GROUNDSWELL PREPARARSE PARA LAS MIGRACIONES INTERNAS PROVOCADAS POR IMPACTOS CLIMÁTICOS Reseña Kanta Kumari Rigaud, Alex de Sherbinin, Bryan Jones, Jonas Bergmann, Viviane Clement, Kayly Ober, Jacob Schewe, Susana Adamo, Brent McCusker, Silke Heuser y Amelia Midgley © 2018 Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento/Banco Mundial 1818 H Street NW Washington DC 20433 Teléfono: 202-473-1000 Internet: www.worldbank.org El presente documento ha sido realizado por el personal del Banco Mundial, con aportaciones externas. Las opiniones, interpretaciones y conclusiones aquí expresadas no son necesariamente reflejo de la opinión del Banco Mundial, de su Directorio Ejecutivo ni de los Gobiernos que representan. El Banco Mundial no garantiza la exactitud de los datos que figuran en esta publicación. Todos los mapas fueron confeccionados por la Unidad de Cartografía del Banco Mundial. Las fronteras, los colores, las denominaciones y demás datos que aparecen en los mapas de este documento no implican juicio alguno, por parte del Banco Mundial, sobre la condición jurídica de ninguno de los territorios, ni la aprobación o aceptación de tales fronteras. La presente obra fue publicada originalmente por el Banco Mundial en inglés con el título Groundswell: Preparing for Internal Climate Migration en 2018. En caso de posibles discrepancias, prevalecerá el idioma original. Derechos y autorizaciones The material in this work is subject to copyright. Because The World Bank encourages dissemination of its knowledge, this work may be reproduced, in whole or in part, for noncommercial purposes as long as full attribution to this work is given. El material contenido en esta publicación está sujeto a derechos de autor. Debido a que el Banco Mundial alienta la difusión de sus conocimientos, esta publicación puede reproducirse de manera total o parcial para fines no comerciales, siempre y cuando se realice una atribución completa a este trabajo. La obra debe citarse de la siguiente manera: Kumari Rigaud, Kanta, Alex de Sherbinin, Bryan Jones, Jonas Bergmann, Viviane Clement, Kayly Ober, Jacob Schewe, Susana Adamo, Brent McCusker, Silke Heuser y Amelia Midgley. 2018. El informe Groundswell: Prepararse para las migraciones internas provocadas por impactos climáticos. Washington, DC: Banco Mundial. Cualquier consulta sobre derechos y licencias, incluidos derechos subsidiarios, deberá dirigirse a la siguiente dirección: World Bank Publications, The World Bank Group, 1818 H Street, NW, Washington, DC 20433, EE. UU.; fax: 202-522-2625; correo electrónico: pubrights@worldbank.org GROUNDSWELL PREPARARSE PARA LAS MIGRACIONES INTERNAS PROVOCADAS POR IMPACTOS CLIMÁTICOS Reseña Agradecimientos Este informe fue elaborado por el Grupo de Cambio Climático del Banco Mundial, con dirección y asesoramiento por parte de John Roome, director senior de esta unidad. El esfuerzo fue dirigido por Kanta Kumari Rigaud, especialista principal en medio ambiente. La orientación estratégica y el apoyo constante del gerente del programa, Stephen Hammer, fueron esenciales para la elaboración del informe. James Close, director de Cambio Climático, ofreció orientación desde el inicio. El análisis que constituye la base del informe fue el resultado de una colaboración exclusiva entre el personal del Grupo Banco Mundial e investigadores del Centro para la Red de Información Internacional de. Ciencias de la Tierra (CIESIN) del Earth Institute de la Universidad de Columbia, del Instituto de Investigación Demográfica (CIDR) de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY) y del Potsdam Institute for Climate Impact Research (PIK). El equipo básico de investigación incluyó a Kanta Kumari Rigaud (Banco Mundial), Alex de Sherbinin (CIESIN), Bryan Jones (CUNY), Jonas Bergmann, Viviane Clement, Kayly Ober (Banco Mundial), Jacob Schewe (PIK), Susana Adamo (CIESIN), Brent McCusker (Universidad de Virginia Occidental), Silke Heuser y Amelia Midgley (Banco Mundial). Rubaina Anjum, Anam Basnet (Banco Mundial); Alyssa Fico, Tricia Chai-Onn, Valentina Mara, Malanding Jaiteh, Marc Levy, Kytt MacManus, Jane mills, Kira Topik, Haibin Xia, Greg Yetman (CIESIN); Anastasia Clark (CIDR) y Jan Volkholz (PIK) brindaron un apoyo fundamental. Stephane Hallegate y Susan F. Martin se desempeñaron como asesores principales y brindaron orientación durante todo el proyecto. Anne T. Kuriakose, Margaret Arnold y Varalakshmi Vemuru proporcionaron valiosos aportes y asesoramiento, incluso para las consultas a nivel de los países. El equipo desea expresar su agradecimiento a los autores de los documentos de antecedentes, quienes recopilaron y analizaron las publicaciones examinadas por expertos pertinentes y brindaron información en la que se basó el informe. Entre los autores se incluyen Jonas Bergmann, Kata Fodor, Francois Gemenne, Lori Hunter y Caroline Zickgraf. La síntesis del nexo