97767 April 13, 2011 Programa Nacional de Solidaridad: Promoción del desarrollo comunitario en Afganistán Programa Nacional de Solidaridad de Afganistán: Promoción del desarrollo comunitario Panorama general Los conflictos civiles y bélicos que sufrió Afganistán durante un cuarto de siglo afectaron seriamente su infraestructura rural y las relaciones comunitarias. El Programa Nacional de Solidaridad (NSP, por sus siglas en inglés), impulsado por la comunidad para la reconstrucción y desarrollo de la infraestructura rural, obtuvo importantes logros en el otorgamiento de facultades a las comunidades, la mejora de las relaciones entre ellas y el aumento de la confianza del público en el sistema de gobierno. Desafío MULTIMEDIA (i) Durante la fase posterior a un conflicto, en la cual la entrega rápida de "dividendos de la paz" es esencial para establecer o mantener la credibilidad del nuevo gobierno, el reto consiste en: - Generar empleo y rehabilitar la infraestructura de las áreas rurales devastadas por sequías rigurosas y más de dos décadas de conflictos; y - Fortalecer el gobierno local para fomentar el imperio de la ley. MÁS Reconstrucción de Afganistán: Un poblado a la Estrategia vez El Programa Nacional de Solidaridad es un gran Programa Nacional de Solidaridad de Afganistán esfuerzo del Gobierno por llegar a las comunidades rurales de Afganistán y atender sus necesidades mediante estrategias participativas. La implementación estuvo a cargo del Ministerio de Desarrollo y Rehabilitación Rural, que utilizó Más resultados una vasta red de organizaciones facilitadoras asociadas (la mayoría de ellas no gubernamentales). El NSP fue en su 45.108 origen parte del Proyecto de Emergencia de Empoderamiento Comunitario y Obras Públicas, lanzado en 2002 y financiado por la Asociación Internacional de Fomento (AIF). Luego, se convirtió en un programa de proyectos finalizados de manera prioridad nacional en el marco del desarrollo del país para satisfactoria. pasar a ser el programa fundamental de desarrollo rural del Gobierno. Los Consejos de Desarrollo Comunitario (CDC), elegidos en los poblados y en los cuales las mujeres ejercen un papel clave, llegan a un consenso acerca de las prioridades de desarrollo, elaboran propuestas de inversión y 515 usan donaciones y mano de obra local para implementar nuevas escuelas construidas. subproyectos prioritarios con el fin de satisfacer sus necesidades. MÁS INFORMACIÓN (i) Resultados Punto final para siglos de El NSP estableció 26.395 CDC en 34 provincias de aislamiento Afganistán, que abarcan a una población rural de alrededor Actualización económica 2010 de 22 millones de personas. Hasta el momento, Minería para el crecimiento aproximadamente 24.862 comunidades recibieron sostenible financiamiento para implementar sus subproyectos prioritarios. Reactivación de las empresas rurales -Se financiaron cerca de 55.050 subproyectos y, hasta el Sitio web del NSP presente, se han completado 45.108 de ellos de manera satisfactoria en distintos sectores. -Se construyeron o recuperaron aproximadamente 23.205 kilómetros de carreteras terciarias y 640 kilómetros de carreteras secundarias. -Se generaron unos 39.343 kilovatios (KW) de electricidad por medio de energía solar o hidroeléctrica. -Hasta ahora, el NSP ha instalado 2.074 bombas manuales. -En el sector de educación, se construyeron 331 escuelas primarias, 143 escuelas secundarias para los niveles inferiores y 41 escuelas secundarias para los niveles superiores. -En el sector de salud, se construyeron 34 clínicas y una farmacia y se proporcionó educación sanitaria a los beneficiarios. -La implementación de los subproyectos en distintos sectores generó 27 millones de días laborables. Las mujeres cumplieron un papel decisivo para la implementación satisfactoria del NSP. Participaron en todos los procesos, desde la movilización hasta la finalización de sus subproyectos comunitarios. Aproximadamente el 38% de los miembros de los CDC son mujeres, quienes participan junto a los hombres en la identificación y fijación de prioridades para los problemas y subproyectos de sus comunidades. Llevan a cabo las reuniones y participan activamente en la ejecución de los subproyectos. Las mujeres intervienen en la supervisión comunitaria para evaluar el progreso y logros de los mismos. Voces Tenemos una escuela en el pueblo