causal. No obstante, también ponen de relieve que estos cursos a menudo solo conducen a un cambio de comportamiento en ciertos grupos de individuos, por ejemplo, los que ya tenían escasos conocimientos financieros, pero no en otros. Asimismo, los impactos medidos son con frecuencia pequeños, y las tasas de participación en los cursos de educación financiera tienden a ser bajas. Los efectos poco significativos y las bajas tasas de participación sugieren que los talleres con estilo escolar quizá no sean la mejor manera de impartir educa- ción financiera a los adultos, que posiblemente no tengan el tiempo ni la motivación para asistir a ellos. Los trabajos bibliográficos han comenzado a analizar si se puede influir en los comportamientos utilizando canales innovadores para brindar educa- ción financiera. En diversos estudios que se llevan adelante en India, Perú, Sudáfrica y Estados Unidos (entre otros) se está verificando si al transmitir información a través de vídeos, la radio, los medios de comunicación masivos o juegos electrónicos se logra mejorar efectivamente las decisiones financieras de las personas (véase, por ejemplo, Berg y Zia, 2013). 95 CAPACIDADES FINANCIERAS EN MÉXICO Por último, si bien hasta ahora la bibliografía se ha centrado principalmente en los conocimientos financieros, también ha abordado conceptos vinculados con las capacidades financieras. Algunos de los cursos de educación financiera estudiados en las evaluaciones de impacto procuran enseñar técnicas para mejorar la planifi- cación de los presupuestos y el seguimiento de gastos. Por ejemplo, en el trabajo de Bruhn y colaboradores (2013), se indica que la implementación de un programa integral de educación financiera en las escuelas secundarias de Brasil condujo a un incremento en el porcentaje de alumnos y padres que confeccionaban listas de gastos. El programa también permitió elevar las tasas de ahorro. En otros estudios se ha analizado la relación entre las preferencias temporales y el ahorro. Brown, Chua y Camerer (2009) realizaron un experimento de laboratorio sobre comportamientos y observaron que las personas cuyas preferencias se orientaban al presente tenían tendencia a gastar de más. Ashraf, Karlan, y Yin (2006) muestran que las cuentas de ahorro programado pueden ayudar a incrementar el ahorro en las personas con preferencias temporales orientadas al presente. No obstante, es necesario realizar más investigaciones para determinar la correlación entre los diversos componentes de las capacidades financieras y el uso de distintos productos financieros. 96 Referencias Ashraf, Nava, Diego Aycinena, Claudia Martínez A. y Dean Yang. 2011. “Remittances and the Problem of Control: A Field Experiment Among Migrants from El Salvador”. Diciembre. Ashraf, Nava, Dean Karlan y Wesley Yin. 2006. “Tying Odysseus to the Mast: Evidence from a Commitment Savings Product in the Philippines”. Quarterly Journal of Economics 121 (2): 635–72. Atkinson, A., S. McKay, E. Kempson y S. Collard. 2006. Levels of Financial Capability in the UK: Results of a Baseline Survey. Londres: Autoridad de Servicios Financieros. Atkinson, Adele y Flore-Anne Messy. 2012. “Measuring Financial Literacy: Results of the OECD/ International Network on Financial Education (INFE) Pilot Study”. Documento de trabajo de la OCDE sobre finanzas, seguros y jubilaciones privadas n.o 15. 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