entre el cambio climático y la migración en este informe se basó sustancialmente en un documento de antecedentes escrito por Robert McLeman. Rubaina Anjum, Anam Basnet, Silke Heuser, Anil Markandya y Sebnem Sahin también redactaron notas de antecedentes. Elisabeth Mealey dirigió la labor de comunicaciones en el informe, junto con un equipo que incluyó a Mehreen Sheikh, Gerardo Spatuzzi, Anita Gordon, Joana Das Neves Lopes, Nick Keyes y Gayle Young. El equipo agradece los aportes y el asesoramiento de Elisabeth Mealey, Stephen Hammer y Anita Gordon en la finalización del informe. Elaine Feister, Paula García, Patricia Braxton y Anna Jacob brindaron apoyo administrativo durante todo el proyecto. Se agradece especialmente la colaboración con la Asociación Mundial de Conocimientos sobre Migración y Desarrollo (KNOMAD), bajo la dirección de Dilip Ratha y con Susan F. Martin, Sonia Plaza y Hanspeter Wyss. El informe se vio beneficiado por dos talleres de la KNOMAD (sobre las evaluaciones cuantitativas de las migraciones provocadas por impactos climáticos y la reubicación planificada), y por un documento conjunto acerca de envíos de remesas. La forma final del presente informe es la contribución de numerosos expertos, entre los que se incluyen Neil Adger (Universidad de Exeter), Soumyadeep Banerjee (Centro Internacional para el Desarrollo Integrado de Montañas, ICIMOD), Rosina Bierbaum (Universidad de Michigan), Katharine M. Donato (Universidad de Georgetown), Elizabeth Fussell (Universidad Brown), Justin Ginnetti (Observatorio de Desplazamiento Interno), Gregory Giraud (Institut de recherche pour le développement), Clark Gray (Universidad de Carolina del Norte), Elisabeth Gilmore (Universidad de Maryland), Lorenzo Guadagno (Organización Internacional para las Migraciones), Flore Gubert (Escuela de Economía de París), Lauren Herzer Risi (Centro Wilson), Dina Ionesco (Organización Internacional para las Migraciones), Dominic Kniveton (Universidad de Oxford), Michael MacCracken (Climate Institute), Anil Markandya (Basque Center for Climate Change), Susan F. Martin (Universidad de Georgetown), Raya Muttarak (Universidad de East Anglia), Anand Patwardhan (Universidad de Maryland), Christopher Reyer (PIK), y Benjamin Sultan (Institut de recherche pour le développement). Entre los expertos evaluadores dentro del Banco Mundial se incluyen Angela Armstrong, Anton Baare, Caroline Bahnson, Cecilia Briceno, Raffaello Cervigni, Franz Drees-Gross, Marianne Fay, Erick Fernandes, Bjorn Gillsater, Sanna Liisa Taivalmaa, Andrea Liverani, Muthukumara Mani, Robin Mearns, Sonia Plaza, Renan Alberto Poveda, Andrew Roberts, Marc Sadler, Chandra Shekhar Sinha y Michael Toman. Anush Bezhanyan, Daniel Jonathan Clarke, Alexander V. Danilenko, Mahmoud Mohieldin, Dina Umali-Deininger, Rachel Allen y Manjula Luthria también realizaron comentarios. Otros comentarios de las Unidades de Gestión de las tres regiones de interés fueron efectuados por Varalaskhmi Vemuru, Teklu Tesfaye, Sanjay Srivastava, Shahpar Selim y Mehrin Ahmed Mahbub. Asimismo, el equipo desea agradecer a los participantes del taller técnico realizado en París sobre los datos y métodos de creación de modelos de migraciones relacionadas con el cambio climático, organizado por CIESIN, el Observatorio de la Tierra Lamont-Doherty y el Instituto de Estudios Políticos de París, en el que se recibieron comentarios iniciales sobre la metodología del informe. Las deliberaciones con los gerentes de proyecto del equipo del Banco Mundial en las series “Hard Talk” organizadas por Ozong Agborsangaya-Fiteu y Anam Basnet también fueron indispensables para aprender a partir de experiencias prácticas cómo se reflejan las migraciones provocadas por impactos climáticos en el diseño operativo de los proyectos del Banco Mundial. Se agradece especialmente a Saroj Jha y John Roome por copresidir la sesión, y a Joanne De Berry, Andrea Liverani, Robin Mearns, Päivi Koskinen-Lewis y Varalakshmi Vemuru por sus contribuciones. Asimismo, la orientación proporcionada por Caroline Bahnson, Xavier de Victor y Alexandre Marc en el contexto de fragilidad, conflicto y violencia fue muy esclarecedora. Agradecemos especialmente a Rissa Camins, Rubaina Anjum y Elaine Feister, quienes facilitaron las consultas en Bangladesh, Etiopía y México. También agradecemos a Tesfahiwot Dillnessa, Esayas Nigatu Gebremeskel, Nicole Klingen, Teklu Tesfaye, Carolyn Turk, Varalakshmi Vemuru, Qimiao Fan, Zahin Takrim Hussain, Sereen Juma, Muthukumara Mani, Rajashree Paralkar, Christoph Pusch, Shahpar Selim, Susana Adamo, Ana Bucher, Gerardo Corrochano, Jail Ixel Cruz, Jutta Kern, Rosa María Hernández-Fernández, Nancy Montes de Oca, Diana Martínez Ramírez, Katharina Siegmann y Gregor Wolf. El equipo también desea agradecer a los participantes de los tres países por sus valiosos aportes durante las consultas en los países piloto. Agradecemos