para niños y niñas, nuestros hogares tienen electricidad y no falta el agua potable. Todos los niños asisten a la escuela con regularidad, en especial aquellos que no pudieron empezar antes debido a la distancia. — Mohammad Yousuf. Contribución del Banco El nuevo liderazgo afgano pensó en implementar el NSP luego de la caída del régimen talibán. Para ayudar a ponerlo en marcha, la AIF recurrió a su experiencia en el diseño exitoso de proyectos de desarrollo impulsado por la comunidad (CDD, por sus siglas en inglés) en distintos lugares del mundo, por ejemplo el Programa de Desarrollo de Subdistritos (kecamatan) de Indonesia. En septiembre de 2010, las contribuciones recibidas por el NSP procedentes de todos los donantes ascendieron a unos US$1.500 millones. Una donación inicial de la AIF (en el marco del Proyecto de Emergencia de Empoderamiento Comunitario y Obras Públicas de este organismo) financió un componente de otorgamiento de facultades a las comunidades por un monto de US$27 millones, que allanó el camino para el NSP. Para septiembre de 2010, la ayuda de la AIF al NSP había alcanzado los US$436 millones. Además, el Banco administró el Fondo Japonés de Desarrollo Social (JSDF, por sus siglas en inglés) de US$42 millones y el Fondo Fiduciario de Respuesta a la Crisis de los Precios de los Alimentos (FPCRTF, por sus siglas en inglés) de US$8 millones. Asociados El NSP es respaldado también por el Fondo Fiduciario para la Reconstrucción de Afganistán (ARTF, por sus siglas en inglés), administrado por el Banco Mundial. El ARTF es una sociedad entre la comunidad internacional y el Gobierno afgano para mejorar la eficacia de la reconstrucción. Desde el inicio de 2002, 32 donantes contribuyeron con más de US$4.000 millones (al 21 de noviembre de 2010), convirtiendo al ARTF en el mayor contribuyente al presupuesto afgano, tanto para costos operativos como para programas de desarrollo. El respaldo del ARTF para los programas de prioridad nacional, para los costos operativos de las operaciones gubernamentales y para la agenda para la reforma de políticas está colaborando para lograr los objetivos de la Estrategia nacional de desarrollo de Afganistán. En septiembre de 2010, el ARTF había desembolsado US$940 millones para respaldar la implementación del NSP. Además, el financiamiento de donantes bilaterales al NSP ascendió a US$100 millones. El ARTF está administrado por un Comité de Gestión integrado por el Banco Mundial (que oficia de administrador), el Banco Islámico de Desarrollo, el Banco Asiático de Desarrollo, la Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA, por sus siglas en inglés) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). El Comité de Gestión se reúne periódicamente en Kabul, con el Ministerio de Finanzas como observador, para cumplir con las actividades cotidianas del fondo. Una vez por trimestre, los donantes del ARTF se congregan para analizar una estrategia más amplia con el Gobierno y la administración del ARTF. Hacia el futuro En los próximos cinco años, el objetivo del NSP es llegar a las restantes 15.800 comunidades para lograr una cobertura nacional. Esta ampliación es un aumento a partir de la estimación original de 10.300 nuevas comunidades y plantea un desafío, dado que aproximadamente la mitad de ellas (unas 7.100) se encuentran en áreas extremadamente inseguras. Asimismo, el programa necesitará una cantidad significativa de financiamiento adicional para conseguir la cobertura nacional plena que se planea. Hasta el presente, más de 18.400 comunidades han usado por completo su primera ronda de donaciones en bloque del NSP (en subproyectos que se completaron por lo menos en un 85%). Sin embargo, el NSP proporcionará una segunda ronda de donaciones en bloque solamente a 11.900 debido a las restricciones presupuestarias, capacidad técnica, administrativa y de adquisición limitadas y el aumento en los índices de inseguridad. Será importante que el Gobierno de Afganistán siga involucrando a estas comunidades para evitar perder la confianza conseguida hasta ahora por el NSP. Además del financiamiento de la infraestructura social de las áreas rurales, la tercera fase del NSP está centrada en el fortalecimiento institucional mediante la transformación de los CDC en Concejos del Pueblo reconocidos legalmente como el nivel más básico de gobierno.