asimismo a varios colegas del Banco Mundial por sus aportes y su apoyo en las principales etapas de la investigación, incluidos Anjali Acharya, Paula Agostini, Sushenjit Bandyopadhyay, Susmita Dasgupta, Maria Ana de Rijk, Valerie Hickey, Nicholas Andrew Keyes, Alexandra Ortiz, Grzegorz Peszko, Claudia Sadoff, Lisa Thalheimer y Nathalie Weier Johnson. También agradecemos a Ana Bucher, Viviane Clement, Dahlia Lotayef y Alexander Kossoy por el apoyo en el examen de las traducciones de la Reseña al español, francés, árabe y portugués. El informe se vio beneficiado gracias a la edición realizada por Communications Development Incorporated y Ernst Lutz. Anita Gordon y Rubaina Anjum gestionaron el proceso de diseño y producción, en colaboración con Ryan Clennan y Amy Kimmett de Studio Grafik. El Departamento de Servicios Generales del Banco Mundial creó los mapas para el informe y facilitó la tarea de impresión. Los migrantes internos por motivos climáticos se están convirtiendo rápidamente en el rostro humano del cambio climático. En 2050, en solo tres regiones, el cambio climático podría obligar a más de 143 millones de personas a trasladarse dentro de sus propios países. África al sur del Sahara en 2050 86 millones de migrantes internos por motivos climáticos En la temporada de siembra, no llovía, pero cuando no queríamos que lloviera, llovía. Esto generaba sequías y yo no quería seguir sufriendo por esto. Quise probar suerte en la ciudad, por eso me trasladé a Hawassa”. —Wolde Danse (28), Etiopía Asia meridional en 2050 40 millones de migrantes internos por motivos climáticos Todos los años hay inundaciones, pero este año la situación es peor. Ahora toda mi familia vive en la casa de un pariente. No quiero volver a mi pueblo, principalmente debido a la inundación. En Dhaka puedo trabajar y tener una vida tranquila y segura”. —Monoara Khatun (23), Bangladesh América Latina en 2050 17 millones de migrantes internos por motivos climáticos …aquí hay trabajo, por lo que pocas personas emigran, no hay una gran necesidad de irse… en el sector forestal y en las empresas hay empleos. La calidad de la madera es una de nuestras prioridades. Tenemos el famoso sello ecológico de bosque certificado, que pocas comunidades tienen”. —Javier Martínez (26), México 1 Groundswell: prepararse para las migraciones internas provocadas por impactos climáticos 2 Kristalina Georgieva Directora general, Grupo Banco Mundial Cada día, el cambio climático se convierte en una amenaza económica, social y existencial más urgente para los países y sus habitantes. Lo vemos en las ciudades que enfrentan crisis del agua sin precedentes, en las zonas costeras que padecen destructivas mareas de tormenta, y en las otrora prósperas zonas agrícolas que ya no pueden sostener los cultivos esenciales. También vemos, en medida creciente, cómo el cambio climático se convierte en un factor impulsor de la migración y obliga a personas, familias e incluso comunidades enteras a buscar lugares más viables y menos vulnerables para vivir. Este informe brinda un enfoque sumamente necesario sobre el nexo entre el cambio climático, la migración y el desarrollo en tres regiones: África al sur del Sahara, Asia meridional y América Latina. La sorprendente conclusión de este informe es que estas regiones quizá deban hacer frente a más de 140 millones de migrantes internos por motivos climáticos para el año 2050, salvo que se adopten medidas concertadas a nivel nacional y mundial. El informe se centra en las migraciones internas, y no las transfronterizas, por buenas razones. Los investigadores reconocen cada vez más ampliamente que una mayor cantidad de personas se trasladará dentro de las fronteras nacionales para escapar de los impactos del cambio climático de evolución lenta, como las sequías, la reducción de cosechas y el aumento del nivel del mar. La cantidad de migrantes por motivos climáticos podría reducirse en decenas de  millones como resultado de medidas de alcance mundial para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero y mediante la planificación del desarrollo con visión de futuro. Actualmente existe una oportunidad de planificar y actuar para abordar las amenazas emergentes del cambio climático. El Grupo Banco Mundial brinda apoyo a los países para que aborden los desafíos climáticos que enfrentan y creen sistemas sólidos de protección social. Esta labor incluye desde la inversión en proyectos de energía solar y eólica para reducir las emisiones hasta la creación de planes de seguro contra las condiciones climáticas para proteger a los países más vulnerables frente al cambio climático del desastre económico. El Banco Mundial también colabora con los países para identificar los riesgos que enfrentan derivados de amenazas crecientes como el cambio climático y planificar en consecuencia. Asimismo, cumple una función en el diálogo a nivel mundial acerca de cómo gestionar y prepararse mejor para el cambio climático y sus impactos. En este momento, el mundo está colaborando para crear pactos mundiales sobre migración y refugiados y formas en las que la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático puede abordar el desplazamiento de personas. Las migraciones internas provocadas por impactos climáticos constituyen un problema de desarrollo. Si no actuamos, se convertirá en el rostro humano del cambio climático. Prólogo 3 Reseña En los últimos tiempos, las migraciones transfronterizas y sus consecuencias para los países receptores han concitado un elevado nivel de atención mundial. Sin embargo, se reconoce con mayor frecuencia que la cantidad de personas que migran dentro de sus propios países es mucho mayor que la de quienes atraviesan fronteras. Dichas personas, se trasladan por motivos diversos, incluyendo los económicos, sociales, políticos y ambientales. En la actualidad, el cambio climático se ha convertido en un poderoso motor de las migraciones internas, que impulsa a una mayor cantidad de personas a trasladarse desde zonas vulnerables a otras áreas más viables dentro de sus países, con el fin de construir vidas mejores. OBSERVACIONES PRINCIPALES Este informe se focaliza en la evaluación de tres regiones (África al sur del Sahara, Asia meridional y América Latina, que en conjunto representan el 55 % de la población del mundo en desarrollo) y en él se observa que para el año 2050, el cambio climático impulsará a decenas de millones de personas a migrar dentro de sus propios países. Asimismo, se prevé que, si no se adoptan medidas concretas que propicien el desarrollo y hagan frente al cambio climático, poco más de 143 millones de personas (cerca del 2,8 % de la población de estas tres regiones) podrían verse obligadas a trasladarse dentro de sus propios países para escapar de los impactos del cambio climático de evolución lenta. Estas personas migraran desde áreas menos viables con escasa disponibilidad de agua y productividad en los cultivos y de zonas afectadas por el aumento del nivel del mar y las marejadas. Las zonas más pobres y vulnerables al cambio climático serán las más perjudicadas. Estas tendencias, junto con el surgimiento de “puntos críticos” de inmigración y emigración por motivos climáticos, tendrán consecuencias importantes en los sectores sensibles al clima y repercutirán en la infraestructura y en los sistemas de apoyo social y la medida en que estos resultan adecuados para la población. En el presente informe se señala que la migración interna provocada por impactos climáticos probablemente aumentará hasta el año 2050 y luego se acelerará aun más, a menos que se reduzcan de manera significativa las emisiones de gases de efecto invernadero y se adopten medidas contundentes en favor del desarrollo. ENFOQUE Es crucial que los países comprendan la escala de las migraciones internas provocadas por impactos climáticos, así como los patrones que seguirán los traslados de las personas, a fin de poder planificar y prepararse adecuadamente. Sin embargo, hay muy pocos estudios de proyecciones que se consideren bien fundamentados sobre este tipo de migraciones en áreas extensas. El presente informe (en el que se incorporan por primera vez los impactos del cambio climático de evolución lenta en un modelo de distribución futura de la población) tiene el objetivo de subsanar este déficit. El énfasis que se concede en este informe a los impactos climáticos de evolución lenta (estrés hídrico, pérdida en la productividad agrícola, aumento del nivel del mar), a diferencia de los acontecimientos repentinos (como las inundaciones y los huracanes), da como resultado una estimación de límite más bajo sobre el probable impacto general del cambio climático en la migración en las tres regiones estudiadas. Además de las tres regiones principales de interés (África al sur del Sahara, Asia meridional y América Latina), se analizaron en mayor profundidad tres subregiones: África oriental, Asia meridional (en su totalidad) y México y América Central, los cuales representan patrones climáticos, demográficos, migratorios, de medios de subsistencia y desarrollo muy distintos entre sí. Adicionalmente, se contextualizaron aún más los resultados a través de tres ejemplos de países: Etiopía, Bangladesh y México. En el modelo se superponen datos sobre impacto demográfico, socioeconómico y climático a un nivel de celdas de grilla de 14 kilómetros cuadrados con el fin de simular los cambios posibles en la distribución de la población dentro de los países seleccionados. A fin de abordar las incertidumbres que implica analizar la migración durante los próximos 30 años, en el informe se consideran tres escenarios hipotéticos de cambio climático y desarrollo. El modelo puede adaptarse y ampliarse a diferentes escalas. En el futuro, los modelos podrían modificarse y extenderse a más países, más impactos del cambio climático y períodos más prolongados, pero también a niveles más locales. Los resultados basados en escenarios deben considerarse como una posible variedad de resultados, no como proyecciones exactas. Reseña 5 Los escenarios utilizados son los siguientes: • el pesimista (elevado nivel de emisiones de gases de efecto invernadero y trayectorias de desarrollo desigual), considerado el escenario de referencia para este informe; • el de un desarrollo más inclusivo (nivel de emisiones igualmente alto, pero con mejores trayectorias de desarrollo); • el más inocuo para el clima (nivel de emisiones más bajo con desarrollo desigual).1 Este enfoque basado en escenarios hipotéticos permite a los funcionarios encargados de formular políticas de desarrollo comprender mejor los movimientos demográficos que probablemente se produzcan dentro de sus países debido al cambio climático (a través del tiempo y de diversas geografías), y planificar en consecuencia. Gráfico 1. Cantidad proyectada de migrantes por motivos climáticos en África al sur del Sahara, Asia meridional y América Latina en tres escenarios, en 2050 ESCENARIOS POSIBLES Pesimista (de referencia) De un desarrollo más inclusivo El más inocuo para el clima TOTAL DE LAS TRES REGIONES Cantidad de migrantes (millones) 140 120 100 80 60 40 20 0 ÁFRICA AL SUR DEL SAHARA ASIA MERIDIONAL AMÉRICA LATINA 100 100 100 Cantidad de migrantes (millones) Number of migrants (millions) Number of migrants (millions) 90 90 90 80 80 80 70 70 70 60 60 60 50 50 50 40 40 40 30 30 30 20 20 20 10 10 10 0 0 0 África al sur del Sahara South Asia Latin America Nota: Las líneas en las barras de los gráficos representan los intervalos de confianza del percentil 95. 1 En el escenario que presenta niveles más bajos de emisiones, se prevé que las temperaturas alcancen para el año 2050 un máximo de entre 0,4 °C y 1,6 °C por encima de los valores de referencia y luego se estabilicen. En los escenarios con niveles de emisiones más altos, las temperaturas aumentan entre 1,4 °C y 2,6 °C para el año 2050 y entre 2,6 °C y 4,8 °C para el año 2100. Groundswell: prepararse para las migraciones internas provocadas por impactos climáticos 6 Mensajes principales PRIMER MENSAJE: La escala de las migraciones internas provocadas por impactos climáticos aumentará hasta el año 2050 y luego se acelerará, salvo que se adopten medidas concertadas en materia de clima y desarrollo. En los tres escenarios presentados en este informe se observa una tendencia ascendente en las migraciones internas provocadas por impactos climáticos hacia el año 2050 en África al sur del Sahara, Asia meridional y América Latina. En el escenario pesimista, el número de migrantes internos por motivos climáticos podría superar los 143  millones de personas para el año 2050 (cerca de 86  millones en África al sur del Sahara, 40  millones en Asia meridional y 17  millones en América Latina). Las poblaciones y los países más pobres serán los más afectados (gráfico 1). En el escenario de desarrollo más inclusivo, el volumen de las migraciones internas provocadas por impactos climáticos en las tres regiones podría disminuir a entre 65 millones y 105 millones de personas. Las proyecciones del escenario más inocuo para el clima muestran la cantidad menor de migrantes internos por motivos climáticos: entre 31 millones y 72 millones de personas en las tres regiones. En todos los escenarios, el cambio climático es un factor que impulsa de manera creciente las migraciones internas. Los impactos del cambio climático (reducción de cosechas, estrés hídrico, aumento del nivel del mar) incrementan la probabilidad de que se produzcan migraciones en situaciones de emergencia, lo que genera mayores desafíos para el desarrollo humano y la planificación. Las personas vulnerables son las que tienen menos oportunidades de adaptarse en el sitio donde viven o de alejarse de los riesgos y, cuando se trasladan, a menudo lo hacen como último recurso. Otros, aún más vulnerables, no podrán trasladarse y quedarán atrapados en zonas que se volverán cada vez más inviables. Las migraciones internas por motivos climáticos se intensificarán en las próximas décadas y podrían acelerarse a partir del año2050 en el escenario pesimista como consecuencia de la intensificación de los impactos climáticos y el fuerte aumento demográfico previsto en muchas regiones. Créditos fotográficos: Maria de la Guardia/Connect4Climate/Banco Mundial Reseña 7 SEGUNDO MENSAJE: Es probable que dentro de los países surjan “puntos críticos” de inmigración y emigración inducida por el clima. Esto tendría consecuencias significativas para los países y para la planificación del desarrollo futuro. Según las proyecciones elaboradas en el informe, se observará una emigración impulsada por motivos climáticos en las zonas donde los sistemas de medios de subsistencia se vean crecientemente amenazados por los impactos del cambio climático. Estos puntos críticos son áreas que se vuelven cada vez más marginales y pueden abarcar ciudades situadas en zonas bajas, zonas costeras vulnerables al aumento del nivel del mar y áreas de elevado estrés hídrico y agrícola (gráfico 2 para Asia oriental). En las tierras altas del norte de Etiopía, por ejemplo, la disminución en la disponibilidad de agua y el rendimiento de las cosechas impulsará la emigración en las zonas de cultivo de secano. Aun en Addis Abeba, la ciudad más grande de Etiopía, es posible que el crecimiento demográfico se atenúe debido a su dependencia respecto de las precipitaciones que se volverán cada vez más imprevisibles. Otras ciudades importantes, como Dhaka en Bangladesh y Dar es Salam en Tanzanía, también registrarán un crecimiento demográfico menor debido al aumento del nivel del mar y las marejadas. En las tres regiones, los puntos críticos de inmigración se ubicarán en sitios con condiciones climáticas más favorables para la agricultura, así como en ciudades que pueden ofrecer mejores oportunidades para desarrollar medios de subsistencia. Por ejemplo, las tierras altas ubicadas entre Bangalore y Chennai, en el sur de India, las mesetas centrales que rodean a Ciudad de México y Ciudad de Guatemala, y Nairobi, en Kenya, probablemente se vuelvan zonas de creciente inmigración provocada por impactos climáticos. Ambos tipos de puntos críticos comenzarán a aparecer hacia el año 2030, y para el año 2050, su número y extensión geográfica se incrementarán considerablemente. La planificación y la implementación temprana de medidas adecuadas pueden contribuir a configurar estos puntos críticos, dado que no están predeterminados ni son inalterables. Muchas zonas urbanas y periurbanas deberán prepararse para la llegada de migrantes, lo que incluye mejorar la infraestructura de vivienda y transporte, los servicios sociales y las oportunidades de empleo. Los funcionarios encargados de diseñar políticas pueden prepararse procurando introducir una mayor flexibilidad en los servicios de protección social e incluyendo a los migrantes en la planificación territorial y las decisiones. Si se gestiona adecuadamente, la inmigración puede generar impulsos positivos, incluso en zonas urbanas que pueden sacar provecho de la aglomeración y las economías de escala. Aun con la emigración prevista, muchas zonas vulnerables al cambio climático deberán seguir albergando una cantidad significativa de habitantes. Por tal motivo, se incrementa la necesidad de implementar estrategias de desarrollo que brinden apoyo a las personas para que logren adaptarse a las condiciones locales o permanezcan en su lugar de residencia cuando esto resulte sensato. Entre los componentes de las estrategias exitosas de adaptación local se incluyen los siguientes: invertir en infraestructura con un enfoque inteligente respecto del clima, diversificar las actividades que generan ingresos, establecer sistemas de protección financiera que respondan mejor a las necesidades de los grupos vulnerables, y educar y empoderar a las mujeres. Los programas de reducción de la pobreza y protección social dirigidos a las zonas rurales pueden contribuir a incrementar la capacidad de adaptación al cambio climático y posiblemente reducir la necesidad de las personas de trasladarse en situaciones de emergencia. Aun así, la adaptación en estos lugares vulnerables tiene sus límites. Cuando no hay un camino creíble de largo plazo que conduzca a medios de subsistencia viables, surge el riesgo de que las personas se vean inducidas a quedarse en sitios donde las condiciones de vida se están deteriorando. Por ejemplo, unos 20 millones de habitantes de las zonas costeras de Bangladesh ya están sufriendo en su salud las consecuencias de la intrusión de agua salada en las reservas de agua potable, provocada por el aumento del nivel del mar. Asimismo, las remesas enviadas por familiares que trabajan en otros sitios pueden inducir a los habitantes de estas zonas a permanecer en ellas, quizá en contra de sus intereses. Si no se adoptan medidas de política adecuadas, los incentivos perversos para permanecer en el lugar pueden minar en gran medida la salud y el bienestar de la comunidad. Los migrantes internos por motivos climáticos no necesariamente se detienen en las fronteras. Si bien este informe no se centra de manera específica en las migraciones transfronterizas, en los modelos se identifican numerosos puntos críticos de migración en zonas cercanas a las fronteras nacionales. El cambio climático puede inhibir o impulsar la migración transfronteriza, en función de una serie de factores que llevan a las personas a decidir trasladarse. Groundswell: prepararse para las migraciones internas provocadas por impactos climáticos 8 Gráfico 2. Zonas que según las proyecciones tendrán niveles altos de inmigración y emigración provocadas por impactos climáticos en África oriental, 2030 y 2050 a. 2030 b. 2050 Addis Addis Ababa Ababa Mogadishu Mogadishu Kampala Kampala Nairobi Nairobi Dar es Salaam Dar es Salaam Lusaka Lusaka Harare Harare Maputo Maputo IBRD 43261 | FEBRERO DE 2018 INMIGRACIÓN EMIGRACIÓN Certeza alta en niveles altos de inmigración provocada Certeza alta en niveles altos de emigración provocada por impactos climáticos por impactos climáticos Certeza moderada en niveles altos de inmigración Certeza moderada en niveles altos de emigración provocada provocada por impactos climáticos por impactos climáticos Nota: La certeza alta refleja concordancia en los tres escenarios modelados, y la certeza moderada refleja concordancia en dos escenarios. Reseña 9 TERCER MENSAJE: La migración puede ser una estrategia de adaptación al cambio climático si se gestiona cuidadosamente y se respalda mediante políticas de desarrollo adecuadas e inversiones específicas. Cuando se prevé que se alcanzarán los límites de la adaptación local, la migración bien planificada hacia zonas más viables puede constituir una estrategia exitosa. Para que las personas se trasladen a zonas de bajo riesgo y mayores oportunidades, es necesario un contexto fuertemente propicio para la migración, respaldado por incentivos directos, como programas de capacitación y creación de empleo. Las estrategias que apoyan la migración interna deben resguardar no solo la resiliencia de quienes se trasladan, sino también la de quienes habitan en las comunidades de origen y de destino. Entre los años 2030 y el 2050, los puntos críticos de migración por motivos climáticos se incrementarán y posiblemente se extenderán. En consecuencia, los países deberán adoptar un enfoque de anticipación y de largo plazo en la planificación, de modo de tener en cuenta a los migrantes por motivos climáticos en las estrategias generales de crecimiento y desarrollo. Etiopía, que podría registrar un incremento demográfico de hasta el 85 % para el año 2050 y ver reducida su productividad agrícola debido al cambio climático, deberá planificar para lograr una economía más diversificada, que absorba mano de obra en sectores no agrícolas y menos sensibles al clima. Bangladesh, que según las previsiones, en el escenario pesimista albergará para el año 2050 a la tercera parte de los migrantes internos por motivos climáticos de toda Asia meridional, está elaborando el “Plan de Perspectivas para el 2041”, en el que se contempla el cambio climático como factor causante de migraciones futuras. En este plan se reconoce la migración como posible opción de adaptación para las personas que habitan en las zonas más vulnerables. México, país de ingreso mediano con una economía diversificada y en expansión relativamente menos sensible al clima, cuenta ya con cierta capacidad para adaptarse al cambio climático, pero debe prestar atención a sus impactos sobre los bolsones de pobreza. Créditos fotográficos: Banco Mundial Groundswell: prepararse para las migraciones internas provocadas por impactos climáticos 10 CUARTO MENSAJE: Las migraciones internas provocadas por impactos climáticos pueden ser una realidad, pero no tienen por qué convertirse en una crisis. Si se adoptan medidas en tres áreas principales, se podrá reducir el número de personas que se ven forzadas a mudarse en situaciones de emergencia. Teniendo en cuenta el rango de la migración interna prevista en este informe para las tres regiones, que va de los 31 millones de personas en el escenario más favorable a los 143 millones en el más negativo, cabe afirmar que la acción concertada en tres áreas clave podría ayudar a reducir el número de migrantes internos por motivos climáticos en hasta un 80 % para el año 2050. 1. Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero ahora Es necesario adoptar medidas enérgicas en todo el mundo para alcanzar el objetivo planteado en el Acuerdo de París2 de limitar los incrementos futuros de temperatura a menos de 2 °C para fines de este siglo. Aun con este nivel de calentamiento global, los países no podrán evitar cierto volumen de migraciones internas por motivos climáticos. Si los niveles de emisiones de gases de efecto invernadero fueran aún más altos, podrían dar lugar a graves alteraciones en los medios de subsistencia y en los ecosistemas, con lo que se consolidarían las condiciones que conducirán a una mayor migración por motivos climáticos. Sin una fuerte reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en las próximas dos décadas, es probable que el escenario pesimista planteado en este informe se vuelva una realidad. En el escenario más inocuo para el clima (en el que las emisiones se reducen de manera significativa), la cantidad de personas que se prevé migrarán en las tres regiones será mucho menor. La oportunidad para reducir las emisiones y revertir las tendencias del calentamiento global está desvaneciéndose rápidamente. 2. Incorporar las migraciones provocadas por impactos climáticos en la planificación del desarrollo Es imperioso que los países integren la migración provocada por impactos climáticos en sus planes nacionales de desarrollo. En la mayoría de las regiones, las leyes, políticas y estrategias no están adecuadamente preparadas para lidiar con personas que se trasladan desde áreas de creciente riesgo climático a zonas que quizá ya estén densamente pobladas. Los organismos nacionales deben integrar este tipo de migración en todas las facetas de sus políticas. Para garantizar la resiliencia y las perspectivas de desarrollo de todas las personas afectadas, es necesario adoptar medidas en todas las fases de la migración (antes, durante y después del traslado). Los Gobiernos necesitarán orientación, asistencia técnica y fortalecimiento de la capacidad para elaborar leyes, políticas y estrategias nacionales que se correspondan con los marcos internacionales relativos a las migraciones por motivos climáticos. La participación de los actores privados, la sociedad civil y las organizaciones internacionales es crucial para fortalecer la capacidad y elaborar marcos normativos. 3. Invertir ahora para comprender mejor las migraciones internas provocadas por impactos climáticos Se necesitan más inversiones para contextualizar y comprender mejor las migraciones provocadas por impactos climáticos, especialmente a escalas regionales y locales, donde los impactos climáticos pueden desviarse de las tendencias generales observadas en un análisis a escala mundial. En muchos casos, existe un conjunto de datos más completo y detallado de indicadores climáticos, biofísicos, socioeconómicos y políticos a nivel regional, nacional y local. Existen incertidumbres inherentes a la forma en que los impactos climáticos incidirán en un sitio determinado, y esto afectará la magnitud y el patrón de los traslados inducidos por el cambio climático. A lo largo del tiempo, a medida que se disponga de más datos sobre el cambio climático y sus posibles impactos en la disponibilidad de agua, la productividad de los cultivos y el aumento del nivel del mar, será necesario actualizar los escenarios y modelos. Aumentar la resolución de los modelos y mejorar los datos introducidos para generar proyecciones más detalladas en cuanto al espacio son algunas de las posibles aplicaciones futuras del enfoque aplicado en este informe. Si se fortalece la capacidad de los países para recopilar datos pertinentes y hacer su seguimiento, es posible que se logre comprender mejor las interacciones entre los impactos climáticos, los ecosistemas, los medios de subsistencia y la movilidad, lo que podría ayudar a los países a elaborar 2 Los países aprobaron el Acuerdo de París en la vigésimo primera Conferencia de las Partes de las Naciones Unidas celebrada en París el 12 de diciembre de 2015. Dicho acuerdo entró en vigor menos de un año después. En el acuerdo, todos los países aceptaron colaborar para mantener el aumento de la temperatura mundial por debajo de 2 ºC y, teniendo en cuenta los graves riesgos que entraña, en esforzarse por lograr que no sea superior a 1,5 ºC. Reseña 11 políticas, planificar y tomar decisiones de inversión adaptadas al contexto. La inclusión de preguntas sobre clima y migración en los censos nacionales y en otras encuestas ya existentes es un modo eficaz en función de los costos de lograr una comprensión más profunda sobre estas cuestiones. Las técnicas de toma de decisiones en condiciones de incertidumbre profunda deben especificarse con más detalle y aplicarse en la formulación de políticas y la planificación del desarrollo. Las investigaciones empíricas, complementadas por la aplicación de modelos en el nivel de los países, son fundamentales. En este sentido, las nuevas fuentes de datos, entre las que se incluyen las imágenes satelitales y la telefonía móvil, sumadas a los avances en la información sobre el clima, pueden mejorar la calidad de la información sobre migraciones internas. En todos estos esfuerzos, debe protegerse la privacidad de los datos personales. CONCLUSIÓN El informe Groundswell: Prepararse para las migraciones internas provocadas por impactos climáticos ayuda a poner un rostro humano a un creciente problema del ámbito del desarrollo, el de las personas que se ven obligadas a trasladarse en situaciones de emergencia para huir de los impactos de largo plazo del cambio climático. Sus conclusiones deben tomarse con seriedad si se pretende que el mundo preserve los logros recientemente obtenidos en el ámbito del desarrollo y ofrezca medios de vida sostenibles para todos. Créditos fotográficos: Natalia Cieslik, Banco Mundial Groundswell: prepararse para las migraciones internas provocadas por impactos climáticos 12 Diseño de la portada: Studio Grafik Impresión: GSDPM, Grupo Banco Mundial